El misterio de la caverna (libre)

*Habia oido hace algunos dias sobre una onda de calor que estaba afectando la caverna de la tierra gelida de la Isla File y fui a investigar junto a Strabimon, cuando llegabamos a la entrada de la caverna, sentimos que un terremoto afecto el lugar y provoco una avalancha, a lo cual decidimos tomar algunas acciones evasivas y nos pusimos a cubierto, para que no afectara tanto al lugar o a los seres que habitaban los alrededores*.

Había pasado mucho tiempo vagando de forma solitaria por la isla Fyle, mis ojos observaban la noche mientras mis pies pisaban la blanca nieve, estaba en la zona más gélida de la isla y aun así no hacía el frio que debía hacer, algo que no sólo parecía afectar a la isla si no también a las tierras más lejanas, pero en esta zona podía tener importantes repercusiones, note un terremoto, un temblor que sacudió la tierra durante unos largos momentos, alce la mirada cuando se calmo, me encamina hacia una cueva, el terremoto no era lo único que se hacía notar, mientras me aproximaba a la cueva escuche un aleteo, algo se acercaba, Digimons varios voladores y no estaba en condiciones de presentar batalla aunque fuera lo que mi corazón más ansiabaDe -de momento iré a la cueva- pensé, ya habría momento de presentar batalla me moví velozmente, me detuve a escasos metros, al visualizar dos figuras.

Justo en la entrada, un humano y un digimon, realmente disfrutaba con la presencia de humanos, pero estábamos ante una hola de calor en una tierra ártica, algo que no debía estar en el lugar, me acerque cautelosamente pero sin mostrar hostilidad ni miedo, solo serenidad y calma, algo que no me costaba mostrar -con este calor, lo que vive en esa cueva no tardará en salir- susurre dirigiendo mi mirada a la cueva, desde su inteescucharon gruñidos gruñidos guturales, no sabía bien que había dentro y también afuera se escuchaban aleteo, migraciones eso estaban produciendo los extraños cambios de temperatura.

Parece que no puedo descansar ni siquiera en una cueva en la mitad de la nada Una persona sentada en una roca en medio de un lago de cristalina agua dentro de una cueva cuyo único pasadizo daba a una caverna con techo alto, en donde se ubicaba dicho lago. Justo en la conexión del pasadizo con la caverna estaba un Impmon, sentado comiendo un trozo de pan, esperando que su compañero terminara de meditar.
Tranquilo es solo un terremoto, no es la gran cosa El joven Humano se levantó tranquilamente, abrió un portal a sus pies y apareció del otro lado del pequeño lago.
Sera mejor salir para ver si hay algún herido por el terremoto, pero primero quitaremos todos los estorbos del camino. El dispositivo del hunter se llenó de una luz roja para dar paso a la aparición de un enorme digimon sapo, Tonosama Gekomon, quien haciendo sonar sus cornetas apuntando al pasadizo ahuyentaría a cualquier cosa que estuviese escondido en la entrada de la cueva.
Es mi impresión o acabo de imitar el gruñido de un Vikemon

*Luego de ver que todo estaban bien y a salvo, Strabimon y yo decidimos entrar y buscar el centro o lo que provocaba aquel calor y nos adentramos, sabiendo que algunos digimons salvajes y hostiles podrian atacarnos y eso no nos importaba, lo que nuestra prioridad era investigar esa onda de calor*.

Strabimon: Apuremonos, no podemos dejar que siga derritiendose el hielo de este lugar, ya que podria afectar a las zonas aledañas y eso no es bueno.

Kamen: Lo se, pero no hay que ser precipitados, ya que eso podria ser usado en nuestra contra, primero hay que revisar la zona y buscar el origen.

*Mientras más avanzabamos, el calor aumentaba y eso estaba afectando a algunos digimons, por tanto era mejor darse prisa*.