Un nuevo comienzo.

-Falta poco…- murmuro, mirando hacia abajo y sonriendo con malicia. –Destruiremos el balance de la tierra y solo así, haremos que las tinieblas gobiernen a todos los mundos existentes en uno solo.

Desde la torre más alta, Ladydevimon observaba con detenimiento la labor de sus nuevos sirvientes, los cuales eran creada por la data de virus del mundo humano. Los usaría en un futuro cercano y acabaría con los humanos, con todos ellos. Rio a carcajadas mientras imaginaba el panorama, haciendo que los Digimons a sus órdenes se estremecieran, pensando que tal vez ellos eran los desafortunados que tendrían que lidiar con su ira.

-Señora Ladydevimon- llamó un Wormon luego de unos cuantos minutos, inclinando s cabeza antes de dirigirse directamente a ella. –Hemos logrado abrir la puerta, pero no asbemos si lleve al mundo de los niños elegidos.

-¿Cómo que no están seguros?- bramó girándose en seco y posando sus rojos ojos en el pequeño gusano.

-Hemos notado que en ese mundo al que tenemos acceso tener una gran cantidad de data.- explico el gusano, temblando completamente.

-¡Todos los mundos tienen data!- grito la mujer digimon, antes de recobrar la postura solo para saber lo que quería.-¿Es la tierra?

-Aún no sabemos…- respondió Wormmon.

-Entonces mande a Demidevimon, tonto insignificante.- le planto una patada cargada de fuerza al pequeño ser y sabiendo que esto no chillaría por amor a su vida, prosiguió. -¿Dónde está el dispositivo oscuro con su digiemblema? ¿Dónde está Demidevimon?

Dicho esto, Wormon huyo y Ladydevimon salio volando por la ventana que había estado usando para mirar el trabajo de los digimon abajo. A la vez, Demidevimon huía al mundo de los humanos con el dispositivo y el digiemblema. Llegando al mundo de los humanos regresa a su anterior forma y pierde el dispositivo oscuro. Aunque no fue el único digimon en cruzar el portal, ya que tras de él venía Leomon.

La temible bestia con apariencia de hombre se encontraba infectado por un engranaje. Él cual desata su furia con todo lo que se encontraba cerca, un golpe del rey bestia ataca un edificio, en donde vivía Cornelius con su familia y que en ese momento se encontraba jugando con su ordenador. Ante la conmoción observa el enfrentamiento y de extraña manera el dispositivo oscuro se guarda en su bolsillo izquierdo del pantalón.

-Voy a destruir todo este mundo… Golpe del Rey Bestia. – Siguiendo lanzando ataques contra el edificio. En el caos se activa el dispositivo y un brillo cubre a la forma anterior de Demidevimon y digievoluciona hasta llega a ser Devimon. Un Ángel caído oscuro que se alza en vuelo y comienza a luchar contra Leomon. Tras finalizar el combate pierde leomon y Devimon se vueleve un digihuevo que va parar a las manos de Cornelius. Desde ese momento se vuelve un niño elegido, con tan solo siete años.

Desde ese momento no se volvieron a parecer los digimon y el digihuevo regresa al digimundo. Cornelius olvida todo lo sucedido, hasta aquel día que Demidevimon sale de su computadora y le revela al joven, que ya no era tan niño todo lo que había sucedido y le explica todo lo relacionado con los digimon.

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Un digiportal se abre desde el mundo real al digimundo del cual sale Cornelius acompañado de su compañero. Llegando por primera vez al mundo digital y portando en su cuello el porta digiemblema, pero sin emblema. En su ropa oscura portaba en su cintura su dispositivo oscuro. –¿Qué lugar es este?- comenta al llegar y ver varios humanos con camaradas y un lugar que no era como antes. Escuchado tras de él algunos pasos.

-Es el digicentral.- Responde Demidevimon elevándose en el cielo y fijando su mirada en su compañero, sabía que jamás ingresaría a la Academia digital, era casi imposible ya que esta prohibía el acceso a los seres oscuro y aunque no sabía Cornelius esa era su naturaleza, mostrando gran diferencia con los demás niños y niñas elegidos del todo el mundo. Algunos rumores indicaban que su emblema se encontraba en manos aun de Ladydevimon o lo había ocultado Demidevimon por no confiar en su propio compañero humano.

Off rol: primero que nada soy Fary Tail, te lo quise decir por mp pero no se podía, decidí contestar con este pj porque si tiene tema libre, no cambia nada solo el echo de que es malvado.

On rol:
Me encontraba en un horrible lugar lleno de niñitos buenos, odio estar aquí pero no me acuerdo el porque o como llegue aquí, era algo sobre acabar con todos los niños engreídos de la escuela, me hice pasar por Fary para que a todos le cayera bien, nadie preguntaba por el parche así que me creyeron, que facil es engañarlos en especial si no lo habían visto anteriormente.

DarkGuilmon permaneció dentro del D-Cyber para no llamar la atención de un digimon maligno en este lugar ademas de que no podía fingir ser un Lopmon.

-Oye tú… - Expreso Bancholemon a Cornelius y se dirige en su dirección. -¿Quién te dio autorización para ingresar a este sector?- Ante esa expresión el joven se comienza a molestar y retroceder para así regresarse por el portal, pero este ya se había desaparecido. –Espero que no pensaras causar problemas o te las veras con mingo…- En ese instante cambia mirada con Demidivimon y con su acompañante humano.

-Y…- Le comienza a refutar Cornelius con gran fuerza. -¿Quién eres para decirme lo que tengo que hacer o no?- Su mirada se le clava y el miedo que tenia se le va desapareciendo por una gran ira que le comienza a invadir en todo su ser. –Yo soy Cornelius y tu cosa rara no me vas a prohibir nada.- Apretando su puño, listo para golpearlo.

Bancholemon expresa una carcajada y le responde. –Chico, vaya que posees gran valor o eres un demente para hablarme así. – y le revuelve el cabello. –Yo soy Bancholemon y soy uno de los protectores de la digicentral. – Se cruza se brazo y finaliza diciendo. –Por lo que les estaré observando…- Dando un giro se marcha de aquel lugar.

-¿Quién se cree que ese esa cosa?- Pregunta y su compañero le responde. –Es un digimon de nivel mega, es decir es muy poderoso.- En eso pasa por la mente del joven que su compañero sería igual que él y le causa tanta gracia que hace que se le plasme una sonrisa en el rostro. –Entonces esto es el digimundo…- hace pausa y comienza caminar.

-No exactamente- Le responde y entonces tropieza con un chico extraño (Nate Tail) quien se encontraba solo. –Otro más…- murmura y le mira con desprecio. –Oye tu…- dirigiendo sus palabras contra Tail. -¿Acaso no piensas pedirme disculpas?- Demidevimon, ya se encontraba listo para combatir en caso ese fuera el objetivo de su compañero humano. Aunque ambos se detuvieron esperando la reacción de aquel sujeto. -¿Acaso no me escuchas? Te exijo una disculpa…- Sentencia Cornelius.

-Tsk... Molestias-dije algo enojado-Pero tienen razón debo pedirles disculpas, así que dénmelas-di una pequeña sonrisa al haber ya ganado a ese chico y su digimon en contestaciones, no los soportaba, si no fuera que cerca estaba Bancholemon hubiera sacado a DG para que se los coma-¿Qué esperan? Digan que lo lamentan-.

<< Jajaja, buena Nate >>yo solo podía escuchar a DG reírse en el D-Cyber pero aun así fue divertido ver que no soy el único con buen sentido del humor.

Ante la respuesta del desconocido una fina sonrisa llena de maldad se le dibuja en el rostro. –Espero que esto te enseñe.- aprieta su puño y le lanza un golpe al rostro del chico. Demidevimon no sabe cómo reaccionar y observa como su compañero lanza otro golpe y esta ocasión era una patada al pecho del chico. A lo lejos Bancholemon nota la situación y se cruza de manos, negando con su cabeza. Al momento de lanzar otro golpe, Bancholemon aparece de tras de este y pronuncia. -¿Qué sucede?- deteniendo su ataque contra el joven.

La mirada del hombre bestia se clava en Nate Tail y en aquel otro humano. –Ni se te ocurra a hacer daño a los humanos.- Sentencia Sleipmon, quien llega de prisa y cabalgata a donde se encontraba. –Los conflictos de los humanos, solo los humanos lo pueden resolver.- Le clava la mirada a Bancholemon. Ante la llegada de caballero Demidevimon no sabe qué hacer, ambos digimon era de gran alto nivel.

-Niños elegidos… El fin ha llegado.- Se escucha una terrible voz y los digimon de nivel alto busca de donde provienen, en ese instante aparecen varios digimon de tipo virus que comienza a lanzar ataques contra todos. Los digimon salvajes que protegían el lugar comienza a combatir. -¿Qué está pasando Demidevimon? – A lo cual responde. –No tengo idea, es la primera vez que sucede. El equilibrio del digimundo se ha perdido.

Mire aburrido al chico que me lanzo algo, lentamente me incline a un costado haciendo que pase por un costado, luego con mi mano derecha agarro su pie dirigido a mi pecho-*Bostezo* ¿Es todo lo que tienes? Estudie defensa personal-las había estudiado practicando con DG cada día para no depender solo de él.

Bancholemon llego a mi rescate no necesario seguido por un Sleipmon que lo hizo callar, mientras que empezaban a pelearse ellos unos digimons Virus aparecieron en toda Digicentral, parecía un ataque, el tonto niño que intento atacarme estaba confundido pero yo sabia lo que pasaba, la misma pelea del yin y el yang. Hice como si nada y empece a caminar por el campo de batalla que se creo en el lugar-Que aburido, pensé que yo seria el único que intentaba destruir el lugar-susurre mientras veía a los guardianes y demás Digimon en sus respectivas peleas a muerte.

-Aniquilen a todos los niños elegidos.- Sentencia Ladydevimon alzándose en el cielo y con la mirada baja.

-¡Golpe del Rey Bestia!- Exclamo Leomon y Ladydevimon lo esquiva con gran facilidad. –Ladydivimon te ordeno que te marches.

-Tú me serás útil.- Envistiendose contra él y lazándole un ataque que lo convierte un ser maligno, cambiando su aspecto a una tonalidad más oscura. –Leomon aniquila a todos los niños elegidos y encuentra a Demidevimon.- Le ordena y este sale corriendo atacando a varios niños elegidos e iniciando batallas a muerte.

-Mi señora Ladydevimon.- Llamo un Wormon. –Informa que Demidevimon se encuentra en este lugar.

-Aniquilen a los Niños elegidos…- Escuchándose nuevamente la voz tenebrosa.

-Esa voz es de…- Comento Demidevimon a Cornelius. –No puede ser, debemos marcharnos de este lugar.

Una fina sonrisa se muestra en el rostro de Ladydiivimon y se abalanza contra Nate Tail. –Humano ¿Dónde está Demidevimon?- Clavándole la mirada y antes que el chico le respondiera un rayo de oscuridad sale disparado del cielo, impactando en ella. –Mi señor…- comenta antes desvanecerse.

–Cornelius, Cornelius es mejor que nos vayamos. Él se encuentra en este lugar.- Le volvia decir Demidevimon a su camarada, sin embargo este no atendía lo que pasaba.

-Aniquilen a los Niños elegidos…- Al volverse a repetir la voz siniestra dos nuevos rayos de oscuridad aparecen salir del cielo e impactar en Bancholemon y Sleipmon, haciendo que su cuerpo comenzara a desvanecerse. En aquel lugar comenzaba a producirse un caos total y las guerra a muerte se comenzaba a producirse.

-¿Dónde está aquel chico?- Pregunta Cornelius a su Camarada. Asumiendo que era mejor estar co aquel por interés y proponerle una alianza. Extrañamente los digimon virus no atacaban a Cornelius o Nate Tail. Era sin duda alguna la batalla solo involucraba a los niños elegidos ¿Pero qué niños elegidos?

-Está ahí, el chico raro está ahí.- Le expresa Demidevimon, volando. Ante ese comentario corre y le llega a donde se encontraba Nate. –Este…- Comienza a expresar Cornelius. –Creo que será mejor comenzar de nuevo.- Bajo la mirada. –Yo soy Cornelius y este es Demidevimon.- Le muestra su digivice, al mostrarlo lanza un rayo oscuro al cielo. -¿Qué ha sido eso?

La chica Digimon de color negro desapareció antes de que le dijera donde estaba el ser que tanto quería eliminar, desapareció totalmente, fue raro, pensé que lo mejor era ir a la fuente directa, el chico.

Por fortuna para mi el chico se me acerco, pidiéndome las muy esperadas disculpas, y diciendo me quien era y mostrándome su Digivice, de repente sale un rayo del Digivice, sonreí, fue glorioso-Fantástico, ojala el mio hiciera algo así-estaba fascinado por lo que ocurría, el Digivice negro no parecía normal, luego me acorde lo que estaba haciendo-Espera... ¡Tu!-apunte a DemiDevimon-Ese Digimon negro te andaba buscando por una razón, ¿Por qué?-aunque no pareciese tenia miedo a lo que estaba ocurriendo, si uno de esos rayos me daba moriría.

-¡Ya no aguanto!-DarkGuilmon sale del D-Cyber seguido por un gran rugido de dinosaurio-Nate ¿Qué ocurre?-apunte nuevamente al DemiDevimon, DG y yo nos pusimos a verlo esperando una explicación aunque corta pero coherente y ojala con algún desmembramiento.

-Aniquilen a los niños elegidos…- Vuelve a escucharse y los gritos con llanto de los niños elegidos, al ver que sus compañeros se desvanecían o regresaban a ser digihuevos. Los cuales eran ayudados por digimon salvajes, dándoles la oportunidad de escapar por los digiportales que estaban apareciendo por todas partes.

-¡Golpe del Rey Besita!- Exclama Leomon y lanza su ataque contra Cornelius y Nate Tail. El ataque de hombre bestia impacta cercano de ellos, pero no le logra dar a ninguno.

-Aniquilen a los niños elegidos.- Apareciendo nuevos rayos oscuros del cielos y uno de esto comienza a impactar en los digimon tipo virus desapareciendo o regresándole a ser digihuevos y Leomon. Uno de esos rayos impacta en Leomon y lo desvance. Aquellos ataques estaban aniquilando a todos los digimon y dejando todo en ruinas.

-Él es el que no debe ser nombrado- Responde Demidevimon. – ¿Qué quieres decir Demidevimon?- Le cuestiona Cornelius. –Aquel que ataca, es el temible digimon que parece una serpiente blanca. – Hace pausa. – Antes de conocer a Cornelius yo era…

Flash Tiempo Atrás.

-¿Qué sucede?- Expreso Bancholemon cruzado de brazos. - ¿Qué significa esas torres negras Angemon?

-Las fuerzas de las tinieblas intenta de controlar el mundo, he notado como varios engranajes salen cada día de esas torres, convirtiendo a varios de nuestros amigos en seres malvados.- Le responde Angemon, volando y posando su mirada a él.

-Entonces el objetivo es claro, hay que destruir las torres negras.- ríe a carcajadas.

-No es tan fácil Bancholemon.- Le refuta Angemon. – Cada día son creadas nuevas torres negras y los humanos intenta crear nuevos dispositivos sagrados con sus emblemas, para colocar fin a esta situación.

-Yo mismo me encargare de esas torres.- Le comenta Agemon y se dispone a luchar. – Yo no confió en los humanos.- Sale corriendo en dirección a la torre negra.

-¡Banchalemon!- Exclama Angemon y lo ve marcharse, en ese instante un holograma de un hombre aparece. -Angemon.- Comenta el humano con bata y lentes en el rostro. –Es necesario que regrese y protejas este lugar, para que podamos enviar los dispositivos sagrados con los emblemas al mundo humano- el holograma se distorsiona por algunos segundos. -¿Qué ha sido eso?- se vuelve a distorsionar y desaparece en algunos segundos el holograma.

El Ángel de luz obedece la orden y embarca vuelo a ese lugar. Al llegar nota que una increíble batalla se libera, aunque ya algunos agentes de Dat´s se encontraba luchando, otros en cambio se funcionaban con su digimon para formar un nuevo ser los cuales se encontraban luchando con biohybridos, Hunter, digi-humanos, etc.

Obligando que aparecieran los tres digimon más fuerte del todo el digimundo. Uno de esto creo una serpiente blanca, la cual comenzó aniquilar y regresar a todos a la etapa de digihuevo, lazando feroces ataques. Pero al momento de crear la serpiente su data se corrompe y es clasificada como una de las doce bestias legendarias del digimundo. Ante tal error confinen a la bestia creada a un profundo sueño y la envía a la Dark Area.

Uno de los más poderosos expulsa Angemon del cielo y lo manda a la Dark Area. Ahí su data se corrompe y se vuelve Devimon. Lucemon lo recibe con los brazos abiertos y le confiere el poder de ser uno soldados. El cual acepta y baja la mirada. –Yo Devimon, me encargare destruir a los niños elegidos. El poder de la oscuridad va a dominar el mundo.- Ante esa afirmación Lucemon se ríe y va enfrentar a los tres más fuerte, pero fracasa y es enviado al confín de la tierra y a dormir un profundo sueño.

Los humanos fueron expulsado por los tres digimon más fuertes y cerraron toda la rutas de acceso al digimundo. Pero no contaba que ya los humanos habían lanzado los dispostivos sagrados y que uno de estos había sido corrompido por la data que había creado a uno de los doce legendarios. Cayendo a diferencia de mundo real a la Dark Zona y ser tomado por posesión del supremo líder de aquel sitio. La existencia del dispositivo sagrado corrompido fue llamado como el dispositivo oscuro. A su llegada Devimon regresa a ser digihuevo y formar un lapso con aquel dispositivo oscuro. Ante esa unión se creó un emblema que permanece oculto en el mundo de las tinieblas.

Fin del Flash.

-Aquella serpiente juro vengarse del digimundo y de los humanos. Claro que ahora las puertas y los lapsos con los humanos ha cambiado, pero ella aún recuerda su objetivo por la que fue creada.- Explica Demidevimon y hace pausa. –Pero desde entonces han aparecido y en extraños ocasiones humanos al servicio de la oscuridad.

-Eso quiere decir que yo…- Respondio Cornelius. –Que la razón que no me atacaran, es que yo soy…- Bajo la mirada y observo aquel chico que lo acompañaba. –Y él también es…- Llegando a la conclusión que ambos deseaban la destrucción del digimundo. Las preguntas comenzaron a formularse en la mente de Cornelius.

Un Leomon dio un fuerte golpe cerca del chico y cerca mio, ese Digimon junto con los demás del lugar empezaban a dejar de existir, escuche atentamente la explicación de DemiDevimon, era impresionante eso de los Digimons mas fuertes, poseer uno solo me daría tanto poder que ya ni lo llegaría a soportar, me encantaba.

El chico insinuó algo, que no nos atacaban ni por un pelo por el echo de ser... Malvados. Tal vez era cierto pero no iba dejar que me ficharan tan rápido así que decidí cambiar su forma de ver-La razón es que somos los buenos...-dije sin titubear y sin sentido-Algún día pasara que el rol de la gente cambiara, los buenos serán los malos y los malos serán los buenos-iba diciendo con una expresión de creerme lo que decía-Y cuando ese día llegue... ¡Entonces yo seré de los buenos!-di una sonrisa un poco maligna y con rasgos malignos.

-Y así solo sobrevivirán los mas fuertes, los mas dignos, ¡NOSOTROS!-DarkGuilmon me siguió con el juego, no seria difícil hacer que este chico me creyera, ya que esta confundido y una mente confundida es propensa a moldearse con ideas nuevas y motivadoras para su vida.

Las palabras de aquel desconocido lo desconcertaron y de cierta forma tenía la razón. El bien y el mal solo era un punto parcial de donde se observara, la victoria de una batalla era el resultado del triunfo del mal, ya que había uno que era destruido en el proceso. La derrota de igual forma era una consecuencia del mal.

-¿Quién eres?- Le cuestiono Cornelius al desconocido, fijando su mirada en este. –Si ¿Quién eres?- pregunta Demidevimon volviendo referirse a ese desconocido. En poco tiempo la destrucción envolvió todo y oscuridad comenzaba a cubrir todo. La maldad florecía en el ser del corazón del joven compañero del digimon tipo virus, cambiando su forma de pensar y llegar afirmar que su compañero era solo una pieza para desturir el digimundo.

Sonreí, mi sonrisa era diabólica y al estilo del gato rison de Alicia en el país de las maravillas-Pues yo... Soy solo un peón mas en este loco juego que es la vida-estire los brazos como para representar lo vasto que es lo existente y dar un toque dramático.

-Cuando el amanecer caiga tu no debes preguntar quienes son sino ¿Quien eres tu, Cornelius?-DG me sorprendió, su voz fue normal y no draconiana como siempre, lo que decía era verdad, yo sabia quien era pero este chico... Este chico esta perdido pero algún día iba a encontrar el camino al lugar donde perteneciera.

-¿Eres un peón de este juego?- Le cuestiono Cornelius y cruzo mirada con su camarada Digimon. – Yo soy el que soy y el que siempre será.- respondiendo a DG. Ante aquel comentario Demidevimon baja la mirada. La corrupta esencia del humano comienza a florecer y mostrar su verdadera apariencia. –Vaya Demidevimon.- Bajando la mirada y hace leve pausa. –No había notado que mi atuendo haba cambiando.

El digimon virus y parecido a un murciélago se eleva y fija su mirada en GB. La altura le daría cierta ventaja o eso suponía. Aun recordaba cómo se había enfrentado contra un patamon y le había agarrado de las orejas y lanzado por los aires. Pero esos tiempos ya habían pasado. -¿Quien eres?- Volvio a preguntar el digimon al desconocido humano.

-Veo que tu también sufriste tu transformación, la mía no fue tan simple-mire al Digimon virus subir y volver a preguntarme lo mismo otra vez, acaso no entendí que yo solo existía para una razón y luego de cumplir mi destino yo debía desaparecer.

DG y yo miramos a DemiDevimon y le dijimos-Solo somos peones que duraran poco tiempo en este lapso temporal de la historia-y luego agregue-Y que no se te ocurra nada, puesto que nuestro poder es claramente mayor que el tuyo-miramos mal al Digimon esperando su respuesta tanto facial como física, como siempre, no caeríamos en ese lugar ya que no era nuestro destino.

-No comprendo de lo que hablas.- Le responde Demidevimon, mientras que iba de un lugar a otro. –En verdad no comprendo.- Y bajo la mirada y la clavo a su camarada. En ese instante Cornelius añadió al comentario de su camarada. – ¿Qué tiene de malo volar?- preguntando a DG y aquel desconocido que no deseaba expresar su nombre. Para ese momento Cornelius se acerca un poco más al desconocido.

-Te pido disculpa por haberte atacado, es que no sabía que eres un peón del destino y esclavo de él. En cuanto a mí y a él- fijando su mirada en el camarada. –No deseamos tener problemas al encadenado de su destino – finalizando su comentario y extendiéndole la mano.

El chico parecía mas inteligente que su Digimon, le extendí mi mano con confianza solo por esta ocasión y le dije-Recuerda mis ojos y si me ves con un parche solo llámame Fary, si no es así solo no me llames por ningún nombre- solté su mano, me di media vuelta y levantando nuevamente la mano en forma de saludo me retire junto con DG.

-¿Esta bien contarles de Fary?-me pregunta DG cuando estamos a una distancia segura.

-Cálmate, si solo Iggdrasil lo permite, podremos sacarle provecho a esto-sonreí malvadamente otra vez mientras nos alejábamos del chico y su Digimon.

-¿Qué sucede Cornelius?—Comento Demidevimon al momento que se marchó el desconocido.

-Ese chico es extraño y casi nos descubre.- Hace pausa Cornelius al momento de responder. – Pero fue una brillante idea aquella historia Demidevimon. El origen del dispositivo oscuro fue brillante.- Formando una sonrisa en el rostro. –¿Pero ahora dime que significaron esos rayos de luz oscura?- Le cuestiona con frialdad.

-Son errores del digimundo. – Comenta Demidevimon. –La base de datos fue alterado por la digienergia oscura de Ladydevimon y los otros digimon de tipo virus, lo cual fue ocasionado al momento que alteraste la data desde el mundo humano. Pobre chico jamás sabrá la verdad.- solto una leve risa.

Para ese momento ya se encontraban lejos de DG y su compañero. El dispositivo volvió a sonar como una alarma del despertador. En ese momento un digihumano aparece frente a Cornelius y su camarada. –¿Quién eres?- El digihumano sonríe y baja la mirada. -¿Quién eres?- vuelve a preguntar. Demidevimon se prepara para atacar y en ese momento responde. –Sigueme…- Y sigue a ese hombre.

En otro lugar y cercano a Nate Tail. Un niño elegido de cabellera rubia y acompañado por un Angemon comentaba. –Vaya, si ha sido raro ese error y la presencia de los digimon tipo virus. – realizando pausa y se alejaba de GB y su camarada, pero su voz aun la escuchaban. –Menos mal que los Administrador ya arreglaron los errores…