Un baile pecaminoso

La niña sintió que alguien tiraba suavemente de su ropa, bajó la mirada y vio a un Lopmon. El cual hizo uso de una mirada a la que era muy difícil, al menos para ella, decirle que no. Ya que el pequeño Digimon estaba a punto de hacerle una petición.

—¿Qué necesitas?—Pero antes de que el pequeño ser digital pudiera decir algo Luka se acercó a la joven y le invitó a que bailaran.—Eh…

Desvió su mirada en dirección al Lopmon y después miró nuevamente a Luka, Wizardmon rodó los ojos. Prefería que su Tamer bailara con Luka, a quien ya conocían, a que Layla aceptara escuchar a aquel Lopmon que ni siquiera conocían. Aunque en otra parte de su subconciente las palabras que Selene le había dicho cuando Layla había invitado al joven y a la Digimon a casa resonaron con fuerza.

A Nathaniel le había tocado ir a la discoteca para trabajar, ya que el que le tocaba reemplazarlo no había ido, el chico de cabello color miel se molesto un poco porque estaba en su tiempo libre pero le había tocado ir a atender el bar por tanta gente que se encontraba esa noche.

-No puedo creer que ese cretino no haya ido a trabajar.-Dijo con un tono algo molesto mientras caminaba con sus manos dentro de los bolsillos dirigiéndose a la discoteca para empezar a trabajar como de costumbre.

Poco después, Nathaniel llego a su trabajo, la música estaba totalmente en alto y la gente estaba super activa en la pista, en el bar había mucha gente la cual no había recibido su pedido ya que solamente había unos pocos atendiendo, inmediatamente Nathaniel se dispuso a trabajar y empezó a atender a las personas que aun no habían recibido sus pedidos.

-¿Que desea?-Luego de anotar lo que las personas iban a pedir, este empezó a servir las bebidas con una velocidad sorprendente, realmente Nathaniel era bueno en su trabajo por lo que toda esa gente que estaba esperando, ya no estaba por lo que el chico de cabellos color miel le había entregado ya las bebidas.

Me había quedado en silencio después del comentario de Dansher, no porque me hubiese hecho callar, sino por el hecho de que solo necesitaba decirle eso. Fui el último en entrar, quedándome un tiempo afuera para mirar al cielo. -Tantos inocentes para llevarlo a cabo.- dije al aire aunque solo mis camaradas eran los que me escuchaban. -Aún así hay que hacerlo antes de terminar.- seguí hablando mirándolos para luego ingresar. -Pero mientras, disfrutemos de la noche.-

Allí adentro noté que ya cada uno se habían hecho de grupos, sin prestar la atención a quién estaba con quién y en dónde, me dirigí a la barra y me senté un poco apartado de Janaan, a quién Dansher se le había acercado. -Jan, te recomiendo alejarte a él, ya que es uno de los mayores traidores que haya podido conocer.- comenté sin mirarlos, estaba en parte concentrado en lo que iba a pedir. -Haber si te terminas contagiando.- le terminé de decir al albino.

Fistus se quedó en silencio en un rincón, observando eso a lo que los humanos llamaban bailar, aunque su rostro mostraba una apatía con respecto a ello. Por otro lado, Ysera se le acercó al escocés, saltándole para derribarlo. -¡Hola!- le dijo de manera algo entusiasmada.

-Ehh…- Lopmon no esperaba algo como la intervención de Luka por lo que tendría que actuar rápido, y por eso tendría que convencer a Luka antes que nada -Perdóneme señor- me dirigí gentilmente a él -Pero necesito la ayuda de Layla, vera necesito que alguien pueda sacar a mi amigo de la pena que lo invade y aparte de la señorita no creo que nadie de aquí pueda hacerlo- Lopmon miro alrededor y casi todos los tamers que pudo reconocer eran seres malvados, inclusive el mismo Luka -Por lo que yo le quería pedir señorita, es que baile con mi amigo, el se dará cuenta que no es mala y no se cerrara, yo no puedo hacerlo ya que no me escucha- Lopmon puso una cara de perro regañado y espero que sus palabras fuesen escuchadas.

-¿En qué momento?- encontré el D-Cyber en el suelo, yo juraría haberlo tenido todo el tiempo conmigo pero parece que no, le di una importancia tan grande como las ganas que tenia de hablarle al disque Johno << Dj, la que sigue >>.

Haruka asintió ante la propuesta del camarero ya que estaba un poco sediento, pensó en que se quería tomar para luego hacérselo saber al camarero.

—Tráeme la mejor bebida que tengas.—Le dijo este mientras se acomodaba sus gafas y fijaba sus ojos de nuevo en la chica rubia de vestimenta llamativa.—Así que te llamas Sharon, ¿no?—Decidió iniciar una conversación con la rubia de azulados ojos, aquella chica llamada Sharon, tenia los mismo rasgos de Haruka, cabello rubio y ojos azules, los cuales atrajeron por completo la atención de Haruka.

Al ver que Mashury no quería bailar no pude evitar el desilusionarme. -Eres aburrida- Le digo y voy a la pista sin importar y comienzo a bailar solo. Al terminar la canción busco a Mashury pero al no encontrarla veo a un grupo de tamers que estaba sentado, entre ellos una de las pocas chicas que habían ido con nosotros, la chica del Wizardmon. Cruzando entre la gente y entre algunos empujones logro llegar hasta donde estaban. -Hola, ¿Se divierten?- Le pregunto al grupo con una sonrisa en mi rosto el cual estaba algo sudado lo cual se podía ver en mi pelo el cual se pegaba a mi frente.

Al escuchar el pedido del joven me acerco a la barra más cercana, en ella estaba trabajando Nathaniel, el cual acababa de llegar, y tarde además. Cruzo la barra y comienzo a preparar un levanta muertos y al terminar le coloco el liquido plateado el cual se le estaba colocando a todas las bebidas.

-Oye Nat, no te olvides de colocarle esto a las bebidas- Le lanzo el frasco que tenía en la mano. -El dueño está insistiendo en que se lo coloquemos a todas las bebidas-

Preparo una sangría y salgo de la barra y camino hasta Haruka y le doy el levanta muertos.

-Espero que sea de tu agrado- Una sonrisa algo malvada se dibuja en mi rostro por un segundo para luego desaparecer, sin decir más palabra voy hasta donde se encontraba Mashury y me siento a su lado.
-¿Gustas? Le ofrezco el vaso de sangría el cual era rojo sangre pero tenía un delicado resplandor plata.

Tristan también había ido a trabajar, le dio una botella con un liquido plateado dentro a Nathaniel y había dicho que el jefe dijo que le pusiera aquel liquido a todas las bebidas, ¿Estaría diciendo la verdad esta vez? En todo caso, no era buena idea confiar en Tristan. Segundos después, un chico pelinegro se acerco a la barra y pidió un trago, antes de que el chico de cabellos miel fuera por el trago, este le advirtió no poner aquel liquido plateado en las bebidas, al parecer el joven de cabellos negros tampoco confía en Tristan, así que hizo lo que dijo y guardo la botella. Después de que Nathaniel guardara la botella, escucho que el pelinegro hizo una pregunta, este se dispuso a contentar para no ser descortés con los invitados.

-Yo me llamo Nathaniel, un gusto-.Se dio media vuelta para servir el trago del chico, que por cierto aun no se presentaba, este termino de preparar el trago y se lo entrego al chico mientras lo miraba a los ojos.-¿Y cual es el tuyo?

Miraba como los niños elegidos bailaban y suspire algo aburrida. Quizas debia irme de alli y dejarles con la fiesta. Me iria fuera y quizas iria a comer una hamburguesa o algo para disfrutar de mi momento de gloria. Pero no tardo en acercarse un joven desconocido con pinta de chulo y cascos de musica. Me recordaba un poco a cierta persona, pero como en todas las discotecas sabia que queria. Y yo no era facil de engañar.
-Lo siento, pero no bebo. Menos aun bebidas brillantes que no inspiran confianza. Si quiero algo ya ire a la barra.
Dije cortante y sin decir mucho mas. ¿donde narices se habia metido cornusmon ahora que mas util era? Era un humano, pordia sacarme de aquel lio sin problemas.
-Ya puedes ir buscando otra chica con la que ligar.
Dije volviendo a observar a los niños y a buscar a Cornusmon que ahora era un humano un tanto oscuro.

cornusmon:

Cornusmon dio vueltas por la pista de bile felizmente aun pendiente de Mashury y acabo acercandose a la barra para ver a los que estaban alli hablando de algo. Se acerco y les miro con cara de ganarse nuevos amigos.
-¿de que hablais?...¿puedo entrar en la conversacion?
Dijo expectante y con ganas de sentirse mas humano, aunque sintiendo que Mashury al parecer tena un problema, pero a su vista ninguno grave.

Al ver lo desconfiada que era la chica no puedo evitar el reírme a carcajadas tirándome para atrás en el asiento y llevando la mano que tenia libre a mi frente mientras reía para luego arrollarme y apoyar mi brazo en mi pierna junto con mi rostro en la mano para intentar calmarme, cuando al fin pude calmarme le doy una mirada directo a los ojos de la chica, era una mirada sutil pero seductora, dura pero delicada a la vez. Me incorporo y le muestro mi identificación, a la chica, la cual tenía mi nombre y me identificaba como barman del lugar. -Tranquila, no intento ligar contigo, te vi algo sola y vine a ofrecerte algo, solo estoy haciendo mi trabajo. Y el brillo de la bebida es por eso- Le señalo un cartel el cual marcaba el nombre del local, "Luz de plata". -Este lugar es famoso por la particularidad de que las bebidas brillan de un color plata bajo las luces ultravioleta.- Doy un sorbo a la bebida que tenía en la mano y luego se la paso a la chica.

Sharon recibió gratamente su bebida del barman, justo en el momento en el que un muchacho, rubio al igual que ella, se sentaba en una silla frente a sí. La muchacha lo miró con curiosidad y sonrió, al tiempo que apoyaba los codos en la mesa y sujetaba su rostro con las manos.

- Hola ~-saludó la jovencita, escuchando cómo el recién llegado se presentaba como Haruka, y repetía su propio nombre-. Sip, ese es mi nombre, un placer conocerte ~

Fue en ese momento, en el cual el barman regresó de nuevo, con la bebida que el muchacho le había pedido. Sharon le dio las gracias al camarero, pero enseguida continuó prestándole atención a su acompañante, mientras se llevaba el vaso a los labios y bebía.

- Bueno ~ Se ha quedado una noche bastante entretenida, ¿no te parece?-dijo Sharon, mirando fijamente los ojos de Haruka.

Después de que Luka se fuera a la barra a tomar algo la niña estaba a punto de aceptar el ayudar al Lopmon cuando el muchacho llamado Itan apareció el cual les preguntó si se estaban divirtiendo.

—Si, gracias por la invitación.—Miró al rubio y le mostró una gentil sonrisa, después se fijó en el Lopmon y dio su respuesta.—No sé bailar, pero, trataré de hacerlo bien.

Wizardmon ya no se sentía muy a gusto en ese lugar, le inspiraba cierta desconfianza aunque de seguro era porque nunca había estado en un lugar como ese y con tantas personas a su alrededor. Dejó escapar un inaudible suspiro pero al menos su Tamer aún estaba perfectamente bien y conociéndola se irían en cuanto comenzara a sentir sueño, tenía solo doce después de todo, aún era una niña.

Haruka recibió la bebida que le habían traído, esta no le inspiraba confianza así que la dejo a un lado y decidió seguir platicando con Sharon ya que la conversación estaba mas entretenida que aquella bebida de aspecto extraño y poco confiable.

—Bastante entretenida.—Respondió el rubio mientras se hipnotizaba en su azulada mirada, realmente era una chica hermosa. Este coloco sus manos sobre la mesa sin quitarle la mirada a la chica.—¿Te estas divirtiendo?—Haruka espero con ansias la respuesta ya que si esta estaba aburrida, la llevaría a bailar un poco para quitarle el aburrimiento.

-Perfecto- Layla por fin había aceptado luego de que Zess se habría alejado, pero por acto del ‘‘¿destino?’’ apareció Itan, Lopmon no quería ser interrumpido ni un segundo más así que tomo a Layla y su compañero de las ropas y lo guío hacia mi ignorando al tamer que nos había invitado a esta fiesta en primer lugar, su plan iba funcionando sin que me de cuenta, todo hubiera sido diferente si yo me hubiera fijado en la ausencia de Lopmon en el interior del D-Cyber.

-Qué… Aburrimiento…- reposando mi cara sobre la mano izquierda no hacia nada más que bostezar, me costaba mantenerme despierto sin algo que me entretenga y ya ni la terminal de batalla tenia algo para que me entretuviera.

-Faryyyy~- Lopmon se me acerco, de las dos personas que parecían seguirlo solo podía reconocer a Layla, la joven maga que había visto junto a Carlos días atrás -¡Far…!- no le permití ni decir una palabra que lo encerré nuevamente en el interior del D-Cyber.

Me levante de mi letargo y me dispuse a acercarme a ellos con interés en saber por qué los había traído hacia mi -¿Qué les dijo ese roedor?- di una mirada seria, según mi terminal la persona que no reconocía era el digimon de Layla que había sido convertido en humano por su magia << Muy interesante… >>.

—Lopmon me pidió que bailara contigo...solo eso...—La niña desvió la mirada y al terminar prefirió guardar silencio, Wizardmon miró al muchacho, lo recordaba de cuando habían viajado a la Atlantida para tratar de encontrar la cura para el virus.

Así que se llamaba Luka, Luka Corsszeria, pero al parecer sus amigos lo conocían como "Zess Brand" el chico de cabellos miel no le vio ningún problema en aceptar su invitación de ir a bailar, este no había venido solamente a servir tragos a los invitados, para nada, Nathaniel iba a divertirse esta noche. Dio un salto sobre la barra para quedar al lado del pelinegro, listo para ir a bailar un poco y divertirse.

-¿Vamos?-Le dijo a Luka para que lo siguiera a la pista de baile.

-Aceptare tu invitación.-Dijo Nathaniel aceptando la invitación del trago que le propuso Luka, cuando llegaron a la pista de baile, Luka había hecho una nueva pregunta, este le mostró una leve sonrisa para responder a su pregunta.-Soy homosexual, aunque creo que te vas a ir ahora que sabes la verdad.-El joven de cabellos miel metió las manos a sus bolsillos y bajo su mirada, ya que todo el mundo al saber la verdadera orientación sexual del chico, siempre acostumbraban a ignorarlo y a darle la espalda.

Le mire y escuche tranquila, sin alborotarme ni descontrolarme aunque mis ganas de darle un puñetazo seguian en pie. Escuche su palabras y vi su documentacion para sentir como en cierto modo  se mofaba de mi. Le sonrei amablemente y cogi la bebida haciendole creer que iva a beber.
-en ese caso supongo que no importara...
Dije despues lanzandole todo el liquito de la bebida a la cabeza con mala uva.
-Primero rubito, nadie se rie de mi. Despues... se que algo quieres.
dije mirandole con una leve sonrisa apoyando mi cara sobre mi muñeca y jugando con una moneda en la otra mano.
-Habla por esa boquita. ¿quieres dinero?

<< ¿Bailar? >> no sabia que tenia pensado Lopmon pero no iba a dejar a la chica allí luego de aceptar bailar con un desconocido -Mmm… Está bien- tome de la mano a la chica y me la lleve lejos de su compañero, a mi me daba vergüenza que la gente me mirara cuando yo hago mi intento ‘‘bailar’’ y sin dudas el amigo de Layla nos iba a estar mirando.

<< Sabia que aceptarías, tal vez estés algo raro últimamente pero es imposible que dejes a una da… >> arroje el D-Cyber hacia atrás para que el Wizardmon con forma humana y no tener que escuchar el incesante sonido de Lopmon sus excentricidades.

Nos detuvimos a una lado de la pista y comenzamos a ‘‘bailar’’ -Dime… Ehh… ¿De donde conoces a Carlos?- trate de iniciar una conversación con lo que sea para evitar ponerme nervioso con la situación.

Al parecer Mashury no se lo había tomado muy a gusto mis palabras, lo cual pude percibir por la bebida que caía por mi pelo y mi rostro mojando mi camisa y haciendo que esta se pegara a los músculos de mí pecho. Paso mi dedo índice por mi mejilla y luego le doy una lamida sin despegar mis ojos de Mashury.

-La verdad que es un desperdicio de bebida, ya sé que soy ardiente, pero no tenias que arrojarme la bebida a la cara, bien podíamos ir a la parte de atrás y consumirnos mutuamente. Me pongo de pie y le arrojo 100 dólares a Mashury. -Ten, para que te compres algo, solo procura no arrojárselo a nadie mas enzima- Una expresión de diversión se podía notar en mi rostro, como si toda aquella situación no fuera más que parte de un juego, y sin decirle más regreso a la barra.

Wizardmon estuvo a punto de protestar al ver que ese chico se llevaba a su compañera humana a otra parte del lugar, pero cuando aquel joven arrojó el D-Cyber en su dirección el Digimon disfrazado de humano lo atrapó en el aire y arqueó ligeramente una ceja.

Cuando Layla y el muchacho estuvieron ya lejos de la vista del Digimon mago comenzaron a bailar, aunque agradeció el hecho de que el chico tratara de iniciar un tema de conversación. Así su nulo talento para el baile pasaría un poco mas desapercibido.

—Pues, lo conocí cuando por alguna razón terminé en el Dark Area, también allí fue donde conocí a Alec.—Le resultaba agradable evocar esos recuerdos, en aquel mundo lúgubre y oscuro había conocido a los que ahora consideraba como grandes amigos a quienes apreciaba mucho. Y también en donde además de haber conocido a Byakko y a Ouryu, se habían enfrentado al Digimon Huanglongmon.

Cuando escuche a ese hombre extraño hablarme no pude evitar ponerme una mano en la frente como muestra de verguenza agena. Tras ver el dinero simplemente le ignore con ganas de reventarle la cara  viendo como se marchaba y solo habia ido a fastidiar. En poco tiempo vino Cornusmon y se sento calmado.
-La gente por este sitio es subnormal¿nos vamos?
-Si quieres Mashu. Es curioso aparentar ser humano.
-jajaja, venga vamos.
Dije andando hacia la salida sin siquiera despedirme de nadie y dejando el dinero sobre la mesa para alguien que lo necesitara

Sharon se inclinó sobre la mesa, acercando su rostro al del muchacho. Parpadeó varias veces de manera hipnotica, sus ojos azules a la luz de los focos de colores parecían brillar con luz propia, mostrando todos los tonos del arcoiris.

- A decir verdad... Tu compañía me hace más grata la noche-susurró, con una leve sonrisa, mientras acercaba más y más su rostro al de él.

Al igual que la chica, Haruka se inclinó sobre la mesa y acerco su rostro al de Sharon, Haruka estaba hipnotizado con la azulada mirada de la chica de cabellos rubios. Este había tenido suerte de recibir ese mensaje por el sujeto llamado Itan, porque de no haber asistido al baile, se habría perdido de la belleza que estaba contemplando.

—¿De verdad? Pues si te soy sincero, tú me has alegrado la noche.—El joven de cabellos rubios acerco cada vez más su rostro al ajeno, Haruka estaba pensando en darle un beso, pero también pensó en que tal vez se enojaría por haber hecho tal cosa y lo dejaría solo. Este se dejó llevar y beso a la rubia sin despegar sus labios de los ajenos.—P-Perdona, me deje llevar.—Separo solo un poco los labios de los ajenos, dejando solo un centímetro de distancia, la miro a los ojos esperando a lo que diría Sharon al respecto.

-Oh, yo solo le rompí la pared con un ataque- la vieja historia de cómo conocí a Carlos era bastante estupida para está situación, además que era un poco rara si solo explicaba esa parte -Ese tal Alec… ¿Es algo raro no?- mirando al suelo intentaba no pisar a Layla con el intento de baile que era un desastre total << Tsk, ¿Qué estoy haciendo? >>.

El D-Cyber desprendió un ligero brillo mientras estaba en posesión de Wizardmon, esto se debía a que Lopmon nuevamente se había liberado por su propia cuenta -Dime si me perdí de algo- él andaba algo curioso por andar encerrado y lejos de mi, lo que le imposibilitaba el estar al tanto de lo que paso aunque hayan sido solo unos simples segundos.

Nathaniel se alegro al saber que Luka también era homosexual, incluso se le noto un leve sonrojo en el rostro. Este continuo bailando aferrado a Luka, ambos se estaban abrazando sin importar lo que las demás personas opinaran de ellos, siguieron bailando al ritmo de la música.

-Quiero estar contigo, Luka.-Reposo su cabeza sobre el pecho ajeno y sentía su calor, se sentía bien y quería compartir aquel calor con el pelinegro. Poco después retiro su cabeza del pecho ajeno y lo miro a los ojos y e mostraba una sonrisa picara.

Me dirijo al a barra y me pido un jugo sin alcohol de los que figuraban en la lista de bebidas que servían en el lugar. Uno de los barman me entrega la bebida la cual tenía un sutil brillo plateado, pago la bebida y me quedo mirando el vaso por unos segundo, me güiro para ver la pista mientras me llevaba el vaso a la boca para beber su contenido, cuando veo a Mashury quien se estaba yendo hacia la puerta, sin pensarlo dejo el vaso sobre la mesada y avanzo hacia ella para tomarla del brazo y detenerla. -Oye, no puedes irte todavía, la noche apenas comienza-

—Debo admitir que es, diferente, pero es lo considero como un gran amigo al igual que a Carlos.—La joven permaneció en silencio unos pocos segundos hasta que dejó escapar un suspiro.—Bailar se me da muy mal...la verdad prefiero cantar o tocar algún instrumento musical...

Volviendo con Wizardmon, escuchó la pregunta del Lopmon y solo fijó su mirada en los dos Tamer que se veían casi al otro lado del lugar.

Wizardmon: Tu tamer se llevó a mi compañera muy lejos.—Debido a la gran cantidad de gente que estaba presente le resultaba difícil el no perder de vista tanto al chico como a la niña.

-Oh, ¿Estábamos bailando?- deja escapar una suave risa y luego proseguí -Pensé que solo estaba tratando de no pisarte, veras a mi tampoco se me da el baile de ninguna clase- de repente se me cruzo por la cabeza algo que quizás sirva para acabar con nuestra pelea de quien pisara primero a quien -Si te gusta la música… ¿Por qué mejor no cantas algo? Ya que ambos somos malos para el baile seria bueno que hiciéramos otra cosa- era claro que ella no aceptaría tan fácilmente mi idea pero ya había pensado que decirle antes de que me respondiera -Si lo prefieres, podríamos ir a donde no hubiera tanta gente para que cantes, además eso serviría para escuchar mejor tu voz-.

-Bueno es de esperar, mi compañero es un chico que siempre está decidido- tras una leve risa de Lopmon, que daba a entender que lo dicho era una broma, tomo el D-Cyber y le pregunto a Wizardmon -¿Por qué eres tan sobreprotector con Lyla~desu?- con tono juguetón trato de relajar al compañero de la Hunter para evitar que destruyera todo el edificio si pasara algo inesperado.

El joven de cabellos miel asintió con la cabeza, Luka le atraía demasiado, no muchas veces se encontraba con chicos de su mismo gusto sexual. Continuo bailando con el pelinegro, y cada vez se aferraba a él mas fuerte para poder sentir su aroma cálido, hace mucho no sentía algo parecido.

Quería robarle un beso a Luka, pero temía de que este le dijera que estaba llevando las cosas a la ligera y que mejor era tomarse las cosas con calma, así que decidió esperar un poco mas.

Al parecer la rubia se había molestado por la tonta acción de Haruka, este quería enmendar su error con cualquier cosa que fuera conveniente, no quería perder la posible amistad que podría llevar con aquella chica, y era por eso que quería compensar su error.

—Discúlpame, creo que me deje llevar por la tentación. Déjame enmendar mi error.—Dijo tomando las manos de la rubia, y sin quitarle la mirada de encima, esperando alguna respuesta de ella.

Tras atender la barra por unos minutos uno de mis compañeros se me acerca. -Oye, el jefe te llama, dice que subas al escenario. Yo me are cargo de la barra. -Entendido- Me quito el delantal y me dirijo a una de las puertas del personal y entro a un pasillo que conecta con el deposito, la sala de descanso para los empleados y el escenario. Tomo el camino que lleva hasta la zona de descanso y me encuentro con el resto de la banda. El baterista, un chico de unos 17 años, cabello largo de color negro con mechas rojas, el bajista, un chico de 18, alto de tez pálida y algo robusto, tenía el cabello corto y teñido de verde, el tecladista y el guitarrista eran gemelos y tenían la misma edad que yo, ambos tenían ojos verdes y un cabello negro lacio que les cubría la frente. Todos iban vestidos con el uniforme de la banda, una remera negra con el símbolo de la banda que era unas alas de ángel ensangrentadas que estaban de cabeza. -Ten, ya está todo arreglado y preparado- Uno de los gemelos me entrega una de las guitarras, la cual tenía un color anaranjado y un diseño de líneas y runas. -Muy bien, entonces a tocar.- Me cuelgo la guitarra y voy junto al resto del grupo y entramos por detrás del escenario y tomamos nuestras posiciones, mientras uno de los ayudantes baja la música y toma un micrófono para anunciar a nuestro grupo. Me coloco en el centro del escenario y tomo el micrófono. -Buenas noches, somos Death Angels, y espero que esta música sea de su agrado- Los demás miembros de la banda comienzan a tocar. -Este tema se llama " Camino Al Pecado ", espero que les guste- Al pronunciar esas palabras mi voz se distorsiona un poco como alguien que habla con un acento extranjero. La comienzo a tocar la guitarra y a cantar, las marcas de mi guitarra comienzan a brillar de un color naranja oscuro, mientras que la gente en la discoteca y todos los que hubieran tomado algo en aquel lugar comienzan a perder el control y a dejarse llevar por el pecado y la oscuridad de sus corazones.

Sharon no se apartó cuando el chico que tenía enfrente rozó sus labios con los suyos. La chica sonrió, juguetona, y correspondió, aunque se quedó algo decepcionada cuando el muchacho se separó, azorado. No obstante, la chica no lo dejó estar. Cuando escuchó que una banda empezaba a tocar una música rockera y quizas algo siniestra, se levantó de su asiento, tomó la mano de Haruka y tiró de él suavemente, en una clara invitación a que lo siguiera. Cuando el chico fuera con ella, la rubia se acercaría mucho a él, le miraría fijamente mientras acariciaba el pelo rubio de su nuca, y lo besaría con suavidad, pero a la vez con cierta pasión que la caracterizaba.

- La noche es nuestra... Aprovechémosla ~

La música comienza a sonar y una puntada de dolor atraviesa mi corazón, la puntada me hace tambalear por lo que me apoyo a una mesa cernada para no caer al suelo, el dolor era como el de cientos de agujas clavándose en mi corazón, la música comenzaba a causarme dolor de cabeza al tiempo de que el dolor en mi pecho no cedía. -Esta música...- Llevo mis manos a mis oídos para apaciguar el ruido de la música, la música en si no era violenta o extremadamente fuerte, pero algo en ella estaba causando aquel dolor insoportable, la música lograba atravesar mis manos aunque su fuerza era menos, por lo que podía aguantar mejor, aunque el dolor en mi pecho perduraba. Un fuerte ruido a una botella al romperse me hace girar por instinto y al hacerlo puedo ver a un grupo de 5 personas peleándose a golpes de puño, mientras que dos mujeres se estaban agarrando de los pelos mientras peleaban, además de eso se podía ver a parejas bailando y tomando alcohol de forma alocada y en una esquina se podía ver a una pareja de hombres teniendo relaciones enfrente de todos. La cosa se estaba saliendo de control en aquel lugar. -Sera mejor que salgamos de aquí- Digo a nadie en particular, giro la cabeza para buscar a Mashury pero no la encuentro y veo la puerta de la salida abierta por lo que asumo que ya se habría ido. Instintivamente comienzo a buscar a los demás entre el tumulto de gente, teníamos que salir de aquel lugar lo antes posible.
El dolor y el desespero por hallar a los demás era tan grande que no podía notar como mi terminal de batalla comenzaba a vibrar y a emitir una luz roja de peligro.