Cuando un día el destino gira 180°

Era un día tranquilo en la ciudad de Tokyo, cierta chica caminaba entre una multitud de personas tratando de abrirse paso por el tumulto de gente y cruzando la calle al ver que las demás personas también lo hacían, ya que debido a que todos a su alrededor le superaban en altura le era bastante difícil poder ver bien las señalizaciones que indicaban cuándo cruzar y cuando no. Después de dos horas de recorrer la ciudad buscando la tienda de electrónica que siempre visitaba pero había cambiado su localización decidió descansar al interior del centro comercial mas famoso y grande que había en Tokyo, se sentó y dejó escapar un profundo suspiro, alzó la vista para ver la hora en el gran reloj holográfico que estaba proyectado en medio de la fuente de agua y solo en ese momento se dio cuenta de algo, se había detenido. Se puso de pie inmediatamente, el reloj nunca se había detenido, ni siquiera en los peores momentos ya que además de dar la hora brindaba noticias importantes de ultimo segundo, el clima y las alertas importantes. Y cayó en cuenta de otra cosa, a su alrededor las personas tampoco se movían.

—Debo estar soñando...—Tras decir eso comenzó a correr por el lugar para ver si había alguien que no estuviera afectado o una forma de despertar de ese supuesto sueño, al ver que todos estaban congelados en el tiempo comenzó a sentir miedo, mucho miedo.—Y...y ahora que hago.

Sintió que su corazón latía cada vez mas rápido, ¿acaso todo se quedaría así para siempre? Entonces le pareció escuchar algo, miró en todas direcciones y lo escuchó de nuevo, agudizando su sentido del oído prestó atención y caminó siguiendo esa aparente voz. Llegó a un pasillo en el que no había nadie ya que esa zona del centro comercial estaba en mantenimiento temporal, se internó pero no sin antes dudar.

—¿Hola, alguien?—Al llegar al final de aquel pasillo una repentina luz le obligó a cerrar los ojos, al abrirlos frente a ella había un extraño aparato de color enteramente blanco con una pequeña pantalla de color azul claro y no había nada a su alrededor, todo era blanco.

???: Di tu nombre.—Esa extraña voz parecía provenir de todos lados y de ninguno al mismo tiempo, la niña decidió calmarse y hacer caso a lo que esta decía.

—Layla Ibuki.—Tras decir eso el aparato cambió de color y pasó a ser de color casi enteramente negro, a excepción de algunos detalles de color blanco.—¿Que es eso?

???: Tómalo, es un Xros Loader. Ahora te pertenece.—Nuevamente ella hizo caso y cuando el extraño artefacto se acercó ella lo tomó en sus manos.—Layla Ibuki, te deseo mucha suerte, porque hoy tu destino ha sido cambiado para siempre.

Y tras decir eso la voz desapareció junto con todo a su alrededor, cuando Layla reaccionó de nuevo estaba nuevamente sentada en la banca de madera a unos metros de la fuente y el reloj holográfico, pero ahora todo estaba de vuelta a la normalidad. Las personas caminaban, compraban, charlaban, lo normal.

—¿Acaso todo eso fue solo un sueño?—Su voz reflejó una ligera decepción, pero sintió algo en su mano derecha y al bajar la mirada a esta vio que el mismo aparato de antes.—¡El Xros Loader!

Una sonrisa apareció en el rostro de la chica y rápidamente salió del centro comercial mientras no dejaba de admirar aquel objeto llamado Xros Loader, al llegar a un parque en el que no había muchas personas a esa hora del día. Hora del Almuerzo. Se sentó en otra banca y comenzó a observar el Xros Loader con mayor detenimiento.

—Pero...para qué sirve.—Y justo después de decir eso algo accionó en el Xros Loader ya que la parte superior de este se abrió dejando ver una "V" de color dorado y después de eso algo salió del aparato. La chica miró a su alrededor y dejó escapar un suspiro de alivio al ver que ya no había nadie cerca, entonces al bajar la vista al suelo vio algo parecido a un pequeño diablillo de color púrpura.

Sus ojos eran verdes, traía una pañoleta de color rojo en el cuello y guantes del mismo color, poseía grandes orejas y también cola, la chica casi se cayó hacia atrás debido a la sorpresa. La niña al sujetarse con fuerza al asiento para no caer volvió a sentarse de forma correcta y de nuevo trató de asimilar lo que estaba pasando. Demasiadas cosas sin explicación por un día.

—¡Q-quien eres!—El pequeño Diablillo se cruzó de brazos y la miró de arriba a abajo con esos ojos verdes, tras estar un par de segundos en silencio se cruzó de brazos y mostró una leve sonrisa.

Impmon: ¿Entonces, ahora tú tienes el Xros Loader?—Se subió a la banca de un salto y extendió su mano en dirección a la chica.—Yo soy Impmon.

—Soy Layla, eh...es un placer conocerte, Impmon.—Ella correspondió el saludo con algo de timidez y al sentir un poco mas de confianza mostró una amable.

La niña había entablado una conversación con Impmon mientras este le explicaba lo que él era. Un Digimon. Y entonces al escuchar algo el Digimon Virus se dio la vuelta al igual que la niña, se sorprendió al ver a un joven vestido de negro, y unos segundos después apareció otra entidad, era como un zorro pero de pelaje de color amarillo y podía caminar en dos patas.

Impmon: Otro Digimon, es una Renamon.—El pequeño Diablillo bajó al suelo de un salto y la niña se puso de pie mientras no perdía de vista en ningún momento a ambos recién llegados.—Quienes son ustedes.

—¿Renamon?—La niña no supo por qué de repente ese chico y su Digimon habían aparecido hasta que se percató de que el muchacho estaba mirando su Xros Loader.

Layla mostró una amable sonrisa al saber que no eran de malas intenciones, entonces ella también procedió a presentarse tal y como lo había hecho el muchacho.

—Me llamo Layla Ibuki.—Y al igual que él hizo también una reverencia en señal de respeto, entonces escuchó lo que este dijo y luego miró fijamente su Xros Loader.—En realidad, todavía estoy tratando de averiguar cómo funciona. Pero Impmon me explicó mucho sobre los Digimon.

El Diablillo permanecía en silencio, aún no confiaba del todo en los recién llegados pero mientras no hicieran algo malo podría estar tranquilo, la niña entonces observó el Digivice del joven llamado Luka el cual este dijo que se llamaba D-3 y a ella le pareció muy interesante, aunque la niña aún tenía muchas preguntas las cuales su compañero no había podido responder.

—Etto...este Xros Loader me lo entregó una...bueno, una voz de la nada, pero quiero saber quien fue. ¿Tu también lo recibiste así o lo obtuviste de otra forma?

—Oh...bueno, de todas formas gracias, al menos ahora ya sé para qué sirve.—Después de eso se dio cuenta de que Renamon había comenzado a hablar con Impmon.

Impmon: Soy del tipo Virus.—Después de dar su respuesta Renamon solo asintió y después respondió a la duda que tenía su dueño.

Pero entonces el pelaje de Renamon se y su mirada se volvió mas fría al igual que emitía un gruñido en voz casi inaudible, después aclaró que había otro Digimon cerca, Layla entonces fijó su mirada con Impmon quien también se mostraba ligeramente sorprendido ante eso. Ella no sabía si eso era algo bueno o malo, pero por la reacción de Renamon lo mas probable es que fuera la segunda opción. Miró a Luka quien se veía dudoso sobre si iba al lugar a donde estaba el Digimon salvaje o quedarse donde estaba.

—¿Puedo ir con ustedes? Así puedo aprender mas sobre como usar esto.—Mostró su Xros Loader negro y esperó a la respuesta del muchacho mientras Impmon a lo lejos del parque notaba que de a poco al lugar estaban llegando mas personas.

Impmon: ¡Claro!—El Diablillo miró a su Tamer y ella tras pensarlo unos segundos asintió, el Digimon Virus mostró una sonrisa y avanzó hasta el campo de batalla. Tomó una piedra en su mano y se la arrojó con todas sus fuerzas al Raptordramon, la piedra impactó en el ojo derecho de este y el Digimon falló el ataque que iba dirigido hacia Kyubimon.—¡A que no me das lagartija tonta!

Tras decir eso hizo una mueca burlona al Digimon enemigo y este se lanzó violentamente contra el Diablillo, rápidamente este salto sobre la cabeza del Digimon y terminó sobre su lomo, el Raptordramon comenzó a hacer movimientos violentos para quitarse al pequeño Digimon Virus de encima mientras este se sujetaba como si estuviera domando a un animal salvaje.

Impmon: ¡Arre Raptordramon!—Layla rió un poco en voz baja al ver eso y Kyubimon aprovechó la oportunidad para atacar, Impmon se bajó del Raptordramon y se preparó también para pelear en serio.

—¡Adelante Impmon!

El impmon se habia montado sobre raptordramon, kyubimon analizaba la situacion para ver de donde atacar a raptordramon sin hacerle daño a impmon, cuando tuvo la oportunidad corrio hacia raptordramon, salto y giro rápidamente con el cuerpo envuelto en llamas. El fuego se estiro y asemejo a un dragón-¡Koenryu!-kyubi se dirigio hacia raptordramon, giro alrededor de su cuerpo quemandolo rapidamente y dejandole levemente herido.

Yo estaba sorprendido aunque mi mirada era inexpresiva y fria, aunque me emocionaba el echo de que renamon hubiera evolucionadi en kyubimon. Kyubi regreso rapidamente y se posiciono enfrente de mi y la niña, alparecer se sentia mas fuerte y queria protegernos-Bien echo kyubi-felicite a mi camarada.

Simplemente me parecio increible, luka mi frio e inexresivo camarada, se acerco a a mi y me felicito¡incluso esbozo una sonrisa!, debemos luchar mas seguido asi recibire mas sonrisas y cumplidos de su parte. Por otro lado mire a impmon sediendole el pasi para que atacara-ten cuidado impmon-le dije mirandolo con preocupacion, lo admitia estaba preocupada era bastante pequeño y conocia la tipica actitud de los impmon.[/color]

Impmon mostró una sonrisa confiada y se lanzó al ataque, comenzó a formar bolas de fuego negro en sus manos y comenzó a lanzarlas hacia el Raptordramon, los ataques impactaban en la cabeza del monstruo dificultando su precisión para atacar ya que tenía que cerrar sus ojos para que el fuego no se los dañara.

Impmon: No necesito tener cuidado, ya me han subestimado mucho antes. Demostraré lo que puedo hacer.—Además de demostrar que no era débil quería impresionar a su Tamer para que ella viera lo fuerte que podía ser. Entonces juntó sus manos y comenzó a formar una bola cada vez mas grande de dos elementos combinados, fuego y hielo, cuando esta ya era mas grande que él mismo la arrojó con todas sus fuerzas hacia el Raptordramon.—¡Invocación!

La esfera impactó de lleno en el enemigo enviándolo varios metros hacia atrás, ese ataque lo había herido mucho por lo que el Digimon Virus vio otra oportunidad para atacar, entonces el aire del lugar comenzó a volverse un poco mas frío y el Digimon pronunció su ataque.

Impmon: Noche de Ventisca.—Hecho eso una tormenta de nieve oscura golpeó al Raptordramon comenzando a formar fragmentos de hielo en la armadura de este y cuando el ataque terminó el enemigo cayó al suelo.—No fue la gran cosa.

Pero después de decir eso recibió una sorpresiva embestida del Raptordramon, este lo estampó contra un árbol con enorme fuerza y Impmon tras forcejear consiguió alejar al enemigo, ese ataque le había causado algunas heridas superficiales. Justo cuando iba a derrotarlo definitivamente Kyubimon lo hizo antes que él y el enemigo fue vencido definitivamente. Impmon emitió un pequeño gruñido y entonces su Tamer se acercó a él demostrando estar claramente preocupada. Ella se arrodilló en el suelo y observó a su Digimon

—¿Estas bien? Ese golpe fue muy fuerte.—Antes de que el Digimon Virus pudiera terminar de decir que estaba bien algo ella lo abrazó con suavidad haciendo que él se sonrojara, cuando ella lo soltó Impmon solo apartó la mirada de todos los presentes mientras aclaraba de nuevo que estaba perfectamente bien.

[coloe=#6600FF]El impmon demostro una gran firtaleza en batalla sin embargo fue embestido por raptordramon, este quizo dejar en claro que no seria vencido por una alimaña purpura y antes de que le diera un golpe critico al pequeño diablillo kyubimon intervino tomo a impmon por su bandana y lo retiro de la vista de raptordramon. Ao dejar a impmon kyubimon fijo su vista en su nuebo objetivo. Raptordramon. Nuebamente ejecuto su ataque koenriu pero esta ves giro en llamas y en forma de dragon alrededor de las patas de raptordramon derribandolo.

Porfin vio una oportunidad y la tomo-Obimidama-extendio su cola en abanico y las llamas que emitia de las puntas de esta se dispararon rapidamente hacia raptordramon, luego de impactara el obimidama de kyubi contra el raptordramon, el cual se desintegraba de a poco en datos y aproveche, corrí con mi espada en manos y atravese el pecho de raptordramon logrando que este se desintegrara por completo.

Kyubi se acerco a impmon y lo miro desde arribaTe adverti que tuvieras cuidado-el aspecto del diablillo la parecia muy tierno a renamon po lo cual lo trataba dulcemente, yo por mi parte no entendia porque el trato especial pero bueno era cosa de mi camarada no mia-¿te encuentras bien?fue duro pero vi tu buen esfuerzo, no es nesesario demostrarle a tu camarada que eres fuerte ella ya.lo sabe-dijo la zorra digital con una media sonrisa en el rostro.[/color]

Impmon solo asintió en silencio y Layla le mostró una dulce sonrisa mientras le daba unas suaves palmaditas en la cabeza.

—Le pudiste hacer mucho daño a ese Digimon, eres de verdad muy fuerte.—Después la niña fijó su mirada en Kyubimon y inevitablemente le acarició detrás de las orejas.—Tu también eres muy fuerte Kyubimon, felicidades por tu Digievolución.

Al retirar su mano volvió a fijar su atención en Impmon y en las heridas que tenía, eran solo superficiales y el Digimon Virus no les daba ninguna importancia pero aún así Layla iba a curárselas al llegar a casa.

La niña agradeció el hecho de que Renamon hubiera vendado las heridas de Impmon, después escuchó la pregunta que le hizo Luka y nuevamente se volteó para verlo a los ojos.

—Vivo con mis abuelos, casi al...—Entonces recordó todo el camino que había hecho desde su hogar hasta el punto en el que se encontraba actualmente.—...Otro lado de Tokyo.

Impmon: No fue tan difícil, además esa armadura que tenía lo hacía lento. Por eso no fue difícil atacarlo.—Mostró una leve sonrisa y entonces no muy lejos comenzó a escuchar que cada vez estaban llegando mas personas.—Hay que irnos a otro lugar.

—¿Que tal si los invito a mi casa? Esta lejos pero valdrá la pena.—Luka lo pensó unos segundos aunque Renamon no tuvo ningún problema en aceptar la invitación.

—No hay problema, puedo decir que eres un maestro suplente de...¡de otro país!—Tanto Luka como Renamon dudaron mucho de la efectividad de esa excusa pero vieron que Layla les hacia señas para que la siguieran.

Mientras caminaban Renamon hablaba con Impmon, a los pocos minutos ya habían entablado una interesante charla, Impmon no recordaba casi nada de su estadía en el Mundo Digital. Solo algunos recuerdos borrosos y en su opinión sin importancia, obviamente para llegar a la casa de la niña tomaron las calles menos transitadas lo cual les llevó un poco mas de tiempo mientras que Renamon e Impmon les seguían de cerca saltando de tejado en tejado con gran habilidad. Cuando estaba atardeciendo finalmente llegaron a una residencia al mas puro estilo oriental antiguo.

Cuando Layla estaba por entrar a la casa tocó tres veces la puerta y desde el interior se oyó un chasquido, ella empujó la puerta y invitó a Luka a pasar al igual que a Renamon y al Diablillo. Por suerte la calle estaba vacía así que nadie los vio.

—¡Ya llegué, traje una visita!—Caminaron hasta llegar a la sala de estar, la niña se acercó a la puerta corrediza y la deslizó con cuidado dejando ver el patio trasero casi completamente el cual era sumamente amplio, poseía un estanque con peces Koi y varios árboles.—Bueno, esta es mi casa, espero que les resulte agradable. Y no se preocupen, ya comprobé que mis abuelos no están, de seguro fueron a hacer las compras.

Hizo una ligera reverencia y después de eso caminó en dirección a la cocina la cual estaba a escasos metros de la sala de estar y daba a esta por una especie de "ventana" en la pared. Comenzó a preparar una cena simple y rápida para no aburrir a Luka y a su Digimon.

Impmon: Es muy grande.—Impmon de inmediato salió al patio para recorrerlo, se le notaba muy feliz por eso ya que le gustaban mucho los lugares espaciosos como aquel.

Mientras nos dirigiamos a la casa de layla renamon e impmon saltaban de casa en casa con gran agilidad mientras yo charlaba con la niña, renamon hiba divertiday que se me habia olvidade que traia el auto y lo habia dejado estacionado cerca del centro comercial, me puse una mano en la cara y recorde que traia el movil y un auricular conectado a este por via bluetooth; encendi el auricular y le lance uno igual a renamon, esta lo atrapo y se lo puso en la oreja cubriendolo con su pelaje amarillo. Asi fue durante el camino y renamon habia entablado una buena conversacion con impmon, raro ya que virus y data quiza no se llevaban muy bien.

Cuando comenzo a atardecer llegamos a la casa de layla . La casa era del mas puro estilo oriental antiguo. La niña golpeo la puerta tres veces y se escucho un chasquido, entramos para nuestra suerte no habia nadie en la calle. Aviso que habia traido visitas cosa que me extraño ya que nos confirmo que no habia nadie en la casa. Layla camino por la casa y se acerco a la puerta corrediza y la abrio dejando ver el patio trasero, este era sumamente amplio, tenia un estanque de agua con peces koi dentro de este. Renamon paso al patio y se acerco al estanque a observar los peces-Es bastante amplio, aun sigo prefiriendo la mansion crepusculo-acoto la zorra digital

Layla hizo una reverencia y se adentro a cosinar una cena para no aburrirnos, yo preferi acompañar a la niña hacia adentro.[/color]

Entonces sorpresivamente apareció un pequeño cachorro de color negro y patas blancas, corrió hasta Layla mientras movía alegremente su cola. La niña bajó la vista para ver al perrito y le entregó un pequeño trozo de carne, el cachorro lo tomó con gran felicidad y se fue caminando al patio para poder comerlo.

—Supe que mis abuelos no están ya que no respondieron, y porque él fue quien nos abrió la puerta en su lugar.—Señaló al perrito quien terminaba de comer, Luka no entendió del todo el hecho de que el perrito les había abierto la puerta.—Mi abuelo le enseñó a abrir la puerta tirando de una cuerda, aprendió muy rápido, y sólo abre la entrada si ellos no están.

Tras varios minutos de espera la cena ya estaba lista, Ramen con Onigiris como acompañamiento, preparó la mesa con ayuda del muchacho y cuando todo estuvo listo llamó a los Digimon para que fueran a cenar también. Se sentaron a la mesa y comenzaron a comer.

—Oye Luka, ¿desde hace cuanto tiempo conoces a Renamon?

La niña escuchó atentamente lo que le decía Luka, entonces cuando la pequeña mascota de este apareció ella mostró una ligera expresión de sorpresa luego acompañada de una leve sonrisa ya que a su parecer ese pequeño demonio Digital era muy tierno. Cuando todos terminaron de comer Renamon dio las gracias por la comida pero después de eso el aire se tornó tenso ya que Luka le había hablado en un tono frío a Impmon y eso al parecer hizo enojar a Renamon quien rápidamente interfirió diciendo que no era necesario que demostrara ser fuerte ya que ya lo era. Las miradas de ambos chocaron y la niña solo apartó la mirada sintiéndose un poco incómoda con lo que estaba pasando.

Entonces el pequeño Demonio Digital interfirió entre ambos emitiendo pequeños gritos, cuando la situación se calmó un poco Renamon se puso de pie y salió en dirección al patio para después ser seguida por Impmon.

—E-etto...perdón por lo que pasó...—Simplemente no pudo evitarlo, Layla tenía la costumbre de pedir disculpas por cualquier cosa mala que sucediera estuviera o no involucrada directa o indirectamente.—...

Mientras tanto en el patio Renamon estaba sentada frente al estanque observando nadar a los peces Koi, Impmon se le acercó y se mantuvo de pie a su lado mientras también observaba el estanque, pasados unos segundos de completo silencio el Digimon Virus finalmente rompió el silencio.

Impmon: No tenían por qué haber hecho eso sabes. No me importa si otras personas o Digimon piensan mal de mi.—Le mostró una leve sonrisa a la Digimon y ella hizo lo mismo.—Aunque de todas formas, gracias.

Mientras caminaban por la calle Layla se sentía feliz de que el problema se hubiera solucionado y también que Luka fuera tan amable de comprarle un helado, pero entonces su alegría lentamente se desvaneció cuando escuchó la pregunta del joven. Sintió un ligero nudo en la garganta por los recuerdos que aparecieron casi inmediatamente en su mente.

—Mis padres…peleaban mucho, por culpa de muchos problemas, mamá y yo le teníamos miedo a papá porque…—Bajó la mirada para poder decir eso último, recordó cada súplica, cada grito, cada lágrima derramada. Y todas las escenas violentas, incluso la que aún la atormentaba en pesadillas.—Él nos trataba muy mal, una noche llegó a casa muy enojado y ebrio, entonces…mamá me escondió y él la golpeó con una vara de metal…en la cabeza…

Cerró sus puños con fuerza mientras su voz amenazaba con quebrarse, por el momento no tuvo el valor suficiente como para terminar. La escena en su memoria de la sangre salpicando por doquier con casa golpe y su madre con el cráneo sumamente fracturado le producía escalofríos y un profundo miedo.

Desde un techo ambos Digimon observaban lo que sucedía, ambos tenían un gran sentido del oído por lo que habían escuchado todo.

Impmon: No sabía que había pasado por eso.—El Diablillo habló en un tono de voz bastante serio que la Digimon no había oído hasta ahora, no lo demostraba externamente del todo pero Impmon quería proteger a la niña Tamer, no quería verla sufrir de ninguna forma.—No permitiré que la lastimen, nunca.

La niña se frotó los ojos con cuidado para borrar cualquier rastro de lágrimas, cuando se sintió mejor dijo un “Gracias” en voz baja y después Luka le entregó un helado de fresa y vainilla. Mostró una leve sonrisa al sentir el delicioso sabor del helado y así ella y Luka se acabaron sus respectivos postres.

—Muchas gracias Luka. Estaba muy rico.—Se limpió la boca con una servilleta y después la depositó en un basurero.—Y gracias por ofrecerme tu ayuda, pero mi mamá está en coma desde hace algunos años…Pero aún tengo de en que va a despertar, algún día.

Mientras caminaban de regreso a la casa de Layla los dos Digimon se habían acabado su helado también y les seguían el paso, después de llegar a la casa de nuevo Layla lavó los platos junto con los demás utensilios de cocina y los guardó en perfecto orden, entonces en ese momento ella escuchó que tocaban la puerta y el perrito jalaba la cuerda para abrirla. Renamon desapareció casi de inmediato pero Impmon como había estado distraído no reaccionó a tiempo y la niña simplemente le ordenó que se quedara quieto.

—¡Layla, ya llegamos!—La niña reconoció a su abuelo abuelo quien se asomó por la puerta de entrada a la sala de estar.—¿Quien es él?

—Es eh...un maestro suplente de la escuela y…lo invité ya que, ¡e-en su opinión soy una estudiante ejemplar!—Habló con una voz ligeramente nerviosa, mientras tanto abrazaba a Impmon quien simulaba ser un muñeco de felpa.

Después de hablar un rato Layla decidió que ya era hora de volver definitivamente a casa, se despidió amablemente de Luka y se fue mientras Impmon la guiaba por el parque ya que ya era de noche. Al llegar de nuevo a casa les explicó a sus abuelos que ya había cenado por lo que a escondidas llevó a Impmon a su habitación, tras ponerse la Pijama, la cual era una camisa celeste de mangas largas y unos pantalones blancos, se recostó en su cama y ocultó el Xros Loader debajo de su almohada. Como ya se había encariñado mucho con el Digimon Diablillo para sorpresa de este lo levantó del suelo y lo abrazó para después conciliar el sueño.

—Buenas noches Impmon...—Y en tan solo unos pocos segundos el Digimon se dio cuenta de que ya se había quedado dormida, de seguro se había sentido muy cansada pero lo había ocultado muy bien.

Impmon: ¡O-oye!—El Diablillo se sonrojó bastante con ese gesto pero tras unos segundos finalmente desistió y se acomodó también para dormir.