Porque no se sabe lo que puede pasar.

Era hora de continuar su aventura digimon, buscando salir de esa isla, la isla Fille e ir a otros lugares a investigar, quería hacerse más fuerte, poder defenderse de otros digimon, ya que tener que estar huyendo, después de haber estado gran parte de su vida, por no decir toda, huyendo, era ya una pesadilla, muy desagradable y quería por fin, plantarle cara a esos obstáculos que siempre ha tenido. Iba decidida con Guilmon a su lado, enseñándole algunas plantas conocidas y extrañándose por muchas otras misteriosas, pero era mejor no tocarlas por si eran venenosas, lo que faltaba ahora... Pillarse un problema y morirse por culpa de alguna estúpida flor, venga ya. Suerte que en aquel lugar los digimon eran pacíficos y no tenía nada de lo que preocuparse, ella iba feliz.

Le dijo a Guilmon que subiera a uno de los árboles que eran de verdad para que buscara algunos frutos y éste lo hizo encantado, aunque le costó un poco subir, quizá por su gordito culo que tenía, técnicamente hablando, refiriéndose a su gran cola. Alice recogió algunas frutas que Guilmon tiró después de darles un mordisco no muy grande, para probar que eran buenas, si eran malas, a él le afectaría menos que a Alice, por lo que no tuvo que preocuparse mucho. Después bajó del árbol y buscaron un agradable claro muy luminoso y se sentaron, sintiendo la frescura de aquella hierba y se dispusieron a comer algo. Las frutas estaban muy dulces, quizá demasiado, pero estaban deliciosas y cada una de un color chillón, invitaba a continuar disfrutando de su sabor, de su zumo para hidratarse, aquello era perfecto, una parte del paraíso deseado por cualquiera.

-Hmm, que rico ¿Verdad Guilmon?
-¡A Guilmon le gusta mucho!

Caminábamos por el gran bosque, con el rico viento soplando en mi cara, respirando aire fresca y admirando cada planta que veían cuando los cruzaba. Agumon tenía la sensación de tocarla para ver qué pasaba pero siempre lo negaba, mientras caminábamos oímos una voz de una chica, era una voz conocida… Aunque no recordaba donde lo escuche.

-Agumon ¿Recuerdas aquella voz?-Pregunte.

-Yo no sé, muchas aventuras que ya me a olvidado de algunos detalles-respondió Agumon.

Decidimos averiguar que era, cuando supimos que era, resultaba ser la chica llamada Alice, la misma chica que vimos en el hospital huyendo de un grupo de chicos y nos acercamos rápidamente.

-¡Hola Alice!-Salude- Había pasado tanto tiempo si vernos-Dije sonriendo- Aunque sospecho que no sabes quienes somos.-Dije- Bueno yo me llamo Samuel y este es Agumon-Me presente.

-Soy el gran Agumon-Dijo.

Después de encontrame con mi primo, Fary Tail, seguí buscando por toda la isla File tropas para el ejército. Ahora rebisábamos por este denso bosque, creo que era el Bosque Nativo. Debíamos hallar a alguien fuerte en algún lado de la isla. Adelante, entre los árboles, distinguí a alguien. esa persona le estaba hablando a otra.

-¿Quiénes serán?- pregunté, y luego miré a Dorumon. -¿Quiénes crees que sean?-

-No lo sé.- me contestó. -Tal vez debamos ver quiénes son, quizás sean aliados.-

-Tienes razón, vamos.- y dicho esto, nos fuimos a averiguar quiénes eran esas personas.

Mientras comían tranquilamente, Guilmon se puso alerta, pudo escuchar algunos pasos que se dirigían a donde estaban, por lo que Alice dejó de comer y miró en la dirección que señalaba su digimon, para de entre los árboles, ver a Samuel, aquel chico que la ayudó hacía tanto tiempo. Sonrió al verle y Guilmon se tranquilizó, saludando ambos. Samuel saludó con bastante alegría y luego dijo que no sabía quienes eran, sin embargo eso no era así, Alice aún les recordaba a los dos. Saludó con la mano y le invitó a sentarse junto a ellos con un leve gesto amigable, tendiéndole una sabrosa fruta saludable para todos.

-Jeje, claro que os recuerdo ¿Cómo olvidaros? Ha pasado mucho tiempo pero sé quiénes sois. ¿Cómo os ha ido? ¿Todo bien? Seguro que tienes mucho que contar jaja.

Dijo y preguntó mientras volvía a dar un mordisco a aquellas frutas, juraría que no se cansaba de comerlas, eran enormes y estaban muy buenas, aunque un poco duras y crujían al morderlas, pero eran como un vicio, no podía parar de comérselas. Muy poco después, Guilmon volvió a ponerse en guardia y nuevamente Alice clavó su mirada en el mismo punto que su digimon, para ver a otro aliado, ésta vez era Johno. Levantó el brazo derecho sonriente y lo movió de un lado a otro, para indicarle que fuese hasta ellos, no sin darle un grito para que supiera que era ella, la del mismo incidente con Shogungekomon.

-¡Ehhhh, John! ¡Cuanto tiempoooo!

Alice me invito que me sentara en el suelo, pues así lo hicimos y cogí la manzana que me dio Alice, yo agarre la otra y se lo di a Agumon y comimos era muy sabrosa, nunca probé esta clase de fruta.

-Bueno…-Dije tragando- No sé por dónde empezar, no sé si en orden o por lo que más me acuerdo-Dije- ¿Tu que opinarías?-Pregunto a Agumon.

-Podías empezar con lo de la espada o como llegamos al mundo digital por primera vez-Sugirió Agumon.

-Está bien, llegamos por primera vez al Mundo Digital con la ayuda de un chico llamado Janaan que utilizo, una espada mitad llave, abrió un portal con esa espada y así fuimos al Mundo Digital, un chico que se llamaba Dansher, supongo que te acuerdas de él con Veemon fuimos juntos en ese día. No salió de todo bien, al final nos persiguió una manada de Digi-Bebes-Termine de relatar.

-Un día extraño y maravilloso-Dijo Agumon.

Luego nos fijamos entre el arbusto y resulto ser nada ni nada menos que Johno y yo levante mi mano agitándolo.

-¡Hola Johno! ¿Cómo te ha ido?-Pregunte amablemente.

Me resultó interesante encontrar a ellos dos acá. Esa chica Alice, tan maravillosa, o me jor dicho, más maravillosa, de lo que la recuerdo. Samuel no cambió. Personas como él no cambiaban fácilmente. Yo seguía con muchas cosas en la cabeza. Cuando escuché que me hablban, me sobresalté. Mientras tanto, Dorumon aprovechaba de las ricas frutas que había.

-Samuel, cuando tengas tiempo, tendremos que hablar.- le dije seriamente, aunque, en realidad, el tema era urgente. Dicho esto tomé una de esas frutas y me la empecé a comer.

Según parecía, realmente Samuel tenía mucho que contar, tanto que ni sabía por dónde tenía que empezar y tras hablarlo con su digimon, pareció encontrar un punto de comienzo en el que comenzar a relatar sus aventuras. No conocía a ese tal Janaan, por lo que esa parte no la comprendió muy bien, aunque se le hacía conocido y a la vez extraño eso de abrir el mundo digital con una llave, quizá esa fuese también la misma razón por la que entró Alice, por accidente de que Janaan hiciera eso, si no era así, no tenía ya ni idea.

Luego habló de Dansher, si, le recordaba y a su Veemon también, Guilmon hizo muy buenas migas con él, a ver si le veía de nuevo algún día. Soltó una muy leve risa cuando dijo lo de ser perseguidos por una manada de Digi-Bebés, ya que se lo imaginó, pero luego volvió a estar como antes. Veía a Johno muy serio, así que cuando se acercó le cogió de la mano y le dio dos besos en la mejilla a modo de saludo tradicional, luego hizo lo mismo con Samuel, aunque fuese un poco más tarde, se le había ido la cabeza y en realidad, no hacer esto era una falta de respeto por parte suya.

-Relajaos... No hay que discutir cosas hoy, mejor que disfrutemos de este reencuentro. Todo un gusto volver a veros, me alegra que esteis bien chicos, jeje.

Cuando termine de relatar, Alice se había reído un poco por el final, también me reí un poco ya que si lo decía, resultaba algo cómico, pero Johno me había dicho que tenía que hablar conmigo. Con su tono de seriedad, al aparecer aun estaba enojado conmigo por lo de la Base, me iba a levantarme hasta Alice me dio 2 besos en la mejilla. Ahí me sonroje mucho y estaba perdido en mis pensamientos.

-Claro… Hay… que relajarse-Dije por error, mientras que me volvía a sentarme. – Dinos ¿Cuáles son tus aventuras que tuviste?-Le pedí amablemente con una sonrisa.

Yo no me podía relajar, aunque así lo hice. No tenía mucho tiempo, así que estaba algo apresurado igual. Debía contárselo para que lo sepa el resto del equipo. Solo debía esperar a terminar de comer. Tomé otra fruta y me la comí rápido.

-Es importante y urgente.- le aclaré mientras toma una tercera. -Pero esperaré.- y dicho esto me empecé a comer la tercera más lentamente.

Observó a ambos chicos, no entendía que tendría que ver Johno con Samuel, pero estaba claro que se conocían y que encima, se conocían más de lo que ella pensaba y podía imaginar, no llegaba a pensar la gravedad del asunto que quería tratar Johno, pero no sería ella la que cuestionara nada de eso, es más, debería dejar que ellos hablaran para que pudieran estar tranquilos, sin que pensaran todo el rato en ello. Dio un suspiro y sonrió a Samuel por sus palabras, la verdad es que no había tenido casi ninguna aventura y eso en cierto modo resultaba frustrante, aunque claro, como mucho llevaba tres o cuatro días en el mundo digital, no llevaba más tiempo, el resto del tiempo había estado en el mundo humano, al cual añoraba tener que volver, no era tan peligroso como este.

-Bueno... Yo... No tuve casi ninguna... No sé cómo llegué al Mundo Digital, de repente un día me levanté en medio del pantano Geko y por el camino buscando la salida me encontré con Johno. Juntos fuimos a la aldea de Shogungekomon y nos quiso esclavizar, pero... Nos conseguimos ir. A partir de ahí estuve vagando con mucha debilidad... Hasta que me recuperé...

Se sentía un poco extraña contando eso, era demasiado simple, no había hecho prácticamente nada, pero ya le pasarían cosas peores y seguro que se arrepentiría. Guilmon parecía no escuchar a nada ni a nadie, seguía comiendo y Alice hacía lo mismo, pero con mucha lentitud, sin dejar de mirar a sus amigos con algo de timidez. Quizá ella no fuera la apropiada, pero estaba pensando muy seriamente en decirles que discutieran ese tema misterioso y que ella se iría sin problema para que lo hablaran, al fin y al cabo, si era urgente, era urgente y cuanto antes, mejor.

-Ahm... Creo que será mejor que hableis de vuestras cosas, si es urgente es mejor que no espere, no hay problema. Mejor aclararlo rápido.

Escuchaba con atención, a su corta historia, me pareció que Alice no tenía muchas aventuras, pude notar que le empezaba a fastidiarle que le protegieran de muchas cosas.

-Bueno, los principios no parecen, tener grandes cosas pero te aseguro, que pronto o más bien mañana. Puedas tener tu gran aventura, llena de emociones-Le anime.

-Cierto, en algún momento, te pasara una gran cosa emocionante-Dijo Agumon, comiendo.

Luego me fije en Johno, mirándolo de reojo, y tome una expresión de seriedad.

-Creo, que solo durada un momento-Dije- Adelante johno, ¿Qué debes decirme?-Le pregunte.

-Lo pensé por días hasta que lo decidí.- le contesté, con un aire misterioso. -He decidido alejarme del equipo.- le conté, dándome cuenta de lo impactante que podría llegar a ser la noticia. -Verás, últimamente me han pasado muchas cosas, buenas y malas, que han hecho darme cuenta de que debo tomar un camino diferente al del Equipo. No los estoy traicionando, pero debo seguir mi propio camino.- Me detuve para tomar aliento. Me sentía muy tenso. Dorumon me acarició con su cabeza para intentar relajarme. -Pero, si me llegases a necesitar, sabes como ubicarme.- le terminé diciendo, haciéndole acordar de los aparatos que los Datamon nos dieron.

La noticia de Johno podía ser muy interesante para Samuel, pero sin embargo, Alice no comprendía nada, desconocía que estaban en un equipo y desconocía todo lo que hacían y la verdad, no quería saberlo, ya que ella sola estaba mucho mejor, estar precisamente con gente era algo que le desagradaba mucho, con una o dos personas estaba bien, pero con lo que se considera un grupo oficial, pues no estaba por la labor. Tras haberse comido varias de las frutas se sintió llena y ya no quiso comer más, por lo que se lo dejó a Guilmon que con gusto se terminó la que ella había empezado y luego, empezó a acariciar a su querido digimon, el cual éste, en respuesta, lamía su rostro y se restregaba con cariño contra su cuerpo. Estaban muy unidos, digamos que Guilmon era la máxima felicidad que había conocido, siempre estando ahí para ayudarla, para sacrificarse por ella, era un gran compañero. Quizá podría intentar dar un comentario o una opinión sobre la conversación, pero no era de su incumbencia, hablar sin saber era algo que perjudicaba a Alice y a todos, se quedaría calladita hasta que Samuel y Johno terminaran de hablar y entonces ya se vería lo que pasaba luego.

Me había quedado sorprendido, sinceramente no me esperaba esa clase de noticia, esperaba algo de rencor acerca lo que paso en la base, pero él no era el único a mí también me había pasado tantas cosas pero debí aceptarlo ¿Quién era yo, para juzgarlo?

-Bueno,admito que tu noticia me haya impactado, pues. Espero que tengas suerte en tu viaje y que encuentres lo que buscas-Le conteste, mordiendo otro pedazo de manzana.

-Cada quien toma su camino, para descubrir su verdadero destino así deben, ser las cosas-Dijo Agumon, comiendo el resto de manzana.

Mire a Alice, estaba muy callada mirándonos, supuse que no tenía ni idea de que estábamos hablado.

Me sentía mal por darle esa noticia, pero ya no había marcha atrás. Tenía que darles motivos de por qué lo hacía. Tenía que hablarle de mi encuentro con Janaan.

-Sam, la razón por la que hago es por seguir a alguien.- le conté con toda sinceridad. -Su nombre es Janaan.- le dije, recordando el aspecto del albino. Luego, decidido le pedí. -Por favor Samuel, pelea conmigo.-

Aquel tema, a ojos ajenos, parecía ir de mal en peor, Samuel pareció tomarse bien eso de que se tuviera que ir o lo que fuera, pero la petición de combate era lo que para Alice no estaba bien ¿Pensaba en matarlo? Si era así, no lo permitiría, por parte de ninguno, ya había visto mucha muerte, aunque tampoco quería ver violencia, pero ella entendía sin problema, que las peleas de digimon eran frecuentes y que eso no era como tal violencia, solo pequeños desafíos, esperaba de todo corazón que Johno no pretendiera matar al digimon de Samuel ni viceversa o entonces... No sabía lo que sería capaz ella de hacer. Alice se levantó del suelo mientras les miraba y se alejó hasta un árbol, donde se apoyó, poniendo un pie en el tronco y otro en el suelo, parte de la espalda y manteniendo los brazos cruzados, mirándoles fijamente. Si la pelea llegaba a un punto peligroso, vería si huir en caso de incendio o intervenir en caso de agonía del otro adversario.

-No me parece bien que peleen... Pero bueno... Adelante, a mi déjenme en paz.

Abrí bien los ojos y aguzando mis oídos, había dicho la misma persona que me tope 2 veces en mis aventuras.

-¿Entonces conociste a, Janaan? Yo también lo conocí 2 veces, una me ayudo a ir al Mundo Digital y en otra es que tuvimos una charla tranquila-Le dije y me lleve otra sorpresa cuando me dijo aquél petición sinceramente, no quería pelear, la verdad no me gusta mucho las peleas porque prefiero aventuras y esas cosas.- Eh… Johno, no sé que respóndete a eso, la verdad yo no quiero pelear con alguien hoy- no digo que tenga miedo ni nada de eso-Añadí rápidamente- Pero sinceramente, no estoy de ánimo para pelear-Conteste sintiéndome algo incomodo.
Solo vinimos aquí para dar un paseo y charlar con Alice pero creo que eso se nos, escapo de las manos. Yo no quiero pelear con Dorumon perdona-Dijo Agumon- Pero no se pongan triste la próxima, si pelearemos.-Animo Agumon.

-Entonces me iré.- le dije tristemente, al ver que rechazó mi petición de combatir conmigo. -Nos veremos en algún otro momento, cuando realmente me neceseciten.- les aclaré, acordándome de que Alice estaba allí, mientras tomaba algunas cosas y me iba. -Ven Dorumon, hay algunas cosas que terminar y el tiempo apremia.-

-Está bien.- me respondió casi sin emoción, luego dirgiendose a Guilmon y a Agumon, les saludó tomando previamente un saludo. -Adiós amigos míos, nos veremos pronto.- Luego me siguió. Sabiendo que tenía que buscar a Janaan en cualquier parte, Dorumon debía digievolucionar. -DORUMON SHINKA... ¡DORUGAMON!.- exclamó evolucionando a Dorugamon. Me monté a su espalda por un costado y nos fuimos, sin mirar atrás.

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OFF: Aquí me salgo

Quedó algo sorprendida de que Samuel rechazara la petición para iniciar un combate, quedándose por dentro bastante complacida, al menos por el hecho de que todo seguiría en tranquilidad, pero que Johno se quisiera ir solo por eso no le parecía bien, ya que estaban los tres, al menos podían pasar un rato juntos, pero ella no sería quien cuestionara las decisiones de Johno, si se quería ir, adelante, era libre, ella tan solo se acercó hasta él para despedirle con un apretón de manos, Guilmon movió sus garras para despedirse de Dorumon y luego, Alice le observó marcharse sobre su Dorumon digievolucionado mientras se sentaba al lado de Samuel. Cuando ya no se vio a Johno por ahí, Alice puso una mano sobre el hombro de Samuel y le sonrió levemente, para que no se sintiera mal por haber rechazado o por haberle hecho marcharse, había evitado una pelea y eso era lo más importante. Dio por hecho que Samuel y Agumon habían terminado de comer, pensando en dar un paseo junto a Samuel, para moverse y no quedarse en el mismo sitio, empezaba a resultar aburrido que eso fuera así. Tras levantarse primero, le tendió una mano a su compañero, mientras Guilmon olfateaba el lugar para buscar un lugar al que dirigirse, de alguna forma tenían que encontrar otro lugar diferente.

-¿Te apetece que demos un paseo? Quién sabe, a lo mejor encontramos algo interesante.

Off Rol:

Me sentía muy desdichado al negarme la propuesta de Johno, realmente quería una batalla conmigo y le negamos veíamos como su rostro estaba esperanzado por tener una pequeña batalla amistosa, pero es que nosotros no quisimos pelear este día tan tranquilo al ver como se iba Johno levante mi mano moviéndolo hacia los lados, mientras que Agumon alzaba los dos brazos moviéndolo en cada brazo en sentido contrario, al termina la manzana, recogí el corazón de la manzana en mi mochila para botarlo en el Mundo humano para no contagiar el ambiente del bosque.

-Tranquilo Samuel, no te sientas mal te aseguro vamos a pelear con Johno en otro momento-Me animo Agumon.

-Me siento culpable-Dije simplemente, luego sentí una mano tocando en mi hombro y mire a Alice a los ojos sugiriendo que dábamos un paseo.

-Si Samuel, un paseo nos relajaría un poco después de esta situación-Dijo Agumon.

Acepte de buena gana y nos levantamos y empezamos a caminar un poco con Alice y Guilmon.

Esperó pacientemente a que Samuel se terminara la manzana y se levantara, aunque no sabía demasiado bien hacia donde iniciar la marcha, le mandó a Guilmon que olfateara el ambiente, si había algo "anormal", es decir, una zona que no fuera bosque, entonces irían hacia allí. Tras un ratito, Guilmon detectó un río, que estaba bastante lejos, pero seguramente ahí podían pescar algo y comer algo que no fuesen frutas, también podían guiarse por el curso del río y encontrar otro lugar, contactar con alguien, había muchas posibilidades. Le señaló a Samuel la dirección a seguir, comenzando a seguir a Guilmon, que sería esta vez, él, el que marcara el paso, el camino hasta el río. Alice prefería olvidar aquel extraño asunto con Johno, era bastante desagradable meditarlo, por el mero hecho de que parecía que solo quería hablar con ellos para pelear, aunque ella desconocía sus verdaderas intenciones, ni la relación de amigos o enemigos que tenían.

-Hmm... Iremos hasta el río... Luego no sé qué podremos hacer. ¿Ideas?

Paseábamos tranquilamente con Alice y Guilmon en el bosque para bajar la tensión y los pensamientos que nos dieron cuando se fue Johno de esa forma, Alice nos sugirió ir al rio para pescar o beber un poco de agua y Agumon y yo asentimos con la cabeza pero a mitad del camino se vio un gigantesco agujero que parecía tener mucha profundidad.

-Wow, mira ¿Qué creen que haya ahí dentro?-Pregunte acercándome poco a poco por el agujero.

-Tal vez un digimon tipo insecto o un Drimogemon que se dedico hacer su, pequeña aventura bajo tierra-Dijo Agumon mirando el agujero.

-¿Tu que crees Alice?-Pregunte mirándola.

Antes de conseguir llegar al río, se toparon con un misterioso agujero, en el que mirando hacia abajo no se podía ver el final. Alice le indicó a Guilmon que lanzara una bola de fuego al interior, para iluminar las paredes y tratar de ver su final, sin embargo, la bola se desvanecía en el "horizonte", significando que el final era mucho más lejano de lo que creían y que además, parecía no tener curvas. Si fuera por ella, saltaría, pero sería algo muy peligroso, podrían golpearse contra algo que no pudieran ver, un simple saliente de roca, por el hecho de que no fuera un túnel perfecto. Se cruzó los brazos y cerró los ojos meditando una posible acción, las ganas de tirarse al agujero podían con ella, seguramente hubiera algo debajo y sino, pues subirían de nuevo, de modo que tendrían que usar cuerdas y un sistema sencillo para no caer y tener problemas.

-Vamos a bajar, pero antes, debemos buscar algo que nos sujete. Yo no llevo cuerdas, así que, buscaremos alguna liana o algo así, aunque no sea una jungla, por aquí tiene que haber algo que nos sirva... Estoy segura de ello.

Tras terminar sus palabras, comenzó a buscar en los árboles, subiéndose encima de uno y desde allí, avanzando con más o menos, algo de soltura, no era experta pero tampoco torpe, el ejercicio era lo suyo así que al cogerle el tranquillo de saltar de árbol en árbol, era mucho más fácil. Algunos árboles estaba cubiertos de moho y helechos, pero hasta ahora, no encontraba ninguna liana, era difícil que hubiera alguna, éstos árboles no estaban en el ambiente necesario para que hubiera, pero, estaban en el Mundo Digital, ahí te podías encontrar las cosas más ilógicas e inverosímiles que existiesen. Incluso a veces se dudaba de su existencia, había digimons que te hacían tener visiones, así que todo era mucho más complicado de lo que parecía a simple vista. Tras un rato de búsqueda, Alice volvió sin nada y algo mosqueada.

-Parece que no podremos bajar...

Mientras que Alice buscaba algo con que sujetar como lianas cosas por el estilo, yo buscaba cosas en mi gran mochila que siempre llevaba conmigo por cosas extremas, pues era hora de buscar que tenia de útil y empezamos a buscar.

-Vamos a ver Agumon, sí que mi mochila parece tener grandes cosas hay que ver, si tiene algo para bajar al agujero-Le conté y abriendo mi mochila empecé a sacar- Una linterna, nada útil… unos pequeños binoculares no, tijeras, brújula, mi diario… Puras cosas nada relacionado con cuerdas-Me desilusione creí que tenía algo útil para estas situaciones y guarde las cosas.

-Creo que no podremos bajar-Dijo Agumon triste cuando Alice llego con las manos vacías.

-Al menos lo intentamos-Me levante y mire hacia adelante- Aun podemos llegar al rio ¿Continuamos?-Le preguntes.

-Yo tengo un sed muy feo, yo digo que si-Dijo Agumon.

-Yo también lo siento, ¿Y tu Alice?-Le pregunte mirándola.

Llegó justo para ver a Samuel guardar algunos objetos que había sacado de su mochila y aunque quisieran, no podían bajar, por lo que asintió ante sus comentarios, aunque ella no tenía ganas de beber, ya lo había hecho del zumo de las frutas que había comido. Empezó a caminar junto a Samuel, Guilmon y Dorumon, dirigiéndose por donde pretendían haber ido en un principio, hacia el río y luego ya verían lo más conveniente, si atravesarlo o seguir su dirección. Unas horas después de andar andar y andar, consiguieron llegar al río, donde además de beber, podrían aprovechar a pescar algo y a descansar con la suave brisa que soplaba cerca de la orilla. Al llegar, Alice se acercó a ver el agua cristalina y Guilmon metió la cola. Al instante en el que lo hizo le dio un gran escalofrío y la sacó, dando a entender que el agua estaba fría. Alice sonrió y le acarició el hocico a su compañero, para luego mirar a Samuel y decirle.

-¿Qué quieres hacer? ¿Quieres comer?

Por su parte, comer algo de pescado estaba bien, aunque ya lo había comido antes, pero las cosas no estaban para pedir cuando se quisieran, esto era el Mundo Digital y no se podía pretender tener cualquier tipo de comida al instante, además ya todos saben que el pescado, la fruta y la verdura son alimentos muy sanos, así que por estar un tiempo comiéndolo, no pasaría nada malo. Para las personas que odiaran el pescado y la verdura, comerlo tan a menudo era complicado, ya que tenían que hacerlo obligatoriamente, pero... Perjudicial no sería para nadie. Guilmon no tardó nada en saltar al agua y pillarse varios peces comiéndoselos al instante crudos, a Alice le daba algo de asco pero en un caso extremo lo haría. Miró los alrededores en caso de que Samuel dijera que quería comer, de ese modo, Alice buscaría algunas ramitas para hacer una hoguera y poder calentar los peces, era algo tan trivial... Pero igual era agradable, como si fuera una acampada.

Cuando habíamos llegamos al rio, ahí ya debíamos a estar preparado para tomar un poco de pescado para luego comerlas tan ricamente como lo sea posible, tenía mucha hambre al igual que Agumon, pues tomando una rama afilada pero ya Guilmon nos adelanto pero solo pescaba lo suyo comiendo pescado crudo.

-Claro que tenemos hambre, pero ahora pescaremos nuestros pescado Guilmon solo casa lo suyo.-Dije.- Vamos Agumon, a pillar pescado.-Y saltamos al rio, el agua estaba fría pero no nos importaba y con la rama mi fije, fijándome en varios peces.

Mientras Agumon le había resultado muy fácil, ya había cazado 3 peces con gran velocidad mientras que yo solo un pez.

-Genial Agumon, ya llevamos 4 peces, uno más y…-Luego vi que Agumon agarro dos más.-Bueno ya no hace falta.-Dije riéndome y saltamos del rio con los pescados para luego esperar a Alice con las ramas.

Se metió en el agua con Guilmon y le pidió que le pescara algo, ya que no quería perder demasiado tiempo y aparte de asco por verle comérselos crudos, le estaba entrando hambre también. Guilmon asintió y mientras pescaba para Alice, se los iba comiendo poco a poco, ésta, al verle, se quedó un poco arruinada. Era consciente de que Guilmon era un poco tonto, pero tampoco se había imaginado que tanto, sin más dejó que hiciera lo que quisiera y fue a buscar ramitas, yesca y rocas para encender un fuego. Al estar en el bosque, aquellos objetos era casi lo predominante, por lo que no tardó mucho en coger lo suficiente para hacer una hoguera y luego, se puso a golpear dos piedras para encender fuego. Entonces Guilmon le lanzó una llama y Alice se tapó la cara, acababa de hacer una estupidez, se había olvidado de que no solo Guilmon tenía poderes de fuego, sino Agumon también, así que era una doble tontería, pero seguramente Samuel no lo había visto, pues estaba muy ocupado pescando. Se sentó frente al fuego con los dos pescados que Guilmon le entregó, el resto se los había comido, pero eso ya daba igual. Puso los dos peces clavados en un palo y lo clavó en el suelo, para que se calentara y se ahumara con la hoguera y esperó a que Samuel viniera también, para darle un palo y que hiciera lo mismo que ella.

-Bueno, esperemos a que estén para comer... Hmm... Espero no coger el anisakis...

Cuando ya terminamos de pescar vimos a Alice ya con la hoguera lista, Agumon y yo nos sentamos tranquilamente utilizando el mismo palo para clavar unos de los pescado que capturamos Agumon y yo pero el palo que ya tenía el pescado se lo di a Agumon. Se alegro y empezó a calentarlo con una bola de fuego y el pescado se quedo muy quemado.

-Creo que es mejor que lo calientes poco a poco en la hoguera y no driectamente con un Flama Bebe.-Le recomendé a Agumon y el triste asintió y cogió otro pescado y lo calentó en la hoguera al igual que hice yo.- Entonces Alice ¿Qué planeas hacer? Me refiero hacer otra aventura cuando ya nos separemos.-Le pregunte amablemente a Alice mientras que Agumon ya se comía su pescado luego nos levantamos.- Fue un placer conocerte, adios.-Me despedi y Agumon levanto la pata despidiendose y nos fuimos.

OFF: Aqui terminamos el tema ok :/ ya me aburri (Sin ofendeR)