Volviendo a los Comienzos

Aquel lugar, era donde todo había comenzado para nosotros, donde conocí a Dorumon. Recordaba la gran confusión del momento, la batalla que se había desatado. Era como si pudiera ver toda la escena, todo lo que ahí había ocurrido. Podía vernos a Dorimon y a mi, luego la llegada de Vice. En aquellos momentos eramos muy débiles los dos y no entendía nada del asunto sin embargo las cosas parecían mas sencillas que ahora, tal vez se debía a todo lo que ignorábamos en aquellos tiempos. A medida que se pasaba el tiempo en el digimundo las cosas eran mas complejas, había muertes, seres inocentes lastimados por otro lado el vinculo que había llegado a tener con Dorumon hizo valer la pena todo aquello.

Después de unos segundos volví a la realidad, Dorumon yacía dormido abajo del árbol mas cercano a la laguna. Dirigí los dos orbes verdes hacia el solo para asegurarme de su posición a continuación seguí recorriendo el lugar con suma admiración. Aquel lugar paradisíaco era perfecto, el cielo era celeste fuerte decorado con unas tres o cuatro nubes, un sol amarillo perfecto que no agobiaba, el clima también era perfecto, la sensación térmica debía ser de unos veinticuatro grados. La vegetación del lugar era abundante, plantas y arboles crecían muy próximos al lago. El silencio era completo solo interrumpido por suaves brisas que acariciaban el cuerpo de cada ser que se encontrara allí.

Lentamente me senté en aquel lugar, una mochila de color verde mate estaba tirada en el suelo, se encontraba un poco sucia y maltratada. De ella sustraje un sándwich en un envoltorio de papel. Pasamos tanto tiempo en el Digimundo que sabíamos como abastecernos bien, actualmente teníamos tres botellas de agua, dos latas de refresco, unos veinte digichampiñones, este sándwich y otro mas. Sabia que Dorumon al sentir el olor del emparedado se levantaría a comer así que tranquilamente saque el otro. Para mi sorpresa Dorumon ya se encontraba a mi lado. -Ojala fueras así de rápido para cuando hay que cocinar!- El digimon tan solo me devolvió una sonrisa y comenzó a comer su sándwich correspondiente y terminandolo en un par de segundos. Mire tranquilamente al cielo una vez mas y llene mis pulmones con aquel aire tan puro acto seguido di un mordisco a mi sándwich.