Nubes grises sobre la luz de la luna

El sol comanzaba a ocultarse, llenando el lugar de una calida luz naranja, la que se puede ver entre los árboles y por los pocos agujeros entre las nubes que cubren el cielo, nubes grises preparandose para una tormenta esta noche. El Pueblo de los Juguetes es el sitio donde van a parar los juguetes abandonados, es un sitio construido en medio de un bosque nebuloso y que esta hecho con legos en su gran mayoria. Sus habitantes en su gran mayoria son ToyAgumon los que también estan hechos de lego, el resto son Digimon comunes y corrientes que vienen de paso y osos de peluche gigente como Monzaemon y Pandamon.
El pueblo simpre esta lleno de música, juegos, dulces y demas, básicamente nunca se esta aburrido en este sitio. Todos en el pueblo se han reunido esta tarde para observar un espectáculo de marionetas de Monzaemon, pero no es un simple espectáculo, estas marionetas son enormes y unas incluso lanzan fuego, los efectos especiales son a otro nivel.
Pero hay un grupo de Gazimon que aprobechan que todos estan distraidos para robar unos juguetes y ademas hacer unos graffitis en los edificios.
 

Por mi parte, yo estaba transformado en mi forma armor, KnightWyvernmon. Estaba corriendo por el bosque, disfrutando de la fuerza que obtenia al estar transformado en ese Digimon algo que disfruto bastante por que es el único que no intenta controlarme todo el tiempo y si lo hace no tengo nada de que preocuparme por que el es extremadamente bueno. Ya después de correro por un tiempo, llego a una zona donde el bosque termina y me encuentro con una ciudad hecha de legos, sin dudarlo y al ver que esta anocheciendo, comienzo a caminar tranquilamente hacia el pueblo para ver si puedo dormir esta noche en alguna posada u hotel o no se.

Llevaba un dia aburrido. No habia luchado contra nadie. No habia pasado nada. Eso era bueno, pero aburria. Avance por la ciudad de los juguetes esperando poder entretenerme con algo. Finalmente al ver que los digimons empezaban a prepararse un lugar donde dormir me quede sentada en una pieza alta de lego. Mirando el cielo y pensando cuando volveria a ver a mi hermana, a Karasu...a mis viejos amigos. Aveces deseaba volver a casa, pero no podia hacerlo. No sabia como y habia dias que el silencio y la soledad me jugaban malas pasadas. Asi que me tumbe y cerre los ojos dispuestaa dormirme.

Ya llevaba un par de días de haber llegado al pueblo delos juguetes, estaba muy cansado, había pasado largas batallas y largos días de caminar sin comer o beber algo. Como siempre, Monzaemon al ver mi regreso me preparo diferentes delicias, tartas, helados, bizcochos, café... diferentes clases de postres que mi paladar agradaban. Luego de haberme llenado de estas diferentes delicias, decidí salir de la mansión e ir a recorrer el pueblo.

El paisaje que se veía era, el sol ocultándose, algunos Toyagumon marchando hacia sus casas luego de un duro día de trabajo. Ya la noche empezaba a llegar, aproveche esta ocasión para sentarme en una piedra lego que sobresalía en la entrada al pueblo y empezar a tocar mi Ocarina, la canción que me tocaba el ermitaño con esta, la dulce melodía que me traía recuerdos.

Agumon y yo estábamos en busca de comida, nuestro dinero del torneo ya se acababa, lo habíamos gastado todo innecesariamente pero ya no era momento para quejarse. Jefesito, tengo mucha hambre. Ahora no puedo hacer nada Agumon, estamos en medio de la nada y ademas de eso nos queda poco dinero y todo por culpa tuya. El lugar en el cual nos encontrábamos era un gran bosque, no se veía que hubiera un pueblo cerca, solo veíamos arboles y más arboles por todo el lugar.

Pero jefe, fuiste tu el que se comió todos esos huevos y todos esos platos de arroz de aquel pueblo y por eso se agoto el dinero.

Cállate, recuerda que tu también ayudaste. Fue entonces cuando a lo lejos se empezaba a ver una construcción, era muy rara, esta no era a ladrillos ni nada que se le pareciera, era... ¿Piezas de Lego?, ¿que harían unas piezas de lego en la mitad de la nada?...

No lo se, tal vez halla un gran digimon jugando con ellas.

¡Vamos a ver! Agumon y yo corrimos hacia el lugar donde se elevaban las construcciones.

Entro al pueblo, es interesante ver la forma en que esta contruida, sobre todo los materiales que se usaron, una brutal cantidad de legos espero que sea un material resistente en donde vivir. Ademas de los legos, la ciudad estaba repleta de juguetes, todo esta hecho de juguetes o gira en torno a los juguetes, no se si estar feliz o si estar asustado, yo no traeria niños a este sitio, se ve sospechosamente raro. Dejando de lado mis pensamientos, me adentro mas y mas al pueblo, descubriendo que incluso hay Digimon hechos de lego y otros que son “normales” si es que se puede llamar normal a un Digimon. Pero algo que capta mi atención es un grupo de bestias digitales, similates a hombres gato grises que estan metiendo juguetes dentro de sacos y haciendo graffitis en las paredes de lego de las edificaciones. Me acerco al grupo de Digimon para detenerlos, mas que nada para que dejen de rayar las paredes ya que no se ciertamente si esos juguetes son realmente de ellos o no, seguramente no. Apendad los Digimon ven que me acerco, ellos salen corriendo espavoridos mientras me lanzan juguetes en un intento de dañarme para que no les persiga, pero algo asi no me detendra mientras soy KnightWyvernmon con quien persigo a los bandalos.

Estaba tranquilamente tumbada cuando un digimon desconocido me toco la boca y estiro de los mofletes viendo que tenia un sueño pesado. Seguramente me habria gritado, tocado, hasta ver que solo tirandome de los mofletes lograria algo.Asi que desperte mirandole con cara de asesina.
-¿que haceS? ¿que pasa?
El digimon me miro y sonrio.
-Estan pintando la ciudad y malcriando a los bebes. tu eres un niño elegido, ayuda a pararles los pies. Los bebes no deben a prender a ser malos.
Me resulto curiosa la respuesta pero asenti. Me dirigi hacia donde estaban esos digimons y les vi huyendo de algo. Me coloque delante y sonrei.
-Vais a limpiar eso u os castigare muy seriamente.
Dije decidida viendo un digimon totalmente desconocido tras ellos.

Luego de terminar de tocar la ocarina me dirigí de nuevo al centro del pueblo. Al llegar a este me doy cuenta que unos digimon corrían por el lugar, pensé que debían estar jugando pero luego fue que vi a un digimon más grande pero desconocido y a una chica, la cual me parecía conocida pero no pude recordar muy bien de donde. Corrí entre callejones y me pose frente a los digimon impidiéndoles el paso, ¿Que pasa aquí?.

Al llegar al lugar nos dimos cuenta de que en realidad era un pueblo, un pueblo hecho a base de legos...

Esto en realidad era un pueblo Agumon, eso significa que... ¡Hay comida!. Salí corriendo por el pueblo con alegría.

Ayy, espérame jefesito.

Nuestros gritos de alegría hubieran sido escuchados por todo el lugar pero fueron apagados por unos Gizamon que corrían por el lugar despavoridos seguidos por un digimon el cual nunca había visto, una chica rubia y un chico moreno.

Mmm, ¿quienes son ellos y porque persiguen a esos digimon?. Dije a Agumon.

No tengo idea, deben estar causando estragos aquí o algo parecido. Me quede viendo la escena sin hacer nada.

-¡Detenganse bandidos!- Grito a los Digimon grises al mismo tiempo que envuelvo mis brazos en llamas para luego lanzar bolas de fuego hacia las bestias digitales que persigo como una advertencia, esta acción hace que los Digimon frenen de golpe. Yo también me detengo y agarro a los Digimon por las orejas -Limpien lo que ensuciaron- Les digo con un tono de voz frio.

Mientras tanto, Monzaemon, el encargado de todo el pueblo, se entera de todo el problema que se armo y acude a ver lo que pasa, pero en el camino se topa con el triste Naois, el oso gigante le mira por unos instantes y le unos dulces antes de continuar con su camino.

Me quedo delante de los digimons viendo como el digimon les amenaza para que limpien lo que ensuciaron. Les miro y luego miro al digimon desconocido con aire heroico.
-No creo que sea bueno que les ataques con fuego...cimplemente con un capon les valdria.
Dje intentando que no salieran muy heridos. En poco tiempo un chico conocido de pelo negro se puso delante de los digimons.
-Eyy, hola.

se fue mucha gente (chihiro se va de viaje por un tiempo largo) asi que mejor se cierra este tema