Su novia es un zombi (Salem) [Evento de Halloween]

Normas :

Norn envía un mensaje a todos los tamer para advertirles de que unos de los pilares del destino está siendo atacado, lamentablemente el mensaje llega tarde y el pilar es destruido. Las terminales de batalla se activan de golpe y encierran a sus portadores en una esfera de luz y los deja inconsciente mientras su alrededor es tragado por la oscuridad.

Al despertar cada uno se encontraba en una habitación diferente de una vieja casa de estilo victoriana aunque reformada a nueva por dentro. Las habitaciones tenían todas, camas dobles, un guardarropa y TV plasma.

La casa contaba con dos plantas, en la planta alta había 6 habitaciones, las cuales estaban unas enfrentadas a las otras, en el centro un largo pasillo que llevaba por una lado a un amplio baño lujoso y al otro lado del pasillo había una escalera que llevaba a la parte baja de la casa, la parte baja constaba de un recibidor que era donde estaba las escaleras, un comedor, una cocina y una alacena, la casa tenía un decorado antiguo pero con toques modernos, varios muebles y adornos de cerámica se podían encontrar por la casa al igual de fotos de una pareja feliz. Las puertas y las ventanas del piso de abajo estaban tapiadas y bloqueadas con grandes maderas que impedían que nadie entrara…. ¿o saliera?.

Las ventanas de las habitaciones en la planta alta no tenían nada que las tapara, pero aun así no era posible ver nada debido a la oscuridad de la noche, lo único que se distinguía eran unos árboles no muy lejos de la casa, y a pesar de que la casa tenia luz eléctrica las luces del exterior estaban apagadas.
A lo lejos se podía escuchar unos alaridos y unos gruñidos aterradores que provenían de lo más profundo de la oscuridad.

Nos encontrábamos en la terminal Versandi buscando al desgraciado de Dasher cuando una luz nos cegó completamente. Esa luz nos afectó hasta tal punto, que pensé que se trataba de algo más que una simple esfera luminosa, puesto que después de eso, quedamos inconcientes y sin otro recuerdo posterior. Hasta que desperté.

Me levanté algo somnoliento y reticente a levantarme de aquella "lujosa" cama, la cual parecía ser de un Motel de mala muerte. No entendía bien que pasaba, así que a almohadonazos levanté a mis camaradas que se encontraban durmiendo del lado derecho de la cama -¡Ehhh manga de dormilones! ¡¡¡DESPIERTEN!!!- les empecé a dar más fuerte hasta que despertaron. Ysera se despertó perezosamente bostezando, miró a todos lados y recién se alarma al ver que no era un lugar que conociéramos. Caso inverso fue Fistus, que se levantó sobresaltado, pero se calmó al ver que no había peligro inmediato. Busqué mis objetos, sin hallar nada más que mi mochila casi vacía, salvo por la terminal D. Ni rastro de la Nanotool, ni la terminal de batalla, ni el Emblema ni el Digivice.

-Exploremos con cuidado.- les indiqué mientras nos dedicábamos a revisar en detalle toda la habitación, tratando de encontrar una explicación para el hecho de haber despertado en este curioso lugar.

Escucho el sonido de mi terminal avisándome de que le ha llegado un mensaje nuevo. Un escalofrío recorre mi piel ¿A estas horas? La ultima vez que llegó un mensaje a mi terminal sin ser esperado...cuando lo fui a ver me transportó a Internet y me inmiscuyó en una guerra demasiado particular. Suspiro a la par que me doy unos toquecitos en la frente ¿que probabilidad hay de que vuelva a suceder algo así? Alzo las cejas con expresión escéptica y tomo mi terminal.

" bip-bip.Uno de los pilares ha sido atacado, bip-bip"

Abro los ojos y entre abro la boca sin poder evitarlo en dirección hacia mi digimon. Esto solo quiere decir... ya es demasiado tarde. Todo es negro.

"Glop, glop"

Escucho el sonido de las gotas de agua cayendo sobre una cañería vieja, es ese silencio sepulcral que gobierna cuando todo está en relativa calma, y muy lentamente abro los ojos. Me llevo una mano a la cabeza, mirando a mi alrededor tratando de ver algo o alguien que me resulte familiar. Negativo. Suspiro, ¿donde diablos habré ido a parar esta vez? Estoy en el suelo, sentada, en lo que parece una habitación bastante bien acomodada. Me levanto y veo que Gabumon esta tendido en la cama, aparentemente dormido. Me cruzo de brazos, no lo diré, no pienso hacerlo: él en la cama, yo en el suelo¿En serio?. Pensemos en otra cosa. Ruedo los ojos con exasperación mientras miro con mas detenimiento la habitación. Desde la ventana no se aprecia el exterior, pero los contrastes de luz invitan a pensar que sea de noche.  Ya es un dato. Gabumon finalmente despierta, su cara lo dice todo.

¿Qué ha pasado? -me pregunta como si yo tuviese alguna respuesta.Me encojo de hombros mientras llevo mi dedo índice hacia el labio inferior con actitud pensativa. El estilo de construcción de la casa me invita a creer que no ha sido construida hace poco, en cambio cuenta con todo tipo de modernidades. La tv de plasma ha cubierto toda mi atención. -Genial, ha vuelto a pasar ¿verdad? ¿Nos hemos convertido en  justicieros oscuros como "Batman" o algo así? ¿Nadie más a quien pedir ayuda?

Le hago una señal para que calle y deje de protestar, esta cortando mi hilo de pensamientos.  Aunque reconozco que ha sido ingeniosa la comparación, mi gran lado oscuro, la bip-señal...-Sí Gabumon, los Cazafantasmas estaban ocupados en otro barrio. En fin, no creo que se trate de eso. Este lugar parece estar bien provisto de comodidades.-Me dirijo hacia el armario para ver su interior, igualmente registro la mesita de luz. Enciendo la tv para tenerla de fondo mientras miro por la habitación cuidadosamente, siempre con los guantes puestos. Nunca me ha gustado eso de llenarlo todo de huellas y más desde que una vez me arrestaron por vandalismo. Papa no se lo tomó demasiado bien. En cuanto la tv se enciende bajo el volumen lo mínimo de tal forma que solo en un silencio absoluto sea escuchada.

Como sea. ¿Lo tienes todo?-contesta impasible. Me cacheo comprobando que tengo conmigo tanto mi bastón espada, como mi pistola y asiento. Salir de casa desequipado, hoy en día es una temeridad.

Busco algún dato que pueda darme alguna pista sobre a quien pertenece esta habitación. Igualmente me gusta mirar debajo de las camas ajenas...normalmente hay mugre pero a quien prefiere guardar sus secretos ahí.

- Nhhnng....

La habitación, como ya se ha visto, no está en silencio... Para empezar, se puede escuchar el aleteo de algo, como de unas aspas de un mini helicóptero; después unos poderosos ronquidos, dignos de un oso, y finalmente un leve gimoteo... Cada sonido, perteneciente a uno de los seres que se encontraban en la habitación.

Empiezo a moverme con pereza, sobre una cómoda base, mientras mi mente comienza a despertar. Sin ser muy consciente de mi ubicación, remoloneo en donde quiera que esté... Una cama, al parecer, pero muy, muy cómoda... Tal era el confort, que me daba pereza incluso abrir los ojos. El lado oculto y frío de la almohada se siente muy bien contra la piel de mis brazos, y las sábanas, parecen un manto de ligera seda sobre mi cuerpo... Un contacto muy cercano... demasiado...

- ¿Meeh...?-me estiro un poco, de brazos y de piernas, y finalmente, poco a poco, abro los ojos verdes... La habitación está a oscuras, pero puedo ver algo, y como había supuesto, me encuentro sobre una mullida cama... Completamente desnuda-. ¿Qu...? Munyaa...

Dejo escapar un amplio bostezo, y me incorporo un poco, notando en ese intstante, que estoy sosteniendo algo en la mano derecha, lo cual identifico, con una mirada adormilada, como una botella de ron, casi vacía.

- Hmm...-la observo, suspicaz, la agito, y al posar la otra mano en las sábanas, noto que parte del licor que resta de la botella está esparcido por la tela-. Where the hell I am...?

Como si de una respuesta a mi pregunta se tratara, un movimiento a mi derecha hace que gire el rostro... Allí encuentro, revoloteando en el aire, a un ser vegetal, con una especie de molinillo en la cúspide de su cabeza... La identifico como Coral, ella me mira fijamente, con su expresión indiferente dotada únnicamente de tres puntitos negros para los ojos y la boquita.

- Coral...-murmuro, y es entonces cuando el último sonido hace que descubra a Fenrir, durmiendo como un perrillo a los pies de la cama. Con cierto gesto de fastidio, gateo hasta él, y lo empujo suavemente para despertarlo-. Soldado, despierta.

Finalmente, el Gabumon hace un par de aspavientos antes de levantar la cabeza, relamerse varias veces y volver a la realidad. Bosteza, dejando escapar un característico sonido canino, y se estira. Espero a que se reponga, para preguntarle por nuestra ubicación, ya que sé de antemano que Coral no va a responder a niguna de mis preguntas. Ella siempre está en silencio.

- No lo sé, mi señora-dice Fenrir, dando un vistazo a la estancia, y olfateando-. No tengo registros de ningún olor así, ni de ningún lugar como este...

Suspiro, resignada por las malas noticias, y bajo de la cama, todavía sin vestir... Las ventanas están con las cortinas echadas, las cuales aparto un poco para mirar al exterior, pero por más que intento vislumbrar algo del exterior, no consigo ver nada que me pueda dar una ubicación exacta. Chasqueo la lengua y busco con la mirada algo de ropa; no me molesta estar en bolas delante de mis digimons, pero fuera de la cama hace frío. Por fortuna, encuentro, unas cuantas piezas de tela, algunas esparcida por el suelo, y otras en lo alto de un armario... ¿Qué cojones hice anoche?

Pasan los minutos, y después de comprobar que la ropa me viene como un guante, me observo un poco a mí misma. Bácicamente, todo lo que llevo es de cuero, como habitualmente, pero en esta ocasión, visto diferente. Botas altas, pantalones, cinturón y unas fundas con sus respectivas pistolas, una especie de corsé, una gabardina, y unos guantes largos.. Todo negro y rojo, perfecto, los colores que más me gustan.

- Better...-parpadeo repetidamente, percatándome de algo-. Wait... Where is my digivice?

- Aquí-Coral se acerca volando hasta mí, y me lo tiende con sus manitas. Tomo el dispositivo, aliviada, pero la alegría me dura poco tiempo... El dispositivo no da señales de funcionar.

- Shit... It doesn't work... Why?-dejo escapar un sonido de indignación y me lo quedo mirando unos momentos, antes de chasquear la lengua y mirar a mis dos compañeros... A todo esto, ¿dónde estarían los demás?-. Los dos, conmigo... No sé qué sitio es este, pero no pienso dejar que me sorprendan... Pero revisemos la habitación antes de salir... Puede que encontremos algo.

Dicho lo cual, los tres nos ponemos manos a la obra, rebuscando por todos los rincones. Armarios, cajones, mesillas, por encima y por debajo de la cama... No dejando un solo lugar sin investigar. Pasado un tiempo, habiendo o no encontrado algo, suspiro, y definitivamente, poso una mano sobre el picaporte de la puerta, y con la otra me armo con una de las pistolas, con la negra... Después salgo, compañada de Fenrir y de Coral.

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apariencia:

inventario:

digimons:

Tininini...Tininini...

.-Que sucede...Don...Donde estoy.....Mis palabras eran débiles y cansadas,en una oscura noche un sonido conocido me logra despertar...No lograba ver nada al parecer era de noche, que es este extraño dolor de cabeza, parecía ser una resaca pero, yo no tengo vicios, no tomo licor ni me Drogo, pero a pesar de el extraño dolor me sentía de alguna manera complacido, nunca había estado acostado en una cama tan cómodo como lo era esta, luego recuerdo que un sonido me despertó si no me equivoco era el D-Terminal, Lo Tome y al parecer me había llegado un mensaje "Uno de los pilares del destino esta siendo atacado"
.-Rayos....en ese momento se me viene a la mente donde se encuentra Dracomon, así que me baje de la cama y dando toques con la mano comencé a buscar el interruptor de la luz,una vez que la logro encontrar y lo presiono logro ver y la habitación parecía muy moderna,me lo esperaba ya que la cama era muy cómoda.
Como Esperarse Dracomon se encontraba Durmiendo una esquina con almohadas al rededor,me acerco y le comienzo a hacer cosquillas en sus patas para que este despertara, luego de unos movimientos este despierta.
.-Pero que...que haces Hiro...Donde estamos?.-.Me dice luego de despertarse y comienza a rascarse la cabeza.
.-No lose, pero al parecer es un Hotel, ya que tiene muchas cosas de lujo,y si te preguntas de como llegamos a este lugar, no tengo idea,pero sera mejor que salgamos de aquí.-.Comienzo a buscar mi Digivice por la habitación, una vez que lo encuentro lo reviso y este no respondía,botón que apretaba este igual no reaccionaba, sea lo que sea en algún momento reaccionara..-Estas Listo Dracomon?,Salgamos de aquí.-.
.-Si Hiro.-.Contestaba con un Bostezo,Mientras yo Me acercaba a la Puerta y daba vuelta a la perilla para poder abrirla.

La habitación era una habitación común y corriente, sin nada que saltara a la vista o resaltara, los cajones y el armario estaban completamente vacíos.





La habitación estaba cuidadosa mente limpia y todos los cajones y armarios estaban vacíos, como si nadie ocupara esa habitación o no lo hubiera hecho en mucho tiempo.
En la TV se podían ver imágenes de un noticiero de personas atacándose unas a otras y estampidas de personas que iban hacia otras que parecían correr asustados, algunas de las personas que corrían en manada reñían hedías sangrantes o amputaciones, pero corrían como si no les afectara. Un anuncio aparecía en la parte de abajo mientras las imágenes seguían pasando. “El virus Z.A.Y.Y.N es imparable” enunciaba el cartel.
La voz de una periodista la cual sonaba con algo de miedo iba comentando las imágenes mientras pasaban. “El virus llamado Z.A.Y.Y.N por sus siglas sigue expandiéndose y causando el terror, el proceso de reanimación de cadáveres parece volverse cada vez más brusco e inestable, los expertos aconsejan no salir de sus casa y disparar a la cabeza si se topan con alguno de estas criaturas. Las grandes ciudades son peligrosas, y se aconseja escapar al campo, seguiremos trasmitiendo desde la base de las fuerzas armadas en el monte rushmore vía satélite en cuanto tengamos nuevos datos.” El mensaje y las imágenes parecen repetirse como en un bucle que parece no tener fin.
Bajo la cama se puede apreciar una cabeza de una niña de larga melena negra como la noche la cual cubre parte de su rostro el cual era blanco como el papel y estaba cubierto de sangre al igual que su cabello, y para hacerlo aún más espeluznante la cabeza no tenía ojos y en su lugar tenía dos grandes huecos negros, pero algo en su mirada o no mirada parecían estar viendo fijamente a Ada a los ojos, la cabeza hace una mueca y luego pronuncia una sola palabra en una especie de llamado desesperado. -Mama-





Las habitaciones de ambos estaban exactamente igual de limpias y sin nada que las otras dos. 
Al abrir las puertas de sus habitaciones se topan con que alguien estaba haciendo exactamente lo mismo en la habitación de enfrente, y desde que llegan a ese lugar encuentran a alguien más, y se encuentran frente a frente.

Spoiler:

Me decepcioné al no poder encontrar nada en la habitación que me resulte de interés, puesto que tanto el  armario como los demás cajones estaban vacíos, así que me senté en la cama un momento a observar la situación y pensar en un plan a realizar. No podía imaginarme la razón por la cual habíamos llegado acá, aunque algo me dice que no fue casualidad nuestra llegada. No sabía que había pasado con nuestros objetos ni por qué solo había quedadp, No conocíamos el lugar. No tenía armas para defenderme, sin tener que contar con mis camaradas claro está. De pronto se me ocurrió.

-Ya sé, le sacaré las patas a la cama Ysera, así que ayúdame con ello. Mientras tanto, Fistus vigila que nadie o nada venga a molestarnos.- les ordené a ambos camaradas, mientras me levantaba, acomodaba el resto de los muebles, junto con la ayuda de ambos, y la trataba de dar vuelta para empezar con el desarme del mueble. Empezamos a intentar sacar la pata que se encontraba en la parte posterior a la derecha, para ello Ysera sacó su Dino Tooth para poder lograrlo. Mientras, Fistus espiaba con cuidado por la puerta arrimada, dejando un poco de espacio para poder ver, qué es lo que ocurría afuera.

DINO TOOTH:

Una vez que abrí la puerta me encuentro de frente con una bella mujer,sensual de cabello rojo como el carmesí y de una vestimenta muy llamativa,sin embargo eso no fue lo que mas me llamo la atención si no que esta poseyera un Digimon,no solo uno si no que eran dos, de pronto en las habitaciones que se encontraban mas a lo lejos también abren sus puertas y salen dos chicos mas, Dracomon aun se encontraba dentro de la habitación y me advierte que cerca de ese lugar lograba oler a mas Digimons cerca,me acerco a la Chica que estaba al frente mio y la saludo estirándole la mano.
.-Hola...-,No sabia si decirle mi Nombre o no,pero si le pregunte por su Digimon.
.-Pude Darme Cuenta de que Tienes compañeros Digimon, no es así?.-.Aunque podía hablar Fluido las armas que poseía aquella chica me asustaban un poco.

En un movimiento rápido e instintivo desenfundo mi pistola y aprovecho para disparar a la niña con ambos brazos sujetando el arma, para repartir el impacto del retroceso, que tengo justo enfrente de mí. No es nada personal preciosa, pero en el sur tenemos un dicho "Dont mess with Texas". En mi casa todos los fenenomenos paranormales terminan de la misma forma. Por eso es tan difícil saber si hemos sido visitados por aliens alguna vez. Los rancheros primero disparan y luego intentan tasar la pieza.

Me incorporo con celeridad, no quiero saber si esa cosa podría ser capaz de reponerse de algo como un calibre del 0.45. ¿Pero que diablos le ha pasado al mundo mientras dormía? ¿Este es el fin y me entero así? Miro de soslayo a Gabumon por unos segundos como si tratase de leer su pensamiento en una situación como esta mientras ambos corremos hacia la puerta y éste aprovecha para prender la habitacion con Petit Fire. Como sea,tenemos que asegurarnos de que esa cosa no vuelva a ponerse en pie.Si estuviésemos en el sur esto no se habría ido de las manos. Si esas cosas estan amenazando el pais... Ya habriamos sacado nuestros buggies e iniciado el rodeo. Cierro la puerta con rapidez y el corazón desbocado.

Miro con precaución el pasillo, tenemos que salir de aquí algo me dice que no sera la primera que este escondida en el lugar menos pensado. Veo unas figuras cercanas a mí ¿mas de ellos? ¿mas de nosotros? Un rostro se me hace conocido, el otro no. Me acerco con celeridad hacia ella a pesar de que la tv ha informado que...Tiene que explicarme muchas cosas. Y cuanto antes mejor.


Off: Dont mess with Texas. "No desentones con Texas"

Antes de salir, puedo escuchar unos sonidos procedentes de la ventana. Siento como un escalofrío recorre mi espalda, pero no me detengo a averiguar qué es aquello que hay allí afuera. Con decisión, salgo de la habitación para encontrarme en un pasillo, con cuatro puertas en paralelo dos a dos, y otra en perpendicular a mi izquierda. Me topo con de frente con un muchacho de cabellos rojizos, acompañado de lo que venía siendo un Dracomon. Ese chico me detecta, y con los ojos entornados preparo la pistola por si tiengo que hacer uso de ella. Sin embargo, el muchacho me tiende una mano, de manera amistosa... Evidentemente, no confío en él, después de haber aparecido en una habitación desconocida en mitad de la noche, y con unos extraños sonidos procedentes del exterior...

BOOM. De repente un disparo, ruidos violentos y pisadas precipitadas. Mis sentidos se agudizan, miro con un brillo salvaje en los ojos en la dirección de ese estrepitoso disparo, notando que, segundos después, una figura sale de la habitación contigua... Con una leve y genuina sonrisa, observo a mi aprendiz.

- Booya...-mis ojos siguen la figura perfilada por la ropa ajustada-. Querida, ¿qué has...?-de repente un olor a quemado llega a mis fosas nasales. Por el calor y la luz que había salido de la habitación de Ada antes de ser cerrada, juraría que no están simplemente quemando malvaviscos en su interior-. What the...-un nuevo gruñido, más audible, se cuela por la ventana de mi habitación. Miro a mi espalda, chasqueo la lengua y encajo mi pistola con el seguro puesto entre mi cinturón y mi pantalón, por la parte delantera. Seguidamente, agarro al muchacho pelirrojo por la muñeca, de forma férrea, y lo arrastro hasta el interior de la habitación, para seguidamente abrir la ventana-. Escúchame atentamente, tenemos que salir de aquí. La casa está hecha de madera y no querrás que nos quememos dentro, ¿verdad? Bien... Siento tener que hacerlo así, pero es para salvar la vida.

De un par de pasos, me coloco a su espalda, y con una patada en su trasero, lo empujo contra la ventana, para tirarlo al exterior... Es eso, o chamuscarnos como insectos en aquel infierno; esperaba que no le doliera mucho. Seguidamente, y sin perder un solo segundo, tomo a Ada de un brazo y regreso junto a la ventana.

- Los besos, abrazos y saludos para más tarde, mi polilla-sin avisarla, paso un brazo por su espalda, la aferro fuerte y la levanto, pegándola a mí todo lo posible-. ¡Coral, lleva a Fenrir!-ordeno. Cuando veo al lobo abrazar a la plantita digital y siendo suspendido en el aire por ella, me asomo a la ventana y me posiciono en la repisa de fuera, después, me dejo caer hasta el suelo de manera grácil, al tiempo que Coral y Fenrir llegan a mi lado.

Vale. Ya estamos en el exterior de la casa, pero el ambiente no es mucho mas alentador. Gracias a mi vision, consigo ver algo espeluznante, seres de aspecto asqueroso, cubiertos de sangre, algunos amputados, otros sin media cara, y unos cuantos simplemente en un estado de descomposición bastante avanzado. Mis ojos se agrandan de la impresión, pero no lo pienso. Hago lo que tengo ue hacer. Ayudo a levantarse al muchacho pelirrojo del suelo y...

Al levantar la cama para poder sacarle las patas tapas la ventana, las patas parecen sólidas y rígidas al igual que el resto de la cama por lo que requirió de mucha fuerza poder ponerla de costado. Las patas eran tan grandes que parecían garrotes medievales.
Mientras cortan las patas se escucha un fuerte disparo que provenía del otro lado de la puerta. Y a los pocos segundos se puede oler y ver como un espeso humo comienza a entrar en la habitación. Por la puerta.



Un espeso humo comienza a salir de debajo de la puerta del cuarto en el cual se encontraba Ada, y al poco tiempo el fuego se expande como si tuviera vida propia y consumiera todo a su paso, el fuego se expande tan rápido que en cuestión de segundos en los cuartos aldeanos al de Ada estaban en llamas, y el fuego se expande a la escalera impidiendo que se pueda bajar por ellas.
Zayyn al tener la fuerza de un byo arrastra fácilmente a Hiroto hasta su ventana y lo lanza para sacarlo de la casa, pero el humano al ser empujado cae de mala manera y se rompe la pierna y el brazo izquierda. Su digimon intenta evitar que lo empujen pero los digimon de Zayyn se lo impiden.
Una vez que Zayyn, Ada y los digimon de ambas junto con el digimon de Hirato salen de la casa por la ventana pueden ver a una manada de Zombis que se acercan.
Gritos se escuchan en el primer piso, gritos de un hombre y una mujer que intentan romper los bloqueos de una ventana para poder salir de la casa antes de que esta se queme por completo. El fuego del segundo piso ilumina la zona permitiéndoles ver donde se encontraban pero a la vez atrae a todos los zombis del lugar. Resulta que estaban en el peor lugar posible, vean en la dirección a la que vieran solo se veían tumbas y más tumbas, estaban en un cementerio el cual tenía un tamaño de varios kilómetros, los muertos de la ciudad habían regresado a la vida, y lo que era peor, los muertos de años también comenzaban a volver, no solo muertos recientes, sino que seres momificados y completamente negros salen de la manda de zombis que se acerca y comienzan a correr como demoños a la velocidad de un corredor de maratón profesional buscando carne fresca.

Los zombis se comienzan a acercar de todas partes rodeando por completo la casa y el único lugar de escondite que hay cerca, en pocos minutos las manadas más lejanas se unirían a las que se acercan impidiendo cualquier escape posible.

Al caer el golpe me Rompe la pierna Izquierda y el Brazo Izquierda,a pesar de ser un gran dolor era algo que podía aguantar ya que era Futbolista y estas cosas me pasaban a menudo,Trate de acomodar mela un poco, pero el brazo era un caso perdido, el dolor era insoportable por lo cual me hice un torniquete en ambas extremidades con una parte de la Polera que tenia puesta,Cuando veo a lo lejos como personas sangrando y de falta de extremidades con una apariencia horrible caminaban hacia nosotros..-Que Rayos son esas cosas?,Son...son zombies?.-.Pregunte para ver si alguien me respondía o sabia que estaba pasando,mientras que la chica que me había empujado me ofrece ayuda para pararme.
.-Aléjate, como me empujas de esa forma pude haberme quebrado la cabeza,ahora tengo la pierna rota y el Brazo también,que te costaba decirme que bajara para que Dracomon me cargara y no cayera tan bruscamente.-.Le respondí de muy mala manera mientras me paraba y trataba de alejarme cojeando.

De forma apresurada pero necesaria, nada más reconocernos Zayyn ejecuta un plan para salir de la casa que se está inundando de humo. No entiendo qué ha pasado con este mundo, pero si ha decidido explotar prefiero que no lo haga conmigo dentro. Estaba claro que algún día llegaría, supongo que dadas las circunstancias debo dar gracias de haberme encontrado con mi maestra. Posiblemente ella tenga algún dato más... Sea como sea el exterior trae consigo noticias más aciagas si cabe. Esos seres abominables que describían la tv están justo aquí, acercándose para saludar. Es entonces cuando caigo en la cuenta de que junto a Zayyn hay un chico más que se ha hecho un torniquete.

Desenfundo mi pistola, tenemos que abrirnos paso como sea. La luz de las llamas me permite ver que...¡¡se tratan de cadáveres!! ¡¡se están levantando de su descanso eterno!! Primero la revolucion con las almas en la dimensión mortuoria y ahora... Claro, los cuerpos no tenían que hacerse de rogar. Busco con la mirada uno de los laterales tratando de visualizar una posible vía de escape, pero vamos a tener que fabricarnosla. Con celeridad disparo, sujetando la pistola con ambas manos, en la cabeza a uno de los zombies que se encuentran en el lado izquierdo y de ellos al que está más a la izquierda. Es en ese entonces cuando al tirarme de nuevo hacia Zayyn y el otro chico... Lo veo claro.  

Gabumon, corta mi capa en trozos. Rapido.-Esto es lo más repugnante que me he visto a hacer nunca.  Me tapo con el la boca y nariz y le doy otros trozos a Zayyn. Corro hacia donde yace el zombie que he abatido y cubro mis ropas con su sangre corrupta, cuidandome de que en ningún momento se impregne directamente mi piel con ella. Invito a que mi digimon haga lo mismo.Me echo tierra por la cara y pelo...no sé cuanto ganaremos con esto, pero la mejor forma de perder la humanidad es siendo uno de ellos.Miro hacia Zayyn el instante preciso en el que nuestras miradas se encuentran y asiento con seriedad. Rápidamente me acerco hacia el muchacho y le doy un empujón hacia delante con intención de que se venza contra el suelo. Luego salgo corriendo por el camino que ha sido despejado antes atendiendo a mis alrededores.

The end is the end. Don't bless me father for I have sinned.:

Las llamas de la casa alumbran las cercanías, de esa forma soy capaz de discernir mejor a los seres frente a nosotros que se acercan. Mis suposiciones anteriores se ven terriblemente infundadas. ¡Zombies! ¡Y una mierda! ¿Primero las almas y ahora esto? ¡¿Qué tiene el Mas Allá en mi contra, joder?! Como sea, consigo no perder la cordura, mis nervios son acero en esos momentos, pues si quiero sobrevivir, he de mantener la cabeza fría... No podemos regresar a la casa estando esta calcinándose, pero los zombies... ¡Tsk! Aferro de nuevo mis pistolas, imitando instantáneamente a Ada, y me protejo con ellas del flanco derecho, acribillando a balazos del calibre del 12,7 las cabezas de un par de zombies con aspecto de haber muerto recientemente que se acercaban por allí. Dejo escapar un gruñido, y doy un par de pasos hacia atrás, encontrandome espalda contra espalda con mi aprendiz, y la escucho dar órdenes a su compañero, por lo que me dispongo a hacer lo mismo.

- Coral, Fenrir. Slice the corpse, now-mis digimons actúan casi al instante, Coral con sus hojas cortantes y Fenrir con el cuerno de su cabeza y sus garras, cortan un brazo ensangrentado de uno de los zombies que he abatido. Mientras lo traen, tomo el pañuelo que la Décima me tiende y me lo anudo en la cabeza, tapando nariz y boca, a modo de braga o protector y me ungüento con tierra en el pelo y en la piel. Cuando mis compañeros digitales traen la extremidad del muerto viviente, hago lo mismo, pero esta vez, untándome de la sangre corrupta por la ropa, sin dejar, por si acaso, que esa contaminación llegue de manera directa a mi cuerpo. Mis digimons hacen lo mismo, no queremos que los caminantes les huelan a ellos tampoco.

Mis ojos se encuentran entonces con los de Ada, su mirada me dice mucho más de lo que aparenta, comprendo perfectamente qué es lo ue tiene pensado, y en respuesta, una sonrisa cruel y malévola se dibuja en mi rostro al estar completamente de acuerdo con ella, incluso yo ya había pensado en algo por el estilo... Una vez más, nuestras mentes han funcionado como una.

- For the way I condescend, and never lend a hand, my arrogance is making this head buried in the sand-murmuro, acercándome al muchacho pelirrojo que había caído al suelo, como una sentencia final. ¿Quería que me alejara de él? Sus deseos son órdenes para mí...- For the souls I forsake... I am going to hell!

De igual forma que hace Ada, empujo con fuerza al muchacho hacia los zombies "vivos" que todavía se acercaban. La caída ha debido suponer para él un duro golpe, pero para su mala suerte, la desgracia no acababa ahí. Viéndole caer al suelo frente al grupo de muertos vivientes, dejo escapar una leve risotada, llena de crueldad y diversión, y rápidamente, sigo a Ada para escapar de allí, por el hueco que ella misma había creado anteriormente. La carnada... Su sacrificio es necesario para nuestra subsistencia.

braga:

Cuando estábamos intentando sacarles trabajosamente las patas a la cama que había en nuestra habitación escuchamos lo que pareció ser un disparo, por lo cual, al igual que Ysera, me dirigí hacia la puerta donde se encontraba Fistus, el trató de distinguir lo que pasaba afuera, pero solo dijo: -Hay alguien afuera.- Los tres nos miramos por un momento, ya que en silencio sabíamos lo que debíamos hacer. Yo me dispuse para abrir la puerta, colocándome en la posición en la que estaba Fistus, mientras que éste se colocaba entra yo e Ysera listo y con su espada de madera en mano para hacer frente a lo que estuviese a la izquierda. Mientras tanto, Ysera se enfocaría a lo que hay a la izquierda.

No sabíamos con qué nos encontraríamos, así que, mientras mis camaradas observaban afuera de la puerta, tratando de averiguar de donde venía el disparo que oímos recién, por mi parte, me devolví hacia la ventana para observar afuera con algo de detenimiento, por si es necesario alguna salida de emergencia o como plan be. Luego me regresé hacia afuera, para ver que habían descubierto ambos compañeros y así poder idear una manera para salir de este curioso lugar tan acogedor.

Johno

La casa continua ardiendo y al regresar al pasillo una nube de humo los cubre y la habitación en la que estaban antes arde al igual que el resto de la casa, el humo comienza a entrar en sus pulmones y la oscuridad los envuelve, al quedar inconscientes tanto el cómo sus digimon son consumidos por las llamas hasta volverse carbón

Ada, Zayyn, Hiroto.

Las chicas rápidamente realizan la estrategia más sensata hasta el momento y cubren sus ropas de sangre de zombi al igual que sus digimon con prendas, el olor era nauseabundo y fácilmente haría vomitar a cualquier persona, pero pesia funcionar, los zombis pasan de ambas y de sus digimon como si estas fueran unas más de ellos.

Por desgracia el chico no tiene tanta suerte y debido a su estado no puede defenderse ante la bio hybrido que lo lanza contra los zombis, y al estar con un brazo y una pierna quebrados no puede defenderse y es devorado por los zombis, los zombis que llegan comienzan a amontonarse cerca de el para intentar obtener su parte y a rodear el digimon para al igual que con el chico intentar devorarlo.

Las chicas logran eludir y pasar entre los zombis, aunque el movimiento no engaña a todos los zombis. Logran alejarse de la multitud de zombis y a lo lejos logran ver una vieja iglesia que está en el medio del cementerio a unos 100 metros de ellas, pero los zombis calavera al notar sus movimientos rápidos se lanzan contra ellas. Los zombis calavera corren rápido pero estan algo lejos, por lo que deberán elegir si luchar contra los zombis que van contra ellas y arriesgarse a atraer a los demás zombis o correr tan rápido como puedan hasta la iglesia para ponerse a salvo.

Muertos: Johno y Hiroto

De alguna forma, espero no tener que volver a hacer una cosa parecida a esta nunca más… pero ¡¡funciona!! Nuestro olor corporal se está camuflando con el suyo, además de que mantener distracciones como el fuego de la casa y aquel valiente muchacho… son una gran ayuda, para que quizás podamos contar nuestras hazañas por unas horas más. No paro de correr en ningún momento, seguida por mi digimon, tenemos que aprovechar esta racha hasta que podamos encontrar un refugio improvisado. Guardo mi pistola en su cartuchera y tanteo entre mis pertenencias el bastón para tenerlo a mano. Pese a que no hemos dejado de correr en ningún momento, no todos los zombies están entretenidos con el fuego, ni devorando al sabroso humano. ¿A quién se le ocurrió la genial idea de clonar a Flash y convertirlo en zombie? Tiempos inestables son lo que nos toca vivir… aquel tipo era un muchacho que estaba en el lugar equivocado, el instante equivocado y con la compañía equivocada. ¿Deberíamos rezarle a la muerte? Oh, espera… tampoco podemos hacer eso.  

Ojalá me hubiese interesado más en el valioso y patriótico juego del béisbol. Mientras estoy aferrándome con fuerza a mi bastón, no dejo de pensar en que la necesidad pueda llevarme a batear con todas mis energías sobre la cabeza de esos seres, porque si me dan a elegir desde luego quiero seguir corriendo por mi vida. Miro de soslayo a Zayyn no quiero que nos perdamos de vista, mucho menos en un momento como este. Una vez que compruebo que sigue ahí, permanezco atenta a cualquier incidente que pueda impedirnos continuar adelante, ya sea porque viene por el frente o por los laterales. En el horizonte se distingue un edificio de construcción religiosa ¿podría ser una iglesia? Ahora mismo me encuentro en la disposición de convertirme a cualquier religión con tal de que me dejen entrar.

Me giro unos instantes para indicarle con un gesto a Zayyn, en dirección hacia la iglesia. Por el momento no es seguro hablar, ni mucho menos gritar. Con el objetivo fijado, lo único que hace falta es correr y nada más. Tiro del picaporte con celeridad, agudizando mis sentidos hacia el interior de la iglesia con el bastón alzado por si acaso. Espero a que lleguen los demás para cerrar el portón.

Parece improbable, pero la táctica de embozarnos con los restos cadavéricos de los zombies muertos funciona. Cuando corremos fuera de esa gente, ninguno de ellos parece demostrar mucho más interés por nosotras que por el pobre jovencito al que hemos tenido que sacrificar. Así es la vida, dura, muy dura, amigo mío, pero es lo que toca... Los fuertes escriben la historia, los débiles se quedan detrás. Con una suave risa satisfactoria, corro junto a mis dos compañeros digitales. Coral avanza volando, moviendo sus hojitas con forma de aspa, mientras dispara diversos frutos secos por su bouita a todo zombie que tenga intenciones maliciosas contra nosotras. Fenrir, en cambio, se limita a correr como no lo ha hecho en su vida...

Por supuesto, yo no soy menos. Con toda mi fuerza, muevo las piernas rítmicamente, corriendo como un atleta en los cien metros lisos. No me importa nada, tan solo me voy a preocupar por mi integridad física...Y evidentemente, por la de mis compañeros y la de mi aprendiz. Respiro de manera acompasada, sin malgastar una sola bocanada del aire que respiro y que lleva el oxigeno a todas las partes de mi cuerpo. Rápidamente, entro en calor, la adrenalina recorre cada una de mis venas, y cuando llegamos por fin a la iglesia que hemos oteado en el horizonte, ayudo a Ada a abrir la gran puerta.

- Rápido, rápido, rápido-murmuro velozmente, entrando en el interior del edificio, acompañada por los tres digimons y por la humana. Seguido de eso, no pierdo un minuto, empujo la puerta cuando ya estamos todos dentro para cerrarla. Sin embargo, no soy idiota. En las iglesias muchas veces también hay tumbas en el suelo, o en pequeñas criptas de su interior... Agudizo mis sentidos de biohybrido y les indico a todos que se muestren atentos y ataquen si lo ven necesario... Agarro mis pistolas con fuerza y apunto a cualquier cosa que se mueva que tenga pinta de ser un enemigo.

Apenas entrar al a iglesia y traban la puerta se puede escuchar varios impactos de cuerpos contra las grandes puertas las cuales resuenan por los golpes de los zombis y sus gruñidos, salir ya no es una opción, al menos no por esa puerta.

La iglesia era larga y alta, de tres plantas de lato pero estaba unido todo en un solo salón, se podía ver un especie de balcón interno que permitía que más gente asistiera a misa y presenciara todo desde arriba, al final de la sala se ve un altar el cual tenía una cruz colgada en la pared, sería una iglesia cristiana común y corriente, salvo por la sangre y cuerpos descuartizados por todas partes, zombis sin cabeza y zombis partidos por la mitad. Y en el centro del altar se encontraba una cuna blanca y parado de espalda a las chicas se encontraba un hombre joven el cual estaba cubierto de sangre y cortes, todo pareciera indicar que él fue el que causo la muerte a todos esos zombis, el joven se encontraba viendo a la cuna sin prestar atención a las recién llegados, lo único que se alcanzaba a distinguir de él era la chamarra azul que usaba, la cual estaba rasgada y manchada de sangre, y su pelo rubio desarreglado, el cual parecía de color cobre en ciertos mechones por la sangre seca que tenía.

No puedo evitar abrir los ojos con cierto sobresalto, cuando escucho cómo se agolpan contra la puerta los zombies que hemos dejado atrás. Inspiro rápido para animarme a recuperar las fuerzas y seguir adelante. Entorno los ojos mirando hacia arriba aunque resulta complicado hacerse una idea de las dimensiones de esta iglesia, es condenadamente grande. Luego echo la vista al frente ¿pero cuánta gente podría caber aquí dentro? Algo me dice que el dato puede ser espeluznante. ¡¡Pero si hasta tiene un piso superior para que los fieles puedan seguirla!! Trago saliva con algo de dificultad, supongo que el norte no será muy diferente al sur y cuando este tipo de catástrofes se dan… todos recordamos lo bueno que sería que nos escuchase una voz divina y abriese los cielos solo para nosotros. Quién sabe, quizás deberíamos intentarlo también nosotras.

Cierro los ojos unos segundos y junto las manos.-Superman…si estás ahí, sálvame.-susurro con un sonido imperceptible. Abro los ojos de golpe y niego con la cabeza ¿qué diablos estoy haciendo? Me centro nuevamente mirada al frente, si hasta una parte de mí ha querido llegar a los rezos, es porque ha llegado la hora de establecer un plan B.-Master, muchachos…-hago un llamamiento en voz baja.-creo que sería estúpido no hablar sobre esto pero…necesitamos un plan B. Debemos buscar qué lugar es el más seguro dentro de esta iglesia y en caso de perdernos, si se llegase a dar el caso, acudir a él. Pero, si en 20 minutos no estamos todos…deberemos seguir adelante. Aunque, creo que nuestra prioridad debería ser permanecer unidos a cualquier precio.

Espero una conformidad como respuesta o bien si quieren resaltar algún punto que debamos comentar ahora, luego podría ser demasiado tarde. Tras esto, continúo blandiendo mi bastón-espada no me fío ni un pelo de este lugar. A la par que camino, pruebo a ir mirando en diferentes direcciones buscando cualquier signo de amenaza mientras mi digimon permanece a mi espalda, guardando ésta. Al fondo puede discernirse el altar, el cual porta una cruz… cuando doy un paso más, escucho cómo algo viscoso ha hecho un asqueroso ruido debajo de mi bota. Es un charco de sustancia indefinida que podría ser lo que en antaño fue..¿un zombie? Mis peores temores han sido confirmados, este sitio también ha sucumbido ante la amenaza zombie. Con mi bastón, voy rematando todos los trozos que puedan pertenecer a cabezas zombies. No quiero ni pensar el revuelo que se podría formar si uno de estos despojos no está bien “muerto”.

Conforme vamos avanzando, me voy dando cuenta de que quizás no sean los trozos parciales de zombies los únicos habitantes del lugar. Una silueta de un hombre rubio cuyas ropas estaban destrozadas, hechas girones y ensangrentadas. Pero además había algo que sobresalía y a lo que el muchacho parecía dedicarle toda su atención. ¿Aquello era una cuna? Doy un respingo mientras mi cabeza parece estar pensando a toda velocidad. Recuerdo cierta charla que me ayudó a comprender mucho mejor las motivaciones de mi Master. Pero si simplemente hubiese sido eso, quizás no se hubiese molestado en ofrecerme más detalles. En aquella foto que me mostró se podía ver claramente a un hombre joven, de ojos azules y cabellos claros que sostenían a una bebé de quizás ¿semanas? ¿algún mesecito? No sabría decirlo…¿y si… fuesen ellos? ¿Qué probabilidad hay de que el mundo se esté devorando así mismo en un letal virus y ellos hayan podido salvarse? ¿Un muchacho de su complexión es capaz de cargar con una bebé y luchar contra los infectados atravesando un cementerio, tal y como nos hemos visto obligadas a actuar nosotras? Y lo que es más importante…¿Qué no haría una madre? Por no mencionar otro pequeño detalle que incluye que el virus ha sido nombrado curiosamente como Z.A.Y.Y.N.

Miro a Zayyn de manera fugaz y luego busco con la mirada algo que pueda frenar nuestros pasos, antes de continuar caminando y encontrarnos de bruces contra los aparecidos supervivientes. La miro directamente a los ojos, comprendo que esta situación podría ser especialmente difícil para ella y no la culparía si quisiese hacer algo por ellos. Pero si nos centramos en los datos…vienen a ser bastante imprecisos y no estamos en posición de correr riesgos innecesarios. Reconozco que podría ser juzgada como la nueva Grinch de la ciudad, por privar a una familia de reencontrarse ante el inminente Fin del Mundo. Pero me ceñiré al estilo más medieval y añadiré "No en mi Guardia".

La única forma que se me ocurre de salir de aquí, es mandado algún tipo de señal desde lo más alto de esta iglesia. Teniendo en cuenta sus dimensiones, si conseguimos lanzarlo con la suficiente potencia, es posible que algún equipo de rescate lo visualice. Si es que todavía existen tales equipos... Subamos al resto de pisos, quizás encontremos algo que nos pueda ser útil. Pero mantened los ojos bien abiertos.-les comento mientras señalo las escaleras, en cuanto obtengo su respuesta acelero el paso hacia las mismas.

Nada más entrar encontramos miles de cuerpos descuartizados por la gran iglesia, que a juzgar por su tamaño exterior, tenía lógica que contara con tantos pisos. Sin esperar a que nadie me lo diga, comienzo a acuchillar a todo cuerpo muerto de zombie que vea por el suelo, acribillándolos en la cabeza para asegurarme de que no se levanten. Una vez veo más o menos finalizado el trabajo, me vuelvo hacia Ada, quien ha decidido reunirnos a todos en una especie de coro para pensar en el próximo plan. La escucho con atención, y asiento a sus palabras cuando finaliza, y me separo para apoyarme en una columna que tapa mi visión hacia el altar. Con el ceño fruncido, veo a Ada mirar en esa dirección, pero no la veo tensarse lo suficiente como suponer que hay algún peligro por allá. Fenrir se remueve, pero mantiene sus sentidos en alerta máxima; y Coral revolotea por los alrededores, vigilando por si acaso algo amenaza nuestra seguridad. Mientras mi aprendiz remata algunos cuerpos más, yo me acerco a uno de los bancos de la iglesia y comienzo a arrastrarlo con fuerza hacia la puerta para bloquearla, para así evitar que los zombies del exterior puedan cruzarla.

- Maldición... ¿Zombies? ¿Cómo demonios a sucedido todo esto?-primero zombies digitales en el Mundo Digimon, y ahora zombies humanos en el Mundo Real... Esto ya parece una cruel broma del Destino-. En fin...-me acerco a Ada, la tomo con suavidad de un brazo y la miro a los ojos-. Esperemos que por la mañana todo haya pasado...

Ella me responde, y sugiere seguir por las escaleras para subir al piso superior. Sopeso la idea por unos instantes, mas finalmente asiento, encogiéndome de hombros y suspirando... No podíamos perder nada, y quizás arriba podríamos escondernos mejor... Aunque eso sí, no voy a ser tan ingenua como para pensar ue allí no va a haber más zombies, muertos o vivos. No importa... Trago saliva, y empiezo a ascender, con las pistolas preparadas y en ristre en caso de que algún no muerto nos salga al paso.

Al subir por las escaleras se topan con dos puertas en forma de L, una de ellas está abierta y levaba al segundo piso el cual servía como un mirador en alto para el altar, la superficie era de unos 10 metros entre la puerta y la barandilla que impedía que la gente se pudiera caer para el piso de abajo, el altillo recorría las paredes hasta llegar al altar. Desde el piso de arriba se puede ver claramente el altar y al chico y la cuna donde desde lo alto se podía ver a una bebe en su interior.

La otra puerta conducía al campanario y se encontraba cerrada con llave.

Al llegar al segundo piso ven que el lugar está intacto, no hay rastros de sangre o de pelea y los bancos despiden un olor a madera barnizada que refuerza la idea de estar en una iglesia, solo el piso de abajo se encontraba manchado de sangre y regado de muerte, era como si estuvieran viendo el infierno desde el cielo, donde pareciera que nadie las atacaría.

Pasado dos minutos desde que subieron la enorme puerta de la entrada rechina y se escucha el sonido de la madera al romperse, los zombis habían roto la puerta, la abertura era mínima por lo que solo dejaba entrar a un zombi a la vez, los zombis se amontonaban contra ella lo que les impedía el dejarlos entrar en manada, solo dos zombis de los mas rápidos, los cuales eran negros debido a su putrefacción y parecían ya calavera sin piel y con la cuenca de sus ojos totalmente negra pudieron entrar y fueron corriendo hacia el altar como dos corredores de maratón, el sonido de la puerta al romperse hace que el chico rubio se voltea y avance torpemente hacia la puerta, ya sea por las heridas o por alguna otra razón, pero eso no importaba ya, los zombis corrieron hacia él y lo impactan arrojándolo al suelo y desgarrándole las entrañas mientras un grito desgarrador sale de su garganta mientras su vida se apaga mordida a mordida. Los zombis se encontraban ocupados con el chico, pero más zombis normales comenzaban a entrar, estos permanecían alejados de los dos zombis negros, ya sea por miedo o por instinto, la cosa es que otro zombi calavera entro al lugar y comenzó a avanzar lentamente hacia el altar ignorando a los otros dos y su comida y yendo lentamente hacia el altar y al bebe el cual se encontraba en la cuna del altar, la cuna tenia manchas de sangre, tal vez de la masacre a su alrededor, tal vez no, quien lo sabría. Junto a ella yacía un cáliz y una grabadora de audio, de las que usaban los viejos periodista para gravar entrevistas o notas importantes.

Una vez arriba, observo junto a Ada el panorama que tenemos frente a nosotras. A diferencia del piso inferior, todo está completamente intacto, los bancos se encuentran como nuevos, y no hay rastros de sangre o de pelea por el suelo. De momento, ese parecía un lugar seguro para estar, miro a Ada, y sonrío de lado, con un gesto, la indico que caminemos hacia la puerta del campanario, la cual parece cerrada... ¡Pero nada que no se solucione con un único disparo, o con un golpetazo de las hojas que salen de mis dos pistolas! Alzo un brazo, dispuesta a abrirme paso, pero entonces, dejándome tan estática como una estatua, un grito escalofriante resuena por toda la iglesia... Y esa voz... Esa voz...

- No...-mis ojos se abren de par en par, y de un salto, me doy la vuelta para asomarme por el balcón... Desde mi posición observo la escena, la matanza... Al parecer varios de los zombies del exterior nos han seguido y se han colado al interior del edificio... Y no contentos con eso...-. No... Nonononono...-aprieto los dientes con fuerza, mis manos se cierran en torno a la madera del balcón, que se agrieta y se rompe en varias partes por la fuerte presión que estoy ejerciendo. Mis ojos rápidamente se llenan de lágrimas, una parte de mi alma, de mi ser, de mi corazón, se fragmenta al comprender lo que significa que él este muerto, por mi incompetencia, por no haberme percatado de su presencia allí. Algo me desgarra desde el interior, abro la boca para gritar, pero las zarpas de Fenrir me cierran la boca a tiempo.

- ¡Mi señora! ¡La niña!-susurra, apresuradamente.

Mis ganas de chillar se disipan. Mis ojos verdes se clavan entonces en la cuna, y en los zombies que lentamente se acercan hacia ella. Y entonces, algo en mi interior explota, la cólera envenena mi sangre como una ponzoña... Inspiro hondo, y con determinación, me separo de mis compañeros digimons y de mi aprendiz, caminando por el segundo piso. Implacable, hago girar las pistolas entre mis dedos mientras avanzo, y me posiciono en el borde del balcón, mirando con frío odio al muerto viviente que se arrastra hacia el infante. Sin dudar, sin dejar que nada me detenga, me dejo caer al segundo piso, limpiamente, y con sigilo, aterrizando grácilmente tras los zombies que se están alimentando con el cadáver de aquel al que juré amor eterno. Miro al cadáver móvil, y empuño mis dos pistolas contra el, enarbolando las afiladas hojas que portan contra ellos.

- Not my daughter, you bitch-murmuro, escupiendo las palabras con desprecio, antes de, con los dos cuchillos, decapitar al ser del inframundo.

Nada más acabar con el, hago un gesto, me acerco a la cuna, y tomo a la niña en brazos, protegiéndola con mi vida si es necesario... Kenshi ha muerto, he perdido al amor de mi vida, pero no voy a perder a otra parte de mí... Protegeré a mi hija con uñas y dientes. La amo, y no me la van a arrebatar. Acudiendo a mi anterior llamada, Coral se acerca revoloteando rápidamente, me tiende una patita... pero no la tomo. En cambio, le tiendo ofrezco a mi hija para que la salve al menos a ella, y antes de despedirme, deposito un beso sobre su frente, un beso en el que dejo toda esperanza para ella... Coral duda, pero al separarme, niego con la cabeza. Ella es demasiado pequeña como para soportar el peso del bebé y del mío propio... Por ello, me voy a arriesgar a ir yo sola y por mi propio pie hacia el piso de arriba. Pero NECESITO que Coral lo consiga, NECESITO que lleguen a salvo. NECESITO que mi hija viva...

- Vamos, Coral... Llévatela, por favor... Si no lo consigo... prométeme que la cuidaréis entre todos... prométemelo-Una vez la plantita asiente, las dejo ir, con un nudo en la garganta, y observo cómo se marchan volando hacia el segundo piso, y sin detenerme un sólo segundo más, cojo la grabadora y el caliz, los guardo en el interior de mi gabardina y me armo con las pistolas, caminando hacia las escaleras que habíamos usado Ada y yo con anterioridad, y atacando a todo zombie que se acerque, usando mis reflejos, mi fuerza y velocidad para hacerles frente.

Al subir las escaleras, la altura nos revela una espectacular vista pero no muy agradable. Para mi desgracia, desde aquí puede vislumbrarse perfectamente al chico de cabellos rubios y a un bebé que se encuentra en el interior de la cuna. El segundo piso parece no haber sido alcanzado por la barbarie, no obstante tampoco podemos fiarnos. Los bancos desprenden un olor que todavía conserva mínimamente la impresión de estar dentro de un recinto sagrado. Bueno, o que fue sagrado. Entiendo el gesto de Zayyn de continuar adelante, todavía no se ha percatado de quiénes podrían estar abajo y eso, ahora mismo, podría salvarle la vida. Nos dirigimos hacia una puerta que parece conducir hacia un piso superior, teniendo en cuenta dónde nos encontramos todo apunta que posiblemente se dirija al campanario.

Doy un suspiro viendo cómo Zayyn ha desenfundado sus pistolas y ha conseguido una forma de "abrir" la puerta. Hasta que un desgarrador grito rompe el silencio y termina con los planes de huida. Veo cómo mi Master se gira en una reacción instintiva para dirigirse al lugar procedente de tal grito. Cuando alcanzo a mirar por la barandilla, nos encontramos con un espectáculo dantesco en el que los zombies han conseguido romper la puerta que habíamos atrancado y han atacado al muchacho y a la cuna que allí se encontraban. Llevo mi mano de nuevo a mi revolver para prepararme... aunque debo admitir que es una sorpresa cuando veo que Zayyn decide saltar para ir en su ayuda. Mi brazo se alarga con impotencia ante un "No" que no me da tiempo a protestar.

No hay nada que decir... vamos a manchar la alfombra del Señor... Y después de visitar el infierno digital se me ocurren unas cuantas ideas decorativas...-comento rabiosa para mis adentros luego blasfemo en voz alta, si mi padre me viese por algo como esto seguramente me llevaría una buena colleja. Pero estamos en el jodido Fin del Mundo y Zayyn se ha lanzando contra una muerte casi segura. Me dirijo hacia el Gabumon de Zayyn para instruirle en asegurar el piso.-Gabumon, ayúdame a desplazar estos bancos contra las escaleras, tenemos que ganar tiempo.

Entre los dos vamos corriendo a por uno de los bancos y los postramo próximos a la bajada de las escaleras para que en cuanto suba Zayyn moverlos. Tomamos un segundo banco y hacemos lo mismo a la mayor velocidad que nuestros limitados cuerpos pueden ofrecernos en estos momentos. Cuando terminamos, me apresuro en apuntar con mi arma e ir disparando a aquellos zombies que no está cubriendo Zayyn. No sé por cuanto tiempo podré darle esta cobertura... La puerta del campanario ya está abierta.

Gabumon, quiero que vayas con cuidado a mirar si es seguro el campanario. No quiero que arriesgues lo más mínimo. Si detectas algo sospechoso, regresa e iremos todos juntos.-le comento a mi Gabumon sin detenerme en mi acometida.

Tsk. Esto esta empeorando por momentos, no solo están entrando mas y mas zombies sino que están consiguiendo llegar hacia el piso superior. Dentro de minutos no quedara ni una sola parte de esta iglesia sin invadir. Máster... Hago crujir los dientes expresando mi impotencia mientras me muevo hacia la zona de los bancos. Le hago una señal al Gabumon de Zayyn y le indico que ya no podemos esperar más, si no termina por llegar en lo que movemos el banco, tendrá que buscar otra ruta alternativa. ¿Habria saltado yo de una zona segura para ayudar a mi padre? ¿Acaso lo habría hecho él? Supongo que ese es el orden natural de las cosas. ¿Habria cambiado algo que hubiese sido mi pequeño, mi protegido? No deseo hacerme esta pregunta nunca.

Terminamos de atrancar la entrada deshaciendonos de los zombies más cercanos, estaba claro que el ruido les atraería hasta aquí, solo espero haber podido ofrecerle los minutos necesarios. -Gabumon, destroza ese banco quizás consigamos algo más de tiempo si atrancamos el pasamanos con un trozo de madera. -le espeto al terminar y aprovecho para cubrir un poco más a Zayyn en esos segundos. Finalmente corremos hacia la puerta que conduce al campanario y cuando todos los presentes ya la han cruzado, trato de cerrarla con el trozo de madera y subo hacia el campanario.

Me hago paso a través de los zombies, volándoles la cabeza a cada uno que me encuentro. A mi espalda, siento cómo Coral ha conseguido poner a salvo a la niña, y tras conseguir un poco de espacio para maniobrar, pateo un banco contra la pared. Seguidamente, me subo sobre él, y dándome impulso, salto hacia arriba,apoyando mis pies muy levemente contra la pared, escalando hacia el piso de arriba. En un último movimiento, brinco hasta conseguir agarrar el borde del balcón, y pronto puedo sentir unas garras férreas sujetando mis muñecas para ayudarme a subir. Cuando levanto la mirada y veo que es Fenrir, sonrío a modo de agradecimiento y termino de subir. Jadeo unos segundos, pero rápidamente, corro junto con él hacia Ada y los demás. Lo primero que hago al reunirme con ellos, es abrazar a Coral y tomar a mi pequeña entre mis brazos besándola en la frente una vez más, contenta de volver a verla. La bebé gimotea un poco, pero permanece tranquila, envuelta en su mantita.

- Gracias a Dios-murmuro aliviada, aunque irónicamente. Le paso unos momentos a la niña a Coral, y rápidamente me quito la gabardina. Llevo más ropa debajo cubriéndo mi piel, así que no hay problema en improvisar un saco para bebé que mantenga a Freyja pegada y protegida a mi cuerpo. Una vez terminado el arreglo, escondo a Freyja ahí, cruzo, junto con Ada y los demás, la puerta hacia el campanario... Quién sabe qué nos encontraremos allí, por eso mantengo mis pistolas en ristre, mientras las recargo.

Spoiler:

Las escaleras del campanario giraban en torno a las paredes de la torre, existiendo solo un barandal que les impedía caerse por el hueco que había en el centro del mismo. Los escalones eran de madera y crujían mientras corrían, algunos escalones parecía que se iban a quebrar con solo pisarlos. Tras mucho correr llegan a una puerta la cual los dejaba entrar al campanario, el techo tenia forma de triángulo y la habitación era cuadrada, sin paredes, solo unas vigas que sostenían el techo del lugar, en el medio de la estructura se encontraba una campana agarrada del techo y que al ser tocada significaba la hora de ir a misa.
 
Freyja expresa un gemido extraño el cual hace que la saques del agarre donde la tenías para verla mejor.
Al hacerlo, notas que está muy pálida y que respira con dificultad, al moverle la ropa logras ver una marca de una mordida en el brazo izquierdo, la bebe había sido mordida por un zombi en algún momento antes de que llegaras a poder rescatar

Con cuidado tratando de no perder ni un solo minuto, subo por las escaleras en forma de caracol que ascienden hasta el campanario. Aprieto los dientes sintiendo cómo chirrían bajo mis pies la madera a cada paso que doy. ¿Estará bien Gabumon? No hemos escuchado ningún sonido salvo los guturales alaridos de los zombies que están en el piso superior de la iglesia. Finalmente alcanzamos a ver una puerta, con celeridad agudizo mi oído para tratar de determinar la distancia a la que nos encontramos de los zombies. Esto parece estar llegando a su fin, si ningún equipo de rescate viene a por nosotros... No hay retorno posible. Sé que quizás el sonido haga que cada maldito zombie de la zona dirija sus pasos hacia nuestra posición ¿pero acaso tenemos otra alternativa?

Abro la puerta topándome con la estructura triangular del campanario, me agarro a una de las vigas centrales con toda la fuerza que soy capaz de ejercer. Les indico a mis acompañantes que me imiten y se aferren como puedan a la estructura. Con la otra mano extiendo mi bastón y toco en el centro de la campana para hacerla resonar con fuerza. Las ondas replican intensamente sobre el campanario, como si la vida me fuese en ello, tomo la viga con todas mis fuerzas para evitar que me descentre el sonido y e haga perder el equilibrio.

La campana comienza sonar con un tono cristalino, a pesar de estar echa de metal sonaba como si se tratara de cristales chocando como en un llamador de ángeles. El sonido se comienza a propagar por todo el cementerio y los zombis que estaban sugiriendo el campanario se detienen y comienzan a bajar a la capilla de forma tranquila y serena. Los zombis en todo el cementerio comienzan a ir tranquilamente hacia la iglesia. Al estar dentro los zombis comienzan a tomar asiento en los bancos de la iglesia y cierran los ojos y producen extraños gemidos, gemidos que parecieran rezos a alguna deidad. Abajo de la cruz, un zombi vestido con una toga griega comienza a dirigir la misa y a "rezar" mientras señala al campanario, los zombis comienzan a pronunciar una sola palabra que podía ser comprensible "Zayyn". 
 

La campana sigue sonando hasta que una luz brillante comienza a emanar de ella y la luz se expande con fuerza y se logra escuchar un sonido a cristal rompiéndose. Al desaparecer la luz todos los zombis, las muertes son desechos, como si nunca hubieran pasado, solo unos pocos logran recordar lo que paso aquel día, y la mayoría de los que murieron aquel día solo despiertan agitados, como quien despierta de una pesadilla.