Una de vaqueros [Caza de Blaze]

Localización: En algún lugar de Misisipi.

Objetivo a cazar: Ballistamon y MailBirdramon

...

Calles desiertas sin rastro alguno de vida, tal y como es de esperarse en casi cualquier lugar del DigiQuartz. Casas de extraños brillos y colores se alzan por todo el lugar, el cielo muestra su característico tono rojizo, completamente despejado, sin nube alguna... Una campana resuena en los alrededores con fantasmagórica majestuosidad, y al instante dos disparos la preceden... Y de nuevo, el silencio.

Llegais a tiempo de escuchar los disparos saliendo de algún lugar de los alrededores. Habeis aparecido en la salida de una línea de metro desierta. En dirección a los disparos anteriormente escuchados solamente se puede ver una larga calle que parece llevar al centro de la ciudad en la que os encontráis, la búsqueda de los datos de ciertos Digimon os han llevado a este lugar, pero nada parece indicar donde se hallan con exactitud. Siguiendo el origen del sonido, a los pocos minutos dareis con una enorme plaza, al fondo de la misma puede verse el ayuntamiento de la misma, y en lo mas alto del mismo, un campanario se alza con majestuosidad. Hay múltiples Digimons presentes, entre los cuales el que mas destaca es un Deputymon (Revolmon) que hace girar sus revolvers mientras los dispara hacia el cielo como un loco. Al otro lado otros dos Deputymons de menor tamaño arrastran algo hasta el ayuntamiento, ya demasiado lejos como para ver de que se trata, si bien por los movimientos parece un Digimon malherido.

- Bien ¿¡He ganado justamente o no!? Ahora ¡YO! Soy el sheriff - Sin pronunciar una sola palabras mas el Digimon camina con tranquilidad hasta el otro lado de la plaza, agachándose para recoger algo del suelo y colocarlo sobre su pecho, es una estrella dorada de metal. Tras ello se gira, mirando a los humanos que han entrado por algún lugar de la plaza - ¡Forrasteros! ¿Acaso venís buscando problemas?

Después de dar el salto hacia el DigiQuartz, aparecimos en una salida de metro completamente desierta se podía sentir el silencio que invadía el lugar dado que en ese lugar estaba completamente desolado o al menos eso parecía, era un lugar repleto de edificio con luces y colores algo extravagantes normales en el DigiQuartz, mire hacia arriba apreciando el cielo despejado sin una nube, aunque este tenia un tono rojizo. La calma y el silencio son interrumpido por el sonar de una campana a los lejos, la cual resonaba en nuestros oídos sin cesar hasta que de un momento a otros lo que invade nuestros oídos no es el sonido de la campana sino de 2 disparos hechos adrede al parecer, después de eso hubo de nuevo silencio absoluto, cerré mis ojos en señal de analizar de donde provenía los disparo tal vez los Digimons que buscábamos se encontraban en dicho lugar aunque no se podía estar del todo seguros de ello.

Luego de unos momentos de caminar pude escuchar mas disparos lo cual provenían de un lugar en dirección por una calle completamente vaciá y desierta entonces decidí proseguir  y averiguar el origen de los disparos caminando por la larga calle abandonada - ¿Crees que sean?- me pregunto Shoutmon caminando a mi lado a lo cual concentrado aun en seguir el camino respondí- Posiblemente, no estoy seguro- luego de varios minutos de caminata llegamos a una plaza la cual a la distancia se apreciaba un ayuntamiento un poco viejo y cubierto en alguna partes por esa data de colores como solían estar los edificio normalmente en ese lugar, me quede parado en silencio observando la cantidad de Digimons que había pero entre ellos se notaba la presencia de un que disparaba sin cesar al aire sin medir consecuencia alguna proclamándose ganador de ser el sheriff del lugar, mientras tanto había unos parecidos a él pero mas pequeños arrastrando a otro Digimon que no lograba distinguir por la lejanía pero por sus movimientos supuso que era un Digimon mal herido. Seguí observando mientras aquel Digimon se colocaba una estrella dorada en el pecho al parecer en señal de que había ganado, después de unos momentos noto nuestra presencia este al momento nos llamo forasteros, al parecer este pensaba que nosotros buscábamos pelea o algo parecido- Disculpe pero no tenemos intenciones de pelear ni buscar problemas, estamos qui en busca de algo, aunque me gustaría preguntar y si no es mucha molestia que me respondiera ¿quien era ese Digimon que llevaban a dentro del ayuntamiento? - pregunte esperando pacientemente la acción o respuesta del Digimon mientras tanto disimulada mente mire al alrededor apreciado todo lo que rodeaba la plaza y los edificio.

Los ojos de Oz logran discernir a varios tipos de Digimon en las cercanías, todos parecen ser Digimons de tipo metal, insectos o de aspecto clásico del oeste; Tentomons,Kokuwamon, Kunemons, Dokunemon, Wormons un par de Deputymons de menor tamaño similares a los que se han marchado segundos atrás cargando el bulto, y varios Digimons insecto mas de menor número, siendo los Kokuwamons aquellos que mas abundan en la plaza, y los únicos que no parecen estar preocupados por lo que acaba de ocurrir.

- ¿Que no sois forasteros...? Claro, por que todo el mundo sabe que los humanos son de lo mas normal en el DigiQuartz - La cara de poker que había adoptado el Sheriff Deputymon era impagable - ¿¡Creéis que somos idiotas o que!? - De golpe varios Kokuwamon salen de cada posible escondite de las profundidades e incluso del propio cielo, apuntando con sus tenazas a los humanos y sus Digimons, mientras el Sheriff permanece cruzado de brazos, mientras uno de sus pies sube y baja con rapidez, intranquilo, sin dejar de mirar a los recién llegados - ¿Y además preguntando por el antiguo Sheriff, ahora un criminal derrotado? Toda la pinta de ser socios... - Las tenazas de las múltiples decenas de Kokuwamons comienzan a cargarse de electricidad, deteniéndose de golpe cuando Deputymon chasquea los dedos - Bien, que no se diga que no soy piadoso con los criminales... Por esta vez seréis perdonados, pero un mínimo crimen mas por vuestra parte y vuestra suerte se acabará, Forasteros - Mientras todos los Kokuwamons se van marchando, el Shariff hace lo mismo, caminando hacia el ayuntamiento con paso sereno mientras ríe con malicia ante lo ocurrido.

Poco a poco la plaza se va vaciando, el resto de los Digimons parecen marcharse a sus hogares, quedando al final únicamente algunos curiosos que parecen estar esperando por si algo mas ocurriera y dos de los Deputymon de menor tamaño, quienes vigilan la entrada al ayuntamiento.

Aviso:

Al observar los alrededores tranquilamente pude notar la variedad de Digimons tipo insecto y similares, al parecer el mayor nuevo eran unos con apariencia de escarabajo metálicos, luego centre mi vista en el Deputymon que al pareces creía que eramos socios de dicho Digimons mal herido dentro del ayuntamiento, con mirada calmada mire como este ordenaba y nosotros eramos rodeados a lo cual no me moví y aun mantenía esa expresión calmada y serena al igual que Shoutmon, después de unos momentos al parecer el Deputymon decidió perdonarnos aun lo dudaba, debido a su actitud al apenas vernos imagine que en cualquier momento podría intentar atacarnos si notaba que eramos peligrosos. Luego de que los Kokuwamon se fueran y el Deputymon igual, observe como la mayoría de Digimons restantes se retiraba y solo quedaban algunos curiosos, volví a dar un vistazo al lugar, el ayuntamiento protegido por 2 Deputymon pequeños, la horda de Kokuwamon que al parecer se encontraban por todo el lugar, así que por ahora era mejor retirarse - Sera mejor irnos por ahora- Dije sin mas dándome la vuelta caminando de vuelta a la calle para salir de la plaza, si yo estaba en los correcto posiblemente nos estarían siguiendo algunos Kokugamon sin que nos diéramos cuenta, o al menos esa era mi sospecha que ya que no creo que el Deputymon nos deje ir sin vigilar nos. Por ahora me hizo el desentendido y hice como que no sabia nada, solo caminando despacio para salir de la plaza, por ahora era mejor esperar a  haber que sucedía.

Una vez comienzan a alejarse de la plaza todo parece mantenerse en completa paz y tranquilidad... Nadie les sigue, hay quienes les observan, mas como haría cualquier Digimon normal ante la presencia de Humanos en un mundo en el cual son casi mas raros de ver que en el Digital.

Antes de irse del lugar, Oz pudo haber visto una calle posterior al Ayuntamiento, o al menos eso parecía, mas ahora, caminando en otra dirección completamente distinta, era otro panorama el que se presentaba ante ambos jóvenes. Calles abandonadas en las que de vez en cuando podían verse Digimons, siempre de paso, nunca quietos, nunca charlando. Es fácil deducir que todos los demás estarán en sus hogares. Todas las casas y edificios que les rodean son iguales, una o dos plantas a lo sumo se alzan hacia el cielo, dando lugar a una ciudad claramente residencial, en la cual solo se encuentran edificios mas altos de forzar la mirada a lo lejos y nunca durante demasiada distancia. Pueden verse tiendas y negocios por todos lados, muchos de ellos cerrados y con carteles que indican la vuelta tras el duelo del medio día. Probablemente estén abiertas a la vuelta de donde sea que se dirijan ambos forasteros.

Si deciden seguir caminando, el tiempo les llevará como un amigo hasta una posada chapada a la antigua, dos puertas correderas de media altura se muestran ante ellos, y desde el interior parece salir cierto ruido tintineante, como el chocar de una vajilla y sus cubiertos, mas ni un solo sonido característico de aquel centro de ocio y sociedad, ninguna risa, ninguna charla airada, a lo sumo el seco y discontinuo replicar de lo que suena como un dardo clavándose en algún tipo de diana. Solo un comedor normal, que espera a ser visitado, si los humanos no optan por tomar una dirección distinta.

OFF: El usuario Oz Bezarius Queda fuera de la caza, se le restará 30 DE como penalización por eludir la misma dados motivos concernientes a intereses propios.

ON:

Mientras el joven y su Digimon se marchan para continuar su camino por el pueblo, un Digimon sale a sus espaldas de la taberna, permanece mirándolos unos instantes mientras se rasca la cabeza y finalmente se encoge de hombros para volver a entrar en su interior sin hacer el mas mínimo ruido.

Tras unos largos minutos en los cuales continúan andando por el lugar, unos curiosos carteles se ven pegados a lo largo de la valla de madera de una casa abandonada. Parecen viejos, como si ya tuvieran mucho tiempo. Mientras son observados con detenimiento y dada la distracción el Tamer casi no logrará esquivar a tiempo uno de los tablones semi caídos a la altura de su rostro, es así como ante sus ojos aparecerá claramente la imagen del actual sheriff del lugar... Tras alejarse lo suficiente como para ver con mas claridad podrá comprobar que se trata de un cartel "Wanted" con una recompensa incluida en la parte baja del mismo... Al parecer antes del duelo del día actual, el Deputimon no era mas que un bandido del lugar, así pues, todo parece indicar que el y sus socios se han hecho con el poblado a golpe de pistola, sin ningún poder real de la ley que le ampare, mas allá de la estrella de sheriff que ahora porta en el pecho, y con la cual domina a los Kokuwamon.

- No siempre fue así... - La voz sale de detrás de la valla de madera... En caso de saltarla o bordearla para ver quien ha emitido esas palabras, el joven podrá ver lo que parece ser un Digimon sin identificar, cubierto por un tupido manto marrón y bebiendo de una botella de cerámica.

El Digimon encapuchado, ahora sumergido de nuevo en la sencilla tarea de beber a morro de su botijo, eleva nuevamente la mirada cuando el humano se dirige hacia el, al tiempo que una risa de alcohólico sale de entre las sombras de su capucha - Antes teníamos como sheriff a un Balistamon, era fuerte y justo... Pero entonces llegó la banda de Deputimon - Suspira con cierto aire de resignación mientras pone su botijo cabeza abajo, del cual no cae gota alguna - Maldita sea, siempre se acaba en el mejor momento... ¡En cualquier caso! Como decía, ellos llegaron, comenzando a sembrar el caos, pero nuestro Sheriff junto al equipo de Kokuwamon conseguía evitar la mayoría de sus fechorías, si bien muchos salían heridos. Así que Balistamon decidió retarle a un duelo de honor, y para eso contaría entre las sombras con su mejor camarada... El duelo fue hoy, y acabo de enterarme de que finalmente Balistamon ha muerto tras un rato sufriendo. Estoy seguro de que Deputymon ha hecho trampas de alguna manera, lo que no se es por que el aliado de Balistamon no ha aparecido... Supongo que ellos lo tendrán, a fin de cuentas, no puedes mentir a un mentiroso. Y ahora, los Kokuwamon como siempre siguen al que lleva la placa.

El Digimon lanza el botijo a lo lejos, y con un rápido movimiento de su mano lo hace estallar en pedazos - Así que supongo que todo está perdido, no se puede vencer a Deputimon en la situación actual... Si quieres saber mas ves a la taberna del pueblo, a mi déjame en paz, quiero dormir... - Y dicho y hecho, en menos de tres segundos una visible pompa se infla y des-infla pausadamente desde el interior de la capucha, acompañada de unos sonoros ronquidos.

OFF: Disculpa la demora, no volverá a repetirse, han sido unos días muy complicados y, sinceramente, me olvide de la caza. Ahora estoy vigilando las respuestas, así que me avisarán al móvil cada vez que haya una contestación.

...

Cuando ya nadie puede verle, la figura durmiente se levanta, alejando un juguete con forma de pompa de su rostro "Espero que sea suficiente" sin que nadie le vea, la silueta desaparece... Por el momento.

Tras caminar de vuelta sobre sus pasos, el joven humano acompañado por su digimon desde dentro del dispositivo en su cintura termina llegando a la misma taberna que anteriormente había dejado atrás. Todo permanece igual, a excepción de un Digimon que, apoyado sobre el marco de las puertas exteriores, se encuentra abrazando un banjo sin cuerda alguna. Cuando el humano se acerca, su apariencia queda al descubierto.


Starmon eleva la mirada y sus ojos se achican mientras mira al recién llegado - Adelante, aunque no lo parezca por el silencio, estamos abiertos al público - Con un gesto de mano indica al humano que puede pasar, tras lo cual, se mantiene quieto, acariciando el instrumento musical que, actualmente, parece no poder emitir sonido alguno.

OFF: Deberías implicarte mas en la cacería, buscar pruebas, métodos o intentar algo, a parte del momento en que te he "golpeado" con la trama, no has puesto ningún punto de iniciativa. No progresarás si no investigas o tratas de implicarte, ya se te han dado algo mas que las piezas necesarias.
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Al entrar en la taberna todo parece tranquilo y normal... Un Starmon mas con aspecto de ser el barman se encuentra tras la barra, limpiando un vaso mientras se mantiene mirando a la nada... No es hasta que te sientas que este parece fijar su atención en ti, mas se mantiene en su posicióncon su eterno limpiar.

De observar alrededor, la taberna parece estar completamente vacía, a excepción de un par de Tentomons, quienes parecen estar jugando a los dardos mediante el uso de su electricidad estática para levantar los daros y dispararlos con rapidez hacia la diana; igualmente y pese a parecer una actividad mas entretenida, ninguno de los dos celebra demasiado enérgicamente sus disparos en caso de ser certeros, casi mas preocupados en mirar a su alrededor cada cierto tiempo con miedo.

- ¿Hay chico eres mudo? - El Starmon que inicialmente se encontraba en el exterior esperando parece haber vuelto a entrar, y se ha colocado al lado del muchacho casi en completo silencio - Supongo que un forastero siempre es y será un forastero, por mas variopinto que resulte... ¿Quieres tomar algo? ¿Buscas algo en particular? Por aqui solemos acercarnos a la barra para pedir lo que sea, permite que se te oiga a través de ruid... - Y entonces se queda en silencio, mirando a su alrededor con desgana - Bueno... Supongo que no hay ruido alguno que inste a alzar la voz para poder ser escuchado.

Mientras el humano realiza sus preguntas pertintentes, la mano de Starmon tiembla un instante, se muestra alterado, pero tras respirar por un segundo con los ojos cerrados, parece volver a la normalidad - Es seguro que lo tengan los acompañantes del nuevo Sheriff - Eleva el vaso que tiene el humano en la mesa y sopla para retirarle el polvo, haciendo lo mismo con el plato y cubiertos que hay al lado del mismo con gran agilidad, casi pareciendo que manejara dos pistolas en lugar de la cubertería - ¿Vas a pedir algo de la carta o solo buscas problemas? No es que me importe, pero desde que el lider de los Starmons desapareció y comenzó la guerra de Sheriffs, no es que nos interese demasiado en meternos por en medio... Así que si estás buscando al ayudante y los problemas que traiga consigo... yo diría que o lo tienen en las minas abandonadas a las afueras del norte del pueblo, o en el propio ayuntamiento, que a fin de cuentas ahora les pertenece. Desconozco que te llama a meterte en medio, pero no nos causéis problemas - Y se mantiene esperando apoyado en la mesa por si desearas pedir algo - Tenemos carne y pescado, no preguntes de que tipo por que dudo que ni el cocinero lo sepa, pero está buena... ¿Tienes bits para pagarla? Por que si no ya si que tendré que pedirte que te largues y no vuelvas. esto es un negocio a fin de cuentas.

Tras caminar por unos minutos hacia la misma dirección en la cual había visto por primera vez al Digimon que le inició en la información del lugar, un cartel polvoriento indica al humano que se encuentra yendo en dirección al sur-este de la ciudad. Gracias a ello es capaz de retomar su camino en dirección correcta, esta vez hacia el norte, por unas calles que aún no había transitado; Callejones estrechos y oscuros llenos de pintadas y basura son lo único que las conforma, de prestar atención a las pintadas comprobará que muchas de ellas presentan escenas en las cuales Deputymon es golpeado por dos sombras, una parecida a un cañón, la otra, de aspecto indefinido, ataca desde las alturas... Pero la que mas llama la atención, es la silueta de lo que parece un Starmon con detalles distintos, caminando hacia ninguna parte, como si se hubiera marchado.

...

Tras varios minutos mas caminando, el elegido llega hasta la salida norte del pueblo, donde no es difícil vislumbrar una señal que le indica la próxima entrada a las minas del lugar, a menos de un Kilómetro a través de un sencillo camino de tierra... La entrada puede verse a lo lejos.

Una vez ante la mina, esta se descubre como la entrada de un túnel aparentemente abandonada de aproximadamente cuatro metros de ancho y alto, parece perfectamente pulido, como si se hubiera utilizado algún tipo de tuneladora para su creación, y huellas en el suelo indican que han habido visitantes recientes, si bien estos se han encaminado hacia el interior del mismo. Parecen ser de hace unos minutos, al estar prácticamente desaparecidas por el viento en forma de ligera tempestad que rodea el lugar, elevando polvo y tierra por igual en los alrededores.

A los pocos segundos y de prestar atención, un tenue sonido puede escucharse salir desde las profundidades, parecen voces arrastrando algo, mas con el viento ululando es difícil asegurar que se trate de las mismas al ciento por ciento. Lo que está claro es que las vías de carretilla, situadas en el centro del túnel, parecen estar vibrando ante el uso de la misma.

OFF:

Al ser una zona aparentemente recién alterada, la misma no sale correctamente definida en el Xros Loader del joven, siendo mas una acumulación de pasillos borrosos que cambian de localización ante las interferencias generadas por el suelo y muros de piedra, si bien el radar parece funcionar a la perfección, mostrando cuatro puntos en las cercanías, el primero se encuentra justo en la posición actual del tamer, los otros tres parecen estar aproximándose hacia su posición, aproximadamente en dirección al gran túnel que tiene ante si.

Así pues resulta bastante evidente que los anteriormente escuchados ruidos, ahora algo mas definidos, son las voces de uno o mas integrantes de dicho grupo, que inicialmente y dado que el joven se encontraba en el DigiQuartz solo podían tratarse de Digimons... O esa era la explicación mas razonable. A´si mismo, el chirrido metálico crece en intensidad, tornándose como un claro tronar de ruedas metálicas sobre el carril que se ve nada mas entrar.

Al ritmo en que se aproximan los tres puntos, llegarán a su posición en aproximadamente quince segundos. A su alrededor hay lugares en los cuales ocultarse, como resultan ser una vagoneta abandonada, varias rocas de gran tamaño, una señal de peligro que se mece con el viento o los propios muros rocosos que rodean la entrada. Si bien no tiene por que ser preciso ocultarse.

Mientras paso tras paso el humano camina en busca de algún lugar en el cual ocultarse, los tres puntos de la lejanía continúan su vertiginoso avance, al tiempo que el cuarto punto mantiene su posición siempre "paralela" al radar... El vagón es perfectamente utilizable para ocultarse, en cuanto entre en su interior y logra acomodarse, un claro rechinar metálico se hace a cada instante mas fuerte, hasta detenerse prácticamente al lado de su escondite.

- ¿Y entonces que se supone que tenemos que hacer ahora con el? Ya hemos eliminado a Balistamon. no entiendo por que tiene que cargárselo el jefe en persona ¡A nosotros también nos ha jodido!

Un suspiro ajeno a la voz inicial resuena, pero no emite palabra alguna, pareciendo estar sencillamente resignado. Poco después se puede escuchar como ambos descargan algo del vagón en el cual han llegado, algo con partes metálicas.

- A todo esto... ¿Por que vibra la tierra? ¿Ya viene uno de esos bichos molestos?

- Creo que tenemos un topo

Y mientras ambos Digimons, comienzan a reírse, lo cierto es que la gravilla de dentro del escondite improvisado también empieza a vibrar levemente. De asomarse mientras ríen, el humano podrá ver a dos Deputymons riéndose por el mal chiste, con lo que parece un MailBirdramon atado e inconsciente entre ellos.

Atento en la situación que tenía frente a sus ojos, el joven humano no logra discernir la amenaza que asoma en las palabras de los "trabajadores", la tierra vibra con mas fuerza, y cuando ya es demasiado tarde para reaccionar de manera alguna, el cuarto punto rojo, aquel que estaba siguiendo su silueta en el mapa, estalla, al tiempo que la vagoneta en la que el humano se halla es lanzada a unos metros de distancia, para sorpresa del humano y doble sorpresa de los Digimons, por lo ocurrido y por la silueta descubierta del intruso en la vagoneta que vuela.

Aterrizar no debería suponer problema alguno, pero los Deputymon ya están preparados, mientras la fuerza desconocida "grita" con furia al tiempo que un enorme taladro gira en el frente de su hocico.


De apuntarle con la terminal o el dispositivo el digimon será identificado como un Nise Drimogemon, una subespecie poco común de Drimogemon, quien parece algo sorprendido de ver al humano y los Deputymon pese a haber salido de debajo del primero.

- ¿¡Ahora también necesitáis ayuda de humanos malditos cobardes!? Da igual, ¡Os enfrentaré a todos! - Y todos los presentes se preparan para combatir, si bien los Deputymon no parecen estar del todo seguros sobre quienes son sus enemigos.

Todo ocurre con demasiada rapidez, pero cruel obviedad. Mientras Greymon se echa sobre su objetivo los Deputymon, viéndose liberados de un problema de manera gratuita comienzan a reír, sospechan que el humano y el Digimon puedan ser aliados suyos debido a esa acción, mas como buenos carceleros que son no han quitado la vista de encima de su presa y cuando descubren al humano tratando de acercarse a la misma, presumiblemente para liberarle, uno de ellos comprende con rapidez que lo que están observando no es mas que un catastrófico malentendido llevado sin inteligencia de dos grandes posibles aliados, y con un rápido movimiento, demasiado impredecible para un simple humano sin cualidades especiales, el Deputymon más cercano golpea al Tamer en la base del cuello con una de sus manos.

A partir de ese instante la batalla continúa de manera desconocida para el insconciente humano, mas la realidad es que su Greymon se enfrenta solo contra un Digimon campeón y que tras ganar, si es que puede, otros dos de nivel similar esperan para atacarle en equipo…

…

Cuando el Tamer vuelve a abrir los ojos, a su alrededor ya no hay mina alguna, solo paredes grises y, tras lograr enfocar sus agotadas pupilas correctamente, barrotes en donde deberían de hallarse las ventanas y la salida de esos cuatro muros. A su lado, solo hay una cama, un aseo poco equipado y alejando la mirada hacia una de las esquinas un misterioso compañero.

- Deberías haberle explicado al topo que no eras aliado de los Deputymon… - La voz metalizada parece agotada, pero su silueta oscura no logra discernirse correctamente debido a la oscuridad que recubre la sala – Habríais podido luchar juntos contra ambos y así liberarme, pero no… ¿En que mente se discierne como una opción correcta atacar a quien se auto declara como enemigo acérrimo de tus enemigos en su entrada? El orgullo humano resulta demasiado incomprensible…

Ahora, con los ojos acostumbrados a la oscuridad y las declaraciones del mismo, el acompañante se descubre como el Mailbirdramon apresado.

- Tu compañero y Drimogemon están fuera… Son demasiado grandes como para ponerlos en una celda, pero descuida, estarán encadenados, así que tenemos tiempo ¿Quién eres y por que querías ayudarme?

OFF:

OFF:

El Digimon parpadea dudando de las palabvras del humano ¿Puede confiar en el? Parece mantener su expresión durante unos minutos, pero al final la resignación se apodera de su rostro mientras suspira pesadamente ¿es que acaso le queda ora opción?

- De acuerdo... Se como funcionan esas cosas, por aquí muchos lo sabemos. No me importa si al final tengo que irme contigo, pero si quieres mi verdadera lealtad, tendrás que ayudarme a solucionar esto... Solo si quieres la de verdad, claro.

Ni si quiera espera respuesta, se revuelve de sus cadenas logrando acercarse lo suficiente como para tocar el dispositivo con el morro, desapareciendo tras ello en su interior... Al momento, un proceso de carga aparece en la pantalla del mismo, indicando que la curación se está llevando a cabo. Unos minutos mas tarde la curación concluye, y el Digimon está listo para ser retirado , libre además de cadenas.

Una vez fuera del Xros y cuando el Digimon comprueba que su estado es perfecto, su rostro se torna serio, retomando las anteriores palabras proferidas -  Hablar es fácil, generalmente demasiado y las palabras se las lleva el viento. Veamos que dicen de ti tus acciones, cual es la verdad tras ellas - No dice nada mas, y la expresión seria de hace unos instantes se torna con rapidez en una sonrisa valiente, antes de disparar varios misiles contra el muro a espaldas del humano - En las prisiones siempre es mas fácil salir a través de los muros que de los barrotes - Para cuando el humo se disipa, una alarma de fuga resuena con fuerza, pero el exterior ya se ve ante los dos antiguos prisioneros, y justo allí, a relativamente pocos metros se encuentra greymon encadenado contra el suelo, su excesivo tamaño ha impedido hacerlo entrar en ninguna celda, razón por la cual está apresado al aire libre.

Unos segundos mas tarde, varios Deputymon comienzan a verse en la distancia, quizás demasiados, cuando pasan unos segundos mas, resulta evidente que si son demasiados, la victoria es imposible en esas condiciones.

OFF: