Aviso Misterioso, ¡Problemas en el Valle de los Dragones!

Esta era una semana especial. El señor Motomiya por fin había conseguido unos días libres en la empresa, gracias a Dios, ya que él y su esposa celebraban 20 preciosos años de matrimonio.

Los padres de Davis decidieron viajar a Europa para celebrarlo, lo cual supondría dejar la casa a sus hijos, Jun y Davis Motomiya. Tras mil y una advertencias a los niños, se marcharon y la casa quedo en completo silencio.

Ya han pasado tres días y la convivencia entre Jun y Davis, como de costumbre, era imposible. El chico era demasiado vago y distraido. Jun, por otro lado, era una alocada adolescente con las hormonas revolucionadas.

- ¡DAVIS, DIJISTE QUE ME CONSEGUIRÍAS EL NÚMERO DE TELÉFONO DE YAMATO! - dijo Jun irrumpiendo en la habitación, en la cual Davis y Veemon se encontraban jugando a la videoconsola - ¡ME PASO TODO EL DIA LIMPIANDO LA CASA Y PARA UN MÍSERO FAVOR QUE TE PIDO........!

Davis se levantó de un salto, soltando el mando de la videoconsola y haciendo que cayese sobre la cabeza de su Digimon.

- ¡¿PERO QUE DICES DE LIMPIAR, SI LA DUCHA ESTÁ LLENA DE PELOS DE..... - no pudo acabar la frase, Jun le cruzó la cara dejando su mano marcada en la mejilla izquierda de Davis.

Cuando salió del cuarto el chico se tiró en la cama y comenzó a patalear y a quejarse de todo. Veemon se puso en pie.

- Davis, deberías hacer caso a tu hermana, mientras tus padres esten fuera ella es la mayor - Davis resopló con desánimo, hoy todo el mundo estaba en su contra.

Se levantó y fue a la cocina, tanto discutir le había despertado el apetito, asi que comenzó a prepararse un buen tazón de fideos japoneses. Cuando parecían estar listos, el chico cogió un par de palillos y se metió la primera "cucharada" en la boca.

- ¡Davis, Davis, el Digivice está mandando una señal de socorro! - Veemon parecía más nervioso que de costumbre - ¡La señal viene del Valle de los Dragones, algo realmente malo está pasando!

El chico, aun con los fideos metidos en la boca, comenzó a correr hacia su habitación - ¡Mierda, ni siquiera voy a poder acabarme mi ramen!

Se puso las botas, los guantes, su ropa de siempre y, por último, las goggles del Capitan Tai. Agarró su D3 y señaló con este a la pantalla de su computadora.

- ¡¡PUERTA DIGITAL ABIERTA!! - un halo de luz inundó toda la habitación y Davis y Veemon se adentraron, una vez más, en el mundo digital.

La puerta de la habitación se abrió.

- ¡OTRA VEZ SE HA IDO SIN DARME EL NUMERO DE YAMATO, DAVIIIIIIIIIIIIIIIIS!! - Jun Motomiya ni siquiera se percató de la puerta aun abierta en la pantalla del ordenador.



El lugar estaba completamente desierto, no había ni un solo digimon por la zona. Davis y Veemon comenzaron a caminar, tratando de localizar el origen de la llamada, pero al ver que tras pasar varios minutos no conseguían dar con el foco del problema, Davis comenzó a desesperarse.

- ¡A lo mejor ese trasto está roto! - dejo señalando a su Digivice - ¡Aqui no hay nadie, solo estamos tu y yo Veemon!.

Veemon se paró derrepente - ¿No quiere decir eso que algo realmente malo está pasando? ¿Donde están todos los digimons de la zona? Es como si hubieran escapado.

- Hombre... visto así si que parece bastante sospech AAAAAGH - el grito de Davis alarmó a Veemon, el cual se puso en guardia frente a su compañero.

- ¡¿QUE OCURRE DAVIS!? - Veemon miró al chico y apretó los puños.
- ¡Acabo de recordar que había quedado con Kari para ir a jugar a los.... - un golpe de Veemon en la cabeza de Davis hizo que el chico no acabase la frase.

- ¡No es momento para estar pensando en eso!..... Ehm...¿También iba Gatomon? - durante un momento Veemon pareció ruborizarse un poco. Entonces el suelo comenzó a temblar muy violentamente.

De detrás de las montañas, 4 enormes figuras se aproximaban a un ritmo de vértigo a la posición de Davis. Por su paso iban destruyéndolo todo, como si tan solo quisiesen y disfrutasen causando caos.

El chico agarró su D3 y señaló a Veemon - ¡Mierda, son cuatro Skullgreymon y están completamente desatados! ¡¿Donde demonios está Ken! - no podia ocultar su nerviosismo, podía enfrentarse a un digimon de nivel Ultimate sin problema, pero cuatro ya era otra historia.

Veemon comenzó a digievolucionar a Ex-Veemon. Al acabar la transformación, el enorme Digimon se puso entre Davis y los 4 Skullgreymons. Un digimon Campeón contra cuatro de cuerpo Perfecto....

- ¡¡EX-VEEMON, PUEDES HACERLO, ÁNIMO!! - Trató de animar a su compañero aun sabiendo la clara desventaja en la que se encontraba. Sacó su Digivice y trató de contactar con Ken y los demás, pero ninguno parecía responder, probablemente estuvieran ocupados.

Estaban solos él y Veemon.

Aceptado, demostraste tener buen nivel de rol, etc. Solo te aviso, puedes usar a Magnamon si quieres xD