Un resplandor Dorado

Un Mail había sido enviado a una página web de parte de uno de los guardianes para pedir ayuda, las cosas se habías salido de control y el guardián de la zona había perdido su poder, por lo cual no podía proteger la zona y una gran concentración de energía oscura se comenzó a reunir en el lugar, nubes grises comenzaron a cubrir la zona de la montaña chatarra, no se podía apreciar a ningún digimon en el área, solo se podía ver mucha basura.

Un Mail llego a una de las tantas paginas de ayuda que visito. en este caso se trataba de un asunto de los Guardianes, que si bien tienen un gran poder no están exentos de problemas.

¿no crees que esto es raro? - Agumon parecía algo asustado. - No hay ningún Digimon por los alrededores.

de seguro la zona fue evacuada para que no hubieran accidentados. - la verdad decía esto solo para tranquilizar a Agumon, ya que pensaba igual que él.

después de caminar por el área y sin encontrar ningún alma viva decidí quedarme a la espera del Guardián en la base de la montaña. un lugar no tan lleno de basura, que por lo tanto era el mejor sitio del lugar.

Recibí un mensaje de mi Pc; un Guardián nos pedía ayuda desesperadamente si un guardián no pudo contra dicha amenaza… Es un oponente con una sobresaliente fuerza que no será fácil vencer… Respiro hondo y decido acudir esa ayuda de tal guardián.  

-No vamos a ignorar una ayuda… Gaomon, vamos.-Ordeno a mi compañero seriamente dándome media vuelta alzando mi Digivice 01 de Gaomon, ya que la de Agumon está guardado, ese Digivice no me será útil al menos que lo encuentre algún día.- Evoluciona.-Y un resplandor salió de mi Digivice evolucionándolo.

-Grrr… Pesado… ¡Gaomon, evoluciona en… Gaogamon!-Evolucionando a una especie de si mismo más crecido y más feroz, di un ligero salto montándome en su lomo agarrando ligeramente su pelaje sujetándome para no caerme, vi a mi compañero olfatear el aire y detecto un poder inmenso, mucha oscuridad.-Huele a peligro… Basura… en esa dirección, ¡Es por aquí!-Y corrió velozmente al poco rato llegamos a lo que parecía mil kilos de basura por doquier, examine el sitio y vi el cielo.

-Esa oscuridad no tardara mucho en invadir este sitio, hay que buscar ese guardián o sobreviviente de aquí y que nos dé más información de lo que ocurre ¡Vamos!-Sugerí y mi digimon recorría todo el sitio en busca de ese guardián anónimo.

Off: Ustedes sabiendo que es un guardián y acá yo con el conocimiento de un chico de 10 años.

 On: - Creo que estamos perdidos... - la voz del muchacho de ojos azules era lo único que podía escucharse en aquel lugar lleno de chatarra y desperdicios. De alguna forma habían llegado al lugar que posiblemente sería el basurero de la isla o eso era lo que parecía, los objetos eran presa de la oxidación y parecía que al tocarlos sus datos saldrían volando esparciéndose por el éter y haciendo ese ruido suave  como si uno les estuviese quitando el alma. Sin embargo al posar su suave mano sobre la superficie oxidada de lo que parecía ser un monitor al cual el tiempo había hecho estragos, no ocurrió nada, los datos no se esparcieron por el aire, no hubo aquel sonido, aquel monitor quedó igual de lo que estaba - ¿Qué haces? - le preguntó el Garurumon que se encontraba tratando de analizar el lugar pero no podía debido a los distintos olores a residuos. El muchacho de la capucha sonrió un poco al voltear la vista hacia su compañero, volviendo a la realidad en vez de a su fantasía donde los datos se esparcían en el aire rodeándolo con el olor a oxidación y muerte - Rezar por los transformers caídos, o serán decepticons? que crees, Garuru? - el muchacho de tez clara habló todo esto con un tono infantil y manteniendo una sonrisa, algo muy normal en él. Mientras tanto su digimon acompañante caminaba hacia delante ya dejando de oler, como si no pudiese sentir nada.

 - El olor a basura me bloquea la capacidad de oler posibles enemigos - un cierto tono de preocupación podía percibirse en el lobo el cual creía que aquel lugar podría ser el centro de alguna emboscada, a decir verdad estaba muy calmado, quizás demasiado. Sin embargo el D-Cyber caminó hacia su digimon y colocó una mano en la cabeza de este, acariciándole esta y luego el lomo - El espíritu de los transformers nos salvará, alma de Optimus Prime, yo te invoco!! - no ocurrió nada, posiblemente nadie en el mundo podría saber que estaba pensando Alec en ese momento pero sus idioteces tranquilizaban a su digimon. Terminó de hablar y miró hacia todos lados, poniendo un rostro triste al ver que no había dado frutos su intento de magia de invocación. Luego de eso le tocó con el dedo índice la oreja a su digimon - Los espíritus no pueden verse, pero si oírse - debajo de la actitud infantil del D-Cyber se hallaba literalmente un genio, en esa frase le dio la respuesta a su digimon sobre que hacer con respecto a su olfato. No solo ese era el elemento que tenía a su favor, al estar todo muy calmado podría detectar cualquier ruido prácticamente por lo cual sería capaz de percibir hasta el más mínimo movimiento. El lobo no entendió esto al principio, siguió caminando unos pasos y sus fauces se deformaron en una pequeña sonrisa que se borró tan rápidamente como apareció. Alec comenzó a seguir a su digimon, sin saber muy bien a donde ir ni que hacer, pero esperando encontrarse con alguien para preguntarle algo sobre el lugar y aprender más del digimundo.

 Off: Si, invocó a Optimus Prime, por qué Alec es Alec y puede invocar a los transformers.

Había recibido un mail a mi D-Terminal. Según el mensaje, algo había extraño le había sucedido a uno de los Guardianes, como si hubiese perdido sus poderes. A su vez, una fuerza oscura de origen desconocido había aparecido en aquella zona. Tal vez tuviesen relación dichos eventos, pero no sabía que conexión tenían. A través del portal que Dansher tenía en su sótano pude acceder al límite de dicho lugar del Digimundo: La Montaña Chatarra. Mi Digivice nos podría proteger de aquella oscuridad, aunque no sabría calcular cuanto tiempo.

-Debemos andar con cuidado.- le dije a Dorumon que se encontraba a mi lado, teniendo Digivice en mano mirando las nubes grises que presagiaban que algo terrible iba a suceder aquí...

*Kio había salido de compras mientras en la habitación Agumon miraba el computador leyendo aquel correo que había llegado-¡esto es malo!-dijo Agumon colocando una de sus garras en la orilla de su boca, mientras tanto Kio caminaba directo a la casa-me pregunto que estará pasando en el digimundo…-dijo el peliblanco, llego a la casa y entro, dejo las compras en la mesa empezando a ordenar cada producto en su lugar Agumon bajo rápidamente a ver a Kio-¡apresúrate Kio es una emergencia!-el joven de cabellos blancos lo mira sorprendido-¿¡una emergencia!?...¡Agumon recuerda que mis padres no te pueden ver!- Agumon subió a la pieza, la madre de Kio fue a la cocina-Kio escuche una voz muy extraña- Kio miraba hacia todas partes pensando que decir-eh…estaba practicando las voces que puedo hacer hehe-dijo riendo un poco nervioso-mmm esta bien, no sabia que podias cambiar la voz de esa manera- dijo la mama de Kio-¿si soy muy bueno, no? ¡Estare en mi pieza!-dijo mientras corria a la pieza y entraba, Agumon lo miro apuntando a la pantalla del computador, el peliblanco se sento en la silla y miro el mail-energia oscura…¡vamos Agumon!-el dinosaurio anaranjado asintió mientras Kio habría una ventana del computador, en esa ventana estaba el señor gennai mirando las plantas-¡señor Gennai!-el señor Gennai se voltio a ver la pantalla- ¡hola jovencito!-dijo el viejo Gennai levantando su mano derecha en forma de saludo-señor Gennai puede abrir un portal en la Montaña chatarra, un guardián de ese lugar envió un email y necesita ayuda, además una energía oscura se concentra en ese lugar-esta bien Kio, cuídate mucho…y ¿has visto esas revistas de esas mujeres con poca ropa?-Kio frunció el ceño-¡Gennai abre el portal!- Gennai se sorprende un poco y rie-hehe pillin asi que las ves…- el joven de cabellos blancos levanta el puño-¡seras!-un portal se abre en la computadora de el peliblanco, entro junto con Agumon a la pantalla del computador, abriéndose un portal en la Montaña chatarra, el joven de cabellos blancos y el dinosaurio anaranjado se encontraban en el lugar.*

Caminando por el Pueblo Industrial luego de una vaga búsqueda de almas que robar, pues, como no tenía realmente ganas de hacerlo, me acerco a una pantalla que empieza a brillar ubicada en un gran muro de hierro de alguna industria. Al parecer el poblado de aquel lugar vivía una vida tan ajetreada que esas cosas no parecían importarles, así que yo fui el único que logró leer el mensaje.

Luego de leer el mensaje mi mente se llena de una cierta avaricia, pues sabía que los guardianes eran ciertamente recíprocos, aunque no me cayesen tan bien. Al analizarlo bien pensé que eso lo habría visto otros en el pueblo, y quizás también en otros pueblo, y, como comunmente se hace según las leyendas, en el mundo humano.

Había muchas posibilidades de acabar con lo que fuese que estuviese ahí, así que me animé a ir, agregandole el aditivo de que era un lugar muy cercano a el Pueblo Industrial.

Empiezo a volar al lugar, pensando, por si las moscas, que hacer para escapar en un momento aciago, y más cuando veo la magnitud del aura oscura que está en la montaña.

No me sorprendió la cantidad de basura. Por algo le dicen Montaña Chatarra (jujuju)

Una señal aparece en los digivices de todos los chicos el cual marca un punto de encuentro a la entrada de una cueva bajo una montaña de chatarra.

ya habia transcurrido un buen periodo de tiempo, por lo que me empece a desesperar. - ¿que sucederá? ¿acaso el Guardián definitivamente fue derrotado? - ya harto de esperar me puse a jugar con mi Digivice, cuando de pronto un mensaje llego solicitándome que fuera a una cueva bajo la montaña - menos mal que no subimos hasta la cima, hubiera sido un viaje en vano.

la cueva estaba construida entre los desperdicios, si bien destacaba, fácilmente podría ser confunda con un túnel de Digmon.

Aferrado en las ‘‘Bandas’’ De GaoGaomon saltando de por ahí y al otro lado encima de los desperdicio acumulados de este lugar no veíamos ningún sobrevivientes a quien ayudar y conseguir información, solo cosas inútiles y desgastados por doquier. Sin detenernos una vibración se sentía en mi brazo y provenía del Digivice 01, es un mensaje ¿Eso significa que el guardián nos comunicaba? Nos indicaba ir a la cueva de una montaña de chatarra.

-GaoGaomon dirigete a una cueva en una montaña repleta de chatarras, rápido.-Ordene aferrándome, Gaogaomon no me dijo nada pero aumento su velocidad a uno as grande y me esforzaba a no soltadme.

Al llegar GaoGaomon se escondió sigilosamente detrás de unos escombros de basura, al asomarme un poco pudimos ver una silueta de un chico y un…. Agumon…. Recordé a mi compañero y me puse triste por un momento, agitando mi cabeza dejando ese tema de lado y ya viendo como adentraban.- Deprisa, puede ser un aliado.-Sigilosamente entramos en esa cueva hecha de basura.

- Oh... por... dios... el alma de Optimus Prime nos manda un mensaje... - un ruido, una especie de bip constante, surgió del bolsillo del muchacho de ojos azules el cual lo interpretaba como una comunicación del fantasma en vez de el mapa que realmente era. Garurumon observó a su maestro de una manera bastante calmada, sabía que solo se encontraba bromeando con lo del transformer y que realmente era un mapa o una comunicación de su digivice. Dicha comunicación sería pronto descubierta por parte del humano el cual, luego de palpar un poco el bolsillo del cual salía el sonido, sacó de este el digivice y se puso a observarlo fijamente. Una proyección apareció en el momento en el cual apretó un botón en la parte superior derecha del digivice haciendo que de ese modo se genere dicho mapa o radar. Un punto brillaba entre una montaña plagada de sueños rotos, en la base de esta era donde dicho punto se encontraba, debido a esto apenas deberían de esperar tiempo para poder llegar. La distancia que debían de recorrer no era prácticamente nada por lo cual mantuvieron su caminata lenta.

 - Mmm... al parecer si era un mensaje... debemos ir lejos de aquí... varios miles de kilómetros y... - el digimon lo interrumpió - sabes que son solo 200 metros, no? - apuntó con una pata hacia delante - la montaña está ahí, juzgando por el mapa, no falta casi nada de distancia... - dicho esto,  el digimon volvió a caminar y el humano lo siguió de mala gana, no le gustaba cuando dejaban de hacer lo que él quería. Sus juegos eran siempre algo que le gustaba mantener lo cual contrarrestaba con la capacidad de su digimon de frenar cualquier situación entretenida - ¿Que más da?... solo vamos... - el rostro del muchacho se tornó triste y lúgubre por el momento y decidió mantenerlo así para causarle culpa a su digimon el cual parecía divertido por esto. A la distancia ambos pudieron escuchar unas voces, llegaron al lugar sin decir nada pudiendo observar a 2 digimons y 2 humanos, una vez allí miraron al lugar por más personas pero al no poder ver nada Alec procedió a presentarse - Ustedes también recibieron el mensaje de Optimus Prime? -

-Un pequeño digimon se esconde en la entrada de la cueva esperando a que todos se reunieran para salir a hablarles-

Estábamos adentrándonos en la zona cuando de repente sonó mi Digivice, como si nos dijera para donde ir. Sin mediar palabra, Dorumon evolucionó a Dorugamon y, subido a su lomo, nos fuimos literalmente volando volando hacia aquel sitio que mi dispositivo señalaba. Esperábamos encontrar más gente allí, puesto que parecía ser una situación de emergencia de alta prioridad. No nos dijimos nada durante el trayecto entre los montones de basura ni hicimos comentarios, todo debido a la seriedad que el caso conllevaba.

antes de entrar siquiera me encontré con dos chicos, los cuales poseían un GaoGaomon, un Garurumon. Uno de ellos nos hace una pregunta un tanto rara - ¿Optimus Prime? si crees que esto es un juego estas muy mal. Un Guardián perdió contra... lo que sea que produzca esta tormenta, eso quiere decir que fácilmente podemos morir en este lugar.- en la entrada de la cueva se encontraba un Digimon, si bien su tamaño no era considerable no baje la guardia.

en ese instante un tercer Joven llego volando en un Dorugamon. ¿acaso a todos los Tamer les gustaba exhibir el poder de sus digimon? siempre e creído que el factor sorpresa puede dar la ventaja en una batalla, y si muestran todo en el primer instante fácilmente su enemigo podría crear una estrategia contra eso.

- Emm... ¿Un guardián? ¿Qué es eso? y, la tormenta está por que Thor está enojado, eso lo saben todos - ignoró lo de morir, pensar en morir era algo que nunca se le había ocurrido al igual que tampoco había estado cerca de la muerte. Garurumon le gruñó a Alec como diciéndole que no dijese estupideces y que se comportase de una manera seria, la palabra "morir" lo ponía levemente nervioso y al mismo tiempo emocionado por aquella sangre de depredador que recorría sus datos. El muchacho le acarició el hocico a su digimon y se quitó la mochila de la espalda dejándola reposar en el suelo - Alec... - dijo su nombre con un tono furioso, casi obligándolo a portarse bien aunque el D-Cyber siguió igual que antes - Luego... - mantuvo el tono infantil y observó hacia dentro de la cueva. Allí había un pequeño digimon, digimon que el muchacho de la capucha se quedó observando fijamente. Abrió su mochila y abrió un paquete de malvaviscos sacando posteriormente uno de estos. 

 Se volvió a poner la mochila en la espalda y extendió el brazo que tenía el malvavisco - Ven chiquito, tienes hambre? - lentamente se fue acercando al pequeño digimon de la cueva, tratándolo como si fuese un animal del mundo humano. 

 Off: En mochila de Alec hay: 

1. 10 hongos explosivos de Mushromons
   
2. 15 Shurikens de 4 puntas en el bolsillo delantero
   
3. 2 chocolates, 1 blanco y 1 negro
   
4. 2 paquetes de malvaviscos de 10 malvaviscos c/u.
   

OFF: No hay orden en esto? ¿Cada cuanto puedo postear?

ON:

Luego de un largo trayecto no se me hace difícil encontrar el centro de concentración, pues todas esas almas de humanos y olores de digimon en un lugar así, para un digimon, son señal de donde están.

Con cierto recato, mientras me acerco, fuera de la vista de la gente, me hago invisible* y me aproximo a los humanos y sus digimon.

Cuando estoy ahí noto la conversación y aparezco de repente al lado de el pequeño digimon, pues así no asombraría mucho, o eso pienso yo.

Al momento de aparecer, con voz calmada, anuncio:

-Estoy con ustedes...-digo tranquilamente con mi hoz en una "mano" y la cadena en la otra, con una mirada fría que examina a cada uno de los integrantes del grupo-¿Que tenemos que hacer?

OFF: Esto va para Carlos: ¿Aquí nos vamos a conocer como en el rol o va a ser otra historia? Prefiero que nos conozcamos, pues así nos ayudaríamos mutuamente.

Vio delante de él el muchacho con su Agumon, Sam se calma, no parecía mala gente pero igual está atento ante cualquier movimiento de traición.

-Calma, somos aliados y que vino creo con el mismo propósito que vosotros dos, ayudar y salvar esta zona que está siendo invadido por la oscuridad ahora estamos buscando el guardián…-Con una sonrisa de confianza y cálida le respondió.

Se adentraron un poco y no tardaron en escuchar la voz de otro chico, uno que parecía mayor pero con una mente infantil escuchando las boberías que decía ¿Optimus Primes? ¿Esa no es la película de Trasnformer? ¿Piensa que todo esto es un juego?

-En primero, no estamos metido en la película de Transformer, segundo deja de pensar en cosas tontas y tercero tomate esto enserio que por algo fuiste elegido por un guardián.-Le regaña mirándolo seriamente.

GaoGaomon sacudo su cuerpo llamando la atención y miro adelante preparado… Es un digimon… ¿Sera el Guardián? Sam no le extraño para nada la presencia de un digimon de bajo nivel, si es el mismo guardián ya perdió todos sus poderes y por eso redujo su etapa más baja. El chico se baja de su compañero y se acerco lentamente al digimon, mientras que GaoGaomon observaba fríamente y desconfiado de los otros gruñendo en silencio.

-Confía en nosotros… No te haremos daño… Solo queremos ayudarte nada mas…-Le decía suavemente.

No se extraño la aparición de su amigo Johno, después de todo no serian los únicos invocados en ayudar esta zona aunque si se sorprendido con la aparición pero simula en no sorprenderse para no asustar al digimon y extendía la mano lentamente.

Nos acercamos al lugar indicado por nuestros Digivice, allí me pareció ver acercándose a varios digimons y humanos, cosa que ya me esperaba. De entre ellos me pareció reconocer a Alec Lightwood, aquel con quién no nos llevamos bien la otra vez por culpa de Koriastrazs. Espero que no nos guarde rencor ya que no soy ése sujeto al que él enfrentó. Dorugamon aterrizó, regresando a su forma Rookie después de que yo me haya bajado de su lomo. Luego nos acercámos al chico que poseía ropa blanca...

off: se ve que nadie leyó la parte en la que decía que el digimon estaba escondido -.-, como me hagan más meta roleo van a tener que pedir ayuda a Mashury.

on:- El digimon (un pequeño Numemon) se acerca hasta el grupo y comienza a hablar. -Por fin han llegado, un grupo de digimon malvados me han atacado y me han robado mis poderes condenándome a esta forma, necesito de su ayuda para recuperar mi resplandor y recuperar mi poder, los digimon que me atacaron me robaron mi poder y lo tiene en algún lugar de este laberinto de chatarra, ayúdenme a llegar hasta él y recuperar mi poder y les daré una recompensa dorada a cada uno- -Dice el digimon mientras señala la entrada de la cueva, la entrada no media más de 2 metros de alto y 5 de ancho, su tamaño y los materiales con la que estaba echa la hacían muy inestable-
off2: no hay orden fijo en el post debido a la gran cantidad de personas y la necesidad de que fluya rápido el tema (nunca pensé que fueran tantos).

según el Digimon el era el Guardián que nos llamo, pero no pensaba confiarme y caer en algún tipo de trampa. nos pidió que entráramos al laberinto en búsqueda de su poder, lo que me asusto. - Agumon, si entramos ahí no podrás evolucionar sin derrumbar el lugar...
si, tendremos que buscar la manera de hacer esto sin evolucionar.
no quería caer en una trampa por incauto, por lo que decidí bajar de de los últimos.

No sabía si confiar mucho en el Numemon, pues en el digimundo son seres detestables, pero decidí comportarme de una manera neutra y aceptar el compromiso.

El tunel y su inestabilidad no me impactaron. En cualquier momento podría atravesar todos los escombros (como un fantasma) y salir libre, si algún accidente sucede, así que me decido a entrar.

Cuando empiezo a entrar me percato de que la voz de un humano y su compañero se me hacen conocidas. Entonces volteo y me doy cuenta de que son Carlos y Agumon. Voy hacia ellos y me pongo a su nivel.

-No se preocupen, muchachos-digo amigablemente, algo no muy predecible para las personas que no me han conocido-Si sucede algo nos ayudaremos entre nosotros ¿Entendido?

Volteo y me decido a entrar de primero en la cueva, volviendome invisible para tener el factor sorpresa por si algo nos ataca.

Estaba llegando a donde estaba el D-Cyber, cuando me percaté de que un pequeño Numemon estaba en este lugar y se dirigía a todos los que en ese momento habíamos llegado a la entrada de la cueva. Entre los recién llegados estaban un Phantomon, un chico de pelo corto con su agumon seguramente y Alec con su Digimon.

El digimon, que por lo que entendí es el guardián, nos dijo que una banda de digimon malvados le habían arrebatado sus poderes y que pedía que lo ayudemos a recuperarlos. Al mirar lo diminuto de la cueva comenté: -Será un reto interesante el hecho de pelear sin evolucionar contra quién-sabe-qué.- Luego miré a Dorumon con entusiasmo.

-Pero aún no conocemos toda la gravedad del asunto, que ya de por si es terrible.-
puso lógica mi camarada Digimon.

El muchacho de la capucha con orejas observó como la gente terminaba de llegar, solo reconocía a uno de ellos a quien saludó dándole un abrazo de un momento a otro mientras tiraba hacia arriba el malvavisco que tenía en su mano derecha. - Johno, tanto tiempo!! Como anda la estocada en el pecho que te hice y que casi te mata? - preguntó con un tono infantil, no como si se burlase de él sino como si realmente le importase. Luego escuchó lo que aquel digimon dijo, debían de ir a un laberinto de chatarra en medio de una cueva lo cual iba a hacer bastante difícil ya que no podrían usar las habilidades de sus digimons de niveles altos. El ojiazul observó como un digimon quería adelantarse a lo cual puso una pequeña sonrisa mientras se paraba recto, agarraba y comía el malvavisco - No hagan idioteces - un tono serio salió de la boca del muchacho, algo muy raro pero que la situación lo ameritaba.

 - Tomen siempre el camino de la derecha, si hacen eso tarde o temprano se llegará al lugar donde está el objetivo ya que se recorrerá el laberinto completamente y para volver solo tomamos todos los caminos de la izquierda que sería lo que antes era nuestra derecha. - trató de explicarlo para que todos pudiesen entenderlo, le daba bastante igual ellos la verdad, lo que le importaba más eran los digimons que podían estar custodiando aquel "poder", por el tamaño no sabía que podían ser, por eso mismo preguntó - Dime, Numemon, que digimons te atacaron? - habló calmadamente, analizando la situación antes de decir nada, sacó de su bolsillo izquierdo el digivice-celular que tenía y su brazo derecho se cubrió de una esfera de energía de un color roja. Dicha esfera voló hacia su digimon el cual comenzó a brillar con aquel brillo característico de las digievoluciones.

 - Alec, por fin te pones serio, que te preocupa? - un hombre envuelto en llamas se encontraba en el lugar del lobo, este hombre tenía la boca cocida pero podía hablar de todos modos y tenía una voz más ronca que su forma de cazador. El Meramon se puso de cuclillas y extendió su mano derecha hacia el numemon para que este se subiese a él - Muchas cosas... podemos provocar un derrumbe fácilmente... Debo pensar como evitar eso... Si alguno de ustedes tiene una evolución con el tamaño suficiente para entrar aquí usenla, tengo un mal presentimiento de esto  - una vez el Numemon se subiese a él, si es que lo hacía, lo colocaría sobre su cabeza y comenzaría a andar hacia dentro de la cueva, tomando el camino hacia la derecha siempre.

-El Numemon se arrastra dejando un rastro viscoso por el cuerpo de Meramon el cual desaparece por el calor de su cuerpo- -No llegue a verlos, me atacaron por sorpresa, pero sé que usaban ataques de tipo desperdicio y también ataque con murciélagos- -Dice le digimon-

-Me suenan a que algunos Digimon son del Dark Area.- comenté al pensar en los ataques con murciélagos. -Tal vez Vamdemon o Ladydevimon.- agregué al caer esa conclusión. De pronto vi que Alec me abrazo, así que lo aparté con la mano. -Heriste mi cuerpo pero no era yo mismo.- le aclaré sin mirarlo a los ojos. Después le terminé diciendo mirándolo. -Hola.- Luego, mirando al guardián y calculando las posibilidades que tenemos y, considerando de que Alec y Phantomon son los únicos que poseían evoluciones pequeñas, concluí que ellos dos debían ir primeros. Nosotros estaríamos junto a ellos. El problema es que no podríamos pelear al mismo nivel por una cuestión de tamaños, así que se los dije. Dorumon iba a decir algo pero se calló.

- Listo, ya tengo suficientes datos, muchas gracias - Sacó un malvavisco de su mochila y lo clavó en una rama de por ahí, manteniendo una actitud más calmada, y se lo dio al numemon y luego siguió caminando con la cueva, caminando a velocidad moderadamente rápida tratando de terminar esto de una vez. Delante de Alec iría el Meramon con el guardián arriba, el digimon de fuego crearía una leve llama delante del numemon por si quería azar el malvavisco antes de comerlo. Sin embargo solo una parte pequeña de su cabeza se quemaría, el resto, aunque era de fuego, solo generaba un calor pequeño similar al del contacto humano. - Y Johno, no tengo ni la más mínima idea de a que te refieres con eso - dijo como manteniendo esa discusión en segundo plano.

justo cuando creí que iba a estar solo me encontré con Kor que también venia a Ayudar. - Genial, siempre es bueno tener un aliado cerca. - todos ya comenzaban tenían teorías de cuales eran los Digimon, por lo que me aventure a dar mis propias conclusiones. - de seguro el de los murciélagos es de la linea de Myotismon, y creo que el otro podría ser un KingSukamon... - ya todos comenzaban a adentrarse en el Laberinto y como dijimos Agumon y yo nos quedamos en la retaguardia.

-Tas avanzar un poco se encuentran con una bifurcación de 3 caminos uno que va al a derecha, otro a la izquierda y otro en linea recta-

Tal como había dicho antes, el D-Cyber con el Meramon caminaron hacia el camino de la derecha teniendo la intensión de tomar siempre el camino de ese lado para de ese modo recorrer todo el laberinto sin llegar a perderse ya que sabrían que camino habían tomado.

-Tras caminar un poco se encuentran con otra bifurcación, esta vez era un camino hacia la derecha y otro a la izquierda.-

Nos adentramos en la cueva, con Alec y su Meramon adelante tendríamos mejor visión de la situación. Además, con las bolas de fuego que el digimon puede lanzar, nos permitiría ver de lejos. Así que se lo comenté cuando llegamos a la división de la cueva. -Alec, ¿por qué no mejor tu camarada usa levemente sus ataques de fuego para iluminar los tres pasajes?- luego saqué mi Nanotool en en forma de cuchilla listo para marcar. -Cuando sepamos cual tomar, marcaré los pasillos tomados.- agregué, mientras "escribía" SALIDA con la cuchilla, bien grande las letras para que se notase y entendiese.

cada vez nos adentrábamos más en la cueva, por lo que todo se tornaba oscuro. como Kor estaba invisible no lo podía ver, pero me dijo que estaría adelante. después de algunos pasos llegamos a una elección entre tres caminos, y el chico Transformer tomo el camino de la derecha. - parece que quiere trata de ser el guía... - otro de los que iba delante decidió marcar el camino. - eso si me parece una buena idea. así sabremos bien por donde venimos, y si alguien tiene problemas de orientación no sufrirá por eso. - cuando nos adentramos en el Túnel de la derecha después de unos segundos nuevamente apareció otra bifurcación. - antes de seguir, Numemon ¿estamos por el camino correcto? ¿estas fueron las direcciones que tomaste? - no quería toparme con un callejón sin salida.

-No lo recuerdo, fui expulsado por un tubo al perder mi poder--Le responde Numemon a Carlos-

-¿Por un tubo?- pregunté confuso cuando terminé de marcar el último pasillo por el que habíamos pasado. Pensar en un tubo en una cueva era bastante llamativo. -¿Recuerdas algo más que puedas decirnos?- seguí preguntando para obtener mejor información. Luego dirigí la mirada hacia Alec y Meramon y en voz baja les dije: -Tengo un mal presentimiento sobre ésto.- haciendo referencia a que no aparecía ningún otro Digimon, como si esperasen que cayéramos en la emboscada.

-Tal vez nos están esperando.- dijo Dorumon pensativa...

- ¿Por qué siento que no me prestan atención? - comentó con voz calmada el muchacho de cabellos oscuros, ya les había indicado como hacer para no perderse por lo cual el intento de Johno de no perderse sería algo que estaría demás. No quiso volver a explicarse pero de todos modos lo hizo para dejar en claro como se debía de hacer para sobrevivir - Siempre el camino de la derecha, tarde o temprano volveremos al inicio. Ponen la mano en la pared derecha y siguen su mano, darán vuelta todo el lugar sin perderse. El escribir salida para volver no es necesario, basta con tomar el camino hacia la izquierda siempre para volver. - pensó un poco las cosas, podrían tardar mucho tiempo en hacer eso en vez de tener un camino previo programado de salida - Meramon, aumenta la temperatura de tus pies para dejar marcas de quemadura en el suelo, para la vuelta simplemente sigan a las marcas de quemadura que habrán en el suelo y listo - con eso se ahorrarían tiempo y no haría falta que marcasen en cada camino que era lo que habían hecho para ir. 

 Meramon siguió caminando con el Numemon en su cabeza, dándose cuenta que no tenía certeza alguna de que el digimon fuese el "guardián" del que hablaban y no alguien que quería atraparlos para evitar cualquier posible rescate al guardián real. Solo sabía que no iba a confiar en nadie del lugar y que esperaba que pudiesen encontrar a los digimons  y sacarles el poder de una vez para salir del laberinto. - Creo que hubiese sido más fácil levantar la montaña entera y listo... - por algún motivo no le gustaba tener la forma dada por el digimental del valor, quizás por que normalmente usaba a un digimon de hielo y el cambio era demasiado como para acostumbrarse fácilmente. Fuese cual fuese el caso Alec decidió ignorar esto y sacar un malvavisco de la bolsa la cual tenía en su mano izquierda.

-Tras caminar un poco mas se puede ver tachos de basura incrustados en el echo y las paredes y un tacho de basura en medio del camino-

al parecer el chico del Meramon por fin se había puesto serio. ¿comprendió el verdadero peligro que corremos? - ¿ya no llamas a tu "amigo"? bien, al parecer ya eres más lógico. - llegamos a un segmento del túnel donde había muchos botes de basura. - cuidado Agumon, si quieren tocarlos adelante ellos. pero no sabemos lo que tengan dentro.

- Buenas tardes, Gerbemons, lamento interrumpir, mi nombre es Alexander Gideon Lightwood y me gustaría saber si por casualidad han visto a un digimon de tamaño humano, posiblemente ultra, que tenía forma similar a un vampiro o algo similar - habló de una manera calmada, tratando de no parecer hostil pero manteniendo la distancia y sin comer el malvavisco que tenía en su mano derecha. Estiró esta hacia delante, sin siquiera saber si habían digimons dentro de los tachos tal como creía - ¿Alguno desea un malvavisco? - ofreció calmadamente, de aquel paquete quedaban 8 contando el que tenía en la mano por lo cual le quedarían bastante incluso si les daba el paquete a los garbagemons.

-Es el enemigo, ataquen--Los tachos de basura se abrieron y comenzaron a dispararles excremento con sus bazucas a los humanos y digimon desde las paredes y del techo-

¿esto realmente es un ataque? - dije escudándome detrás de Agumon. - ¿que harán? ¿dejarnos con mal olor durante todo el día?

no los provoques. puede que tengan otro ataque más poderoso... ¡Flama Bebé! - Agumon quemaba los ataques, lo que produjo un olor nauseabundo.

- Tsk, que molesto... y yo que quería ser bueno con ustedes... - comentó el muchacho de ojos azules mientras observaba como le disparaban pedazos de excremento. Soltó el malvavisco de su mano derecha mientras daba un paso hacia atrás, no necesitó ni esquivar los ataques ya que el malvavisco de un momento a otro aumentó de tamaño adquiriendo el suficiente como para tapar completamente la parte del laberinto que separaba a los elegidos y a los digimons. Los disparos chocaron contra este malvavisco y prácticamente rebotaron contra este, debido a la consistencia del mismo, al aumentar de tamaño pudo "trabarse" completamente dejando separados ambas partes apenas generando presión sobre las paredes del laberinto y de ese modo haciendo casi imposible un derrumbe. 

 Meramon tomó al guardián y lo dejó en el suelo, luego caminó hacia delante calmadamente - Gerbemons, última oportunidad, o paran con su ofensiva o me veré obligado a carbonizarlos - habló con una voz firme, no tenía intensión de atacar ya que de ese modo podría hacer peligrar la estructura en la cual se encontraban. Observó al malvavisco gigante, estando a 1 metro de este apuntó con su mano derecha mientras llamas comenzaban a salir del puño, preparando su ataque para destruirlos a todos - Vamos, no quiero que tengamos que hacerles daño... por favor no crean que todos los humanos son malvados y descuidados... no quiero tener que dañar a ninguno de ustedes pero si siguen me veré obligado a hacerlo... - los digimons de tipo derperdicio, por lo menos los que conocía, eran resultado de abusos y maltrato por parte de los humanos por lo cual eran los únicos digimons a los cuales Alec prefería tratar de no purificar sino hacer que se volviesen buenos en aquella etapa y no tener que volver al egg para empezar todo de nuevo.

No le dije nada más a Alec por el tema como recordar donde es la salida, puesto que era obvio que era lo mismo que hablar con la pared. Al llegar con los Gerbemon me di cuenta de que esperaban que fuéramos por ahí. Al ver que eran algunos de nuestros enemigos nos preparamos para combatir. Dorumon se puso a la defensiva mientras yo me quedaba aislado de mi camarada por la pared de malvavisco que el ojiazul había hecho...

Haciendo uso de mi ventaja al ser invisible tomo la oportunidad y (como en frontier) empiezo a atacar con mi hoz apareciendo y desapareciendo a cada uno de los Gerbemon de una manera ágil para no ser percatado y además, asustar a los atacantes.

Al ser de mi mismo nivel que los enemigos tardo tiempo atacando al azar, pero logro destruir a unos pocos, esperando la ayuda de los otros.

-¡Ayuden!-digo en un momento mientras ataco a uno de los tantos Gerbemon-No puedo hacer esto yo solo.

-Desplieguen su arsenal o nuestro amo nos matara- -Dice uno de los Gerbemon mientras sale de su tacho y apunta al malvavisco con su tacho el cual comienza a absorber la data de lo que se encuentra cerca, los Gerbemon de los otros tachos salen de estos dejando que se abrieran agujeros negros en el suelo y las paredes que absorbían la data y hacia que todo el túnel se volviera inestable, si no podían atrapar a sus enemigos en sus tachos los enterrarían vivos-

Eso lo explicaba todo, por fin los ataques de esos digimons tenían un motivo, otra vez con la amenaza, lo que no sabían era que de todos modos posiblemente los matarían por lo cual todo lo que hacían solo era atrasarlos pero al mismo tiempo indicaban que iban por buen camino. 

  - Mmm... Meramon... tenemos problemas con esto... fuego a la cuenta de 3... - ambos comenzaban a sentir la succión provocada por los tachos de los Gerbemons, no esperaba el usar sus armas tan rápido pero ya no tenía opción. Abrió su mochila rápidamente, mientras el malvavisco era absorbido y su cuerpo comenzaba a ser arrastrado hacia distintos lugares a la vez. - 2.... - sonrió un poco mientras arrojaba la mochila hacia arriba, pero esta no fue lanzada sino que Alec sostenía la misma. El contenido de la mochila fue volcado y comenzó a ser succionado - 1... -, por su tamaño, las distintas cosas fueron succionadas a gran velocidad, entrando uno o más hongos explosivos a cada uno de los tachos, para que sus datas fuesen absorbidas, pero en el momento en el cual ya se dirigían hacia los distintos contenedores la cuenta atrás llegó al 0.

 El meramon disparó llamas desde sus dedos, dirigiéndolas hacia los contenedores los cuales de todos modos trataron de absorber estas. Al unirse los hongos con las llamas, antes de llegar a ser absorbidas completamente ambas, generaron distintas explosiones casi dentro de los tachos que posiblemente destruirían a estos y harían que el ataque terminase. La explosión no afectaría a las paredes de la cueva ya que sería efectuada dentro del barril por lo cual la estructura de la cueva se mantendría segura y sin daños. - Dios, si alguien va a matarlos los matará de todos modos. Un verdadero amo debe protegerlos, no asesinarlos, yo mismo me encargaré de que su amo no los lastime ni lastime a nadie... No importa lo que pase no dejaré que ustedes mueran. Por favor permitan que pasemos, así ustedes estarán a salvo... -

el Malvavisco estaba siendo absorbido de a poco, este salia de su posición como una botella de vino al ser descorchada. - mejor sera que nos pongamos a una distancia segura. - con Agumon retrocedimos un par de pasos para intentar salir de su rango de absorción. en este instante el chico del Meramon tubo un plan que podría funcionar. la destrucción de sus tarros de basura podría ser la respuesta para que pudiéramos cruzar sin bajas.

-Nosotros también.- le ordené a Dorumon, repitiendo la misma acción que el chico y su Agumon. Justo a tiempo para ver el plan en acción de Alec y Meramon. Tal vez sin esos tachos de basura la batalla sería sencilla, ya que la otra técnica de los Gerbemon es arrojar desperdicios. Mientras tanto sujete a mi camrada y clave fuertemente mi nanotool al suelo para aferrarnos al suelo.

Cuando vi la nueva estrategia de los digimon enemigos me di cuenta del peligro y me alejé rápidamente, atravesando como fantasma la barrera de malvavisco y encontrandome otra vez con los del grupo.

-Creo que lo hice mal-digo suavemente, dejando notar la vergüenza.

Me acerco a Agumon.

-Desde ahora más juntos ¿No?

-Los hongos explotan dentro de los tachos los cuales terminan siendo destruidos dejando solo dos de ellos , uno en una pared y otro en el suelo los cuales continúan debilitando rápidamente el techo y las paredes lo cuales comienzan a querer ceder, los Gerbemon al no poder usar sus tachos siguen atacando con sus lanzando les excremento-

Al ver que solo dos tachos habían quedado después de la explosión generada por los hongosa explosivos y el fuego de Meramon, se me ocurrió como evitar que se sigan debilitando las paredes. -Debemos poner dos Garbemons en esos tachos,uno en cada uno, así cancelamos esa técnica.- les comenté al resto, confiando en que Phantomon y Meramon tenga la fuerza para obligarlos a regresar al bote de basura.