Crimson Beast [Mision de Dansher]

Un par de Megidramon azotan a aquellos que se aventuran a la isla flotante donde alguna vez estuvo el árbol celestial. Trata de acercarte sigilosamente a estos y destrúyelos para así evitar más víctimas de su insaciable sed de destrucción

Describe como llegas, puedes poner que ya estás en la isla flotante

Me encontraba en el Continente Folder junto con Veemon, dábamos un paseo recordando algunos momento que pasamos allí, después de todo solíamos pasar mucho tiempo en el Valle de los dragones, pero en esta ocasión andábamos rondando por la Sabana Guardián, un lugar bastante tranquilo y semidesértico, al parecer a Veemon le agradaba el lugar, pues es un dragón, este tipo de clima suele agradarle.

-Este lugar del Continente Folder no lo habíamos explorado antes, ¿verdad Veemon?- pregunté a mí digimon mientras seguíamos caminando por aquel semi-desértico lugar -Cierto, por aquí no investigamos cuando veniamos al continente folder Dansher- respondió Veemon, el cual se veía bastante conforme por el clima -Bueno, al menos conoceremos más sobre este lugar- sosteníamos la charla cuando de repente observamos hacía el cielo y nos percatamos que había lo que parecía una isla flotante -Dansher mira, es una isla flotante- comentó Veemon algo impresionado mirando aquella isla -Es cierto, qué extraño, bueno, realmente no, es el mundo digital jaja- reí un poco junto a mí digimon.

-Ahora que recuerdo Dansher, allí se encontraba el árbol celestial, hay muchas historias sobre esa isla, como que fue el primer lugar que piso el Dios Digimon- agregó Veemon como un dato cultural, parecía muy interesante, sin duda tenía ganas de explorar aquel lugar -Bien, ¿qué te parece si vamos hacía allá Veemon?- pregunté a mí digimon mirándolo -Claro que sí Dansher, sólo que podemos llegar volando nada más o si mal no recuerdo había un elevador especial- decía muy emocionado y pensativo Veemon, al parecer había dos opciones, sin en cambio, yo era un poco claustrofóbico -No...no creo que sea necesario el elevador Veemon jajaja, mejor vayamos volando- contesté motivado y tratando de disimular mi desacuerdo en usar elevadores -Pues venga Dansher, digievolucionemos a Goddramon, volemos hasta allá y comencemos a explorar- recomendó Veemon bastante motivado, me parecía bien su opción, después de todo, no sabemos que podemos encontrar allá arriba y será mejor ir en la etapa mega de una vez -Bien. ¡Matrix Evolution!- en eso Veemon y yo nos fusionamos en -¡Goddramon!- y comenzamos a volar hasta la isla flotante.

Una vez que llegamos a la isla flotante todo parecía tranquilo, quizás demasiado, no había ni un digimon a la vista -Qué extraño, para ser un lugar interesante, es demasiado callado. Deberé de ir con cuidado- pensé mientras comencé a avanzar por el lugar explorando un poco y ver si era seguro.

Frente a ti se extiende un gran prado boscoso, aun sin mucho esfuerzo puedes distinguir el árbol que se encuentra al centro, parece que todo está demasiado tranquilo pero puedes percibir una especie de aroma a chamusquina reciente proveniente del interior del bosque

off:

La isla flotante era demasiado llamativa y bonita, nada comparada a la parte de abajo que era semi-desértico, aquí había más plantas y era algo boscoso, un increíble panorama.

Sin embargo, la parte más llamativa de la isla era el gran árbol que parecía estar exactamente al centro de la isla flotante -Vaya, este lugar no deja de sorprenderme, es muy bonito- pensé mientras me quedaba mirando un poco más el árbol, cuando de repente un olor a quemado me llegó -¿Huele a quemado?- pensé -Tal vez se trate de algunos digimon vándalos que están haciendo maldades en este lugar sagrado, no lo puedo permitir- continué pensando, y sin más me dirigí a donde provenía el olor, pero no sabía con que tipo de digimon lidiaría, así que aunque me apresuraba iba de manera sigilosa para no alertar a nadie y pueda ver que tipos de Digimon son los que posiblemente están causando algún incendio en el lugar.

OFF:

En un claro del bosque encuentras a un digimon inconsciente el cual resulta ser un Meramon, al estar tumbado eh inconsciente en el suelo no es capaz de regular por sí mismo la temperatura de las llamas que componen su cuerpo consiguiendo así un pequeño incendio a su alrededor

Mientras más me acercaba al lugar de donde provenía el olor a quemado, podía llegar a observar que se plograba ver un poco de árboles incendiados -¿Quién incendiaría un lugar así?- me cuestioné a mí mismo mientras procuraba adelantarme a un paso un poco más apresurado.

Cuando llegué a donde se veía que había más actividad del fuego, pude observar un claro boscoso, y cerca de allí, un Meramon, el cual parecía inconsciente, y también parecía ser la causa del incendio, lo mejor era poder despertarlo o retirarlo de allí para que cesase el incendio, así que sin más, me acerqué al Meramon - ¡Hey Meramon! Despierta, estás causando algo de incendio aquí- traté de despertarlo y lo pokeaba con una rama antes de que esta se consumiese por las mismas llamas de Meramon, necesitaba despertarlo de alguna manera, pero realizaba eso para ver sí funcionaba y obtener más tiempo de pensar.

Cuando picas a Meramon con la rama te das cuenta que más que estar dormido esta inconsciente y que sus llamas brillan con un color carmesí obscuro casi malvado y no con el clásico anaranjado cálido propio de los Meramon

Al parecer el tratar de despertarlo no había funcionado, parecía más noqueado que descansando, debía de idear como hacer que entrara en razón, aunque después me percaté de algo extraño, su color no era como el de los demás Meramon, era un color más rojo vivo, un color carmesí, cosa que me pareció bastante extraña -¿Qué le pasa a éste Meramon, por qué brilla con ese tono?- pensaba mientras veía como poder despertarlo, sin duda sí lo tocaba me quemaría, y un ataque no sería la mejor solución, ya que el pobre digimon está insconsciente -¿Qué podría hacer para despertarlo?- esa preguntaba redundaba en mí cabeza -Tal vez con una piedra- le lancé una piedra al Meramon para ver sí despertaba, y mientras esperaba su respuesta, lanzaba un poco de tierra hacía donde se estaba esparciendo el fuego, para apagarlo -Espero que esto funcione- .

Las llamas carmesí que se expanden creando ese pequeño incendio resisten poco más que las llamas características de los Meramon y cualquier digimon de su nivel, pero aun así seden ante la tierra

-uhh…- se queja el Meramon cuando la piedra ingresa a su llameante cuerpo, y lentamente abre los ojos, pero no por completo -ese… maldito…- alcanza a balbucear aun tumbado -sino fuera mi cuerpo de fuego… estaría… muerto- continua balbuceando hasta que nota tu presencia -¿quién eres…?-

Las llamas eran demasiado resistentes, a pesar de que lanzaba tierra para cesar el fuego, este se resistía, aunque al cabo de un tiempo terminó cediendo y las llamas calmaron.

-Me alegro, la idea a funcionado un poco, ¿pero la de la piedra?- me pregunté a mí mismo, volteando hacía donde estaba inconsciente el Meramon, el cuál parecía ya estar recobrando la consciencia, estaba susurrando algunas cosas, al parecer tuvo algún enfrentamiento con otro digimon por lo que decía, hasta que se percató de mí presencia -Hola, soy Goddramon, estabas insconsciente y tus llamas estaban quemando gran parte del lugar, por lo que trate de cesar un poco la sllamas con tierra, ¿y tú?, ¿qué te pasó?- pregunté algo curioso al digimon, después de todo, sí había un digimon malvado por aquí, era necesario ponerle un alto.

-se que eres un Goddramon… pero no pareces ser solo un digimon…- explica tratando de regular sus llamas -fui atacado por un digimon demente… con un poderoso fuego prácticamente infernal- se queda viendo su mano y como sus llamas están agitadas y de color diferente -tengo que expulsar estas llamas que absorbí... pero… si lo hago devastare la zona…- voltea a verte -Goddramon, ¿podrías ayudarme? ¿tienes alguna idea de cómo me pudiera deshacer de este poder infernal?-

El Meramon parecía darse cuenta con facilidad que no me trataba de solamente un Goddramon común y corriente -Bueno, sí, en seo tienes razón, yo soy un digimon fusionado con mí tamer- respondí, y al parecer el digimon fue atacado como predecía -¿Fuiste atacado por un digimon demente?, ¿qué clase de digimon?- pregunté algo curioso, ya que si había un digimon causando estragos, era necesario llevar precauciones y saber a que es lo que podría enfrentarme -Con que absorbió las llamas de ese digimon- pensé, ya más o menos me podía dar una idea de que se trataba de un digimon dragón como yo -Ahm...bueno, sí, es necesario que liberes esas llamas, pero creo que este no es el lugar más indicado, es un lugar sagrado. ¿Qué te parece si las liberas debajo de este lugar?, allá abajo es una zona semi-desértica, apuesto que no pasará mucho si liberas las llamas allá- recomendaba al Meramon, supongo que para la situación era lo más viable.

-…..- suspira cansado y se te queda viendo -bien… el digimon que me ataco rugió aturdiéndome y cuando no me podía mover me lanzo una fuerte llamarada… para evitar que incendiara este sitio la absorbí pero… bueno… ya vez como estoy…- se queda sentando tratando de reprimir sus llamas -lo más seguro es que este más cerca del árbol celestial…- te indica con el brazo el árbol mismo

Volteé mirando aquel árbol principal que se podía distinguir en esta isla flotante, después de todo, era importante, y sí el digimon que hirió a Meramon se dirigía hacía allá, posiblemente estaría atacando a más digimon o peor aún causaría estragos este lugar -Ya veo, entonces tendré que encargarme de ese digimon para que no haga más estragos- comenté al Meramon mientras volteé rápido la mirada -¿Y qué hay de ti y todo tú fuego reprimido?, debes liberarlo pero en otro lugar, de lo contrario este lugar sagrada perecerá- comenté, esperaba que el Meramon tomara mí opción de descender de la isla y liberarlo allá abajo que es menos riesgoso.

-¿Y sabes qué digimon fue el que te dirigió el ataque? Para poder identificarlo más fácilmente- era necesario para mi saberlo, ya que sí se encontraban otros digimon dragón, podría confundirlos.

-lo se… intentare llegar a la orilla de la isla y de allí bajare- dice enderezándose y luego empezando a caminar -me ataco por la espalda, así que no se… pero era grande y tenía un fuerte rugido- tras decir eso, se va -suerte...-

Pasa un tiempo antes de que escuches un rugido aterrador, el cual es secundado por otro de la misma magnitud pero en otro punto de la isla flotante, te puedes dar cuenta que están a extremos contrarios de la isla. Uno de los rugidos se detiene y es substituido por el sonido del disparo de una poderosa llamarada, a su vez un destello brilla con la misma intensidad y color que las llamas que tenía el Meramon con el que te encontraste hace un momento. El olor a quemado es por mucho mayor al de antes y un grito de dolor resuena

El Meramon al parecer no reconoció al digimon que le atacó, así que la única pista que tenía era que era un digimon grande y que lanzaba fuego, posiblemente un dragón de nivel ultra o mega, así que debía mantener mis precauciones, y Meraon comenzó a dirigirse hacía debajo de la isla como le recomendé.

Comencé a avanzar en dirección hacía el árbol central de la isla flotante cuando escuché un rugido, estuve a punto de ir hacía allí cuando de repente otro rugido sonó en dirección contrario -¿Cuál debería seguir?- pensé mirando a ambos lados, y cuando menos me lo esperaba, un tercer ruido se escuchó, pero este acompañado de una fuerte llamarada, al parecer algo le había pasado a Meramon, ya que también se escuchó un sonido de dolor -¡Meramon!- me alerté, y supuse que algo le había pasado, así que me dirigí hacía donde provino el sonido de Meramon para ver que le había sucedido.

El ultimo rugido que escuchas y tal como sospechas se origina de algo atacando a Meramon, pero esto es algo extraño pues lo que sucede es que un Flare Lizarmon (el cual también tiene sus cuerpo llameante de un color carmesí y es anormalmente grande) se encuentra absorbiendo las llamas del Meramon, de forma que le provoca un dolor terrible y prácticamente lo quiere consumir por completo; Meramon, por culpa del dolor no se puede defender y solo se abraza a si mismo intentando conservar algo de sus llamas y no terminar muriendo

Cuando llegas y te topas con esa escena, Meramon ha sido reducido tanto que parece más un niño hecho de llamas, y el Flare Lizarmon es casi equivalente a 3 de ellos juntos, tanto en tamaño como en poder. Cuando te ve ruge con gran fuerza, como una advertencia para que no te acerques mas

Me apresuré lo más que pude a llegar hacía donde se originó el gritó de Meramon, eso me preocupaba bastante, ya que habría bastante posibles consecuencias como que Meramon sin querer liberara las llamas, o que este muriera a manos de otro digimon, por lo cual debía de llegar lo más ante posible -Maldita sea, este se supone era un viaje tranquilo- pensé.

Al llegar a aquel lugar, pude percatarme de que había un FlareLizarmon atacando a Meramon, el cual se veía que sus llamas estaban extinguiéndose al parecer, por la culpa de aquel digimon -¡Meramon, resiste!- le grité al Meramon. Poco después aquel extraño digimon me lanzó un rugido de advertencia, se veía bastante grande, ya que al parecer absorbió las llamas de Meramon, por ello sus llamas eran muy similares a como el otro las tenía, y no sólo eso, también había crecido -Bien, digimon problemáticos como tú no pueden estar en este lugar, así que tendrás que irte- me acerqué un poco más a la escena, y mirando a aquel digimon -Luz Arcana- rugí para atacar a aquel digimon.

Ataque:

Cuando se dio cuenta de tus intenciones (el momento en el que dibujabas el circulo mágico), Flare Lizarmon rodo como una bola hacia una lateral de tal forma que comenzó a avanzar a tu alrededor como si tu fueras su eje, a su vez también, desde su cuerpo se formó un pillar enorme de llamas directo contra ti. Mientras tanto, Meramon se encontraba en el suelo aun sufriendo la perdida severa de sus llamas y de las carmesí. Su dolor era tal que se mantuvo en posición fetal tratando de volver a formarlas y no terminar muerto en el intento

Los 2 rugidos restantes dejan de sonar y son substituidos por el único sonido de la pelea en la que estas metido justo ahora


Fire Tower: Realsa un enorme pilar desde su cuerpo llameante hacia el enemigo

Thrust Rush: Rueda vuelto una bola y le da una voltereta al enemigo

Aquel digimon se movió lo suficientemente rápido para evadir mí ataque y comenzó a girar alrededor de mí, sólo veía como una enorme bola de fuego me rodeaba, era bastante molesto, lo que hizo que prestara atención a los movimientos de aquel digimon -Tsk, debo de detenerlo de algún modo- pensé, y vi que formó un pilar encima que lanzó sobre mí -Puños siniestros- mis puños concentraron la suficiente fuerza con los poderes de Amon y Umon para golpear repetidamente ese pilar de fuego y mínimo desvanecerlo -Bien, así quieres jugar- me acerqué rápidamente hacía el eje de aquel FlareLizarmon, y cuando pasara enfrente de mí, liberé mí poder concentrado que tenía en mí mano izquierda (Umon) para detenerle y hacerle bastante daño.

Ataque:

Consigues desvanecer el pilar de fuego al golpearlo repetidas veces con tus puños. El Flare Lizarmon se encuentra tan fuera de sí en ese frenesí de enojo y locura que en lugar de detener su rodada o cuando menos desviarla, arranca con toda su furia y velocidad en tu contra para arrollarte con su flameante cuerpo. Es a último momento que se percata de tu puño izquierdo, sin embargo ya es demasiado tarde para frenarse, recibiendo el golpe de lleno lo que causa que explote en una lluvia de fuego dejándole el cuerpo severamente reducido en tamaño eh intensidad quedando inconsciente

El ruido de la explosión y la lluvia de fuego consiguen captar la atención de uno de los digimon que antes rugieron al aire, el cual ahora ruje en rumbo a tu ubicación generando un fuerte eco, como si de una advertencia se tratase

Al parecer el ataque fue demasiado repentino y cercano, por poco aquel digimon logra arrollarme de lleno, más sin en cambio, no salí del todo ileso, el golpe y la explosión fue tan cercana, que apenas sólo pude cubrirme un poco mi cara con mis brazos -Maldita sea, esa explosión fue demasiado peligrosa- me sacudía el hollín que había quedado en mí cuerpo tras la explosión.

Descansé tan sólo unos muy pocos instantes, para después dirigirme a Meramon -Meramon, ¿te encuentras bien?- pregunté a aquel digimon, después de todo, esto fue para salvarle, hasta que escuché un rugido que se escuchaba a lo lejos, al parecer se dirigía hacía acá debido al sonido explosivo de FlareLizarmon -Con que tendremos compañía- aproveché que las llamas de Meramon no eran tan intensas para poder llevarlo cerca de unos árboles en dirección contraria de donde sonó el rugido para ocultarlo, y yo me subí a un árbol para sorprender al enemigo.

Consigues esconder al Meramon que está nuevamente incontinente, pero al estar casi consumido sus llamas dejan de ser un peligro. Una parte de la lluvia de fuego se consume por si misma mientras cae… el rugido ya no se escuchó, pero sientes la presencia de algo acercándose más y más. Ese algo se siente como una presencia repudiable y asquerosa. Como pasan los segundos sientes un olor nauseabundo y como si la presencia se multiplicase a cada metro que avanza

Cuando al fin llegan las presencias al claro donde peleabas, resultan ser nada más y nada menos que 10… 10 Numemon que parecen estar corriendo despavoridos de lo que está rugiendo -vamos chicos tenemos que uir- dice el que parece ser el que los lidera -ese dragón maldito no puede tardar mucho en venir-

Estaba totalmente quieto, sin perder de vista a Meramon, esperando el momento en que la presencia de aquel digimon que emitió el rugido apareciera, atento a cualquier movimiento agresivo, listo para atacar.

Seguía en el árbol aún, cuando se veía como las hojas de los arbustos cercanos se movían -Está cerca- pensaba mientras me preparaba aún escondido en el árbol, cuando de repente aparecen unos Numemon huyendo -Malditos Numemon- suspiré algo decepcionado, pero a juzgar por su expresión y por lo que comentaban suponía que el digimon venía atras de ellos, así que aún me mantuve con la guardia en alto para esperar el momento en que este digimon hiciera acto de presencia -Ven, ven, que te ando esperando- susurraba.

-vamos chicos, cerca está el elevador que nos sacara de aquí- dice uno -¿tengo que recordarte que ese cabrón tiene alas… y que sabe usarlas?- le responde otro -¡por Yggdrasil! casi matan a Meramon- los interrumpe otro señalando a Meramon el cual sigue muy débil y sufriendo por su falta de llamas -¡¿Por qué está cayendo fuego?!- histérico agrega otro -¡creo que son las flamas de flare lizardmon!- y así comienza el cuchicheo histérico, desenfrenado y aturdidor clásico en los Numenos

Durante la alocada discusión, se dan cuenta de tu aroma, y todos voltean al mismo tiempo al árbol en el que te escondes -¡el culpable sigue aqui!- gritan algunos señalando al árbol -¿¡que hacemos ahora!?- gritan otros -¡no puede ser! Primero 2 Megidramon nos atacan y ahora esto- agrega el que parecía ser el líder del grupo. Obviamente… están corriendo en círculos asustados sin saber que hacer ahora

Mientras estaba escondido aún en los árboles, preparado para saltar al ataque y ocasionar un impacto sorpresa...de donde provenía aquel sonido y movimiento, salen un Numemon corriendo, al parecer algo asustados, preocupados por lo que realmente se aproximaba, me decepcioné un poco, pero aún así, era mejor pasarles por alto, los Numemon suelen ser demasiado molestos.

Después los Numemon  comenzaron a analizar la zona donde peleé con FlareLizarmon y vieron a Meramon debilitado, se vieron más preocupados, pero les seguí pasando por alto, hasta que uno de ellos me vio y me culpó por todo alertando a los demás -Estúpidos digimon moco...- dije en voz muy baja para que no me escuchasen -Escúchenme Numemoquitos, yo no fui el culpable de que Meramon estuviera así, fue atacado por FlareLizarmon, y yo le ayudé, es por ello que está así- respondí sosteniendo la mirada hacía ellos -Y segundo, ¿2 Megidramon?, estoy aquí oculto esperando a ese digimon, ya que fue el primero que atacó a Meramon, y además, posiblemente al ser digimon hostiles, harán daño a este lugar sagrado, por lo cual es mí deber deteneros- respondí a los Numemon para que se calmaran -Así que si no quieren estar aquí a la hora de la pelea, les recomiendo que se vayan, y si realmente quieren hacer algo de ayuda, y les cae bien Meramon, les pido de favor que se lo lleven con ustedes a la parte baja de la isla mientras yo me encargo de esos digimon- sugerí, realmente esperaba que aceptaran, mínimo debían de ser de un poco de ayuda.

Aviso:

Tras escuchar y temblar por tus palabras y mirada tragan en seco -t-tienes razón, pero oye… esas cosas vuelan y tienen unas narizotas… ¿de verdad crees que no te olerán escondiéndote en un árbol?- preguntan al final todos al mismo tiempo -además… tu tamaño y el suyo- en lo que el líder te decía eso el resto cargo a Meramon -si tanto te preocupa este lugar… ¿quieres que algunos te ayudemos a pelear?- pregunta fingiendo valor, aunque es obvio que se está muriendo del miedo, mientras que algunos se quedan esperando tu respuesta otra parte del grupo se lleva a Meramon hacia el elevador invisible

Tras algunos segundos, de entre la espesura de los árboles se alza una figura retiniana carmesí la cual emite el rugido que ya has escuchado varias veces antes; su mirada llena de furia, pese a la distancia se siente con facilidad; aun con su comportamiento agresivo de siempre, este dragón carmesí parece más que atacar sin ton ni son… se encuentra analizando la situación y observando detenidamente a los Numemon preparándose para cualquier movimiento inesperado de estos o de la zona en la que se encuentran mientras de su boca se escapa una especie de suspiro de fuego idéntico al que contaminaba a Meramon y a Flare Lizardmon

-hey… Goddramon… ¿Qué deberíamos hacer…?- murmura entre dientes el Numemon líder, tratando de no delatar tu ubicación