Estragos en el puerto

Una luz cegadora alumbro toda la calle por unos pocos segundos antes de desaparecer por completo sin dejar rastros.
Así aparecí en el suelo, en medio del pavimento. Me pongo de pie mirando el mar.

-Hhmmm de nuevo aquí...-

El ruido de una bocina no me hace correrme de donde estoy y los bocinazos aumentan. Miro de reojo al camión que no puede frenar, no me muevo hasta que está muy cerca y salto sobre el techo y caigo al otro lado. Doy un giro y corto con mi afilada cola las llantas del camión. El camión pierde el control hasta chocar contra un poste de luz y otros autos chocan contra él.

-Hice un buen trabajo.-

Sonrío y camino en dirección contraria al camión. Salto sobre un poste de luz y me muevo velozmente saltando.

El perfecto día para una buena caminata con un esplendido luz solar que me calmaba muy bien y relajarme caminando encima de un puerto observando el esplendido paisaje del mar, no tenia preocupación alguna caminaba con tranquilidad ignorando aquellas personas que se burlaban como me vestía, mi vestimenta era como la Edad Media y poseía una espada en mi mano derecho.

En mi pequeña mochila colgando en mi correa portaba el extraño aparato blanco cuya funcione ni idea… pero no me importa cuando ya estaba en las orillas de las calles de parimento no pude evitar ver un raro bicho que provoco el accidente de coches.

-¿Qué demonios…?-Dije lo mas sorprendido ya los autos de ambulancia y policía llegaban sin cesar y yo buscaría el provocante corriendo en dirección adelante viendo una silueta saltando con mucha velocidad.- ¡Oye tu ven aquí que te hare pagar por aquellas gente!-Le grite mientras lo perseguía blandiendo mi espada.

¿Me hablan a mi? No puedo creerlo, giro mi cabeza y veo a un crio correr hacia mí vestido de forma extraña... esto es raro. Me detengo en un poste de luz y me dejo caer, colgándome con mi cola del poste y quedando de cabeza mirando al chico.

-¿Pagar? Pero yo no hice nada malo... Ese camión me asustó y yo solo reaccioné.-

Explico con mirada amable y una agradable sonrisa. Detrás del chico de vestimenta extraña veo a otro venir hacia nosotros con una cosa más volando cerca de él. Afilo mi mirada para distinguir de qué se trata.

-Un Patamon...-

Susurro para mí y chasqueo la lengua.

El bravucón ese se detuvo dejándose caer colgándose de su cola en el poste de luz pero me quede muy impactado e impresionado yo esperaba solo ver a un crio niño de 6 años por lo menos no un bicho de los más raro que nunca vi ni en tiendas de mascotas pero ya eso lo dejaría en otro momentos aquellas dudas, alzando mi espada en dirección a la fea criatura.

-¿Reaccionar? Si como no mira como me lo creo. Si te asusto de lo más normal era esquivarlo lo hiciste para provocar caos a propósito. Y yo te daré una lección ¡Ven aquí!-dicho aquellas palabras empecé a trepar en el poste de luz y moviendo mi espada en sentido vertical y horizontal ya que estaba cerca de aquella criatura.

Mis ojos se movieron en las callas dándome cuenta de otro chico que llevaba a su lado otra criatura extraña pero con alas, escuche los susurros de cómo se llamaba ¿Un Patamon? ¡Qué día! Viendo muchas cosas raras pero seguía con mi objetivo y seguía blandiendo mi espada contra esa fea criatura.

Me olvido de ese Patamon y presto atención al chico de la espada, que por supuesto no cree mis palabras... tampoco yo me creería jajaja Me balanceo de atras para adelante mientras él sube e intenta golpearme con la espada.

-Por supuesto que lo esquivé y después lo ataque. No sé lo que era esa cosa, parecía un monstruo.-

Explico con inocencia pero con una sonrisa que daba a entender que lo que decía no era verdad. Enrrollo mi cola hasta subir al poste y me pongo de pie esperando que el chico tambien suba, pero no es el unico que quiere atacarme.

Muevo mi cola y corto a la mitad el ataque de ese Patamon y lo miro de reojo.

-Hhhmm ¿Intentabas hacer algo con esa burbuja infantil?-

Las palabras de aquella extraña fusión de la naturaleza respondió que lo esquivo y dijo que no sabía lo que era ¡Que mentira! Lo observe ahí mientras caminaba quedándose de lo mas quieta y de repente salta encima de la camioneta provocando ya el caos con su rara cola parecía muy a la mano como un tercer brazo, subiéndome al poste esa cosa me provocaba mas y mas defenderé aquellas gente que sufrió daño por su culpa.

Al llegar al final del poste de luz vi que ese Patamon o como lo llamen expulso una esfera de aire que esa criatura lo bloqueo como si no fuera nada solo puro polvo más bien.- ¡Buen intento!-Le anime aquel chico no sé porque pero me ayudaba y moviendo nuevamente mi espada en sentido diagonal luego horizontal para proporcionarle un fuerte golpe aquella criatura.

M muevo por el poste de luz hacia atrás para esquivar la espada de ese niño. Esto es muy divertido, un simple humano intentando lastimarme y un digimon mascota atacándome. Miro con indiferencia hacia el suelo donde una de esas burbujas hizo impacto sonrío ampliamente.

-Dije... que no me gustan las burbujas....-

Las Púas en mi espalda salen volando hacia ese Patamon y su compañero humano chocando contra las burbujas y sin conformarme con eso salto al suelo. Doy un giro completo y corto el poste de luz con mi afilada cola, haciendo que el poste caiga con el chico de la espada aún subido en él.

Off:

Cada vez esto se hacía muy loco y difícil de hacer no; estar encima de un poster de luz atacando aquella criatura extraña pero lo hacía para defender así que valdrá toda la pena pero lo que me daba más ánimo es tener a una persona que me ayude como si fuera su amigo e intentando acercarme con cuidado aquel criatura.

-Deja de huir que así no ganas nada ¡Miedoso! Pelea contra mí si tienes las agallas.-Le provocaba para atacarlo directamente pero luego esas esferas de aire hiso impactado ahí hiso que el límite de paciencia de esa criatura llegara al 95% soltando púas rojas al muchacho y su rara mascota mutante de otro planeta.- ¡Eh vuelve aquí!-Dije enojado ya que se salto al suelo y rompió el poste y yo estaba encima eso era un problema ya cayéndome.- ¡Ahhhhhhhh!-Y choque con fuerza al suelo con unos pequeños rasguños por suerte mi traje tenía algo de armadura medieval sobretodo mis pies y no me lastime gran cosa y me levante rápidamente.

Ya enojándome cada vez mas corrí en dirección a la fea criatura blandiendo mi espada para lograr golpearle.- ¡Ahora veras cosa fea extraña y mutante!-Le grite.

Ese chico calló junto al poste de luz cuya bombilla se rompió al impacto. Que mala suerte la mía porque no se hizo nada, solo unos pocos razguños, tendré que poner más énfasis en mis ataques entonces.

-Cosa fea, extraña y mutante.... ¿estás hablando de vos mismo?? ¿Humano patético?-

Me río mientras esquivo sus ataques de la espada, es muy sencillo predecir los movimientos de esa arma. Lo que me sorprende es que es Patamon siga insistiendo con sus burbujas y eso me obliga a cubrir de vez en cuando mi cara con mis brazos para que no me dañe.

-Primero... me encargaré de Patamon.-

Sonrío y salto dando vueltas en el aire, pasando por arriba del chico de la espada y caigo tras él y justo bien cerca de Patamon.

-Me has cansado chiquillo.-

Los picos de mi espalda brillan y vuelan hacia Patamon.

off:

La verdad no puedo creer que a mí me llame cosa fea, extraña y mutante… Si él es que tiene cuerpo de humano, cabeza de lobo y una cola que parece un tercer brazo solo que elástico pero sí que era difícil proporcionarle un golpe con la espada a ese bicho feo, tengo que probar algo más directo.

Ya iba a probar otra táctica de movimiento pero el Patamon de ese chico siguió dándole esferas de aire que algunos le golpearon pero se tuvo que cubrir para no recibir daño y saltando encima dejándome a mí de espalda ¡Ventaja! Cuando él o ella disparo sus pues en el aire aquel digimon y el chico.

-¡Ya eres mío!-Pensé en esos momentos corriendo hacia él y viendo la pare más baja en las espaldas de aquella criatura que no lleva púas ahí lo agarre empujándolo contra el suelo.

Admito que ese mocoso me tomó por sorpresa, lo que menos me esperaría es que corriera hacia mi y me empujara del modo que lo hizo, haciéndonos caer a ambos de frente contra el suelo.

-Eres demasiado confiado... ¿Crees que un humano puede detener a un digimon?-

Los picos en mi espalda crecen de nuevo y aprovecho eso para levantar mi pecho con mis manos de forma que el chico solo tiene dos opciones, dejarse picar por ellos o apartarse de ellos.

-Si crees eso... piénsalo de nuevo-

Giro y lo golpeo con uno de mis brazos para alejarlo mas y me pongo de pie. Muevo mi cola mostrando que tengo sujetada su espada.

-¿Que harás sin tu espadita de juguete?-

Miro que sucede con el otor humano y el digimon.

Mi plan funciono lo he tumbado contra el suelo aunque también provoco mi caída, pero no me importo le hice daño eso lo que me importa ¡AH! Pero nunca pensé la parte de sus pinos ahora no tenia como hacer, si escapar eso sería de cobardes mas si estoy aquí recibo las púas y quien sabe cómo me afectara pero aquella criatura menciono algo que puede ser su especie rara y la de aquel chico ¿Digimon? ¿Eso será? Pero no tuve tiempo para unir cables porque me golpeo con tal fuerza que me derribo contra el suelo, mi mejilla estaba rojo por la herida y detectando mi mano no tenía mi espada que me ayudaba a defenderme.
-¡Estúpido miserable! ¿Qué tienes en contra de nosotros o más bien los humanos en general?-Le pregunte con rabia pero sin mi espada no significaba que no pueda hacer nada, corriendo hacia él para luego intentar darle un golpe.

Si él me atacaba podía sacarle ventaja en algo o eso depende de cómo me fuera atacarme pero espero que ese chico con ese Patamon me ayudara.

-Estúpido y miserable... no deberías hablar así de ti mismo.-

Me largo a reír mientras bloqueo su golpe con mi brazo y lo golpeo con mi otro brazo para tumbarlo. Me estoy divirtiendo mas con las palabras de este chico que con la pelea, es bastante gracioso.

Doy un grito, no por el dolor, sino por la sorpresa, me había olvidado por unos momentos de Patamon. Grave error que nunca mas volverá a ocurrir, las orejas de Patamon me golpearon y me tumbaron pero la espada sigue estando bien sujeta por mi cola. Me pongo de pie de un salto.

-Eso no lo vi venir... ahora veras!-

Las marcas negras de mi cuerpo brillan intensamente de rojo, casi cegando a los que están a mi alrededor y de las marcas salen rayos rojos que avanzan por diferentes direcciones hacia Patamon.

off:

Rayos no logro darle un buen golpe aquel digimon o lo que sea, solo se anda burlando de mis estrategias y de mis formas de intentar ofenderlo por lo menos un poco pero nada pero no me daré por vencido y fijándome el buen merecido que se dio el digimon gracias al ataque de Patamon me reí a carcajadas.

-¡Toma eso por tus tontos reflejos!-Le insulte a risas y me cubre un poco por el ataque inesperado de aquel digimon lanzando rayos por cualquier dirección.- ¡Cuidado!-Exclame al chico y a Patamon ahí corrí con todas mis fuerzas al digimon y di un salto para estar tumbado en la cabeza de aquel digimon y agarrándome como si mi vida dependiera de ello.-¡Ahora dime que harás si un humano está encima de ti!-Le provoque.

Me considero un digimon que a pesar de todo tiene paciencia, pero este niño ya me ha comenzado a cansar y cuando eso pasa significa que nada bueno sucederá. Primero trato de sacármelo de encima sacudiéndome, pero claro que eso no funcionaría, entonces... tendré que hacer el plan B.

-Solo esperaré a que me sueltes por tu voluntad.-

Dicho esto tomo la espada con una mano y mi cola ahora libre se enrolla con fuerza alrededor del cuello de Tony y empieza a apretarlo. No tengo pensado soltarlo aunque Patamon me ataque y su ataque me duela, retrocedo un paso y muevo la espada que tengo en mi mano para cortarle un ala a Patamon.

-Humano idiota.-

Sonrío al sentir la patada en mi pierna y veo de reojo al humano tan cerca de mi. Me giro dejando los picos de mi espalda justo frente a su cara... Los picos brillan y lo atacan.

Off:

Esa sabandija usa mi espada para atacar a mis amigos pero tengo un nuevo problema, ahora debo intentar soltarme de la cola de aquel digimon ya que me aprieta el cuello impidiendo que respire, ya no respiraba nada mi cara se volvía rojo y mis ojos se salían de sus orbitas.
-¡Suelta… S-Suéltame!-Tratando de quitarme su cola de encima pero resultaba en vano girando bruscamente por que el digimon se giro, ataco aquel chico con sus púas ¿Qué debía hacer? Ya no tenía salida debo soltarme o al menos… Ya que su colla me amarra el cuello dando un gran esfuerzo, sujeto el otro extremo de su cola y acercándomelo en mi boca se lo mordí con fuerza si no funcionaba lo que debía hacer era soltarme.

¿Ya dije que si mi paciencia se agota suceden cosas malas? Bueno... eso es lo que sucederá justo... ahora!!!

-¡¡Aaah!! ¡¡Maldito humano!!!-

El humano que cuelga de mi ha pasado la raya de mi paciencia. Sin soltarlo lo aprieto con más fuerza, lo levanto con la fuerza de mi cola alejándolo de mí y con un giro lo tiro contra un grueso árbol. Y al mismo tiempo le devuelvo la espada, lanzándola con tanta fuerza que se clava en el árbol, a milimetros de su cabeza, dejando solo su empuñadura a la vista.

-Ahora.... me encargaré de ustedes dos...-

Me doy vuelta y miro a Sergio, mis pupilas se alargaron por la furia que siento y doy un paso hacia él.

-Te metiste con el digimon equivocado humano. Cuando yo peleo, jamás abandono una batalla.-

Sabe a rancio su cola me tendré que quitar este sabor con miles y miles de jabón en mi lengua pero eso es lo de menos he logrado conseguir lastimar al problemático digimon pero mi consecuencia fue ser apretado mas mi cuello ya dejándome sin respiración absoluta, luego lanzado de tal forma chocando contra un árbol que me dejo un chichón en la cabeza y agache mi cabeza por que la espada, mi espada, clavado en el árbol que solo mostraba el puñal.

-Esto sí que te has pasado de la raya.-Dije mientras sacaba la espada con todo el esfuerzo hasta tuve que poner las piernas sobre el árbol y logrando sacarlo volteando corriendo al digimon mientras estaba despistado y deslizándome debajo de sus piernas poniéndome frente al digimon y detrás del chico y su Patamon.- ¡Y tú te metiste con el humano equivocado!-Blandiendo mi espada lo golpee en estilo horizontal en su cuerpo.

Creo que haber ahorcado al humano de la espada le hizo daño al cerebro porque vuelve a intentar darme con la espada. Retrocedo para evitar el filo y solo me gano un corte en mi vientre que aunque algo doloroso no me impedirá seguir luchando. Rápidamente giro y con el filo de mi cola parto a la mitad la piedra que me lanza y aunque es algo arriesgado doy un gran salto yendo directo hacia Patamon que sigue girando en su ataque.

Me lastima pero no me impide envolverlo totalmente con mi cola, impidiendo que pueda usar sus alas, lastimándole una en el proceso y manteniéndolo de espaldas a mi para que no pueda atacarme con sus burbujitas de aire. Aterrizo en otro poste de luz y miro a los humanos. Esto ya me está aburriendo... quizás sea hora de dejar de jugar....

-Bien... Vete con tu amo Patamon... Fue divertido, pero es hora de terminar.-

Doy un giro y lanzo con fuerza a Patamon contra el suelo. Al mismo tiempo salto hacia la calle llena de autos, giro varias veces cortando los neumáticos y empujo con mi cuerpo a un auto para que vaya directo hacia donde están los humanos y el digimon, hago lo mismo con dos autos más y un colectivo, provocando un gran embotellamiento donde otros autos tuvieron que girar para no provocar más choques.

Salto al techo de un auto para ver mi obra maestra, probablemente no vuelva a ver a esos dos mocosos y a su digimon. Doy media vuelta y me alejo saltando sobre los techos de los autos sin ser vista por los humanos que corren a ver que sucedió y si alguien está lastimado.

-Eso le enseñó que no puede cazar digimons-

off:

Eso le demostrara que un humano como yo, puede causarle daño ¡Si huye con tu madre! Si es que lo tiene… Viendo todo sus tácticas de esquivar, cortar la piedra, agarrando el digimon con todas sus fuerzas arriesgando su estado puede causarle demasiado daño pero ya que es un raro digimon, cosa de la rara naturaleza que pasa en este raro mundo.

-Deja el digimon, loco psicópata…-Luego vi que lo lanzo con brusquedad y lo cogí salvándole la vida, supongo se lo di al chico de unos 16 años, mucho mayor que yo y eso que solo tengo 13 años, mira al digimon que salía huyendo, saltando en postees.- ¡Corre con tu madre!-Le dije desafiantemente a gritos, cada vez me molestaba que siguiera causando daño sobre todo que no pude darle su merecido como es debido, pero eso le mostro que un humano como yo, no pudo derrotándome.

Me voltee al chico, con una sonrisa amigable y extendiendo mi brazo.

-Me llamo Tony, el chico que pudo combatir con un digimon gracias a tu ayuda ¿Tu eres?-Le pregunte con curiosidad.

Me voltee dandome cuenta que varios autos venian hacia nosotros y empuja al chico y a su digimon a un lado para evadir los coches.

Logre salvar dos vidas ¡Viva yo! Me sentía completamente a gusto por eso pero el chico se presento como Sergio, al aparecer estaba apurado y se fue corriendo a mayor velocidad poniendo a su Patamon en su raro aparato, oyendo las sirenas llegando la policía corrí a todo correr huyendo de la policía.

-Que día más raro…-Dije para mí mismo, mientras huía de la policía pensando en todo lo que ocurrió y intentando olvidar aquel digimon ten pesado…

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Off: aquí se finaliza el tema.