Una nueva impresión: la amargada enemistad

Había pasado ya mucho tiempo desde que me decidí alejar de todo y de todos, pensando por mí cuenta junto con Veemon lo que me cambió la vida para siempre, pasar de ser un integrante del ex-equipo DD, de tener a lo que yo creía amigos, a darme cuenta de la realidad, y ver que, estando sólo era la única forma de obtener más poder y forjar los lazos con mí compañero digimon.

El digimundo continuaba infectado por lo cual aún no podía entrar a él, pero tanto tiempo de ya estuviese así me hizo más paciente.

-Veemon, ya hemos estado demasiado tiempo sin volver al digimundo, sin volver a ver a aquellas personas que nos ahcían debiles, viajando para todos lados en busca de ser mejores y evitar que te conviertas en un digimon renegado...- dije mirando a Veemon algo pensativo.

-Es cierto Dansher, pero, todo ésto lo hemos hecho por nuestro bien, además, ve el lado positivo, todo éste tiempo juntos a fortalecido nuestra amistad, hemos estado entrenando juntos y podemos enfrentarnos con quien sea, hemos llegado a la evolución mega Dansher- dijo Veemon tratando se subirme los ánimos.

-Jejeje, tienes razón Veemon, por algo tenemos la espada de la amistad y el digiegg- sonrío y me recuesto en el pasto mirando a los canguros.

Veemon y yo nos quedamos un poco relajados disfrutando del ambiente mientras cerrábamos los ojos dejándonos llevar.

-Aaaaah, jejeje, tanto tiempo en las ciudades  y lugares donde está demasiada gente a veces no es bueno para la mente jejeje, en lugares como éstos si nos podemos relajar- dije sonriendo a mi Veemon.

-Es cierto Dansher, hace tiempo que no venimo a un lugar con mucha fauna para poder sentir el aire fresco y salir e la presión y tensión de las grandes ciudades...- dijo Veemon cuando de repente su rostro se tornó algo preocupado tras una presencia -Da...Dansher, siento una presencia muy familiar- me dijo Veemon algo preocupado y levantándose del suelo -¿En serio Veemon?- le cuestioné algo dudos y me levanto desenfundado mí espada de la amistad y apuntando hacia donde Veemon sentía la presencia cuando un rostro familiar grita nuestros nombres y se hace presente -¡Samuel!, querido amigo, ¿cuánto tiempo sin verte?, haz cambiado jejeje, hemos dejado muchas cosas pendientes-  le dije mostrando una sonrisa seca en mí rostro -Aún recuerdo cuando te di dos grandes palizas, ¿aún sigues con tú inútil meta de volverme a hacer el de antes?- lo miré y noté un poco que algo había cambiado en el, pero no le di importancia -¿Y tú lagartija naranja?, Veemon extraña arrastrar el suelo con él- le comenté riendo un poco mientras miraba aquel rostro de mí amigo escondido tras una máscara.

Me quedé muy sorprendido al sentir la fría actitud de Camilo, ¿qué es lo que le pasó?, realmente no me importaba mucho, o más bien, no debía de importarme, yo era ya un Dansher totalmente nuevo, y no iba a dar lugar a cuestiones. Camilo ahora era mí enemigo y eso no iba a cambiar, y no sólo Camilo, todos.

Hubo un aire que me sorprendió mucho de Camilo, al momento en que se quitó la máscara pude notar la heterocromía en sus ojos -¿Heterocromía?- me cuestioné en mí mente sorprendido, eso sólo se daba de manera genética cuando se nace y Camilo no tenía heterocromía en todo el tiempo que lo conocí, ¿qué habrá pasado? Aunque hubo un momento que me desconcertó por completo -¿Agumon está dentro de ti ahora mismo?- preguntamos Veemon y yo al mismo tiempo algo impactados, cuando de repente Samuel desapareció de mí vista y sólo escuché a Veemon quejarse por golpes y cuando menos me lo esperé recibí un golpe en la mano que sacó volando mí espada de la amistad muy lejos -¿Qué....qué rayos?- ni si quiera terminé de hablar cuando Camilo apareció enfrente de mí dándome una fuerte patada en el vientre que literalmente me sacó volando -Agggh- aquejé un poco en el suelo sobándome el vientre -¿Qué....qué es todo ésto Samuel?- pregunté intentando levantarme estando adolorido.

-¿Qué...qué le hiciste a tu camarada?- decía Veemon igual un poco adolorido.

No entendía que pasaba, ¿por qué Samuel actuaba así?, ¿a que se refería con que Agumon estaba dentro de él?, ¿por qué se movía a una velocidad soreprendente?. ¿Qué pasó todo éste tiempo que estuve alejado de todo?

Por ningún momento se me había venido a la cabeza Zayyn, ¿cómo era posible que mí mentora le haya echo eso a Camilo?, ¿cuál era la finalidad?, aunque lo haya echo para torturarlo, también sería algo contradictorio, ya que al mismo tiempo lo está haciendo más fuerte. Por mí cabeza rondaban demasiadas preguntas y no estaba seguro de obtener pronto las respuestas, además, ya llevaba mucho tiempo d eno ver a Zayyn...ella, ¿estará bien?

-¿Za...Zayyn?, eso es imposible, ella jamás le daría el potencial a alguien como tú Samuel, ¿cuáles serían sus razones?- Le cuestioné algo enojado cuando en eso sentí como me jalaba de los cabellos y aguantando el dolor le sostenía la mirada -¿Mí culpa Samuel?, lo dudo, sí tú quisiste irte a meter con Zayyn fue bajo tú responsabilidad, yo no tengo nada que ver en tú miserable vida- sentía sus ojos pesados, su mirada era inclusive más fuerte que la mía, pero yo jamás iba a quedarle mal a Veemon, él es mí compañero, mí amigo mí camarada, y sí mí destino era volver a pelear contra Samuel con gusto lo haría -Da...Dansher, ten mucho cuidado, él no es el Samuel que conocíamos- me dijo Veemon algo preocupado cuando Samuel me avienta contra el suelo -Daghh- aquejo por el dolor y en eso escucho que prefería matarme a mí -Jejeje Samuel, si hay algo que prefiero sin importar que, es que me hieran a mí antes que a mí camarada, claro, eso tú no lo podrás saber por que tú ya no tienes uno- sonreí levemente -Es hora de jugar en serio Samuel, sí es tiempo de terminar ésto definitivamente prepárate para la batalla de tú vida, yo siempre daré batalla y protegeré a mí camarada, y sí para eso tengo que asesinar a la persona que fue mí mejor amigo, como mí hermano, lo haré- le dije decidido a Samuel mientras apretaba mí puño -Matrix Evolution!- grité mientras el cuerpo de mí Veemon se fusionaba con el mío dando paso a un digimon de nivel mega -Goddramon-

Observé con mucho detenimiento a Samuel, y la poca importancia que le daba a mis palabras, ¿tan maleducado se ah vuelto?, ¿sigue demasiado enojado conmigo que quizo ser como yo para darme una probada de mí propio chocolate?, mil dudas se hacían más en mí cabeza, pero las respuestas las obtendría conforme se desarrollara la batalla.

Cuando por fin logré digievolucionar a Goddramon miré a Samuel con unos ojos super serios, dándole a entender que en ésta ocasión todo iba en serio, nada a la ligera, y sí era cierto que todo éste tiempo muchas cosas cambiaron, necesitaba comprobar que -Adelante Samuel muéstrame tú potencial de ahora- dije algo retador al pequeño niño elegido, en eso, observé como Samuel cargó digisoul en su mano a su digivice -Al parecer es cierto lo que decía, ahora es algo similar a Zayyn..., inclusive su dispositivo cambio hmm- pensé algo curioso mientras observaba como daba lugar a su digievolución, pero, era una digievolución que nunca antes había visto -¿Qué....qué es ésto Samuel?- le pregunté algo dudoso y soprendido al ver esa digievolución, nunca antes la había visto, ¿y por qué tiene un aura maligna, qué rayos le pasaba a Samuel?, ¿acaso Zayyn también le hizo ver la verdad a Samuel?, y sí es así, ¿entonces por qué está en mí contra si debería tener los mismos ideales que yo? -Samuel, me debes una explicación, ¿por qué tú digievolución emana un aura oscura?, sí Zayyn te hizo ver la verdad igual que a mí, ¿entonces por qué peleamos?, ¿qué está pasando aquí?- le cuestionaba, realmente su digievolucion no me sorprendía, sabía de lo que Zayyn era capaz, y lo que me importaba realmente era saber la verdad.

Escuchaba atentamente lo que Samue o Krauxmon tuviera que decirme, por lo visto Zayyn también tuvo que ver en ésto, pero como era de suponerse Samuel no iba a cambiar esa forma tan infantil de pensar.

-Es muy interesante Samuel, pero veo que ni si quiera Zayyn puede cambiarta esa tonta actitud que tienes. ¿Y odiarme?, es interesante por que yo no recuerdo haberte pedido nunca que me ayudaras, todo lo haz hecho bajo tú responsabilidad, y las consecuencias de tus actos no tienen nada que ver conmigo- Dije despreocupado y mirando fijamente a Krauxmon -Bien Samuel, si no piensas decirme nada más creo que es tiempo de que por 3 ocasión arreglemos ésto de una ves por todas, ya saben lo que dicen... la 3 es la vencida- solté una leve sonrisa mirando fijamente a Samuel y apuntándole con mis manos -Jejejeje, Luz Arcana- mencioné el nombre de mí ataque a distancia mientras comencé a dibujar un circulo mágico en frente de mí apuntando a Samuel.

Ataque:

Sonreía al ver que Krauxmon se acercaba hacía mí cuando dirigí el ataque -¿Acaso es tonto?, sí se acerca lo único que logrará es que el golpe sea más fuerte, pero bueno- pensé algo desconcertado por la decisión de Krauxmon y en eso se formó una extensa nube de humo que cubrió mí vista -¿Qué tanto daño le pude haber causado?- me cuestionaba mientras trataba de ver a través de aquellla densa neblina, cuando ésta comenzó a aclararse un poco más y vi que Krauxmon logró defenderse -¿Pero cómo...?- no terminé de decir mí oración cuando empecé a sentir por mí cuerpo que algo comenzaba a rodearme e impidiéndome mover -¡Maldición!- exclamé enojado -Puños siniestros- comencé a concenctrar la fuerza de Amon y Umon en mis brazos intentando expandir aquel látigo un poco para poder escapar -No me tendrás atrapado así por mucho Krauxmon- sonrei mirando a aquel digimon mientras comenzaba a aflojar poco el látigo.

Puños siniestros:

Me sentía atrapado, aunque ya había aflojado un poco la del látigo del cual Krauxmon me tenía atado, escuché que lanzó otro ataque hacía mí, posicionando alrededor de mí muchas cuchillas filosas, por lo tanto, escapar por los lados o por arriba ya no era opción.

-Demonios- Me puse un poco tenso y preocupado ante la situación y después me relajé un poco y pensé -Muy bien hecho Krauxmon, veo que ya haz mejorado en unos aspectos- puse una sonrisa seca, y cuando logré aflojar un poco más el látigo para poder moverme, apunté mí brazo que tenía contenida la energía de Amon y la liberé exactamente debajo de mí -Puños siniestros- grité mientras se hacía un gran hoyo debajo de mí y una enorme columna de tierra se levantaba impidiendo que Krauxmon viera lo que hacía -Ésto me ayudara un poco- pensé y entonces entre a ese hoyo abriéndome paso por el subsuelo y con el puño que ya no contenía la energía de Amon rompí el suelo saliendo detrás de Krauxmon y apunté con el puño que tenía la energía de Umon a Krauxmon -Toma ésto, ¡Puños siniestros!- grité liberando de mí otro puño la energía de Umon para que explotara al contacto con Krauxmon y le hiciera gran daño.

Cuando aparecí detrás de Krauxmon y logré lanzarle mí ataque, tan sólo espere en que la montaña de tierra que estorbaba la visión tras el ataque que ejecuté, se dispersara para que lograse ver cuál había sido el resultado de mí plan.

-Espero que mi plan haya funcionado- Pensaba mientras me encontraba un poco tenso por ver lo que sería el resultado de mí ataque hasta que escuché la vos de krauxmon como si no hubiera surtido efecto mí ataque -¿Qué... qué es lo que estás diciendo Krauxmon?, ¿ésto es un juego?- quedé impactado al ver como la tierra se disipó totalmente y Krauxmon no había recibido daño alguno, ¿qué era en lo que Samuel se había convertido?, sin duda ese potencial iba más haya de que tan sólo Zayyn experimentó con él y Agumon, ya que, sólo conocía 2 personas con un poder similar, Vice y Zayyn....¿y sí, Samuel también se había convertido en alguien como ellos?

-Samuel, ésto no es normal, ¿qué rayos te pasó?, tuvo que pasar algo más que sólo experimentar con tus genes...¿acaso te volviste uno de ellos, cómo Zayyn?- pregunté a Krauxmon mientras le gritaba, estaba desesperado por saber que era lo que había ocurrido cuando empecé a ver que iba a dirigir un ataque hacia a mí con el simple hecho de que empezó a hacer movimientos con su arma.

Cuando vi que una onda se dirigía hacía mí actué -Llamarada sagrada- lancé mí ataque contra el ataque de Krauxmon para poder contra-arrestarlo, más sin en cambio sólo sirvió para debilitar el ataque, que logró impactar conmigo y salí despedido algo herido contra el suelo -Ma...maldita sea-pensé apretando los puños e intentando levantarme con dificultad.

OFF:

Me sentía demasiado extraño, no era posible lo que estaba pasando, ¿tan sólo un golpe de Krauxmon fue suficiente para debilitarme de ésta manera?, no podía levantarme con facilidad, y al escuchar lo que dijo Krauxmon, me quedé sin aliento.

-¿Tú haces equipo con Zayyn?- Le cuestioné algo impactado, el Samuel que conozco sin duda nunca haría eso, no podía creer en verdad que Zayyn llegara a reclutar más personas, y que probablemente Samuel estuviera en el mismo equipo que yo...pero ahora éramos enemigos a muerte -¿El equipo DD?, pfff, a mí tampoco me interesa ese equipo, por mí puedes largarte- le miré muy enojado pero sin saber que hacer tras lo ocurrido.

Seguía intentándome levantar cuando vi que Krauxmon sin dudarlo me iba a atacar con su Guadaña que se había convertido ahora en una lanza -No voy a morir aquí...y menos cuando tengo la vida más preciada de mí camarada que tengo que proteger- pensé y con las pocas fuerzas que me quedaban intenté frenar la lanza de Krauxmon con mis brazaletes de Chrome Digizoid, de manera que sólo fuése un fuerte choque que me sacó despedido un poco y volviera a la forma de Dansher y Veemon -Vee-Veemon, ¿estás bien?- le pregunté a mí Veemon mientras me acercaba a él -Dansher, estoy debilitado, pero bien- me respondió dando una leve sonrisa a lo que le correspondí con una igual.

Era evidente que ya no podía continuar la batalla, de ese fuerte ataque mis fuerzas se fueron demasiado rápido, lo único que ya quería era proteger a Veemon, estar a lado de mí compañero el cual sin duda protegería ante todo, hasta que Krauxmon llevó hasta Veemon un látigo enredándolo -¡No, ¿qué es lo que haces Zerker!?- grité algo alertado intentando conseguir fuerzas para ir a lado de mí digimon.

-Da...Dansher, ayúdame- Veemon pedía auxilio mientras yo trataba de ir hacía él, la serpiente no me intimidaba para nada, era con mí camarada con quien Zerker se andaba metiendo y no iba a permitir que le hiciera nada, pero de repente Krauxmon jaló el látigo acercando hacía a él a Veemon y de tantas vueltas lo mareó y quedó inconsciente -¡Veemon, déjalo en paz, es mí camarada!- gritaba desesperado, no podía fallarle a Veemon, todo lo que habíamos logrado juntos no iba a dejar que Krauxmon lo destruyera en un segundo, al parecer quería hacer una venganza por lo que yo había hecho con su Agumon.

Traté de caminar hacía Krauxmon, pero su Gaomon se hizo presente -Maldita sea, sí tuviera más fuerzas...- pensaba mientras Gaomon se acercó a mí soltándome un uerte puñetazo y caí al suelo, no podía levantarme, broté un par de lágrimas ante ese hecho -Veemon...lo siento, te eh fallado- mis pensamientos me perturbaban, me sentía desesperado e impotente de no poder hacer nada -Krauxmon, devuélveme a Veemon por favor- pedí a Krauxmon mientras volvía a intentar a levantarme.

Las pocas fuerzas que aún me quedaban las trataba de emplear para poder levantarme, más sin en cambio era un intento casi inútil, mí cuerpo no respondía para nada, sin duda era la golpiza de mí vida, pero yo haría lo que fuera por mí compañero, Veemon siempre fue mí motivo para seguir adelante, fue por quien yo decidí luchar, y gracias a él, aunque Samuel no lo quisiera ver, gracias a los digimon fue como lo conocí a él, todo giraba entorno a Veemon, no podía permitir que algo malo le pasase a mí compañero.

-¡SAMUEL CÁLLATE!- grité a Krauxmon con las pocas fuerzas que me quedaba -Tú...tú no sabes por que hice todo ésto realmente, y sí tú estuvieras en mí lugar hubieras hecho lo mismo, además, sí yo caí bajo, tú mucho más, sí, rapté a tú camarada y ahora estoy pagando las consecuencias seriamente, ¿pero tú?, ¿tú Agumon?, ¿dónde está él ahora?, es parte de ti, pero no volverás a tener a tú compañero- respondí a Krauxmon mientras trataba de levantarme -Realmente, ¿crees que esto te llevará a alguna parte?- cuestioné a Krauxmon mientras alzaba una ceja.

Caminaba como podía, con las pocas fuerzas que me quedaban hacía el gran dragón de Krauxmon -Ahora, ¿qué te dejará la venganza?, creí que tú estabas en contra de éste tipo de cosas, y ahora sin que te des cuenta te convertiste en el conejillo de indias de Zayyn, y además, te convertiste en lo que más odiabas- sonreí no tenía miedo a aquel digimon, no habría nada que me detuviese sí mí compañero estaba en peligro -Devuélveme a Veemon Krauxmon, por última ves te lo pido por favor, yo no le hice una cosa muy grave a Agumon cuando lo tuve conmigo- pedí por última ocasión a Krauxmon que me devolviese a Veemon.

En eso observé como Krauxmon en un rápido movimiento lanzó a Veemon por los aires y con su guadaña lo atravesó...yo no lo podía creer -¡NOOOOOOOOOOOOOO, VEEMOOOOON!- grité desesperado y frustado soltando unas lágrimas al ver que no había podido hacer nada mientras mí compañero volvía a ser un digitama, y Krauxmon en burla lo exhibió en frente de mí -Veemon...¡Maldito, dame el digitama, es mío- no prestaba atención a las palabras de Krauxmon de que si Veemon me recordaría -No te pertenece, ¡Camilo, eres un maldito, dámelo dámelo dámelo- exigía a aquel digmon.