¿Creyendo en los dioses?[Europa(Efeso)]

Azrael se acercó a los niños los cuales observaban a los fantasmas con miedo, la angustia invadía a todos y la impotencia lo hacía con Duskmon. El lobo se colocó entre lo niños y los fantasmas, Azrael trató de no lanzar hielo hacia los espíritus después de todo necesitaba defenderse pero si alteraba a los entes fantasmagóricos estos atacarían... El digimon miró la situación, no le gustaba nada...Selene tampoco estaba muy contenta con lo que pasaba y se quedó junto a mi para cuidarme del resto. La digimon frunció el ceño- Piddomon, Duskmon tiene razón, no es su culpa, todos cuidamos de nuestro camarada como podemos y él no puede sanar a Magnus, no tienes porque echarselo mas en cara....Solo te está pidiendo ayuda. -Bajo la mascara la digimon no estaba contenta, detestaba la forma en que Piddomon le había hablado a Duskmon, fui con Azrael y Selene se acercó a Piddomon- Dime en que puedo ayudarte, sino puedo con esta evolución utilizaré la otra para ayudar...No te preocupes Duskmon, sanaremos a Magnus. -Comentó notablemente decidida la digimon mientras Sangloupmon retenía a Duskmon. Selene le acercó el bolso con el digihuevo a Duskmon, necesitaba que alguien cuidase del digitama por el momento pues Azrael estaba junto a a mi y los niños tratando de que los espíritus se alejaran.

Suspire suavemente y acaricié el pelaje de Fenrirmon el cual se molestó por la frase de Duskmon, mas que por su frase por el hecho de que quizás era cierto que Piddomon creía que los digimon oscuros no cuidaban de sus camaradas. El lobo gruñó, no le hacía ni una pizca de gracia lo dicho por Duskmon, le acaricié las orejas suavemente para calmarlo pero el lobo se negaba a calmarse con facilidad- Yo soy oscuro y sin embargo cuido de mi camarada -Fruncí el ceño y dejé que el lobo se desahogara, no iba a dejar que fuese mas allá pero estaba algo ofendido, no era su culpa.

Suspire ante la situación, si los espíritus se alteraban iba a ser un problema pues si Selene no podía purificarlos y Azrael solo podía tratar de espantarlos estábamos un poco limitados a no hacer nada o defenderse pero solo un poco o lo necesario. Al ver que Piddomon no necesitaba ayuda Selene regresó a mi lado y suspiró suavemente, detestaba el hecho de no poder ayudar y ser inútil en las peores situaciones, le frote el hombro suavemente para que se calmara un poco pues no le hacía ninguna gracia ver como Magnus estaba mal y ella solo debía observar, sin embargo recordó que debía ser paciente a veces por lo que se centró en otras cosas a parte de lo que sucedía, dejó volar su mente hacia su hermano mayor, se notaba que estaba mal pero ella tampoco lo podía solucionar ¿Qué había hecho bien desde que había logrado tener un digielegido....Suspiró poniendo atención solo a lo necesario y a las charlas, soltó una risa por lo que había dicho Duskmon, lo entendía claramente después de todo ella había estado en el mal siendo un digimon del bien. La mayoría rió por el comentario, incluso Clockmon y Azrael ¿Quien no había alcanzado su lado oscuro por un momento aquí?

La tranquilidad no duró mucho cuando Magnus se levantó en seco lastimándose un poco mas por lo que Selene amagó a ir a ayudar a Magnus el cual gritó en nombre de Adham, eso no tardó en alertar a Fenrirmon el cual ,al ver que Adham no estaba, subió a Anwar sobre su lomo y se alejó un poco por precaución. Selene se puso nerviosa, los espíritus le causaban dicho nervios debido a no poder exorcizarlos. La diosa digimon miró a Duskmon- ¿A donde se lo llevaron? -Azrael gruñó molesto al no haber visto como se llevaban a Anwar, el problema era que debían moverse con Sangloupmon y Duskmon ya que los espíritus podrían atacarlos- Y esta es la razón por la que no dejaba mi forma mega...Tenemos que ir a buscarlo de alguna forma -Fenrirmon arrastraba un poco las palabras, detestaba en esa forma a los espíritus mientras que su mega y cambio de modo solían espantarlos debido a su posición como un posible psicopompo en su mega y en su cambio de modo llegaba a serlo. Se notaba que ambos hermanos se estaban poniendo algo nerviosos después de todo no podían contar con sus poderes ni siquiera Selene y Azrael no podía evolucionar por lo que era normal que se pusieran así. Acaricié la cabeza de Fenrirmon- Calma, ya podrán ayudar de alguna forma, por ahora traten de no ponerse mas nerviosos de lo que aparentan. -Comenté ligeramente esperando alguna idea o forma de salvar a Adham.

Selene se disgustó al ver el rostro de Piddomon y Duskmon pero mas al notar a Anwar descompuesto sin mencionar que Magnus quería ir en busca de su hermano, esto era lo que solía decir su hermano Ashley "El principio del fin". El hecho de que Magnus se quisiera levantar le complicaba mas las cosas a Selene la cual estaba bastante preocupada por la situación y Duskmon se estaba poniendo nervioso al igual que ella, apoyó sus manos en lo hombros de Magnus para frenarlo pues quería crecer y como Duskmon había informado si Magnus envejecía el veneno se esparciría con mas rapidez y lo mas probable que en cuestión de minutos estuviera muerto y eso no era bueno, que pensaba, claro que no era bueno. Suspiró suavemente y trató de frenar a Magnus como podía ya que no quería dañarlo mas, ni que sus camaradas le hicieran daño a ninguno de nosotros. Selene se exaltó al oír los gritos de Duskmon y mas al oír la promesa de muerte lo cual la puso tensa mas bien sus músculos se tensaron por si acaso debía defender a Magnus de las espadas de Duskmon o cualquier ataque que quisiera efectuar el digimon oscuro. Sabía que Duskmon no iba en serio, quería a su camarada solo que tenía miedo, estaba frustrado y nervioso, y no eran buenas juntas, después de todo conocía el sentimiento y la sensación de dichas emociones juntas.

¿De donde venía Duskmon humanos eran comida? ¿De donde venía? Selene se puso mas nerviosa al escucharlo decir eso pero tuvo que atrapar a Magnus cuando lo vio desvanecerse en silencio sobre nido, bajó lentamente la cabeza del niño y puso atención a las palabras de Duskmon, no le gustaba la idea de que su hermano se fuera pues podría pasarle algo pero debía dejarlo ser, después de todo había regresado con la intención de ayudar. Vio a Anwar, no sería buena idea llevarlo por lo que se acercó y lo cargó en sus brazos- Anwar no está bien...Supongo que es por alejarse de su hermano. -Comentó Selene, apoyó el dorso de su mano en la frente de Anwar y miró a Fenrirmon pudiéndole que traiga a Adham. Azrael miró a Sangloupmon y caminó hacia la oscuridad usando el olfato para buscar a Adham ¿Cómo habían pasado de estar en un templo a una tumba?.

Selene dejó a Anwar en mis brazos y observó a los espíritus que los acosaban, si sangloupmon los Ahuyentaba y se había ido ¿Qué los espantaría ahora? Me acercó a donde se encontraban Piddomon y Duskmon, estaba demasiado nerviosa considerando que no solo Anwar, Magnus y Adham estaban en peligro sino que su digihuevo también lo podía estar y si le pasaba algo probablemente Selene se descontrolaría y evolucionaría de forma oscura o probablemente como caballero y destruiría todo a su paso para encontrar su tama.

Selene se sorprendió ante la actitud de Anwar, lo vio y escuchó susurrar con desesperación que no podría acompañarlos a buscar a su gemelo, miró al gemelo al pasar a los brazos de Luka, estaba preocupada por todo lo que estaba ocurriendo, Azrael se había ido solo, los espíritus no podían ser exorcizados....No sabía que hacer, si algo no había visto era a Selene nerviosa a tal punto pero al ver a todos sus seres queridos en peligro tenía miedo y estaba tensa por si acaso. Miré a Anwar al escucharlo gritar, rompió el enorme silencio con la desesperación plasmada en su rostro ¿Que le ocurría? Selene vio a Anwar avanzar hacia Magnus y se interpuso en el camino del niño, cosa que no fue muy difícil ya que estaba cerca de Magnus, la digimon frunció el ceño bajo su máscara, no quería que Anwar dañase a nadie por lo que me miró en señal de que llevaría a Anwar hacia su hermano pero lo haría si nadie salía herido porque a pesar de que Anwar estuviera separado de su hermano ella también estaba mal al igual que todos, tenía miedo de dejarme y que me sucediera algo malo. Selene se agachó y se calmó para hablar con Anwar- Te llevaré con mi hermano a buscar a Adham si bajas el arma. -Duskmon trataba de acercarse a Anwar, si este último le hacía daño a Selene probablemente Azrael le buscaría sin descanso, su hermana era casi intocable y como apenas conocía a los niños no sabía de que era capaz el digimon lobo pero....Si debíamos tratar de que no nos hiciera daño.

Por su parte Azrael trataba de rastrear a Adham pero de le hacía bastante complicado, sabía que el gemelo negro tenía aroma a chocolate mientras que el blanco a dulces y gomitas, no sabía si su olfato estaba mal o eso era lo que llegaba a oler cuando los tenía cerca. El problema con los aromas que captaba de las personas era que muchas veces le costaba encontrarlos y ahora le estaba costando demasiado, el olor muerte y la tensión en el ambiente no ayudaban demasiado solo se complementaban con la prisa que tenían por encontrar al gemelo de negro. En primer lugar el lobo no entendía porque habían ayudado a los gemelos pues apenas si los conocían pero ya que estos últimos los conocían en el futuro no quería quedar mal con ellos en aquel tiempo. El lobo siguió olfateando en busca de un aroma útil pero no hallaba nada apenas olores desagradables y molestos- Hay demasiados olores....No encuentro casi ningún rastro de Adham y no se puede oler a un fantasma así que supongo que deberemos seguir el rastro de alguno... -Miró el lugar detenidamente y trató de olfatear mas para encontrar al gemelo negro.

Selene se puso mas nerviosa aún, Anwar no escuchaba a la razón y si hacían un mínimo movimiento podrían poner en riesgo la vida de Magnus o de si mismo. El niño retrocedió, no parecía que pudiese hacer nada mas que observar, todos estábamos en la impotencia, tanto Duskmon como Piddomon, Selene y yo, mis manos temblaron ligeramente- Luka te lo a dicho, jamás te mantendríamos alejado de Adham, es tu hermano y si lo necesitas te llevaré con él cueste lo que cueste....Pero tienes que confiar en mi. -Cogió aire y dejé de temblar, jamás había temblado y nada le haría temblar, bajo la máscara conservaba el ceño fruncido y no dejaría de mostrarlo así, ella era sacerdotisa y tenía orgullo uno bastante inquebrantable ya que no podía verse caer de ninguna forma, solo en batalla, muriendo o por sus seres queridos. Se bajó su báculo con cuidado apoyándolo en el piso y dos de sus dedos sobre este, deseaba que Anwar confiase en ella, sabía que podía dejar su tama en manos de Duskmon o Luka pero no lo veía seguro después de todo era una madre y no veía mas seguro a su niño que consigo misma. Anwar se llevó la punta del cuchillo al cuello lo cual me alertó tanto a mi como a Selene, si algo le pasaba a Anwar, Adham estaría en la misma situación posteriormente ya que por lo visto los gemelos no podían vivir sin el otro, deseaba poder hacer algo mas pero no podía entrar solo a la oscuridad.

Selene soltó un suspiro ahogado por su mano cuando Magnus sujetó el cuello de Anwar y el cuchillo perforó un poco su brazo, sin embargo sacó del bolsillo del menor un reloj de muñeca el cual comenzó a reproducir una canción tranquilizante mientras Magnus le hablaba a Anwar, supuse que era...¿Alicia en el país de las maravillas? No sabía bien pero los nombres le sonaban mucho por lo que simplemente la digimon se conformó con eso pues si así se podía tranquilizar al gemelo blanco era mejor. Selene suspiró por lo bajo y me miró como preguntando donde estaba Azrael pero simplemente pude encogerme de hombros si saber que decir.

Levanté las orejas el igual que Sangloupmon, también había escuchado el sonido pero recordaba que este era igual al del reloj de Prometeo, si, era igual pues ya lo había escuchado con Luka en el hospital. El lobo miró a su igual al escucharlo hablar ¿Así que aquel reloj era ahora de Adham? Sacudió la cabeza y olfateo en la dirección de la que venía el sonido- Entonces sigamos el sonido, probablemente nos lleve a Adham, es mas factible que seguir buscando un olor que entre toda esta peste no encontraremos. -Comentó Fenrirmon antes de girar y correr hacia la dirección en la que venía el sonido.

Las palabras de Selene no funcionaban con el gemelo blanco y ambos no entendíamos bien el porque, Selene no deseaba separar a Anwar de su hermano, la digimon solo quería llevarlo hacia el gemelo negro para que ambos estuvieran bien y no cometieran ninguna locura como la que estaba sucediendo en aquel momento. Seguramente los nervios de la digimon afectaran el resultado de sus palabras, era normal después de todo alguien que no tenía al ser querido con el que se siente seguro. Suspiramos aliviados mutuamente cuando notamos que la música y Magnus habían logrado calmar a Anwar, lo que nos parecía raro era la forma en que Magnus y Anwar se llamaban, aunque Selene le encontró sentido cuando recordó la historia de "Alicia en el país de las Maravillas" allí habían dos gemelos, Tweedledee y Tweedledum, y Sonriente o Cheshire, eso dependía de la reescritura y la editorial del libro supuso la digimon ya que había visto que el gato era llamado de diferentes formas. Observé el brazo de Magnus y luego a Duskmon el cual parecía estar por desmembrar a Anwar, Selene estaba atenta al digimon, además de que estaba mucho mas relajada que antes por lo que se enderezó para estar mas cómoda y mirar a Duskmon el cual se "declaró" inocente ante la pregunta de Piddomon.

Las palabras de Magnus fácilmente calmaron a Anwar, lo que no sabía es hasta cuando lo haría pues el niño pronto se daría cuenta de que su hermano probablemente no volvería tan pronto como el creía pues ambos lobos no parecían ir a volver a pesar de su prisa. Miré a Piddomon y me recogí de hombros- ¿Que hay del veneno? -Bajé la voz al hacerle la pregunta a Piddomon y dando por hecho que si Adham no volvía Anwar no quitaría el cuchillo de su lugar y Magnus sufriría los efectos del veneno, suspire y pedí a dios que Azrael de verdad fuera un arcángel responsable y trajera a Adham rápido- Debo decir que....Extraño que Azrael sea un psicopompo destructivo, así podría juzgar estas almas..Aunque no me gusta su método destructivo, es cruel. -Comentó la digimon con cierto enojo pues recordaba que Azrael había destruido a su digitama, sin embargo no era momento de recordar eso...

Azrael siguió a Sangloupmon, el lobo vampiro era rápido y Azrael le seguía el paso, vio cuando Sangloupmon se detuvo y parpadeo al ver la situación en la que estaba el gemelo negro...- ¿Y ahora? -Susurró el lobo a su compañero vampírico.

Selene soltó un suspiro al ver a Anwar mas calmado por lo que agarró su báculo dejando que la punta afilada tocase el suelo y los aros de la parte superior chocaran entre si y el que los sostenía para producir un tintineo suave, eso calmaba bastante a la digimon, sabía que además era una de las formas que tenía para atacar. Recordaba que podía crear un área con pétalos de cerezo y ambiente calmado pero en este caso los fantasmas no parecían querer alejarse...La digimon se tomó la barbilla y miró a Duskmon al ver como espantaba a los espíritus cuando los miraba, quizás.... Comenzó a pensar ¿Podrían pasar? Lo mas probable era que si y así mantendría alejados a los espíritus malignos, no le hacía ninguna gracia el hecho de que en cualquier momento de pudieran llevar a cualquiera- Creo que podría hacer una barrera contra espíritus malignos para que no se lleven a nadie mas o ocurra algo peor ¿Que dices Duskmon? No sé cual sea la reacción de los espíritus lunáticos pero por ahora es lo único que se me ocurre y creo una buena opción.... -Sugirió Selene pues no tenía otra idea contra dichos espíritus, aun siendo mayor tenía que aprender no solo magia sino también exorcismo de los espíritus y para eso necesitaba a Azrael el cual en su cambio de modo o como mega podía enseñarle mucho pero en aquel momento no se encontraba presente y aun no tenía su evolución mega.

De uno de los ojos de Magnus cayó una lentilla o lente de contacto color azul, su ojo realmente era rojo y enorme como uno de los ojos de Duskmon, en verdad llegaba a parecer Sonriente, de Alicia en el País de las Maravillas, el joven de cabello azul seguía intentando calmar al gemelo blanco y aun soportaba aquel cuchillo en su brazo. Selene no entendió bien la pregunta de Duskmon pero por la respuesta de Clockmon dio a entender a que se refería...Mas o menos claro.

Azrael asintió ante el plan de Sangloupmon, esperó a que el lobo vampírico fuese a distraerlos y corrió hacia Adham cortando lo que fuera que lo amarraba, cogió al niño por la ropa y lo subió a su lomo- Anwar está bien, te llevaré con él antes de que haga una locura. -Anunció el lobo y comenzó a retomar camino, corriendo hacia el nido en el que se encontraba Magnus, esperaba que Adham no le hiciese nada pues al haber visto como reaccionó el gemelo blanco no tenía idea de que haría este.

Miré a Piddomon, en sus palabras estaban plasmados sus nervios pues se notaba que buscaba sacar un tema para calmar o hacer menos tensa la situación, Selene le apoyó la mano en el hombro y se lo masajeo suavemente, sacudiéndolo ligeramente para calmar los nervios del ángel, sabía que éste estaba tratando de mantenerse calmo - Tranquilo, mi hermano lo traerá de nuevo. -La digimon solo quería ver bien al ángel que seguro le reprocharía o se calmaría, no tenía muchas opciones mas que confiar en que Azrael traería a Adham a salvo, lo que no sabía era si su hermano saldría a salvo, odiaría tanto perderlo y le costaría mucho pero en verdad mucho superarlo, era su hermano después de todo, pero una diosa como ella no podía echarse abajo pues los demás la necesitaban, necesitaban una pequeña esperanza. Miré de nuevo a Magnus, en su cara estaba cristalizada una respuesta contraria a la que le había dado a Piddomon, era de cierta forma divertido pero notaba que la daga en su brazo le estaba haciendo daño, no era yo el mejor para decir aquellas cosas- Anwar, que tal si esperamos a tu hermano con Magnus sano, seguro le gustará verle bien. -Comenté desde mi lugar, tenía miedo a que Anwar le hiciera mas daño a Magnus por lo que no demostré nada de mi miedo ni inquietud. Selene me miró con una suave sonrisa y luego notó que Duskmon bajaba la vista para pensar, al aprobar la idea de la digimon dijo que esperaría en el pasillo- En cuanto lleguen entra, será mas peligroso supongo... -Informó la digimon la cual sacó varios pergaminos que comenzó a escribirlos con un pincel sacado de su bota y pintura dorada, pegó en las paredes de la habitación, no tardó demasiado, pronto volvió a acercarse a nosotros y golpeó suavemente la parte afilada de su báculo contra el piso logrando que los aros dorados del mismo chocaran y resonaran suavemente, las letras de los pergaminos refulgaron de dorado, dicho brillo se esparció por la habitación hasta las puertas creando una barrera entera que espantaría a los espíritus y no los dejaría entrar- Si mi hermano llega y Luka puede hacerlo evolucionar y que me ayude con su magia. -Suspire suavemente, solo esperaba que la barrera durara el tiempo suficiente para que Azrael llegara.

El lobo escuchó las palabras de Adham y gruñó al oírle decir que le falló a su hermano pues no era así- Él está bien, pero te necesita, no le has fallado, nunca lo harás pero sino me dejas llevarte a salvo con Anwar estoy seguro de que te necesitará mas que nunca....Te necesita ahora, eres su hermano...Y yo te llevaré, te prometo que nada le pasará. -El lobo notó como las barandillas se despegaban para atravesarlo. Fenrirmon comenzó a lanzar una ráfaga de hielo y veinte metros del piso a su alrededor comenzaron a congelarse, del mismo hielo empezaron a salir estalagmitas que sostuvieron las barandillas que trataban de guillotinarlos. El lobo subió las escaleras de tres en tres hasta llegar a la cima y seguir corriendo hacia la habitación.

Notaba a Piddomon molesto ¿Como no estarlo? Magnus, se notaba, era un chico pequeño y los niños no eran exactamente pacientes o quietos, pero Magnus....Magnus, se notaba, podía sacar de sus casillas hasta a su propio digimon el cual se supone debía tenerle mas paciencia, aunque eso se podía contradecir ya que Selene y Azrael no eran de los digimon mas pacientes incluso aun siendo una diosa digimon y un ángel caído demoníaco, aunque esto último era entendible, se divertía viéndome sufrir los castigos que Selene me imponía, los cuales no eran nada agradables pues bueno... Eran castigos. Suspire con suavidad pero al ver el rostro de Anwar y su reacción ante mis palabras comencé a preocuparme, mas de lo normal, supuse que Azrael y Selene lo sentirían, que estaba preocupado por alguna razón, quizás Azrael lo dedujera pero Selene ya había visto la razón de mi desasosiego. La digimon se acercó y agacho a acariciarle el cabello a Anwar- Anwar está bien, se siente aquí. -La diosa le señaló el lado izquierdo del pecho- Yo lo siento con mis hermanos, así que supongo que tu lo sentirás con Adham, él está bien y seguro estará muy feliz de verte bien ¿No? Después de todo quiere ver a su hermanito feliz y tranquilo. No queremos angustiarlo -Le secó las lágrimas con el pulgar al menor y le acarició el cabello de forma maternal al igual que la sonrisa que le regalaba a Anwar. Olió el aroma de su hermano mayor y recordó que él no podría entrar hasta evolucionar en su etapa mega-Azrael no es pervertido. -Al menos no lo había visto serlo por momento.

Fenrirmon vio como los fantasmas se dispersaron casi llegando a la entrada de la habitación, sin embargo notó un obstáculo con forma humanoide, obstáculo contra el que impactó pero no dio tiempo a disculparse, al notar la barrera conjeturó que había sido obra de su hermana por lo que dejó de lado a Duskmon y se aventuró hacia la barrera, no tardó en llegar y dejara Adham cerca de la barrera, lo empujó suavemente con su hocico haciéndolo entrar- Ve con tu hermano...Lo siento Duskmon. -Se disculpó lobo al voltear y mirar al digimon oscuro, en si no sabía porque se disculpaba pues casi nunca lo hacía, pero la amabilidad constante en todos lados lo volvían algo blando o mas específicamente, considerado.

Anwar estaba mas calmado y al parecer los digimon también, la tensión de un tamer y su miedo eran la peor alarma para Selene, Azrael y supuse que también para Piddomon y Duskmon. Selene se levantó al ve el reloj volar hacia el pasillo por el que se había ido su hermano, Piddomon siguió al reloj el cual se unió con otro. El digimon ángel primero recibió a Adham al cual bajó para que fuera con su hermano y luego cogió los relojes o mas bien lo que había dentro de ellos, un emblema partido en dos...No cualquier emblema, Selene lo miró y se acercó a Piddomon observando el emblema- Es...Un ying y un yang. Interesante... -Comentó la digimon, realmente estaba algo pasmada el ver el símbolo del emblema de los gemelos, yo nunca había tenido un emblema por lo que no estaba muy interesado en aquello, me quedé con Magnus- ¿Como reparas un emblema? -Preguntó Selene suponiendo que si Piddomon venía del futuro quizás supiera como repararlo- ¿Que tal si dejas de ver como reparar un emblema y tratan de sanar a Magnus? -Comenté con cierta brusquedad y Selene me miró casi de forma mortífera lo cual me hizo callar y dejar de mirar a ambos digimon. No entendía quien era el conejo blanco ahora y no tenía ganas de averiguar en aquel momento, era bastante cansino el hecho de ponerme a averiguar los personajes de Alicia en el País de las Maravillas en aquel momento, el ambiente que creaba la energía de Sakuyamon aliviaba la mente y los músculos, era bastante relajante.

Fenrirmon asintió ante la pregunta de Duskmon pero antes de que pudiera contestarle el digimon oscuro entró en la barrera, el lobo negro bajó las orejas, no podía entrar, era débil y sabía que si entraba debía volver a la terminal, el problema es que si se quedaba fuera... Probablemente si Duskmon o Sangloupmon no estaban los fantasmas lunáticos le atacarían. Miré a Azrael, supuse que estaba negado a entrar y hasta que no estuviera en peligro o a punto de morir...- ¿Quien es el conejo blanco? -Suspire ligeramente preguntando. Selene observó a Duskmon, se notaba que sufría daños pero no estaba dispuesta a bajar la barrera, solo a debilitarla un poco...Para que no fuese una presión tan grande para el digimon de multiojos. Fenrirmon aun esperaba a Sangloupmon, en realidad, no estaba decidido a entrar ya que mantener una barrera contra espíritus malignos como los de allí no era sencillo, aunque la digimon usaba una barrera en la casa para espíritus y ocultar la presencia de los bugs y ellos mismos... Para que no se viera su práctica pues un dragón de 25 M no se veía todos los días en Londres a pesar de que la mansión estaba apartada.

Selene arqueó una ceja con incredulidad pero era razonable aquel hecho, un digimon con solo un mes no aprendía demasiado, pero considerando que era del futuro había supuesto que Piddomon sabía que hacer, este no era el caso conjeturo la diosa digimon antes de ver a Piddomon correr hacia Magnus para empezar a sanar al niño, se notaba a los gemelos asas preocupados, era normal pues los tres eran hermanos, a pesar de ser adoptados, Selene comprendía muy bien el sentimiento de los hermanos adoptivos, en su familia todos eran adoptados, no podía pensar en una vida sin sus hermanos, sin el molesto pero culto Azrael, el bromista y amable Bäel, el cínico pero preocupado Ashley y el pequeño malhumorado pero animado Mikael, eran sus hermanos adoptivos y los necesitaba a todos y cada uno de ellos, tal como.... El ser humano necesita de los de su especie o de la comida para sobrevivir. Miré a Piddomon cuando explicó con cierto corte, se notaba que no le gustaba ser llamado así o quizás no estaba a gusto con las circunstancias en las que se conoció con sus camaradas. Selene miró a donde Azrael, temía por su hermano, últimamente siempre lo hacía y pensaba en que quizás estuviera sin pareja siempre, sin embargo no todo se puede...Y que a su hermano le guste algo era difícil.

Me dio cierta risa el hecho de que, aun "agonizando", Magnus les pidiera tomar un té cosa que Duskmon interrumpió para regañar a Magnus y este le respondió, era su forma de demostrar el nerviosismo, el deseo de Duskmon de salvar a su compañero humano y el afecto que Magnus le tenía a su compañero y amigo digimon. No duró mucho el sentimentalismo del momento que el mismo Duskmon creo y ahora estaba interrumpiendo para pedir ayuda a Selene, la digimon apenas se entrenaba en es tipo de arte y esperaba a Azrael para poder aprender mas y sanar mas fácilmente- Puedo sanarlo, pero no en esta forma. Así soy una sacerdotisa, si tengo que sanara a Magnus deberán encargarse de los espíritus lunáticos, debo usar otra evolución y como veo que accederas, Duskmon, tu y Azrael traten de que no se lleven o ataquen. -Apunté con mi digivice hacia Selene , este último lanzó un fulgor de la pantalla y Selene evolucionó, por primera vez, en uno de sus cambios de modo, Sakuyamon Heaven Mode, o como podía verse, Gallantmon versión femenina. Selene se acercó y en la cúspide del chakram en su espalda se género un fulgor, dorado y bruñido, este se extendió formando una cúpula de diez metros de radio. La luz que se generaba en el ambiente no solo comenzaron a sanar a Magnus sino también a Duskmon y borrar las marcas en el cuerpo de Adham; aquellas que lógicamente quedaron al estar atado.

La digimon se concentró en sanar a Magnus lo mas rápido que pudo, sabía que la técnica para sanar gastaba una parte de su poder y al concentrarlo en Magnus debía sanar mas rápido de lo normal, pero sus capacidades defensivas y ofensivas iban a reducirse por lo que no podría estar demasiado tiempo en esa evolución,ya había perdido un cuarto de su poder. La digimon se sintió observada, eran los gemelos quienes la miraban, Duskmon estaba atento a su amo y Azrael estaba entrando al cuarto para acercarse a mi, se sacudió liberando algo de polvo pedroso, seguramente era de haber ido a buscar a Adham- Esa técnica no durará demasiado tiempo, debo esperar a evolucionar y quizás pueda ayudarte con magia, por ahora soy solo un lobo -Fenrirmon se estiró desperezándose, hace mucho no corría de una muerte segura, su última persecución había sido realizada en el digimundo, cuando escapaba de sus hermanos por destruir el digitama de Selene....Su propio digitama el cual había quitado en aquel momento de mi hombro para tenerlo cerca, se notaba que Azrael estaba arrepentido hasta el último pelo de su pelaje negro azabache. Miré a los niños y luego a Magnus el cual estaba quejándose por las protestas de Piddomon, a pesar del fulgor bruñido y dorado, la digimon blanca, todo lo que sucedía seguía creando una atmósfera tensa.

Azrael reconoció la canción que sonaba en la habitación "Pop Goes The Weasel", la canción que escuchaba conmigo cuando estábamos solos y podíamos charlar, claro esto sólo era cuando éramos pequeños, es decir, cuando yo era pequeño. El veneno probablemente ya estuviese eliminado del todo, las heridas de Magnus sanarían con mayor facilidad, aun así la dama blanca no se concentraba bien, los espíritus no eran una molestia por lo general, pero en aquel momento estaban siendo agobiantes a pesar de que Duskmon los estaba espantando. Azrael estaba conmocionado, quería evolucionar para ayudar en lo que fuera o pudiera hacer- ¿Crees poder evolucionar pronto? Porque aunque lamente decirlo te necesito como psicopompo destructivo Nii-sama -Aclaró la mujer caballero, Azrael no podía hacer muchas muecas siendo un animal, pero si hubiera hecho una sería de disgusto o gracia, la actitud del arcángel era demasiado cambiante y drástica.

Selene sintió la mirada de su acompañante angelical el cual probablemente ya había notado que el veneno y la fiebre estaban desapareciendo mas bien habían desaparecido por completo pues el poder de Heaven Mode había acabado, suspiró ligeramente y se estiró un poco, la digimon caballero miró a Azrael y el lobo le acercó el bolso con el digihuevo que ella tomó con cuidado entre sus brazos, después de tanto tiempo, Azrael y Selene podían llevarse mejor mientras que el primero se sentía aliviado por hacer las cosas bien...Por poder estar remediando sus errores del pasado. Selene sintió la presencia de otros dos digimon al igual que Azrael, ambos no creían que llegarían tan pronto, también se preguntaban como entrarían. Selene miró los relojes a los cuales se refería Piddomon, se notaban especiales, supuso que el albino se los dio ya que este era su padre adoptivo, nunca se había imaginado al albino como padre, ni mucho menos cuidando niños pero al recordar que cumplía con la función de atender a los digimon del castillo entendió porque su inmensa paciencia, ella aun no sabía lo que era sed madre, una voz en su interior le decía que a pesar de que su pequeño saliera del huevo, no significaba que las cosas fueran a mejorar en aquel futuro que había visto Luka y de pronto tan rápido como vino se fue su alegría. Azrael se acercó a Anwar y le empujó suavemente el hombro con su hocico cuando escuchó la campanilla de Clockmon sonar- ¿Feliz de verme en otra forma -Preguntó el lobo ladeando la cabeza suavemente hacia el gemelo blanco.

Me quedé con la risa en la garganta por la discusión de Magnus y Duskmon, antes me llevaba así con Selene, sabía que me quería pero ninguno lo demostraba ¿Me habían regañado por eso y al chico no? Quizás era porque yo era un adulto y el un niño que de todos modos iría cambiando con el tiempo y yo igual, solo que los adultos no le dábamos mucho rodeo a las ordenes o los consejos, al menos eso conjeturé en aquel momento el cual se volvió menos tenso. Vi a Duskmon ir al pasillo, Selene también miraba a la entrada- No esperaba que llegasen tan pronto, estaban de viaje... -Comentó cuando veía dos pares de alas, unas doradas y otras blancas, eran Bäel y Ashley o también se los podía ver como Anubismon y MagnaAngemon- Ash, Bäel, que oportunos ¿Eh? Bastante tarde llegaron, como siempre. -Bäel frunció el ceño y Azrael le devolvió la mirada haciendo que el dios digimon regresara a su mirada inexpresiva- ¿Crees poder solo Piddomon? Ashley puede ayudarte. -Dijo el lobo negro y resoplo suavemente por la nariz.

Ashley y Bäel vieron a los niños, a la mayoría mirarles con seriedad y enojo, el silencio que inundó la habitación hizo que el dios chacal y el arcángel entendieran que no eran bienvenidos. Duskmon los miraba con seriedad, con enojo. Ambos miraron a Azrael dejando a su criterio que pasaría, Azrael era el hermano mayor, el padre adoptivo de todos, muchas veces dejaban en sus pensamientos las decisiones que debían tomar y el lobo simplemente observaba la situación, era obvia su decisión, pensaba en su familia antes que en unas cuantas personas que apenas conocía, en especial en cuanto a los gemelos, Magnus era otra historia- Tranquilos hermanitos, porque no van a vigilar las afueras del lugar y Bäel, puedes espantar a los espíritus supongo. -El chacal asintió cabizbajo, eran sus hermanos, Selene y Azrael, Ashley y Bäel, siempre mente mantuve el ceño fruncido. Por su parte la diosa zorruna suspiró, dejó el Heaven Mode pues estaba gastando energía de gusto. El dios y el arcángel entendieron la indirecta, el último hizo una mueca de disgusto- Cuando volvamos a casa cantaremos unas canciones, va hermanitos... -Ashley y Bäel salieron pronto del lugar dando miradas de reojo hacia sus hermanos. Selene se quedó a mi lado y Azrael igual. Fenrirmon estaba enojado, se notaba pues fruncía el ceño y arrugaba el hocico, no le hacía ninguna gracia el hecho de que le dieran la espalda a sus hermanos menores, menos que los hicieran sentir desplazados o se les hicieran desplantes- ¿Hay algún problema con mis hermanos en el futuro?¿Hicieron algo por lo que deban mirarlos de esa forma? -La paciencia y la bondad que el can oscuro había mantenido se habían esfumado, el hacerle cosas como esas a sus hermanos era hacérselo a él, el los había criado, mimado, educado, los había visto crecer como un padre y hermano mayor adoptivo, sabía sus lados buenos y malos, como poner orden si se trataba de ellos y no iba a dejar que....Los ofendieran.

El lobo se acostó detrás de mi y miró a Selene de forma seria, la diosa digimon entendía las miradas que su hermano le daba y significaban que cuando todo se solucionara se irían, también las entendía pues habíamos empleado el mirarnos para entendernos muchas veces- Tranquilo... -Le acaricié la cabeza a Fenrirmon y suspire suavemente, peine su pelaje y el mismo se sacudió un poco para acomodarlo. No pudo quedarse quieto por mucho tiempo y se puso a recorrer la habitación buscando algún hueso u objeto que pudiera morder para sacar a flote su molestia sin intentar matar a nadie, no estaba en su obligación quedarse a cuidar a unos mocosos y digimon que ofendían a sus hermanos, cuando llegaran no solo cantarían sino que Azrael se pondría a usar el saco de boxeo que usaban tanto el como Selene muchas veces, el muñeco de práctica o arañar los árboles era también una opción- Es...Una pena, Ash habría ayudado....Bueno, haré otra barrera por si acaso. -No era por si acaso, la digimon quería entretenerse y no socializar demasiado.

Azrael gruñó de nuevo, sabía que Ashley y Bäel eran destructivos y muchas veces impacientes, pero nunca habrían de comportarse así, el lobo negó molesto agitando la cabeza y volvió a mi lado para roer un hueso que había encontrado, no parecía viejo por lo que no había problema en sus pensamientos. Azrael siempre había pensado que lo mejor era que Ash y Bäel vivieran en el digimundo y es que probablemente fuera así, quizás debía enviar a sus hermanos al digimundo ya que la mayoría de los que los veían hacían lo mismo, eran despreciativos con ellos y eso no le hacía la mas mínima gracia. Selene miró a su hermano sabiendo en que pensaba, sabía que dentro de su cabeza conjeturaba muchas ideas, algunas extrañas y otras no tanto, el problema era lo que estaba pensando ahora y el rencor que tendría por los demás en mucho tiempo, como había pensado durante toda su vida, si alguien ignoraba o maltrataba a sus hermanos se lo hacía a él, esto solo lograba que el arcángel estuviera mas furioso al punto que cuando estallaba congelaba todo o en su forma mega lo mas probable es que arrancase el saco de boxeo sacándolo de su lugar, la diosa digimon siguió con lo suyo. Azrael no sabía bien que pensar, en definitiva no le interesaba cambiar el futuro, si así tenía que ser pues bien, solo le importaban sus hermanos y yo, siendo su camarada y amigo era normal, lo que no era normal para mi pero si lógico es que Selene temiera a la furia de su hermano mayor, no es que yo no temiera pero sabía que no me haría daño.

Azrael miró a Duskmon, estaba cansado ya, que importaba el futuro, si cambiaba mejor pues quizás sus hermanos no tuvieran que pasarla mal por ir a buscar a un par de niños malcriados. Miré el digivice, la pantalla estaba brillando, suspire y apunté el digivice al lobo el cual fue rodeado por la típica data que demostraba la evolución del digimon, la mirada de Selene no era de felicidad exactamente- ¿Miedo? -La digimon hizo una mueca de disgusto y siguió pegando los pergaminos- No me hace muy feliz lo que viene. -No era ultra dicha evolución, tan pronto como salió extendió un par de alas negras, la mirada fría y umbría del mayor hacían juego a la mala cara que estaba plasmada en su semblante. Movió sus dedos y alas acostumbrándose a una evolución que no usaba hace tiempo ya, hace 18 año solo había podido estar así en mi mente y ahora verle parado al lado mío daba cierta aprensión y asombro- No le tengo rencor a nadie...Ni mucho menos Selene pero quizás me arrepienta de mis acciones. -El arcángel se cruzó de brazos y miró a Selene la cual solo le echó una mirada de molestia. Escuché las palabras de Magnus mientras Azrael iba con Selene a ayudarla con los pergaminos, aunque sabía que solo se alejaba para no estar en contacto con los demás.

Dudé que Selene y Azrael tuvieran el gusto de volver o al menos que éste último doblegara el brazo y volviese a mi lado, solo fue Selene quien, cuando terminó la barrera, volvió a mi lado, el arcángel solo se sentó cerca de una ventana para tratar de ver hacia afuera, no estaba de humor en aquellos instantes- ¿Dices que se le pase? -La digimon solo miró a Magnus para ver que mostraría y luego me miró- Mas me preocupa lo que está pensando. -Comentó antes de mirar a Magnus de nuevo con la curiosidad de un cachorro ¿Que habían hecho para alegrarlo?

El arcángel se quedó mirando hacia afuera, necesitaba pensar, en aquel momento estaba un poco harto, deseaba por alguna razón volver a ser solo una consciencia, abandonado al final de la mente de su camarada si poder hablar con los demás... Sin hacerle mas daño a nadie, sabía que estaba haciendo una inmadura rabieta de mocoso, pero eran sus hermanos, quizás en vez de eso debía ir tras de ellos para que no estuvieran solos, hablar con ellos y explicarles que todo estaba bien, que eran cosas del futuro que no eran de su incumbencia y todo estaba normal. Lo mejor sería que los alejase de los gemelos o mas bien de todos, estar un tiempo sin salir de casa era la mejor idea e ir al digimundo por un tiempo sería bueno para relajar la mente, recordar viejos pero alegres tiempos entre hermanos. El de ojos ambarinos fluorescentes se levantó para ir a por sus hermanos, pero antes de ello vio como Anwar salía corriendo fuera del cuarto y Adham iba tras él... So corazón dio un vuelco, se asustó y temió por la vida de aquellos niños, la cara de horror del ángel no tenía precio, ni siquiera Selene lo había visto así y se asustó, mientras que la misma me detenía para que no fuera donde los fantasmas. Todas las facciones del arcángel de alas negras estaban contraídas, de verdad no lo había visto así nunca.

Azrael ignoró las palabras de Magnus, no podía pensar literalmente ya que estaba pasmado, Selene decidió sacarlo de su ignorancia- ¡No te quedes ahí idiota! ¡Has algo, ignorante parásito volador! -La miré y dejé de intentar escapar de su agarre por un momento, sabía que Selene se enojaba y decía muchas cosas menos bonito pero no creía verla insultar en ningún momento. Azrael se llevó una mano a la sien y corrió tras los gemelos, en el pasillo alzó vuelo como pudo para ir mas rápido, se estaba empezando a culpar, si algo le pasaba a esos niños...- ¡Adham!¡Anwar! -El arcángel pasó por sobre Magnus y Sangloupmon al vuelo y lanzó un rayo a las almas, no como el de una tormenta pero si lo suficiente para espantarlas.

Azrael forzó su olfato lo mas que podía, tenía que encontrar a los gemelos, si algo les pasaba...No podía matar indirectamente a dos niños que habían sufrido durante toda su vida. No quería dañarlos mas....Eras su culpa. Bajó para correr e ir viendo si habían caído pero antes de darse cuenta el arcángel sintió el olor de los gemelos mas cerca, estaba seguro que estaban bajo sus pies y si, pero lo que había bajo sus pies era un derrumbe que se volvió mas grande, el peso y la gravedad hicieron que el ángel cayese por el bache. Vio a los gemelos, con suerte, reaccionó a tiempo y cayó sobre sus manos y rodillas cubriéndolos del derrumbe que había causado con su caída, sintió como el polvo y pedazos de piedra caían sobre él. Había varillas de hierro que arrancaron varias de sus plumas y le causaron heridas a sus alas, el polvo causaba un ardor molesto en dichas heridas- ....Anwar...Adham...¿En que pesaban? Que me moleste no significa que deban arriesgar su vida por disculparse con mis hermanos... Actué mal... Perdonenme a mi, solo estaba... Defendiendo a mis hermanos. -Sus alas temblaron ligeramente e intentó no moverlas para que el polvo no cayese sobre los gemelos. El ángel apoyó su polvorienta cabeza en el suelo y suspiró de alivio, pero pronto recordó la presencia de loa espíritus lunáticos, probablemente no se acercasen a el considerando el tipo de digimon que era pero de igual modo quería salir de allí y ponerlos a salvo de todo. Podía subirlos, lastimando sus alas claro, el bache no lo dejaría pasar bien pero podía acercarse al borde y colgarse para subir todos.

Los ojos ambarinos fluorescentes del arcángel observaron la salida y a los niños los cuales, luego de arrodillarse con cuidado de no aplastarlos, los cargó en brazos- Traten de sujetarse de mi ropa. -Pidió el ángel con miedo de que algo les pasaba, su corazón, si es que tenía, golpeaba con fuerza por el susto al ver a los gemelos irse, mientras que su cara reflejaba miedo, mas bien angustia- ¿Como se encuentran? -Alzó vuelo y llegó con rapidez al borde del hueco por donde habían caído, sostuvo a los gemelos con un brazo y usó su mano libre para colgarse y salir de un salto impulsándose y extendiendo sus alas antes que la zona de donde se sujetó se derrumbase. Se alejó un poco del bache y suspiró.

Bäel y Ash escucharon la voz de Kudamon, estaban seguros que había sido Piddomon quien los llamaba pero se había reducido al tamaño de un hurón y era blanco, se notaba el drástico cambio que hacían las especies angelicales de rookie a campeón, ultra y mega. Mega y ultra escucharon las súplicas del mustélido digital y el mayor ladeó la cabeza... Suspiró y cargó al armiño en su hombro, ambos digimon entraron, Bäel delante, rastreando a los gemelos con su olfato canino mientras que Ash iba detrás vigilando, iban de prisa, volando. El olor a muerte y putrefacción era molesto pero se distinguía el olor de los gemelos y el de Azrael, este último olía a gardenias, madera de sándalo y cítricos, al menos para el chacal quien a pesar de que cubrieran su olor con polvo y pavimento no podrían evitar el aroma que despedían, a menos que rociarán su cuerpo con gasolina o una esencia fuerte como para repeler el olor.

Selene encontró mas conveniente soltarme para seguir a Magnus junto a mi, los alcanzamos pronto y Selene cargó a Magnus para que este no se cansara y la sanación de su parte y de Piddomon no fueran en vano. Ignoró olímpicamente cualquier queja de Magnus mientras avanzaba casi corriendo mientras le seguía el paso. La diosa digimon levitó por si acaso, veía el suelo muy inestable.