Ghostbus...Eh..DATS en acción,La secundaria embrujada.

Salimos del gimnasio cruzando el boquete hecho por Zayyn y su arma, viendo en el centro del patio a 3 siluetas, por la señal del d-ark, supe que 2 eran digimon y por ende, la figura que parecía ser la menor tenía qué ser la única civil presente en toda la escuela. No estaba preocupada pues tenía mi plan de respaldo. Zayyn presentó a los digimon como sus amigos, fue entonces cuándo me di cuenta que la mujer de rodillas, era la cuidadora de la escuela y no Saya. Guilmom se dispuso a ir a salvar a la civil mientras yo deslizaba una tarjeta que elevaria la velocidad del dinosaurio rojo, la cuál era "conexión H de supervelosidad". Cuándo el momento de la verdad se acercaba peligrosamente, sombras salieron de una zona aún mas obscura, salvando a la mujer. Guilmon se freno de golpe y dio un largo saltó hacía atras para alejarse de los enemigos

-¡ja! Sigo creyendo que eres buena y solo querías forzarnos a creer lo contrario... Y de paso "traumatizarnos" con la escena de una decapitacion- sonrio confiada, pese a que mi corazón late a mil por hora, en un momento creí que no salvariamos a la mujer. Ya luego me encargaria de decirle a Saya algo -pienso que mas que intertar contra decirme, buscas una forma de "rompernos". Primero intentando engañar a Yosuke y ahora intentando decapitar gente... ¿Tanto quieres destruirnos sin matarnos?- esvocé una sonrisa -puedes seguir intentandolo tanto como quieras, pero te aseguro que no lo lograras- tanto Guilmon como yo nos preparamos para su siguiente acción, aun no quería verme en la posición de tener que evolucionar a mi compañero pero tal y como se veían las cosas... No me quedaban muchas opciones

Una sonrisa cruel se aposentó en mi rostro cuando Beelko alzó su espada para rematar a la humana, e inevitablemente, mi mirada se clavó en los dos agentes de DATS para observar su reacción ante tal espectaculo. No obstante, antes de que la motera pudiera siquiera cumplir mi órden, sentí instantáneamente algo. Una presencia poderosa y cercana, no tan poderosa como Beelkomon, o como MetalGaurumon, pero si más que un simple rockie. Por ende, mis instintos se dispararon, y cuando vi las sombras surgir para atrapar a Beelkomon, supe que ni en momentos como aquel, iban mis suposiciones a traicionarme. Con un gruñido, y mientras veía a más de esas sombras agarrar a la humana a la que iba a ejecutar, accioné mi terminal, y de ella, nuevamente, extraje mi arma, mi preciado Boomerang. Miré a las sombras que empezaban a alejarse, y con un tirón, lancé el arma arrojadiza hacia ellas para eliminar así mismo a la mujer. El shuriken voló, raudo y veloz, hacia su objetivo, sin tregua, y levantando una fuerte tormenta de aire a su paso que no solo revolvió mis cabellos, sino que incluso los árboles se sacudían hacia la dirección, azotados cruelmente por el vendaval.

Estaba claro, no iba a dejar escapar a esa humana. Esa humana era MI presa, lo había sido desde el principio, y no iba a permitir que unos agentes de DATS me la arrebataran. Lo siento por Misaka si pensaba que podía hacer que me redimiera, o que pensara que fuera buena persona, pero estaba totalmente equivocada. La Oscuridad no siempre es mala, pero en mi caso, era un abismo de maldad que me llevaba hacia las sombras.

- Fenrir-apenas lo llamé, el lobo metálico se colocó a mi lado, y de un salto, me subí a él, para después alzar el vuelo, si es que alguien intentaba impedir cumplir mi cometido. Las sombras podrían huir, podrían esconderse y llevar consigo a la humana, pero tanto mi shuriken como yo los encontraríamos.

La Carmina no me dejaría fácil salirme con la mía y rescatar a la humana. De su terminal sacó una especie de shuriken gigante la cual identifique como la que había visto momentos atrás durante mi vigilancia; si de por si llevaba las de perder en este encuentro ahora todo se resumía a aferrarme con uñas y dientes a cumplir el objetivo que se me había dado, el cual era proteger a la humana sin vacilar en el costo que eso conllevara. La Carmina no se tocó el corazón y se dispuso a arrojar la shuriken, las sombras que sujetaban a la digimon se precipitaron a sujetar también el brazo de la Carmina para al menos desviar un poco la trayectoria de su arma arrojadiza. Aprovechándome del devastador aire que genero la misma, enrolle las sombras que apresaban a la humana para terminar por formar una espiral con ella como el punto central; el viento generado por el arma me ayudo a enrollar más rápidamente  ya que la espiral se formaba con un movimiento envolvente hacia arriba. En conjunto al aire, sería como soplarle a un Yo-yo que está en el suelo; si contando con la física elemental de este mundo ya me daba un dejo de ventaja al sumarle mi propia fuerza lograría evitar por el momento la muerte de la mujer.

Nunca en toda mi vida me había enfrentado a un enemigo tan formidable, aun solo contra ella mi derrota estaba prácticamente confirmada, pero eso a la Carmina no le basto pues monto en el Metal Garurumon y levanto el vuelo. Mis enemigos eran, una mujer de olor peculiar, un Metal Garurumon y un arma arrojadiza que creaba fuertes vendavales  con solo ser arrojada sin impulso y regresaba a su dueño. Todo esto tenía que ser una maldita broma de mal gusto. No era momento de perder los estribos, debía mantenerme con la mente fría si quería soportar el tiempo suficiente. Al amparo de la proyección de la obscuridad generada en el edificio por culpa de la luna, tenía escasos segundos para idear un plan. Un plan…

Si tan solo Mikoto en lugar de parlotear hubiera abierto un portal o al menos atacado para distraer momentáneamente al enemigo no me encontraría en medio de este aprieto, de esta cacería entre el gato y el ratón. Tratar de engañar a la Carmina era mi opción más viable, apenas mis sombras me trajeron a la humana pasé a despojarla de sus vestimentas. Estar desnuda era nada comparado a morir. En total obtuve 3 prendas, camisa, blusa y pantalones, por separado las envolví en sombras logrando que tuvieran el mismo volumen que tendrían de estar la humana con ellos. El objetivo de este plan consistía que en base al olor de la humana el Metal Garurumon no supiera a cuál de los 3 bultos sombríos seguir; estos bultos se moverían en direcciones diferentes a lo largo de todo el campo escolar mientras que yo, llevando a la mujer en mi espalda oculta en mi capa me movilizaría en otra dirección a la espera de que ese plan creado tan rápidamente funcionara unos miserables segundos, los suficientes como para que el par de humanos que suponían ser mis compañeros hicieran algo más que estar parados como si hoy fuera una noche para contemplar la luna.

La longitud de expansión de mis sirvientes se vería severamente limitada por tener que enrollarse en sí mismos para lograr el tamaño adecuado, al igual que su velocidad de desplazamiento y maniobrabilidad, pero era eso o disparar mis cañones y solo lograr revelar mi ubicación al enemigo. Una iría de regreso a donde estaba en un principio la humana arrodillada con claras intenciones de arroyar a la digimon, otra se dirigirá hacia los 2 agentes  desviándose a la mitad de la trayectoria en un intento de imitar una retirada regresiva a la seguridad de la oscuridad y la tercera treparía por el muro del edificio tan alto como pudiera, mientras que yo, yendo casi adherida a la barda perimetral  de la Secundaria, correría a la salida de la misma, posicionando mis cañones de tal forma que pudiera dispararlos a cualquier enemigo que me atacase por la retaguardia o por encima, si era por el frente o a los lados se enfrentarían a mi espada.

Misaka estaba convencida de que la pelirroja en realidad era buena a su manera,y podía tener razón...pero realmente la mujer no mostraba señal alguna de ello,era una individua muy peligrosa como para tomársela a la ligera con comentarios como esos que podrían hacer que nos demuestre que no tenía nada de buena,como casi hizo hace un momento.

La mujer humana pareció estar a salvo durante un momento,pero entonces Zayyn se montó sobre el digimon lobo metálico y persiguió a las sombras que repentinamente habían aparecido para ayudar a los agentes,o al menos eso parecía,en un movimiento extraordinario,las sombras lograron evadir el arma que la pelirroja había lanzado,el castaño aun no estaba seguro de que eran o de porque estaban allí ayudándolos,pero de lo que estaba seguro era que debía aprovechar el momento....pero ¿para qué?,no es como si pudiera atacar a algunos de los presentes y definitivamente huir no era una opción.

De pronto,3 sombras bastante grandes aparecieron moviéndose por el lugar,eran más grandes que las anteriores pero también más lentas,Yosuke no sabía que hacer ni como hacerlo así que en un último intento por encontrar alguna respuesta miró a Misaka-Oye...Misaka,¿tienes algún plan?...no creo que Gumdramon pueda derrotar a alguno de esos tres digimon,y tampoco es como si huir fuera una opción-tal vez estaba poniendo demasiado peso en los hombros de Misaka,pero no se le ocurría otra cosa además de consultar con su superior,sus enemigos los superaban abismalmente en cuanto a poder se refería,¿como podrían ganar?...

Zayyn parecía especialmente aferrada a la idea de acabar con la civil. Apenas Saya había logrado sacar a ésta del peligro, Zayyn volvió a sacar su shuriken arrojandola a las sombras creando un increíble viento y Saya logró por los pelos salvar de nuevo a la civil con una super idea

Viendo frustrado su ataque, Zayyn montó a su lobo mecánico para después levantar el vuelo. Salieron 3 bultos de sombras grandes pero de alguna forma torpes, apenas los vi mire la brújula del D-ark que tenía en una mano mientras qué con la otra tecleaba rápidamente las coordenadas para abrir un portal hacía alguna de las baces de DATS. Ese sería el de salida, el de entrada lo programé para qué se abriera justo al frente de Saya, lo cerraria apenas la señal de la pelinegra desapareciera

Deslize la conexión S de super digievolucion llevando a Guilmon a su etapa champion, Growlmon, usando su tamaño como tapadera -huír es lo único que puedes hacer ahora- abrí un nuevo portal frente a Yosuke el cuál lo llevaría a la misma bace a la que envié a Saya -asegúrate de mandarme de regresó al digimon que nos acaba de ayudar- no esperaría que el castaño me replicara, así que lo empuje a él y a su digimon al interior del portal, cerrandolo inmediatamente -¡Zayyn-san! Creía que únicamente habías venido a decirnos lo de la guerra santa; pero ahora pareces pérdida- le grite con un dejo de enojo pero mas que nada ironía -alguien como tú ya debería saber que perderse en una sola emoción no es nada útil- canturre; pero ahora que lo pienso era peor meterse en su camino ahora... O bueno, "gajes del oficio" ¿huh?

No hice más que soltar el shuriken, cuando de repente, las sombras de Kali (Beelkomon), se me echaron encima, haciendome desviar la trayectoria del arma, y peinando por poco a sus objetivos iniciales. Solté un rugido de frustración, pero entonces sentí que la energía que esos seres despedían no era corriente... Se parecía mucho a mi energía mortuoria, eran seres de ultratumba. Chasqueé la lengua, y me quedé quieta durante unos instantes que Kali utilizó para disparar a los cuerpos que me retenían, sin errar en ninguno. Una vez libre y sobre el lomo de Fenrir, dejé salir a Rukriel (Ulforce) del digivice, y le ordené a este que se quedara junto a Kali, vigilando a los dos jovencitos de DATS. Posteriormente, tanto Fenrir como yo, volamos en pos de a mi presa. Me coloqué agazapada sobre su lomo, como un gato, y sujetándome para no soltarme. Instantes después, recibí al boomerang cuando regresó a mí, y comencé a hacerlo girar sobre sí mismo mientras el lobo metálico perseguía a la espiral de sombras que se llevaba a la humana.

- Señora, el olor se divide-murmuró Fenrir, gruñiendo, tras olisquear el aire.

- Uhmph... Muy listos-adiviné por su aviso, que sea quien fuere que hubiera invocado a esas sombras, se había decidido por la estrategia de confundir a Fenrir por el olor. Como dudaba bastante que hubiesen partido a la humana en varios trozos de carne, llegué a la conclusión de que habían hecho algo con su olor, algo como... usar su ropa-. Digisoul...

Envolví mi mano con mi digisoul rojo como la sangre, y posé la palma sobre el hocico de Fenrir, para potenciar sus sentidos y para ayudarle a elegir un camino correcto. El lobo soltó un resoplido, con molestia, y aumento la velocidad de su vuelo, acercándose más y más hacia el objetivo:

- Tres olores a muerte en diferentes direcciones... Un olor a humana hacia otra.

- Síguela-fue mi única órden.

Así que, sin más preámbulos, el MetalGarurumon voló raudo, siguiendo el rastro a humano que no despedía muerte. Puede que ellos hubieran intentado engañarme, pero hacía falta algo más que eso para engañar al olfato de un digimon tan experimentado en detección como lo eran los MetalGarurumons. Pronto incluso pudimos ver a lo lejos al ser que llevaba consigo a la humana, para salvarla. como había supuesto, era un digimon, un digimon grande, con unos cañones en la espalda, y una enorme espada en el cinto. Fenrir, al detectarla, preparó sus coetes, por si al digimon contrario se le ocurría disparar; lo único que mi digimon haría si el otro disparaba, sería contraatacar, y debido a la diferencia de poder, dudaba bastante que sus ataques nos hicieran algo.

Así mismo, si Fenrir se preparaba para la pelea, yo también. Cuando vi que un portal de escapé se abría unos metros más adelante, eché el brazo hacia atrás, creando un impulso de carrerilla, y solté el Shuriken con fuerza. De nuevo, el arma "rasgó" el aire, soltó un suave silbidillo mortífero, antes de adelantar al digimon guerrero, y pasar por delante de él. El trayecto del arma arrojadiza creó un largo y elevado muro de aire (cortante como cuchillas, tan denso que sería dificil por no decir imposible que ninguna onda o frecuencia podría atravesarla), impidiendo así el paso hacia el portal... El digimon podría arriesgase a traspasar tal muro, pero teniendo en cuenta el poder del viento, si daba un paso más allá, acabaría con el cuerpo hecho trizas, y no sólo él... De la humana a la que pretendía salvar solo quedaría un puré de carne.

- Hasta aquí has llegado-el boomerang regresó y lo agarré al vuelo-. No sé quién eres, ni me interesa, sólo la quiero a ella-señalé con la barbilla a la mujer desmayada-. Y por mis ovarios que la tendré... Pero empecemos por las buenas.-sacudí el boomerang un poco en mi mano, y ante el gesto, el muro se extendió de forma cicular, encerrando tanto al digimon, como a la humana como a mí y a Fenrir en su centro. Nadie se iba a ir de allí hasta que recuperara a mi presa-. Entrégamela y no haré daño a tu amiga, la líder de DATS... Todavía hay dos de mis digimons allí donde ella está.

Mi estrategia de engaño no sirvió de nada, pero ya no importaba pues en mi carrera se desplegó un portal justo frente a mí brindándome una rápida salida. Apenas crucé el portal este se cerró. No tenía idea de que es lo que había pasado en esos instantes, mas haya de tener la gélida y atroz sensación que se obtiene al ser perseguida; lo importante era que por ahora, esta humana estaba a salvo. Di un par de pasos antes de frenarme completamente y devolverme a mi forma humana; peine con la vista la zona donde me encontraba, resulto ser una de las bases de Dats.

Ya que ya no estaba presente en el sitio del enfrentamiento, mis sombras se debieron de haber desvanecido en el preciso segundo que yo desaparecí. Esperar era lo único que me quedaba por hacer. Quizá idear un pan era lo mejor, pero con la poca información que conseguí recabar, intentar adelantarme a la situación seria una pérdida de tiempo y seguramente un error. Como única forma de “matar el tiempo” me quede pendiente a que algún portal se abriese y pudiese regresar a la batalla. De la humana, por lo pronto había vuelto a perder la conciencia volviéndola una simple muñeca de trapo. En algún momento tendría que aparecer alguien a quien pudiese dejársela encargada.

Yosuke ya estaba en DATS al igual que la civil gracias a la ayuda de Saya, los 3 estaban a salvó... Por ahora. Solo quedaba averiguar porque Zayyn seguía aquí y mas aun, el porque seguía sacando a mas digimon. ¿Por qué alguien que no se ensucia las manos matandonos si se aferra tanto en matar una civil? En verdad que no comprendía a Zayyn... Las hormonas de la lactancia le... ¿Estarán afectando el juicio?

En cuanto Yosuke fue tragado por el portal, abrí la comunicación con otro agente, pediría refuerzos por si a Zayyn se le ocurría sacar a mas digimon mega o de cualquier nivel. Una vez solicité la ayuda suspire cansada -Zayyn-san; ¿tienes alguna otra cosa que decir?- esperé unos segundos antes de continuar -no se porqué alguien que sólo viene termina haciendo todo esto... Pero sí lo que quieres es pelear, vale, pelemos-

-si vamos a pelear ¿podría ser en otra parte?- pidió Growlmon alzando una de sus manos cómo si estuviera en plena clase -¿podemos?-

-¿o lo dejamos para otro momento? Si quieres ofendete y enojate mas Zayyn-san, pero tienes que reconocer que estas... Erm... Un poquito inestable ahora- después de ciertas cosas ya me aburría y no le encontraba sentido a pelear pero si no había otra solución... Al menos quería que pelearamos en una zona deshabitada para estar completamente libres y poder pelear sin limitaciones

Entrecerré los ojos al ver mi oportunidad evaporarse cuando traspasaron el portal. No me daría tiempo a atravesarlo junto con ellos, pero daba igual, mi presa había escapado. Chasqueé la lengua, levemente contrariada, apreté los puños y respiré profundamente para no ser controlada por la ira. Seguidamente bajé la mirada, y oculté el rostro bajo la sombra que el flequillo rojo protectaba sobre mi cara.

Mantuve esa postura durante un par de segundos más, el tiempo que tardó el boomerang en volver a mí. Cuando esto sucedió, alcé el brazo, y atrapé eficazmente con una mano el mango del arma arrojadiza, todavía sin levantar la vista. Fenrir esperó con paciencia, sabiendo que estaría enfadada, pero...

- Pff... Muy bien-murmuré, alzando levemente la mirada-. De todas formas, pronto DATS desaparecerá.

Chasqueé los dedos de la mano, y ante mi, se abrió un portal mortuorio, con destino a un lugar muy, muy lejano. Otro portal similar apareció junto a Ulforce y Beelko, quienes, entendiendo, lo cruzaron sin vacilar. Dicho portal se cerró nada más lo cruzara el último de ellos, impidiéndo así que nadie más pasara al otro lado. Mientras tanto, desde mi ubicación miré en la dirección donde debía de hallarse la lider de DATS, y tras un leve gesto de contrariedad, obligué a Fenrir traspasar la puerta tridimensional, conmigo sobre su lomo. Seguidamente el portal se cerró.

Segundos después, todo quedó en tal silencio, que de no ser por el boquete en el lado lateral del instituto que llevaba al gimnasio, cualquiera diría que aquella noche no había sucedido nada fuera de lo común.

Tras decistir de su deseo de matar a la civil, se marcho cruzando un extraño portal. Suspire y desinvolucione a Growlmon devolviendolo a su etapa rockie, acto seguido abri un propio portal que nos llebaria a la base de DATS donde estarian los demas