El cristal perdido [Misión de Janaan]

En la Tierra Espiritual, lugar donde residen los hermosos ángeles del digimundo y suelen ser visitados también por digimon del tipo ave para descansar sus heridas de batalla, justo al centro existe una catedral llamada ''La catedral del cristal luminoso'', fue nombrado así ya que esta catedral está formada de diferentes tipos de cristales, pero también porque en ese mismo lugar reside el cristal más importante de la ciudad, el cual se puede ver que en el centro hay una pequeña luz formada por el mismo, a todos les ha agradado ese fenómeno, pero por alguna razón algún digimon decidió robarlo. Tienes que encontrar al digimon ladrón, recuperar el cristal de forma completa y regresarlo a la catedral

Describe como te enteras de los acontecimientos

Restricciones especiales:

Puedes usar todos tus objetos y herramientas, pero solo un digimon

Cuando llegas a la catedral, te encuentras con un lio total, todos los ángeles allí presentes se pasean como gallinas sin cabeza, y al ver a tu Angemon de cabellera negra se quedan quietos mirándoles -¡ustedes! les señala un holly angemon, el cual se les aproxima flotando -nunca habíamos visto una variedad como la tuya, Angemon, y los humanos también son poco comunes por aquí… les solicitare que se retiren, ahora mismo tenemos una crisis y no quisiera que se vieran envueltos- dictamina de la forma clásica que aria un digimon de su tipo -su visita se tendrá que ver aplazada a otro momento, por favor, retírense-

-bien… muy pocos elegidos vienen a esta zona del digimundo…- se te queda analizando un momento -eres un humano… y por alguna razón siento vestigios antiguos de maldad, pero parece que ya los has superado…- medita un poco su proposición de ayudar en lo que acaba de acudir -está bien, aceptamos su ayuda, nunca está por demás tener a un elegido que parece tan experimentado como tú- tras eso les explica que han robado el cristal más importante de la catedral y que por eso su brillo ya no se ve reflejado en toda la construcción -siento no poder decirte más, pero si gustan revisar el área donde estaba nuestro preciado cristal son libres de hacerlo- tras decir eso les indica gracialmente con la mano que puede internarse más en la catedral

El albino bajo la vista al recordarle sobre la infección del virus, realmente lucho mucho para que el virus no lo doblegara pero, al final no pudo y se requirió de otra elegida con una arma aura para ayudarle, Caley noto la tristeza en el albino

de cierta forma temía que el virus no se hubiese eliminado por completo de su ser pero, casi siempre se alegraba creyendo que sí, el virus desapareció por completo y escucharlo del arcángel era bastante reconfortante -gracias-

Escucharon con atención lo que el arcángel dijo, el albino medito, según los libros que leyó de ese cristal, alababan su particular brillo y su enorme tamaño y peso, eso significaba que el ladrón podía o ser un digimon de gran tamaño o con cualidades mágicas –le agradezco mucho que nos permita ayudar- dijo dando una elegante reverencia estilo inglés, un reverencia imitada por Caley

El ángel y el humano caminaron hacia la catedral, más que por nada por la forzosas costumbres el albino dio una elegante reverencia a la catedral, si bien él no era del tipo que se persona pues no era un cristiano que digamos si era respetuoso de la culturas de los demás, el interior era hermoso, casi parecía irreal casi todo echo de cristales cuidadosamente tallados

-si Arturius estuviera aquí podríamos usar su bufanda para buscar pistas- comento Caley –o Myrddhin, el ya habría deducido que paso-

-él está ocupado, con el asunto de los planes de la reconstrucción de las áreas afectadas por los atentados y Myrddhin está ocupado viendo los portafolios de las empresas abaladas por mi familia- dijo mirabas inspeccionaba el lugar usando todos lo aprendido con Myrddhin y Arturius busco primero todo que estuviese fuera de lugar y le diese una pistas de quien pudo ser el causante –tranquilo Caley, confió en ti- sonrío en forma amable

-¿en qué puedo ayudarte Janaan?- Pregunta con una sonrisa

-busca cualquier pista desde lo alto, quizás en los muro o donde estaba el cristal encuentres algo y si lo haces ten cuidado de no contaminar la evidencia-

-jaja suenas como Myrddhin- Sonrió antes de alza el vuelo y inspeccionar

Cuando revisan la parte donde estaba apoyado el gran cristal (una especia de altar al centro de la catedral), se dan cuenta que sus dimensiones son bastante grandes y las probabilidades de que el o los culpables sigan en el área

Caley tenía que admitir que o habría sido un digimon muy fuerte o varios digimon quien hicieron esto y más sorprendente que no dejasen ninguna pista –janaan con tu permiso explorare los alrededores-

El albino mido al ángel de cabellera negra –está bien daré una última revisión a la catedral y te daré alcance-

Angemon asintió y salió de la catedral surcando los cielos en busca de algo inusual, un destello, un grupo sospechosos, alguna presencia lo que fuera

El ángel no consigue observar algo sospechoso en su vuelo, pero tú te das cuenta que el suelo que también está hecho de cristal tiene unas extrañas huellas como si se hubiera derrito ligeramente y estas guían a un muro, pero de ser observador te darás cuenta que una huella está cortada por la mitad justamente por el muro, como si hubiera un pasaje secreto tras este

Agemon miro los cielos fuera de los digimon histéricos corriendo de ahí por allá no hacia mucho –esto es malo- murmuro para si, deteniéndose en medio de aire dejando que el viento juegue con su largo cabello negro –¿sera mejor regresar?- miro hacia la cátedras ya bastante lejos

Por su parte el albino se puso en caminar cuanto sintió una leve desnivelación, extrañado miro al suelo, estaba bajo en cierta área, una huella, el albino de pronto reacciono, cuanto digimon que conocía gustaban de las gemas al punto que llegaría a tanto como para robar esta… reacciono y miro al muro, tomo su llave aura y toco en el are del muro donde se cortaba la huella y vio un pasadizo abrirse

Guaro su llave y rápidamente bajo, evitando hacer el menor ruido posible para no alertar a nadie

Cuando das los primeros pasos dentro del pasaje secreto, el muro se cierra detrás de ti. Te das cuenta que además de carecer de algún tipo de iluminación, los digimon ángeles (logras distinguir levemente sus siluetas a través, de los muros de cristal opaco) que se pasean aun en búsqueda de su cristal no se dan cuenta de ti eh incluso pareciera que no saben de la existencia del pasaje. El pasillo además es lo suficientemente grande como para que el cristal robado pase sin problemas

Al final del largo pasillo se distingue una luz pero esta se va haciendo más y más tenue al pasar los segundos

El albino casi pego un brinco al quedar a oscuras, miro a hacia atrás y pudo ver a los demás ángeles buscar pistas

El albino dio un suspiro silencioso, casi como si temiese ser escuchado, miro hacia las escalera notando un luz, en paso silencioso apoyándose de la pared para no caer, usando la luz como un faro y aun que apresurando el paso no deja de ser cuidadoso en donde pisaba no podían darse el lujo de ser descubierto

.-.-.- Por su parte Caley

El ángel digital de cabello negro aterrizo en las puertas de la catedral

el ángel entro en forma respetuosa y miro a su entrono buscado la presencia de su camarada -¿donde estará?-

off:

Mientras recorres el pasillo apoyándote en la pared, el tacto de esta se siente como derretido en algunas partes y en otras astillado. La luz se sigue alejando hasta que la pierdes de vista, a los segundos escuchas un ruido deslizante a la lejanía y el silbido del viento a través de algún tipo d rendija

Angemon al ingresar de nuevo a la catedral es interceptado por el Holly Angemon del principio -espera, hemos encontrado pistas del posible culpable… sígueme- dice amablemente dándose la vuelta y yendo por otra parte de la catedral

off:

El albino sintió mas mascas, el cristal algo tibio, ahora estaba mas seguro de quien era el culpable el problema era que la luz se fue, el albino se alarmo

"maldicion, si mi sospechas son correctas, debo apresurarme o se la va a comer" pensó alarmado casi corriendo camino por el pasillo manteniendo su tacto para guiarse, sin luz la marcas y el cristal levemente derretido eran sus mejores pistas aun que eso le valiese aun que otra cortada



-.-.-.-

Caley miro a Holly Angemon -si pero ¿a visto a mi compañero? creo que al también le gustaría saber que descubrieron-

Pasan algunos minutos antes de que llegues al final del pasillo, es solo un muro y ya, sin embargo es fácil de percibir un silbido a través del muro, como si de otro pasaje secreto se tratase

…………….

-si tú no sabes dónde está, ¿cómo lo sabré yo?- cuestiona para luego suspirar -mira, la catedral es muy amplia… es fácil perderse en ella, alguno de los otros ángeles lo encontrara y guiara a la salida, por otra parte, el fue contaminado… la verdad es que aún me siento un poco desconfiado de él…- explica sinceramente -ahora vamos… sígueme por favor- exclama calmadamente

El albino se topó con un muro su desconcierto creció ¿desaparecieron? Se mantuvo en silencio pensando cuando escucho un silbido, era el viento pasando por alguna rendija, tomo nuevamente su llave y toco la superficie abriendo el pasadizo, miro su llave aurora con una sonrisa y rápidamente se puso a continuar avanzando lo mas rápido que podía, sin ser ruidoso, guiándose por las irregularidades del muro, le ardían sus manos por los cortes pero se negó a apretarse de su única guía debía llegar rápido

-.-.-.-

Caley bajo la cabeza, ciertamente hizo un pregunta un poco tonta pero, como ellos revisaban la catedral entonces era normal que lo hubieran visto pero, era cierto era una enorme edificación. La confesión de Holly Angemon molesto al ángel negro y a la vez lo entristeció –el no fue contaminado por que quiso…- susurro y siguió en silencio a Holly Angemon, fue un accidente, eso fue lo que le comentaron un digihuman por accidente contamino a Janaan y este peleo contra el virus con todas sus fuerzas hasta que finalmente no pudo más y se requirió de otro elegido aura para ayudarle

Si no tienes el suficiente cuidado te pegaras en la cabeza (el daño sera igual a el que recive cualquiera cuando se pega por andar distraido, o sea, minimo) con una protuberancia en el muro, que repentinamente se vuelve liso y perfecto, la protuberancia resulta ser una antorcha con una yesca casi por completo nueva. A pocos metros de donde está la antorcha (puedes tomarla si quieres) hay unas escaleras que bajan y si enciendes la antorcha veras que el cristal ahora es inusualmente de color negro. Las escaleras descienden alrededor de 20 metros llevándote a una gran sala con murales donde describen la historia de la construcción de la catedral de cristal y como el que se robaron es especial importante para ese sitio. Los murales están separados por cortinas de fino material que pese a estar en esta sala doblemente secreta se mantienen perfectamente limpias (puedes usarlas para vendar tus manos si gustas)

……………………….

-aunque no haya sido contaminado por gusto propio… igualmente poseyó maldad en su corazón…- por algunos pasillos de los que recorrieron guardo silencio hasta que llegaron a una sala de grandes proporciones -me doy cuenta que por cómo ha criado él es un buen elegido…- dice luego de ingresar ambos a la sala y las puestas por las cuales cruzaron se cierran -tranquilo… no tienes de que preocuparte- dice sin voltearse a ver a Angemon

Un golpe detuvo su anda con su mano izquierda poso la palma extendida en la sien, abrió la boca pero, no emitió ningún ruido; tantos años de sobrevivir le enseñaron a mantener silencio cuando algo así pasaba, con la mano derecha palmeo la superficie con la que se impactó, una antorcha, decidió tomarla, no estaban los ladrones cerca al parecer, puesto no veía ninguna luz y no pensaba torcerse el cuello tanteando a oscuras, encendió la antorcha y noto unas escalera iluminadas por la luz dorada del fuego, se acercó cuando noto algo que lo sorprendió

Su reflejo en una superficie oscura, poco después se dio cuenta que era un cristal oscuro, bajo las escaleras en silencio ocasionalmente viendo el cristal, recordaba que decían que era una piedra ¿quizás eran dos? Negó con la cabeza, los textos decía que solo era uno, entro a un salón y miro con detenimiento los muros traduciendo los escritos y apreciando las pinturas en busca de una explicación ¿Por qué era tan importante? ¿Qué era este cristal?

El lugar era casi habitable, no parecía tener muestras de abandono como uno esperaría de un lugar tan oculto ¿Qué estaba pasando?

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El ángel digital bajo la mirada –ni siquiera nosotros estamos libres de maldad Holly Angemon- argumento antes de que el silencio reinara por unos minutos –es una muy buena persona- dijo tranquilo y reprimiendo una sonrisa de orgullo por su camarada

Entraron al gran salón, angemon casi pego un brinco al sentir la puertas cerrarse detrás de el, escucho las palabras del ultra y trato de mantenerse sereno

En la sala en la que te encuentras una de las tantas cortinas se mueven levemente en intervalos de tiempo muy aleatorios, a la cuarta o quinta vez que esto ocurre el muro detrás de esta se desliza con espesor revelando más obscuridad… de la cual emerge lentamente y más que andando, se desliza hasta desplomarse una figura de grandes cristales en pico, apenas pudiendo mantenerse despierto extiende una de sus enormes manos hacia ti -….- intenta decir algo pero le es imposible, solo pudiendo hacer un ademan para que te acerques, de hacerlo te susurra muy lejanamente -no confíes… en Holly… Angemon…- antes de quedar inconsciente, su cuerpo tiene vestigios de haber peleado recientemente

……………………………

-en efecto Angemon… todos tenemos maldad en nuestros corazones…- gira levemente la cabeza hacia atrás cuando recita estas palabras -bien, las pistas que quería mostrarte… son estas- en la habitación en la que se encuentran, hay una especie de escritorio donde hay fragmentos de cristales, los cuales parecen mordidos -sospechamos que fue un digimon en particular…- devuelve su atención al ángel de nivel menor -¿puedes imaginarte de quien hablo..?- toma uno de los cristales y lo admira -el siente un gran aprecio por devorar cristales…- le hace un ademan para que se acerque y también pueda buscar más pistas o referencias en la evidencia

El albino se sorprende ante el ruido de un muro abrirse, volteo para ver un pasillo oscuro, del cual emerge un Blastmon, muy mal herido -Blastmon- se acercó corriendo, no era incauto pero, por naturaleza detestaba ver digimons heridos, escucho sus palabras y se sorprendió Blastmon resiste- trato de insistir pero al notar que solo estaba inconsciente se relajó pero… no podía quitarse la sensación de que su camarada estaba en apuros -Caley- coloco una mano contra su pecho donde se encontraba oculto su emblema de la lealtad –te cuidado- murmuro, ates de ponerse ayudar curar, en lo que podía a blastmon

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Caley se siento extraño con las palabras de Holly Angemon y noto el escritorio y las piezas de cristal –me temo que no- niega con la cabeza –no conozco mucho de digimon de esa clase- se acercó a la mesa pero, no tomo los cristales, no podía arriesgarse a comprometer la evidencia –usted entonces ¿ya tiene un sospechoso?- miro hacia la puerta por un segundo, el pelinegro hubiese creído haber escuchado hablar a su camarada

Las heridas del Blastmon son demasiado grabes como para que las hiciera un perfet, como lo era Holly angemn, sin embargo consigue recuperar el conocimiento -uhhh… ¿Dónde estoy?- le pregunta al aire confundido -es verdad… tengo que recuperar el cristal- intentar reincorporarse pero no puede por el dolor que siente -humano… dime… ¿dónde de esta Holly Angemon?- casi te suplica por una respuesta a esa pregunta

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-vaya que mal, pensé que serias más consiente de tus cogeneres- dice en un tono casi burlesco -veras… hay un digimon llamado Blastmon, su cuerpo se compone enteramente de cristales… además de que le encanta comerlos… a más brillantes mejor… ¿no crees que sería un manjar para el nuestro preciado cristal?- pregunta sarcástico pero sin abandonar su propiedad y “respeto” como ángel

El albino alzo la vista el escuchar los balbuceos del digimon antes de que recobrase la conciencia –estas consiente- dijo aliviado, por las heridas infligidas el albino comenzaba a temer que el digimon no despertase pronto-el cristal? Creía que usted lo tenía- medito un poco –que ocurre con Holly Angemon, por favor, explíquemelo-

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Angemon no pareció ofendido –usted tampoco sabía que un quedaran Angemos de pelo negro- se recogió de hombro, no era impertinente pero el mismo lo dijo cuándo lo vio por primera vez –entonces ¿por qué se lo llevaría? Si su apetito es tan grande ¿no hubiese sido mejor comérsela de una vez, en lugar de cargarla?-

-el… no es… lo que parece… tiene camaradas… dentro…- pasa saliva con trabajo -su objetivo… es apoderarse de todo… no solo de la catedral, y para ello… necesita del cristal- alcanza a decir antes de volver a quedar inconsciente

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Mira por encima de su hombro para poder observar al ángel menor ¡hmpf! llevas la razón en ello…- responde con una media sonrisa pintada en sus labios -¡ah! esa es una muy buena pregunta… que tiene una buena respuesta- deja el cristal que admiraba junto a los otros y se gira para quedar de frente a su congénere -entre mejor sea el manjar… más se disfruta al comerse tranquilamente, ¿cierto? No tendría sentido atragantarse con el cristal por miedo a ser atrapado-

-de que estas hablando Blastmon, no es quien parece?- des afortunadamente el otro volvió a desmallarse, janaan miro su digivaice y apunto al digimon de cristal dejando que la luz sagrada sanase sus heridas –Caley….- murmuro preocupado sentía que el estaba en peligo

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Angemon miro atentamente al ultra –perdone pero… ¿realmente que desea usted? ¿Dónde esta el gobernante angélical, slashangemon? Tengo entendido que tras las ausencia de los tres grandes ángeles el está a cargo de impartir justicia y orden-

Con la luz sagrada que surge de tu digivice consigues sanar las heridas del Blastmon, pero este aun no recupera la conciencia, quizás dejándole descansar un poco más se recupere por completo….

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-hmm… pensé que no estabas tan bien informado sobre el digimundo… Angemon…- dice para luego encogerse de hombros levemente -me pregunto… donde estará…- dice con suspicacia y en ese momento se abren las puertas que cruzaron momentos atrás -ya te he mostrado lo que debía… continuare con la búsqueda de nuestro preciado cristal- sonríe de forma confiada dejando la habitación

Janaan miro preocupado a Blastmon, amenos ya estaba sanado, cerró los ojos y recordó lo que lego sobre esa especie, se supone que los cristales de los Blastmon se regeneran rápido, lo que significa que el ataque fue reciente, un digimon de ultra o mega, quizás más, metalizo es el estado que estaba el digimon en busca de patrones o algún distintivo, como arañazos, cortes o algo para tomar una idea del perpetrador. Dijo que no podía confiar en Holly Angemon, ¿fue el?, lo digimon ángel era conocido por ser muy fuertes pero… algo estaba mal

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-jamás dije que no estaba tan bien informado sobre el digimundo, solo que no conocía a un digimon con esas características- informa tranquilo pero, firme demostrando un halo sagrado, en su ser el cual, su dueño no parecía consiente de esa naturaleza -de alguna forma extraña siempre me atrajeron las leyes como la medicina -

-¿es tu único sospechoso?-Con Calma el ángel escucho la puerta abrirse –de todas forma buscara a ese digimon que come gemas, si lo encuentro lo interrogare- se dio media vuelta y camino hacia la puerta

Al salir de la habitación, deturbo al primer digimon que se cruzo en su camino –¿donde encuentro a Slashangemon?-

El cuerpo de Blastmon muestra indicios de que sus cristales fueron explotados por culpa de algún tipo de descarga eléctrica poderosa dejándolos hechos añicos y en algunos casos pulverizados. Después de algunos minutos recupera la conciencia -el cristal… tengo que recuperarlo- dice mientras se reincorpora con dificultad -te doy las gracias humano… de verdad, gracias a la energía que me diste me siento por lejos mejor que antes- se dirige al muro por donde llego -si me quieres ayudar a recuperar el cristal, eres bienvenido- ofrece sonriendo sinceramente

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Una Angewomon que iba pasando también en búsqueda aun del cristal al ser interceptada tan de improvisto se queda sin habla  y lo es capaz de señalar detrás del ángel de cabellos negros, detrás de este se encontraba nada más y nada menos que el mencionado Slash Angemon el cual además de llevar su clásico ropaje sagrado tiene una bufanda parecida a la que tenía Holly Angemon -¿eres tú el que nos está ayudando a buscar el cristal?- te pregunta con una fuerte y serena voz -¿qué  quieres de mí? anda a buscar el cristal… es muy importante para nosotros-

El albino se apresuró al Blastmon –espera, por favor, ¿para que necesitas el cristal?- no era lógico, si fuera para comerlo entonces por qué no se devoró el otro cristal, quizás no era tan brillante como el que dicen que estaba en la catedral pero, si  esto fue un crimen planeado Blastmon debió de haber esperado y como es un digimon que requieres de mucha comida debido a su nivel o al menos abría consumido el cristal oscuro para mantenerse en óptimas condiciones en caso de ser descubierto pero, ese no era el caso, el cristal estaba intacto, tampoco podía ser por la altura, Claey tuvo que alzar el vuelo para llegar al lugar del cristal robado lo que el cristal oscuro era más accesible –Blastmon ¿usted robo el cristal antes?- no lo estaba acusando, deseaba conocer su versión, la verdad tiene más de una cara y apresurar un juicio sin antes tener evidencia era lejos de los que sabía que ninguno de sus camaradas y él mismo  aceptarían por un echo

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Angemon nota el gesto de la Angewomon y luego miro hacia ese punto, noto la bufanda lo que le extraño, no recordaba a ver leído que los cargos se rigieran por bufadas, ni siquiera haber oído algún rumor de eso, quizás sí, no estaba tan informado como creyó –por eso mismo deseo hablar con usted- mantuvo la serenidad y el porte aprendido de ver a sus aliados y  de Janaan cuando hablaban con alguien de rango mayo o con quien debían tener un charla formal

Extendió su mano hacia Slashangemon –por cierto olvide saludarle me llamo Caley, es un honor conocer al ángel digital de las espadas y el honor, me gustaría hablar con usted afuera de ser posible-

-¿cómo que para que lo quiero?- te mira despectivamente -soy el guardián de los cristales de la luz y de la obscuridad… es obvio que quiero recuperar ambos- se cruza de brazos aun mirándote despectivamente -espera... ¿estas insinuando que crees que me los robe para comerlos?- dice boquiabierto -¿Por qué todos creen que por ser un Blastmon comeré cristales?- pregunta al aire indignado -escucha, en cuanto escuche que se robaron el cristal me apresure a venir aquí, el altar del cristal de la obscuridad, para llevarme la sorpresa de que tampoco está- su mano comienza a brillar (es lo que usa para impulsarce y volar, pero a menor escala) -¿ves? no está. Alcance a perseguir al ladrón pero me ataco con un rayo de energía eléctrica, intente regresar por ayuda, pero bien… ya viste como estaba-

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Slash Angemon se te queda quieto mirando tu mano -no estrechare la mano contigo hasta que no demuestres verdadera valia- responde y muestra su brazo derecho -además, prefiero mantener mis brazos como espadas por si se llegan a necesitar en algún momento; con un ladrón a cuestas prefiero ser precavido- escucha tu petición de charlar con él -espero que seas consiente de que ahora tenemos una gran emergencia y que no es tiempo para hablar… pero, hare una excepción y te escuchare- se hace a un lado para caminar junto a tu digimon

El albino bajo la vista, en ningún momento quiso acusar de nada al Blastmon pero, jamás leyó de que un Blastmon custodiara el cristal, casi todos lo que pasaba era nuevo para el oji amatista –discúlpame Blastmon, no quise acusarte de nada pero…- un rayo de energía eléctrica? El albino se extrañó, el cuerpo de Blastmon era de diamante puro la electricidad no sería razón de gran daño quizás agua en alta presión, un láser u otro diamante, lo que significaba que blastmon no consumía los suficientes cristales para endurecer su armadura o se vio forzado a usar Ametralladora de Diamante antes de recibir el impacto eléctrico–me dijiste que no podemos fiarnos de Holly Angemon, ¿es realmente el Holly Angemon? Mi camarada está arriba y me preocupa que esté en peligro –

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Al parecer era Slashangemon real, aunque le sorprendió que llegara tan rápido, ni bien termino de hablar con Holly Angemon el llego, aun que también le extraño que no le corrigiera cuando dijo que el era el ángel de las espadas y el honor

Sin más miramientos lo guió al patio –yo no creo que ese digimon come diamantes, que Holly Angemon dice sea el culpable- contesto tajante –y necesito saber la historia real de estos cristales- sonaba firme y autoritario pero, sin rallas en la altanería, in-subordinación o en el descaro –le pido formalmente que me explique la historia de eso cristales-

-¿pero…?- se queda viéndote con duda mientras te debates con tus pensamientos -¡esto es terrible!- exclama alarmado al escuchar lo de tu camarada -mira, son solo sospechas mías, pero una vez Holly Angemon fue de viaje, cuando regreso lo hizo muy cambiado… además de traer esa extraña bufanda-capucha- aprieta el puño enojado -no sé qué hacer ahora, los cristales son importantes, pero tu camarada también lo es… la sospecha que tengo es que Holly Angemon en realidad sea un Murmukusmon… es uno de los pocos digimon que puede copiar la apariencia de otro… pero sin poder retirar esa especie de bufanda- explica -tú decides, ¿vamos a por el digimon que se robó los cristales o a ayudar a tu compañero?-

………………….

-¿la historia?- dice cuando le preguntas -¡hmpf! es simple, cada cristal representa la luz y la obscuridad, se tiene la teoría de que si ambos… no… si uno solo se rompe estaremos perdidos… terminando en un apocalipsis de destrucción masiva- explica con su fuerte voz mirando al cielo -fueron concebidos por el mismo dios del digimundo para representar lo frágiles que podían a llegar esas 2 cosas, el bien y el mal… como ya seguro lo sabes, esas fuerzas… pese a ser magnánimas son fáciles de corromper, tan frágiles son como ese par de cristales- dirige su atención hacia ti -tenemos que encontrar el de la luz y devolverlo a su recinto… solo espero que el de la obscuridad siga donde debería- exclama con decisión pero con un dejo de preocupación

http://wikimon.net/Murmukusmon

off:

El albino bajo la vista –no, confió en Caley- su emblema brillo suavemente ante la confianza y fe en su camarada –te ayudare Blastmon, esos cristales deben muy valiosos y no podemos permitir que nada les pase, Caley es mi camarada y se lo fuerte que es además- pone su manos sobre su pecho donde descansaba su emblema debajo de sus ropas –siempre que el me necesité hallare la forma de ayudarle- miro a Blasmon –según entiendo el olfato de los Blastmon para los cristales es el mejor ¿crees poder rastreas su aroma?-

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Angemon escuchó atentamente la explicación del otro –entiendo, gracias SlashAngemon-

El ángel de cabello negro dio una sube reverencia y comenzó a caminar de regreso a la catedral o al menos eso parecía, Caley apenas se apartó de la vista de SlashAngemon se ocultó, no se fiaba del ángel de espadas y opto por seguirlo

-entiendo; en definitiva esta es la confianza que un elegido y su digimon acompañante tendrían- afirma sonriente -¡JAja! por supuesto que puedo, y gracias a ti ya me encuentro recuperado por competo- exclama adentrándose al túnel por el que salió alumbrando el camino con su mano -tenemos que tener cuidado, el digimon que me ataco ha de ser virus, pues parecía un demonio… no alcance a distinguirlo claramente, pero estoy seguro que era una especie de dominio con un báculo relampagueante- explica mientras avanza por el pasillo de muros negros -no puede haber ido muy lejos con ambos cristales en su poder- explica olisqueando el aire aun avanzando -¿tu qué crees? Puede que escondiera uno y el otro se lo llevase… o ¿se atrevió a irse con ambos?-

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-bien… continua con la búsqueda- dice dirigiéndose de nuevo a la catedral pero por el camino contrario al tuyo -ese ángel ya está sospechando de mi… tch…- piensa mientras vaga por los pasillos con una inusual cama y sin un rumbo fijo

El albino sonrió por el comentario, le enorgulleció cada que alagaban de su lazo con sus camaradas –me honran sus palabras- siguió de cerca al digimon de diamantes –entiendo si puedo ver fácilmente y es del tipo virus puede que sea del dark área, tus sospechas no pueden ser correctas-

-no lo creo- dijo después de pensarlo un poco –si ambas nacieron por el equilibrio debe de tener alguna reacción entre ellas cuando estén cerca o se aparten mucho, lo que habría causado un efecto que alertaría a todos… lo más probable es que las tengan en una distancia razonable-

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Angemon no se enorgullecía pero, aprendió a moverse sin hacerse notar por varias horas de practica con Alphamon, no le costaba seguís a SlashAngemon sin ser visto, agudizo su sentido para percibir cualquier cambio de parte del otro que la haga pensar que se dio cuenta de que Angemon lo seguía

-hmm… sabes mucho… aunque lo cierto es que solo buscaba hacer un poco de platica- responde aun avanzando por el pasillo hasta llegar a una división en 4, se pone a olisquear el aire un momento -detecto el aroma de los cristales, están en lugares diferentes… pero también siento el olor del digimon que me ataco y los robo, está en otro pasillo- va señalando cada pasillo mientras explica -además, si seguimos por ese, podríamos ir encontrando cada cosa, pues es el que rodea todos los pasos… pero tardaríamos algo más tiempo… ¿Qué crees que sea lo mejor?-

…………………..

Mientras va siguiendo al supuesto Slash Angemon, este ángel con espadas se sigue moviendo por entre los pasillos internándose en la catedral, a cada momento hay menos ángeles circulando en esa zona…

El albino sonrió –cuando niño quería ser el primer arqueólogo humano del digimundo por lo que cada que podía estudiaba las ruinas o compraba libros en lo basares y mercados que mis camaradas me enseñaban a traducir- dijo sin poder evitar mostrar un cierto espíritu infantil en sus palabras como un niño que cuenta de su programa favorito o su héroe predilecto, lo que causo que al percatarse de eso se sonrojase un poco y mirase a otro lado aclarando su garganta –disculpe me deje llevar -  

Al llegar a un cruce de 4 pasillos del cual emergieron de uno, dejando solo tres caminos, escucho las explicaciones, por un segundo el albino hubiese deseado que todos su camaradas estuvieran ahí pero, no podía hacer nada –los cristales debe ser nuestra prioridad, si lo que dices es correcto no podemos permitir que sean dañados -  si bien le gustaría atacar al que daño al guardián de los cristales, no sería prudente además seria forzar al guardián a dejar su deber –tendremos que separarnos, ve por el cristal de la luz yo ire por el da oscuridad-

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Caley comenzó a sospechar que quizás SlashAngemon se dio cuenta que era seguido por lo que lo estaba llevando aun zona con menos digimon angelicales para atacarlo… no, eso era ilógico, sería más fácil atacarlo y hacer creer a los demás que él deseaba emboscarlo, mantuvo su perfil bajo atento de su entorno y del digimon

-está bien, no te preocupes- responde tranquilo a tu gesto apenado [color=#00ffff-…-[/color] se te queda viendo un instante parpadeando como si se hubiera dado cuenta de algo -bien, no sé cómo conseguiste entrar hasta la sala del cristal de la obscuridad… pero si conseguiste llegar hasta aquí, debes de tener tus trucos- de su cinturón saca un pergamino doblado y te lo entrega -con esto sabrás donde están los pasajes secretos y muros falsos… estoy confiando en ti humano…- dispara uno de sus cristales a su mano el cual brilla y te lo entrega -no lo arruines…- tras decir eso se interna en el pasillo que lleva al cristal de la luz

Según el mapa, hay todo un complejo laberinto en lo que aparentan ser esos 5 pasillos (eran 4 aparte del que provinieron) puedes valerte de estos para encontrar le cristal y eludir al digimon ladrón

……………..

Slash Angemon sigue avanzando hasta llegar a una sala decorada de una mitad con el mismo cristal bello cristal casi luminiscente y la otra mitad, también bello cristal era… pero de un profundo negro, justo en la unión de esta decoración, al fondo de la habitación que tenía aspecto barroco como el resto de la catedral, el ángel con espadas por brazos se recarga en el muro y parece susurra algo, tras esto pareciera que sostiene una conversación… con el muro, o algo al otro lado de este

Puedes escuchar como los pasos metálicos de Blastmon se alejan de ti. El pasillo que récores no parece tener fin; ahora, sustituyendo el paso metálico de Blastmon escuchas una especie de gotera, además escuchas murmullos, pero no próximos... sino más bien como un eco creado por la acústica del lugar

……………………

La supuesta conversación que sostiene Slash Angemon con el muro o lo que sea que este al otro lado concluye y este, creyendo que está en la soledad de su habitación cambia su forma a la de Magna Angemon… sin embargo, por pocos instantes, el ángel de cabello negro logra distinguir durante el cambio, un digimon alado diferente, uno más orientado de cierta manera a la cultura egipcia… sin embargo esta forma casi parece una alucinación de parte del Angemon por lo poco de dura en su mirada

El sonido de la gota de agua llamo la atención del oji amatista, quien bajo el cristal luminoso para buscar los charcos, no quería alertar a nadie al pisar accidentalmente alguno de esos grupos de agua, luego se apresuró a buscar el origen de los murmullos, con suerte y encontraría la piedra

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Angemon logro detener un grito de sorpresa por la transformación, oficialmente necesitaba estudiar más sobre los digimons, se mantuvo oculto, pensando en alguna forma de entregar esta información al albino, suspiro sin emitir ningún ruido, mas parece un simple gesto, en estos momentos realmente envidiaba a sus hermanos mayores. cerro los ojos quitándose la idea de la cabeza no tenia tiempo para pensar en eso, el tiene sus propias habilidades y confiaba que serian pronto de gran utilidad para el albino. Decidio seguir vigilando en busca de algo más o un momento de distracción que le sirviera para salir del salón sin ser visto

Mientras continuas tu avanza llegas hasta un lago subterráneo que es bañado con una luz azulosa clara, cerca de este está descansando el cristal de la obscuridad, el cual es por completo diferente al de la luz en cuanto a dimensiones pues este es relativamente pequeño en comparación de tal forma que podrías llevarlo cargando valiéndote de tus 2 brazos. Para este punto los ecos las voces se han silenciado pero aun así sería mejor que no bajaras la guardia…

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En lo que Angemon se debatía con sus pensamientos de sentirse menos que sus hermanos, “Holly Angemon” se dirigía a la salida del salón en el que estaba

Una sonrisa se formo cuando al llegar a esa hermosa laguna subterranea y se encontro con el cristal de la oscuridad, estaba por acercarse cuando, se sentia desconfiado que fuese tan facil pero, cuando se peracato que las voces distantes menguaron, alarmado desendio rapido y cargo el cristal entre sus brazos  y se apresuro a salir antes de quien sea se aproximase, era algo pesado pero, no por ello imposible de cargar y correr.

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Angemon se movio un poco para que el otro no le descubriera por la esquina del ojo.

Espero a que el otro se fuera, tenia bastante informacion pero, desgraciadamente no puebas.

La opcion logica era emfrentarle y engañarlo para que revele su verdadera forma

Consigues regresar al pasillo sin problemas, pero, alcanzas a escuchar el eco de pasos… vienen desde otra entrada al lago… estos pasos se escuchan acompañados del ruido de arrastrar algo muy pesado por el suelo -maldito… guardián… creía que ya lo había derrotado- se queja una voz un tanto aguda -bueno, da igual, conseguí eludirlo y traer este cristal conmigo- afirma victorioso solo para quedar en silencio apenas llegar al lago -¿¡dónde demonios está el de la obscuridad?- con cuidado suelta la tela que usaba para poder arrastrar el cristal de la luz sin romperlo o dañarlo disponiéndose después a buscar el de la obscuridad

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-¿hmm…?- después de pasar de largo el sitio donde se esconde Angemon se detiene y luego mira hacia atrás -no… solo estoy… ¿nervioso…? si, eso debe ser…- murmura para sí mismo y continua con su camino

El oji amatista se debuto a escuchar unos pasos en la recamara, se oculto y miro quien podría ser el dueño de aquel escalado, noto el cristal de la luz y memorizo su ubicación, la voz del ladrón aladro los oídos de albino quien acostumbrado al silencio, le resultaba muy desagradable, con gran cuidado dejo el cristal de la oscuridad en el suelo, tomo su terminal para corroborar si podia almacenarla, encaso de no poder tenia otra estrategia en mente pero, sin duda rogaba por poder almacenarla


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Caley se mantuvo en total silencio cuando sintió que tal vez fue descubierto, casi se relajo a escuchar que el otro se auto convenció que no era nada pero, prefirió ser precavido y esperara para salir de su escondite

Consigues guardar el cristal en la terminal, pero el sonido que hace el aparato alerta al ladrón, con la luz que emana del cristal puedes verle la cara, la cual es como una calavera, de hecho, todo su cuerpo se parece un esqueleto alado. El ladrón intenta encontrar de dónde provino el sonido avanzando con cautela y mirando en todas direcciones empuñando un baculo listo para atacar

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“Holly Angemon” sale de la sala y vuelve a vagar por la catedral sin aparente rumbo fijo mientras pretende seguir en búsqueda del cristal…

http://wikimon.net/Skull_Satamon

El albino mordio su labio al darse cuenda del ruido desenredo un crucifijo de oro que colgaba de su cinturon arrojandolo a hacia donde recordaba estaba la otra entrada causando ruido en aquel lugar

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Angemon salio un rato despues de su escondite se acerco a la zona donde Slash...Holly Angemon estaba

Caley miro el lugar, buscando alguna discrepancia

Apenas escucho el ruido del crucifijo al chocar con el suelo se giró hacia este y ataco -¡nail bone!- y de la jema de su báculo salió una luz relampagueante, tras esto se acercó rápidamente para ver que había atacado -¡tch! ¿Qué basura era esta?- dice intentando recoger el colgante pero este se desmorono -vaya desperdicio de ataque- se queja sacudiendo su mano -ahora… ¿Dónde está el dueño de esa baratija..?- pregunta al aire martilleando sus dedos en su báculo mirando nuevamente a todas partes

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Holly Angemon llega hasta la zona donde había más tránsito y recibe un informe donde le dicen que hay un infiltrado en la catedral -¿me han descubierto…? No, espera, esto es perfecto- piensa al escuchar el informe -deben de ser ese elegido y su digimon, casualmente se separaron, seguramente tenían un plan para confundirnos y que creyéramos que estaban de nuestra parte y así conseguir libre acceso en la catedral… ¡apréndanlos inmediatamente!- ordena diligente y ahora todos los ángeles dejan la búsqueda del cristal y la cambian por la búsqueda tuya y tu digimon

El albino aprovecho la distracción de su crucifijo, generalmente no era si de arriesgado pero si era cierto no podía permitir que los cristales cayeran en manos erróneas. No se ofendió por el comentario a él tampoco le gustaba el crucifijo pero era un recuerdo de su madre una mujer que no conoció por lo que de cierta forma no era una gran perdida para él. Almaceno el segundo cristal y salió lo más rápido que pudo del lugar evitando pisar los charcos que por suerte a un recordaba donde estaba “almeno ya se quien ataco a Blastmon” pensó para si , al Salir del pasillo corrió hacia donde Blastmon le dijo estaba el cristal de la luz con suerte lo en contraria ahí. Sintió algo extraño, una energía recorrer su cuerpo, su digivaice brillo

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Caley al no hallar nada opto por salir pero ni bien abrió la puerta su cuerpo brillo evolucionado a Seraphimon, el serafín digital miro sus manos confundido, su cabello negro era cubierto por su armadura; de alguna forma en ese nivel el serafín digital era la viva copia de fallecido ángel de las leyes y la disciplina, quizá porque Janaan fue el último en ver con vida al gran ángel, Caley camino en silencio por  los pasillo si Janaan lo evoluciono era por algo.

 Camino hacia el altar donde espero encontrar pistas que le permitan ir con el paradero de Janaan, una vez en el altar contemplo el espacio donde debería estar el cristal, realmente tenían que encontrar el cristal

-¡…!- se gira rápidamente al escuchar repetirse el sonido de la terminal almacenar pero esta vez no ataca creyendo que sería otra trampa -tch…- chasque la lengua cuando huyes, y cuando se da cuenta que no está el cristal de la luz donde lo dejo, se pone a perseguirte mientras te maldice entre gritos -¡devuélvemelo maldito humano!- te ordena enojado -¡si no, te atacare y te volveré polvo!- advierte apuntándote con la jema de su báculo

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-¡maestro!- dicen un grupo de Angemon incrédulos al ver a tu Seraphimon mientras admira el sitio donde estaba el crista dispuesto antes de ser robado -¿acaso el que hurtaran el preciado cristal fue suficiente como para juntar los residuos de sus datos, o gran maestro?- agrega uno de los Angemon del grupo -no se preocupe gran maestro, le aseguramos que lo encontraremos y devolveremos a su sitio a toda costa- afirman los 4 a la vez

El albino corre a gran velocidad, usando la gema luminosa que le dio Blastmon para asegurarse de no estamparse contra nada -y ya se como se siente Magnus cuando le persiguen por robar- piensa en cierta forma la adrenalina que sentía era refrescante, sacudio la cabeza, y se centro en correr -¿me volverás polvo independiente si te lo devuelvo o no!- grita -blastmon!- grita con fueza con la esperanza de ser escuchado por el guardian

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Caley casi pego un salto cuando escucho una voz, miro en silencio a los angemon, no entendió se que hablaban al menos con respecto a lo de los residuos de la data, no sabia que rayos decir no entendía nada, solo se limito a asentir y regresar su vista hacia el vació que ante ocupaba un crista