Mucho que aprender

Layla estaba sentada en una banca de un pequeño parque de Tokyo, había estado aprendiendo mas sobre el Digivice que tenía, el Xros Loader, hasta ahora había aprendido a "guardar" a Impmon en el aparato y también a sacarlo. Tan solo tenía que decir la palabra "Reload" seguido del nombre del Digimon Diablillo. Además había descubierto algo aún mas interesante, en el interior del Xros Loader en una ranura especial había un extraño Chip puesto, ella lo sacó con cuidado de no hacerle daño y al tenerlo en la palma de su mano lo examinó con cautela. Ese chip tenía la imagen de algo parecido a un conejo, pero de color verde claro y sus orejas llegaban casi hasta el suelo, tenía al parecer unas ametralladoras en las manos, en una esquina de a ficha estaba el nombre y decía: Gargomon.

—Oye Impmon, ¿que es esto?—Dirigió su mirada hacia el Xros Loader y de este surgió la voz de Impmon quien respondió a su pregunta.

Impmon: Es una Digimemory, son raras pero muy útiles. Cada una de ellas tiene el poder de un Digimon diferente. Esa es la Digimemory de Gargomon.

—Oh, gracias.—Aprediando la Digimemory procedió a guardarla en el bolsillo que estaba al interior de su ropa, específicamente al interior de su suéter color beige.—Sabes, no puedo esperar para que logres Digievolucionar.

Layla había comenzado a buscar Digicampos de batalla cada vez que podía e Impmon había comenzado a adquirir mas experiencia gracias a esos combates, las heridas para él eran lo de menos, pero Layla siempre se preocupaba por él y se encargaba de curarlo del daño que recibía después de cada pelea. El pequeño Diablillo púrpura no podía evitar sentir que algo le faltaba para poder Digievolucionar, pero simplemente no podía decir exactamente qué.

Poco después un joven de cabellos rojos pasa frente de la niña, el cual se encontraba hablando con su Digivice (Ic) dentro de el aparato se encontraba su compañero Digimon Gaomon y al parecer le estaba preguntando algo.

—Oye Gaomon, ¿Enserio no sabes como salir de ahí?.—Dijo el pelirrojo mientras presionaba todos los botones.

Kotemon: No, no lo se tal vez deberíamos ir a DATS, de seguro te explicaran mas acerca del Digivice y de como sacarme.

—Esta bien iré a DATS, aunque quería divertirme un poco mas.—Suoh dio un leve suspiro mientras guardaba su Digivice y mandaba sus manos hacia su nuca.[/color]

La chica alzó la vista al escuchar al chico pelirrojo mencionar el nombre "Gaomon" Últimamente ella se había empeñado en aprender la mayor cantidad de nombres de Digimon que pudiera con la ayuda de Impmon y los datos disponibles en el Xros Loade, hasta ahora iba bastante bien.

—¿Gaomon? ¡Oye, espera!—La chica se acercó al muchacho antes de perderlo de vista y justo cuando llamó su atención al jalarle suavemente el brazo no supo exactamente qué decir cuando el joven bajó su mirada para poder verla.—E-etto...¿dijiste Gaomon, verdad? Ese es, el nombre de un Digimon, ¿tu tienes uno, tienes un Digivice?

El joven pelirrojo miro a la niña pararse al frente de el, el asintió ante la pregunta de la niña de cabellos negros.

—Si y si, pero... ¿Como es que conoces a los Digimon?—El joven saco su Digivice de su bolsillo para mostrárselo a la niña, se podía ver que en la pantalla de este aparato había un tipo de perro color azul que usaba guantes.—El es Gaomon, pero no se como sacarlo de ahí, ¿tu sabes como hacerlo?.

—Porque yo también tengo un Digimon, y también tengo un Xros Loader. Una voz misteriosa me lo dio.—La inña entonces fijó su mirada en la pantalla del aparato, en esta se podía ver al Digimon. La niña dio un rápido vistazo a su alrededor y jaló al chico del brazo para conducirlo a otra parte.—Las personas no saben de los Digimon, que tu Gaomon salga del Digivice en este lugar es muy peligroso.

Tras conducirlo por otra parte del pequeño parque llegaron a un punto en el que por suerte no había personas ya que no había nada interesante además de un par de viejas tiendas cerradas. Layla tomó el Digivice en sus manos y lo examino detenidamente.

—No se parece mucho al mío, pero creo que si puedo sacar a tu Digimon.—Tras probar con todos los botones trató de hacer combinaciones de estos presionando dos o hasta tres al mismo tiempo. Hasta que finalmente el Gaomon consiguió salir de este.—¡Listo!

—Con que haci eres eh, pareces un cachorro adorable.—El joven sonrio un poco al ver a su Digimon fuera del Digivice

Gaomon: Por fin sali, gracias pequeña.—El Digimon sonrio mientras extendia su mano en forma de saludo.—Por cierto, gracias... Eh... Ahora que lo pienso, no nos hemos presentado. Soy Suoh Mikoto.—El joven hizo una leve reverencia ante la niña.

Un digimon, una Dorugamon observaba de lejos, más adelante en el cielo, a los dos humanos y al Gaomon. Ella parecía curiosa por aquel grupito que se encontraba allí enfrente, charlando. Recordando lo que su tamer le había pedido, ella se acercó a dónde estaban y se puso al alcance de la vista de los tres y aterrizó cerca de ellos.

—De nada.—Correspondió el gesto de saludo del Gaomon y después escuchó al muchacho presentarse.—Yo soy Layla Ibuki.
Justo después de hacer eso sorpresivamente una especie de dragón aterrizo cerca de los presentes, entonces en un segundo Impmon salió del Xros Loader de la niña y observó fijamente al Digimon recién llegado.

Impmon: ¿Un Dorugamon?

—Que hace este Dorugamon aquí.—Después de decir esto el joven Mikoto y su Digimon dieron un paso adelante y prepararse para lo que viniera.—Como llegaste a este mundo.

Gaomon: Es probable que lo hayan ayudado a venir aquí.

Ella se había acercado con una idea en la cabeza de cómo provocar a ambos Digimon y Humanos. Con una sonrisa en la cara pasó su mirada por cada uno, mostrando su boca y sus dientes, resultando algo extraña para cualquiera su expresión. Se agazapó un poco, colocándose en posición de ataque.

-¿Qué hago aquí?- repitió la pregunta de manera de dar inicio a lo que iba a decir la dragona. -Pues, tengo hambre, así que vine a buscar comida.- les respondió finalmente, mirando primero al perro de color azul y luego al digimon con aspecto de diablillo. -Y aquí la encontré.- terminó diciendo, dejando claras sus intenciones.

Tras decir eso fue una razón suficiente para atacarla, Impmon formó varias bolas de fuego en sus manos y las lanzó todas en dirección a la Dorugamon.

Impmon: Si claro, porque no mejor haces algo mas fácil y buscas comida en los basureros de allá.—El Diablillo púrpura señaló unos contenedores de basura que estaban a varios metros de distancia mientras mostraba una sonrisa burlona.

Layla solo observó a su Impmon un segundo y después dejó escapar un suspiro, esa clase de comentarios burlones con los que solo lograba hacer enfadar aún mas a sus enemigos le costaban varias heridas demás, aunque el Digimon Virus les restaba importancia.

El Digimon de Mikoto se lanzo contra la Dorugamon mandando una serie de puños a gran velocidad.

Gaomon: Crees que podrás devorarnos tan fácil no te hagas ilusiones.—El Perro azul también mostró una sonrisa burlona ante aquel comentario del Diablillo.

Suoh observaba junto a la pequeña Layla para protegerla de lo que viniera aunque no pudiera hacer mucho iba a arriesgar su vida para que la niña no sufriera ningún daño alguno.

Dorugamon se decidió meterse en el juego de bromas que Impmon había iniciado. Luego de haber detenido las bolas de fuegos con pequeñas esferas de metal, le contestó al Diablillo: -Es que vos sos mejor basura que lo que hay allí.-

Luego, mirando al perro azul, agregó: -No me hago ilusiones- y luego hizo el gesto de saborear el momento, relamiéndose de manera siniestra. -Aunque primero jugaré con la comida.- Luego se lanzó hacia Gaomon. -¡Power Metal!- exclamó y de su boca salió una esfera de metal de casi el mismo tamaño que el Digimon de pelaje azul. Ella pensaba en usarlo de distracción mientras se dirigía a él con la boca abierta.

Mientras tanto, en un lugar cercano, un chico de diecisiete años estaba observando sin llamar la atención...

El Diablillo reaccionó a tiempo y sujetó a Gaomon por la cinta roja que tenía atada en la cabeza para después jalarlo con fuerza y alejarlo de la esfera de metal, pero a cambio sintió los colmillos de Dorugamon hundirse en su brazo derecho.

—¡¡Impmon!!—El Diablillo apretó los dientes tratando de no fijarse en el dolor que ahora sentía, al escuchar gritar a su amiga fijó su mirada en ella y después en la Dorugamon mientras decía una maldición en voz baja dirigida hacia esta última.

Impmon: No te preocupes tanto, esto no es nada.—El Impmon entonces sintió otra oleada de dolor recorrer su brazo y cerró los ojos con fuerza unos segundos, cerró su mano en un puño y le lanzó un golpe con gran fuerza a Dorugamon en el hocico para que lo soltara.

Después de que el Impmon jalara a Gaomon, el Digimon azul se soltó y rápidamente realizo un ataque de puños contra la Dorugamon.

Gaomon: ¡Giro Destructor!. El Digimon salta en el aire, haciendo girar y golpear al opositor con su puño Shoryuken.

Al parecer ambos Digimon's se encontraban en un serio aprieto contra la Dorugamon, los Tamers estaban preocupados por sus Digimon's, pero ellos tenían fe en sus compañeros y no dudaron de ellos ni en lo mas mínimo.

Dorugamon parecía deleitarse ante lo ocurrido. EL Impmon mismo se había entregado ante las fauces de la dragona, aunque fuera a modo de sacrificio de un compañero Digimon, algo muy loable aunque, como en este caso, muy desafortunado y trágico.

Ella se quiso aprovechar de esta situación, y de nuevo abrió la boca para tratar de sujeta mejor al diablillo, cosa que al final no pudo. No pudo porque en ese momento fue golpeada por Gaomon. Ésto la hizo apartar apenas de ambos, provocando que en una reacción posterior y arrebato de ira arañe con fuerza a Gaomon a la altura del vientre. Luego, aprovechando su cercanía, trata de agarrar al Azul con sus dientes.

Mientras tanto, aquel chico seguía observando desde lejos, apenas dejaba ver una silueta los que estaban en la zona de la pelea...

Impmon rápidamente comenzó a formar un ataque, al juntar sus manos creó una bola hecha de fuego y hielo la cual a cada segundo se hizo casi tan grande como el Diablillo. Entonces la lanzó con todas sus fuerzas hacia la dragona para que no lastimara al Gaomon. Tras hacer eso se llevó una mano al brazo herido del cual caían gotas de sangre.

—Tengo que...—Pero antes de terminar lo que iba a decir Impmon respondió con un rotundo no.

Impmon: No te acerques, es demasiado peligroso...—El Digimon Virus no se lo perdonaría nunca si algo malo llegara a pasarle a Layla, volvió a fijar su vista en Dorugamon.

El Can Digimon callo al suelo después de recibir el arañazo de la Dorugamon, rápidamente se levanto para ayudar a el Impmon aunque eran infantiles Gaomon iba a dar todo de el para poder vencerla. Gaomon empieza a girar como un tornado y de este salían una serie de puños dirigiéndose a la dragona.

El Tamer Suoh estaba preocupado por su compañero y al parecer no pensaba abandonarlo por nada, de repente la mirada preocupante de Suoh cambia a confiada y seria.

Dorugamon se vio afectada por el ataque combinado de ambos digimon del nivel Rookie, haciéndola retroceder unos metros. Ella ahora si estaba molesta. -¿Así que quieren que los despedace y luego me los coma?- dijo en un tono que hizo notar un verdadero enfado. -¡Ya verán!- ultimó, dispuesta a abalanzarse sobre ambos y lanzarle bolas de metal. Pero, cuando iba dispararlas se oyó una grito con una orden.

-¡Suficiente!- exclamé imperativamente.cuando me hice presente, estando detrás de mi camarada. Ella se volteó a verme. -Ya no es necesario seguir, ya vi sus límites.- le aclaré y mi compañera se colocó detrás mío y se dispuso a ver la mochila con el Digihuevo que había encontrado.

Layla se acercó a su Impmon y se arrodilló a su lado mientras veía la herida del brazo, el Diablillo solo se quitó su pañoleta del cuello y la usó para vendar la herida por ahora, como era de color rojo ocultaba bien las manchas del líquido carmesí. Tras hacer eso le mostró una leve sonrisa a su amiga y ella solo dijo en voz baja un lo siento.

Impmon: Debes dejar de disculparte por todo.—Apoyó una mano en el hombro de la chica y ella solo asintió para después volver a ponerse de pie.

La niña entonces fijó su mirada en el muchacho que había hecho aparición.

Suoh también se acerco a Gaomon para ver si se encontraba bien, el Can Digimon dijo que estaba bien pero al parecer no era así el ataque de la Dragona le había afectado mucho pero el Can Digimon lo estaba ocultando para no preocupar a Suoh.

El joven pelirrojo desvió su mirada al hombre que había aparecido de la nada

-Al parecer, exageraste Dorugamon.- dije observando las heridas de ambos digimon de nivel Rookie. Me agaché y bajé mi mochila para ponerme a buscar un par de juegos de vendas para atenderlos. En el bolsillo principal solo estaba el Digihuevo, por lo cual tenía las vendas y las gazas en el secundario.

-Tienes razón.- habló con penuria mi camarada, la cual se quedó cerca del huevo cuando yo fui a a tratar las heridas tanto del Can como del Diablillo. -Lo siento.- le dijo a ambos por haberlos herido así.

Me acerqué primero al Impmon, que pareció haber recibido la peor parte...

Impmon retrocedió un paso cuando el muchacho se le acercó, pero cuando Layla le mostró una càlida sonrisa dejó escapar un pequeño y casi inaudible suspiro y permitió que el desconocido vendara la herida de su brazo. Cuando escuchó a la Dorugamon pedir disculpas el Digimon Virus solo la miró fijamente un segundo y dio su respuesta.

Impmon: No te preocupes, por lo menos pediste disculpas.—Cuando el chico terminó de tratar la herida el Diablillo púrpura tomó su pañoleta roja y volvió a ponérsela en el cuello.

—Pero, ¿por qué nos atacaste?—Su voz no denotaba enfado alguno, solo era una simple pregunta. Aunque seguía estando preocupada por las heridas de Impmon y Gaomon.

Suoh vio como aquel chico curaba el brazo de Impmon y pensó que no era un enemigo... Por ahora, por otro lado el Can Digimon miro a la Dorugamon pedir disculpas hacia ellos por lo que había hecho.

Gaomon: Pero creo que te pasaste un poquito. El Digimon azul se sentó en el piso para disimular el dolor que sentía en su vientre.

-Porque tenía que ver que es lo que tenían en el fondo de su alma.- les dije de manera algo indirecta después de terminar de aplicar las vendas a Impmon y me acercaba al Perro Digimon con el otro paquete de vendas y gazas. -Ya que no dejaré que cualquier humano tenga compañeros Digimon, ni tampoco que cualquier Digimon deambule en el mundo humano sin que lo merezca o necesite.- terminé de aclarar las razones mientras desinfectaba y vendaba al Can.

Dorugamon, recostada en el suelo al lado de la mochila y sin quitar la vista del Digitama contestó al Gaomon: -Solo fue un juego para mí, pero para ustedes fue grave.- no habló de esta manera para ofenderlos, sino para decirles que solo los estaba provando. -Aunque admito que hicieron poco más de lo que esperaba.- los felicitó en tono orgulloso mientras empezaba a limpiarse las garras que aún tenían algo de la sangre del Cachorro Azul.

La chica vio como Gaomon era curado, cuando ambos Digimon de etapa infantil demostraron estar mucho mejor Layla sintió un gran alivio. Entonces el Diablillo púrpura al escuchar lo que dijo la Dorugamon solo se cruzó de brazos y mostró una leve sonrisa.

Impmon: Seguiré peleando y me volveré más fuerte.—La niña le dio unas palmaditas en la cabeza y el Digimon Virus solo miró a otra parte.

—Bueno, te agradezco mucho que hayas curado a Impmon y a Gaomon.—Dicho eso hizo una ligera reverencia hacia el muchacho desconocido.

Al igual que la niña Suoh también agradeció haciendo una leve reverencia ante aquel desconocido y después de eso miro al desconocido.

—Y cual es tu nombre.—Después de decir esto el pelirrojo mando sus manos hacia su nuca esperando una respuesta de el chico.

Gaomon: Es verdad queremos saber por quien fuimos atacados. Decía el Can Digimon

-Cierto, donde quedaron mis modales.- me percaté de que aún no nos habíamos presentado formalmente mientras terminaba con el vendaje del perro azul. Así que lo hice cuando me acerqué a mi camarada y me volteé. -Mi nombre es Johno Battonage.- me presenté con mi mano izquierda.

-Y yo soy su camarada, Dorugamon.- se presentó mi ella, que se levantó y se acercó a ambos Rookies de manera tranquila cuando se terminó de limpiar las garras. Allí rodeó con sus patas delanteras al Gaomon y lo empezó a lamer de manera tierna.

—Es un placer conocerte, yo soy Layla Ibuki.—La niña sonrió al ver la escena de Dorugamon lamiendo a Gaomon.

Impmon: Oye Layla, ¿no hay un Digicampo de batalla cerca?—Ella sacó su Xros Loader y observó la pantalla un segundo mientras presionaba un botón.

—No, no hay ninguno. Pero aún así es mejor que no pelees, la herida de tu brazo debe curarse primero.—Habló casi en un tono de reproche hacia el Digimon Virus quien emitió un quejido en voz baja.

Impmon: De acuerdo...—Aunque no lo dijera directamente, en el fondo se sentía feliz de tener a alguien como ella a su lado.

—Mucho gusto, yo soy Suoh Mikoto.—Al igual que la niña el joven también sonrió un poco al ver como lamían a Gaomon.

Gaomon: Dorugamon me haces cosquillas. El Can Digimon reía al sentir la lengua de la Dragona en su rostro.

—Layla, puedes ver si hay una batalla Digimon con tu Xros Loader. El se acerco a la niña para mirar como hacia tal cosa y poder aprender un poco.

Dorugamon no le hizo caso al can Digimon sobre dejarle de lamer. Parecía que le daba un baño como un leona a su cría. No pude echarme una risa al ver esta situación. Muy pocas veces la había visto actuar así. Luego tomé la mochila teniendo cuidado de que el huevo no se caiga.

-Por lo poco que sé de los Xross Loaders,- empecé a decir cuando escuché lo que comentó el pelirrojo sobre ese dispositivo digital. -Tienen mapas en tres dimensiones, pero no para rastrear campos de batalla.- les aclaré mientras resumía que clase de personas eran ellos dos, percatándome que la chica era una Hunter y el chico sería un Saver o un Tamer.

De pronto se escuchó una explosión cerca de nosotros...

La niña al oír lo que dijo Johno bajó la mirada mientras guardaba nuevamente su Xros Loader, definitivamente aún tenía que aprender sobre ese aparato. Pero entonces cuando se escuchó la explosión, la cual fue bastante cerca, Impmon de inmediato observó la nube de humo que se alzaba y corrió en dirección a esta siendo seguido por su amiga.

—¡Espera Impmon!—Sin pensarlo un segundo la niña fue con su Digimon para que a este no le pasara nada malo, aún estaba herido y si peleaba ahora y ocurría un error no quería llegar a imaginarse el resultado.

Impmon: ¡Ven, rápido!—El Digimon Virus hizo un gesto para llamar la atención de la chica y siguió avanzando pero un poco mas lento para que ella lograra darle alcance.

El pelirrojo se percato de aquella explosión y haciéndole una señal con su cabeza a Gaomon ambos corrieron hacia dicha nube de humo, por otro lado el joven Johno y su camarada se habían quedado parados ahí parecía como si no fueran a hacer nada. Suoh y Gaomon alcanzaron a la niña y a Impmon y empezaron a correr a la misma velocidad que ellos.

—Estas segura que deberíamos ir, nuestros Digimon están heridos y agotados.—El Digimon Cachorro se miro aquella herida en su vientre pero después envió su mirada hacia el frente.

Gaomon: No se preocupen, nosotros podemos pelear.—El pelirrojo miro a su Digimon con una leve sonrisa en su rostro y continuaba corriendo a una velocidad determinada.

Después del estallido inicial, observé que ambos Digimon y ambos humanos se precipitaron a la acción. -No deberían...- me interrumpí al ver que ya se encontraban lejos como para escucharme. Cuando salieron de nuestra vista, mi camarada y yo nos quedamos mirando el uno al otro, tratando de pensar que hacer ahora.

Allí, donde había ocurrido la explosión, se encontraban dos Tyrannmon atacando a las personas que se encontraban dando vueltas. Éstas, al ser atacadas por ambos dinosaurios, salieron corriendo lo más lejos posibles de ellos. -Si, váyanse humanos.- dijo el primero de los rojos, mientras se disponía a seguir lanzando llamas. -¡Ahora este lugar nos pertenece!- reclamó el territorio el otro.

Tras encontrarse cara a cara con los Tyrannomon el Digimon Diablillo trató de ir a enfrentarlos pero fue detenido por el firme agarre de su compañera.

—¡Es demasiado peligroso!—Se negó rotundamente a soltarlo, pero el Digimon tras forcejear unos segundos finalmente desistió.

Impmon: Tengo que ir, debo pelear contra ellos y vencerlos.

—Pero por qué, aún estas herido.—Impmon finalmente logró soltarse y alzó la mirada para ver a Layla a los ojos.

Impmon: Confía en mi, sé muy bien que ganaré esta pelea.—Y al terminar de decir eso con paso decidido caminó hasta estar frente a ambos Tyrannomon quienes enfocaron sus miradas en él.—¡Ustedes, peleen contra mi!

Entonces uno de los Tyrannomon comenzó a reír casi sin control mientras golpeaba fuertemente el suelo con su pesada cola y al hacer esto activaba las alarmas de los autos e impedía que la niña pudiera permanecer de pie mas de tres segundos, además de romper unas cuantas ventanas. El otro Tyrannomon permaneció serio hasta mostrar una sonrisa de superioridad.

Tyrannomon: Te metiste en un grave error enano, ¡vamos a hacerte pedazos!—Y tras decir eso se lanzó contra el Diablillo quien lo esquivó con sorprendente velocidad, el impacto del Digimon Dinosaurio contra el suelo hizo temblar el lugar de nuevo.

—¡Detrás de ti!—La niña señaló al Tyrannomon que planeaba atacar a su compañero por la espalda, este de un salto se subió a la cola del enemigo la cual casi lo habría aplastado de no ser por la alerta de la chica.

Impmon: ¿Es lo mejor que tienen?—Soltó una risa burlona y aterrizó sobre el techo de un auto, pero se llevó una mano al vendaje de su brazo cuando la mancha de sangre que había en este se hizo un poco mas grande.

Al haber llegado con los Tyrannomon el Digimon Cachorro efectuó un ataque de puños dirigidos a uno de los Tyrannomon haciéndolo retroceder unos centímetros.

—Muy bien Gaomon.—El Tyrannomon que había sido atacado miro a ver por quien había sido golpeado por sorpresa y al mirar al pequeño cachorro este apretó sus afilados dientes mientras golpeaba fuertemente el suelo con su cola.

Tyrannomon: Como te atreves a golpearme desprevenidamente, ¡te aplastare!—Tras decir eso corrió hacia el Cachorro, rápidamente el Digimon Azul iba a saltar para esquivar el ataque pero sintió un gran dolor en su vientre que le impedía moverse mientras caía arrodillado por aquel dolor quedando desprotegido por el ataque del Tyrannomon.

—¡¡Gaomon!!.—El pelirrojo corrió hacia su camarada y ya estando el Tyrannomon a pocos centímetros el Tamer pega un salto hacia el Gaomon y efectivamente lo quita de la escena, el pelirrojo suaviza la caída del Digimon, el Digimon Cachorro se para y mira al Tyrannomo impactarse con una pared dejando un gran agujero en ella y causando un gran estruendo.

Gaomon: Estoy bien Suoh gracias por salvarme.—El Digimon Cachorro mando sus manos hacia su cinta que tenia en la cabeza y cogiendo los tirantes jalo de ellos para apretarla, luego miro a su Tamer con una sonrisa y una mirada confiada, después miro al Tyrannomon salir de aquella pared que había perforado.

Un resplandor llegó hasta dónde Layla y Suoh podrían verlo. Esta luz parecía provenir de donde estaban recién. Una vez a lomos de Dorugreymon nos dirigimos cerca del lugar de la batalla.

Al mismo tiempo, furioso por la interferencia del humano de pelo rojizo, el Tyrannomon lanzó una llamarada en su dirección tratando de quemarlo junto a su camarada, así hacerse cargo de ambos.

Por su lado, el otro dinosaurio, aprovechando la distracción que tuvo el diablillo por su herida, estaba por lanzar otra llamarada, apuntando hacia Impmon, pero fue impactado por una enorme esfera de metal casi tan grande como él haciendo que pierda la concentración, dejándolo algo golpeado.

El disparo era el Metal Meteor de Dorugreymon, mi camarada, que se encontraba volando a unos metros por encima de ellos. -¡Deberías meterlo en el Xross loader para que se cure más rápido!- le aconsejé casi de manera imperativa a Layla, ya que podría perder a su amigo.

—Entendido.—La niña sacó su Xros Loader pero cuando estaba a punto de guardar a Impmon al interior de este tuvo que moverse a un lado para evitar las garras del Tyrannomon que había sido golpeado por el Metal Meteor.

Impmon: ¡Oye, tu oponente soy yo!—El Diablillo nuevamente comenzó a formar una gran bola compuesta por los elementos fuego y hielo, cuando el ataque estuvo listo lo lanzó con todas sus fuerzas a la cara Tyrannomon.—¡No te atrevas a atacarla!

Cuando el ataque impactó en el enemigo este se alzó de nuevo sumamente furioso, entonces le propinó un golpe a Impmon con su cola con todas sus fuerzas, el Diablillo no pudo moverse a tiempo por culpa de su herida por lo que salió despedido varios metros hasta finalmente chocar contra un autobús dejando una enorme abolladura en este.

—¡Impmon!—La niña fue hacia su compañero mientras le apuntaba con el Xros Loader. Pero el Tyrannomon le cerró el paso mientras le observaba con una clara furia reflejada en su mirada.

Impmon: No te...atrevas a lastimarla...—Impmon estaba muy herido, el Digimon Dinosaurio solo lo golpeó nuevamente con su cola casi en un gesto despectivo y esta vez el Diablillo tardó mas en ponerse de pie.—¡Tendrás que matarme primero!

El gran Digimon enemigo a grandes pasos llegó al lugar donde estaba el Digimon Diablillo y este solo mostró cerró los puños con gran fuerza, Layla entonces notó que la pantalla del Xros Loader había comenzado a emitir un gran resplandor. Ella miró a su Digimon compañero a los ojos y él solo asintió mientras mostraba esa típica sonrisa suya, ¿acaso ya sabía que eso iba a suceder?

—¡¡Ahora, Digievoluciona!!—Ella alzó el aparato y efectivamente, tras un brillo momentáneo en lugar de un Diablillo ahora había una especie de mago sujetando firmemente un báculo. Este se ajustó el sombrero y le apuntó al enemigo con su báculo mientras el Tyrannomon retrocedía un par de pasos.

Wizardmon: Ahora, cumpliré con lo que dije, los derrotaré.

El ataque del Tyrannomon se acercaba hacia el Tamer y su camarada, en un acto rápido el agente de DATS se paro frente a al Digimon azul para recibir el ataque el solo y proteger a su camarada.

—No te preocupes Gaomon, solo encárgate de recuperarte.—Ya estando la llamarada a pocos centimetros el Cachorro Digimon reacciona y empujando a su Tamer hacia un lado el ataque de llamas golpea al Digimon azul, este cae al suelo con unas quemaduras de 3er por todo su cuerpo sin poder moverse.

Gaomon: No te preocupes por mi Suoh, mi deber es protegerte lo recuerdas.—El pelirrojo se acerca corriendo hacia su camarada y lo levanta con suma delicadeza para no lastimarlo mas, despues de eso el pelirrojo mira al cielo y con un fuerte grito dice el nombre de su camarada.

—¡¡¡Gaomon!!!.—El pelirrojo cayo arrodillado con su camarada en brazo mientras agachaba su cabeza y su pelo cubría sus ojos, después se podía notar que unas pequeñas gotas de lagrimas caían en el suelo.

Me dediqué a ver las acciones de ambos combates. Al parecer, el diablillo había logrado recuperarse un poco en el Xross Loader para salir de manera impetuosa hacia su oponente y evolucionar a su etapa de Campeón. Esto me hacía percatar que ya no necesitarían nuestra ayuda.

Aunque esto no se aplicaba a los otros dos, que parecían estar en graves problemas. Incluso Gaomon parecía al borde de la muerte, puesto que con el fuego se le había quemado el vendaje y en otras partes del cuerpo también tenía quemaduras de tercer grado. Considerando esto, decidimos intervenir.

Dorugreymon bajó en un vuelo a ras del suelo para atacar y embestir al Tyrannomon. EN el momento que estuvo cerca de tierra yo salté, quedando con una rodilla tocando el suelo al lado de su respectivo puño, mientras que mi otro brazo estaba sobre la otra rodilla. Luego Dorugamon lanzó su Metal Meteor contra el dinosaurio rojo impactándolo y luego lo embiste fuertemente, lo cual lo empuja varios metros.

El otro Salvaje escupe fuego al mago, tratándolo de hacer morir carbonizado. Él lagarto prehistórico se notaba muy enfadado, no por el golpe, sino por tantas interrupciones de diferentes adversarios.

Wizardmon esquivó el ataque con facilidad, tras haber hecho eso le apuntó al Tyrannomon con su báculo mientras este se volteaba para verlo directamente y emitía un poderoso rugido.

Wizardmon: ¡Ilusión del Terror!—Después de decir eso todo se sumió en la oscuridad mas absoluta alrededor del Tyrannomon, este miró en diferentes direcciones mientras trataba de escapar de esa negrura.—Puedo ver tus miedos mas profundos.

En ese momento el Tyrannomon comenzó a actuar de manera muy violenta e impredecible ya que al haber caído presa en el ataque de Wizardmon estaba viviendo sus peores miedos y pesadillas. Tras haber agotado sus energías el Digimon Mago vio la oportunidad perfecta para acabarlo. Formó una gran esfera de electricidad en su mano y la lanzó con todas sus fuerzas hacia el Tyrannomon, el ataque impactó justo en medio del pecho del Digimon Dinosaurio por lo que este, tras finalmente quedar libre de la ilusión cayó al suelo. Derrotado. En cuestión de segundos se volvió una nube de datos la cual desapareció.

—¡Lo lograste Wizardmon!—La niña saltó hacia su Digimon mientras lo abrazaba y no dejaba de felicitarlo, tanto por haber vencido como por haber Digievolucionado.—Pero ahora debemos ir con Suoh y Gaomon.

Efectivamente, debido a la pelea contra el Tyrannomon sin darse cuenta se habían trasladado algunas calles del punto original por lo que rápidamente fueron para ir a ver si el pelirrojo y su compañero estaban bien.

El pelirrojo se levanto con Gaomon en brazos, sus heridas de 3er grado se hacian mas grabes ya que al Digimon azul no le quedaba mucha energía como para pararse.

Gaomon: S-Su...oh...—Rápidamente el pelirrojo lo interrumpió para que dejara de hablar ya que si lo hacia se pondría mucho pero de lo que ya estaba, después de eso el pelirrojo camino hacia la niña de cabellos negros para felicitarla por su gran victoria y a su compañero por haber Digievolucionado.

—No trates de hablar Gaomon te voy a meter al Digivice para que te mejores.—El pelirrojo miraba a su compañero con una sonrisa mientras el Cachorro Digimon sonreía levemente ya que no tenia ni fuerzas para sonreír.

Me acerqué a Sueoh y a su camarada, al ver la gravedad de las heridas de Gaomon, pensaba que el pelirrojo hacía lo correcto al meterlo en su dispositivo. Aunque el sistema de sanación del DIgivice IC no es tan bueno como el del Xross Loader, sería suficiente.

Mientras tanto, Dorugreymon volvía a atacar al dinosaurio rojo con su Metal Meteor, uno de mayor tamaño que el anterior, acabando con el enemigo. Ella se volvió hacia donde nosotros estábamos. Cuando cuando por fin estuvimos todos reunidos, miré a ambos humanos pero refiriéndome a los cuatro.

-¡Eso fue imprudente!- les grité algo molesto por lo peligroso de sus acciones. -¡Es una suerte que logren estar vivitos y coleando!- terminé de reprocharles, tratando de aguantarme el enojo.

—Lo siento mucho...—Nuevamente ella bajó la mirada al piso al escuchar el fuerte reproche por parte de Johno.

Wizardmon: No te enfades con ellos, después de todo fui yo quien los hizo venir hasta aquí y pelear contra esos Tyrannomon.—Wizardmon se sentía mal consigo mismo, había logrado Digievolucionar pero su imprudencia había resultado en que Gaomon estaba muy malherido y además su compañera había estado bajo mucho peligro.—No volveré a poner en peligro a los demás.

A Layla le tomó ligeramente por sorpresa que la actitud de Impmon hubiera cambiado de tal forma al Digievolucionar, ahora era mas maduro y responsable de sus acciones además de que por lo que había visto hasta ahora. No tenía ese toque de orgullo en su voz.

El joven Mikoto solo metió a su camarada en el Digivice para que descansara de tanto jaleo y al igual que Layla, el pelirrojo también bajo su mirada al suelo porque se sentía culpable por el del accidente de su camarada, el pelirrojo metió sus manos en sus bolsillos mientras escuchaba el reproche de Johno.

—No toda la culpa es de Wizardmon... Yo también quería enfrentarme a esos Tyrannomon... Pero creo que cometí un error al haberlo hecho...—Después de decir esto el pelirrojo apretó con fuerza sus dientes pero luego se calmo.

-Wizardmon, el pasado ya pasó.- le reconforté de manera algo amable, tratando de ocultar aún más mi enojo. -Pero si lo vuelves a hacer algo así, date por muerto- le dije en un tono serio y y mirada sombría, tratando de provocarle el miedo suficiente al mago para que no lo vuelva a hacer. Luego miré a Mikoto.

-No fue un error, fue una imprudencia.- le aclaré al pelirrojo. -Aunque no me sorprende de D.A.T.S.- dije en un tono triste y decepcionado por el estado de dicha Organización.

Luego, recordando lo que tenía que hacer les empecé a decir a modo de saludo. -Bueno, me acordé que debía estar en otro lado, así que me iré.- mientras decía esto me acerqué a Dorugreymon y me subí a su grupa. -Nos veremos en el otro momento.- me despedí de manera sencilla.

-Hasta pronto, pequeños.- saludó ella haciendo referencia a ambos Digimon. -Hasta pronto humanos.- se despidió de los otros dos. Luego ella alzó vuelo para perdernos entre lo alto de los edificios.

El Digimon Mago solo asintió, no era la mirada ni el tono de voz de Johno lo que lo habían convencido de no volver a hacer algo como eso, sino el hecho de no volver a poner en riesgo a su compañera o a alguien mas. Después de que Johno se fue Layla estuvo en silencio unos segundos hasta que finalmente decidió en volver a su hogar. Al llegar cocinaría algo.

—Vamos a casa Wizardmon.—Ella le sonrió cálidamente a su Digimon y este asintió.—Adiós Suoh, espero que Gaomon se recupere pronto, lamento mucho los problemas.

Hizo una profunda reverencia como señal de disculpa y después de hacer eso caminó junto con su Digimon hasta que el pelirrojo los perdió de vista cuando doblaron en una calle. En esa forma no era necesario llevar al Digimon Mago adentro del Xros Loader ya que no llamaba tanto la atención, por lo que pudieron llegar sin problemas a la casa de la chica tras unas horas de caminata.

Al igual que Layla, el pelirrojo también se marcho a su casa para descansar y al ver como la niña se marcho Suoh dio media vuelta y se marcho de la escena