un encuentro un tanto inesperado

un tiempo después de que obtuve a petimeramon comencé a buscar en foros, paginas de Internet ,chats , etc. formas de cuidarle mejor y ver si habían mas personas que los conocían a los digimons para que me dieran consejos. también  paseaba mucho por las costas pensando en mejores formas para cuidar a mi digimon  cosa que no hago muy a menudo debido a que prefiero estar en mi computadora pero tengo que pensar y Petimeramon es muy inquieto para que me deje pensar, cuando salgo lo dejo en mi casa solo se que no hay ningún problema con esto debido a que mis padres no se han dado cuenta de el, aunque lo han visto de frente.

Y esta rutina a sido por muchas semanas.

Actualmente esta caminado por el puerto cerca de los embarcaderos que a esta horas no se encuentra nadie.

Después del encuentro con aquella humana en Manchester City me decidí embarcarme en una aventura,literalmente, para conocer a los humano y su mundo. Para ello me había metido de polizón en este barco, un buque mercante, el cual transportaba objetos envueltos en cajas de madera que decían "frágil".

Para sobrevivir allí me dedicaba a robarles comida a los marineros cuando no estaban o se encontrasen distraídos. Éstos humanos, a diferencia de los traficantes de animales, parecían honestos y trabajadores. Igual sentía, muy en el fondo, que no podía presentarme a ellos porque me intentarían capturar.

Tardamos más de una semana en llegar hasta el destino final que tenía el recorrido. Según tenía entendido el lugar se llamaba Viña del Mar, en Chile. Cuando llegamos era de mediodía, así que me escabullí y me bajé del barco, escondiéndome en una pila cajones de madera que allí había.

mientras caminaba por el puerto escuche ruidos en unos cajones de madera que al no ver nadie me decidí ir a ver que armaba tanto ruido, en las caja estaba escrito destino Viña del mar dije en vos baja- obvio en Valparaiso desembarcar muchas cosas incluidas las que van a la ciudad jardín (viña del mar esta a unos 10 min en metro de valparaiso) , me pregunto que esta haciendo tanto ruido. Así que decidí ver que era lo que armaba tanto rebuscando entre todas las cajas encontré una cola que sobresalía de la pila de cajas. entonces me decidí a mover las para ver que se escondía entremedio de las cajas .

En el instante en que la figura quedo completamente descubierta pensé un dragón di 3 pasos hacia a tras sobresaltado y ese instante recordé que lo mas posible era que fuese un digimon, dije- hooo..la, tu eres un digimon no? un tanto asustado y nervioso por ver a un digimon solo en el puerto me tropecé y se me callo del bolsillo mi digivice a medio metro de mi

Me había logrado esconder en los cajones, aunque no sirvió de mucho, ya que llamé la atención de un humano. Veía como se acercaba lenta y decididamente hacia mi posición diciendo cosas que no llegué a oír.Movió las cajas hasta que me encontró y retrocedió.

Con un tono que demostraba miedo me preguntó si yo era o no un Digimon, cosa que me hizo pensar dos cosas, o era un Tamer y tendría un camarada, o era una persona con intenciones que no me convienen. Esto me quedó claro cuando se cayó y soltó el Digivice. -¿Y tú quién eres?- le pregunté desafiante aprovechándome de su miedo y de que se le había caído el dispositivo.

al ver que no me veía exactamente con cara de amigos tome mi digivice mientras decía-soy Arneytyun bastante atemorizado recordé que deje a petimeramon en casa viendo películas infantiles que le gustaban mucho y aparte de que me serviría nunca lo vi pelear pero a lo mejor podría quemar las cajas donde esta este digimon, dije- lo siento pero tengo que irme a mi casa y alimentar a mis mascotas

mientras tanto en mi casa petimeramon estaba viendo el rey león dice - siento que algo le esta ocurriendo a Arney.... nahh que flojera el me dijo que no podía salir de casa y le are caso. después de un rato se quedo dormido encima de su cama ignífuga que diseño Arney

El humano se presentó como Arneytyun, nombre que me pareció curioso. Él se fue asustado, probablemente porque no llevaba a su camarada consigo. Lo pensé por unos momentos en seguirlo. Como me pareció interesante este sujeto, decidí seguirlo pero teniendo mucho cuidado de que no me percatara. Para ello me fui entre los árboles, en tejados bajos y otros lugares algo elevados, siempre manteniendo cierta distancia para que no se percatara de que lo seguía.

Después del encuentro con el digimon me fui caminando a mi casa era un camino bastante largo para llegar a ella pero en el momento en que me decidi volver note que no traía conmigo nada de efectivo. Mientras caminaba y mi casa ya estaba bastante cerca sentía una presencia de que alguien me estaba observando y escuche algo entonces me di media vuelta y fui al curse de la calle anterior dije enojado- cabro chico de la porquería deja de rayar los portones de las personas. luego que dije eso el niño salio corriendo por suerte solo alcanzo a hacer una muy pequeña mancha, luego seguí el camino a mi casa.

en el momento en que llegue a mi casa y abrí la puerta petimeramon se despertó y fue en mi búsqueda el estaba aburrido y quería jugar algo me rastro al patio trasero de la casa para jugar con una pelota que tenia y dijo- juguemos  juguemos, e estado todo el día sin hacer nada y quiero moverme y divertirme. a regañadientes acepte y me puse a jugar con el.

apenas habíamos comenzado a jugar petimeramon se quedo quieto y dijo al aire - hola... quieres jugar con nosotros. yo perplejo me quede observando hacia donde el estaba observando.

Seguí al humano hasta la casa. Allí opté por ocultarme en el exterior y no meterme, observarndo lo que hacía. Allí, desde un árbol y a través de la ventana, observé a su camarada, un Petitmeramon. No me decidí presentar, ya que aún me encontraba muy inseguro de si este humano era de fiar o no.

A pesar de estar oculto, su camarada logró percatarse de mi presencia, invitándome a jugar. Me negué a salir de mi escondite, esperando de que dejase de insistir con su invitación.

Petimeramon se acerca y me susurra , digo- esta bien voy allá. me devuelvo a la casa y me dirijo a la cocina para ir por lo que me pidió petimeramon.

petimeramon se acerca a un árbol y dice- se que estas hay no hace falta que te escondas porque no, bajas hablamos. el seguía insistiendo en que bajara para hablar o jugar hasta que llegue. Dije- Bueno aquí traje lo que me pediste. la coloque en el suelo y me senté en el suelo un poco alejado de la bandeja llena de comida en ella había fruta, unos sandwiches, galletas y una jarra llena de jugo de frutilla.

dije- así que este es tu plan Petimeramon hacer que le de hambre y baje, no? el responde - no es que tengo hambre y me imagine que el también tendría hambre. luego de lo que dijo pensé que este digimon es muy inocente todavía , Petimeramon se puso a comer.

Observaba a ambos allí abajo, tratando de hacerme salir con comida. Se notaba que eran ingenuos y sabían poco de mí, ya que no había de lo que yo comía. Bajé del árbol al suelo, teniendo cuidado de que no haya nadie más a la vista. -¿Por qué creen que yo como ese tipo de comida?- les pregunté haciendo cara de asco a lo que me ofrecían. Como no me gustaba y ellos parecían ser buenas personas, se los aclaré. -Prefiero el pescado y no esta cosa llena de frutas.- dije para indicarles lo que me gustaba mientras olisqueaba desde donde estaba.

Me pare y fui de nuevo a la cocina que fortuna que vivo en la costa porque siempre mis padres compran pescado una o 2 veces a la semana debido a que es muy rico en omega 3 o por lo menos eso es lo que dice mi madre. así que decidí de cocinarle un poco de pescado antes de que Petimeramon me lo pidiese. después de un rato con el pescado cosido y bien preparado volví afuera para ver como le iba a Petimeramon, por si acaso también traje pescado crudo no se como le gusta mas.

Mientras no estaba mi digimon hablo- ¿por que tienes tanto miedo de presentarte?, Arneytyun y yo no somos malos el siempre se preocupa por mi y me a comprado varios juguetes y cosas que me gustan mucho. el mira con una cara llena de inocencia hacia el árbol.

En el momento en que llegue dije - espero que esto sea mas de tu agrado. coloque esta bandeja con 2 platos junto a la otra y volví a sentarme donde mismo.

-No es miedo, sino desconfianza.- le aclaré con mirada seria al Digimon ígneo, el cual parecía no entender mi razón, mientras su humano no estaba. -Más de la mitad de los humanos que nos conocen, no nos quieren, al menos con buenas intenciones.- le expliqué tranquilamente.

Luego el humano volvió con pescado cocido, el cual olía bien. Me acerqué, aún dudoso, pero con algo de hambre, a lo que aquel sujeto había preparado comiendolo con fruición. Seguía comiendo mientras me mantenía alerta ante cualquier movimiento que intentasen realizar.

dije-bueno espero que te halla gustado la comida, si no estoy mal tu res el digimon que estaba en el puerto, no?. me gustaría saber el porque estas aquí y como te llamas, porque en realidad no e visto a un digimon que no tenga a un compañero humano. esperando que hablase seque una manzana y me la puse a comer y Petimeramon dijo- ¿por que desconfías tanto de los humanos que te han echo? aun soy joven y no entiendo mucho de lo que es la vida.

despues de lo que dijo mi compañero me quede pensando que le habran echo a este digimon para que sea tan desconfiado. Se nota que aun Petimeramon es muy joven pero también se ve que no es nada tonto.

No le contesté al humano, quedando algo descortés, pero me dedicaba a terminar de comer el pescado. Luego, al mirando a ambos muy interesados en mí, pero no por algo en especial, decidí abrirme un poco más. -Desconfío de los humanos por muchas cosas,- les empezaba a contestar, cuando me pareció sentir algo extraño, aunque solo fue por un instante, quizás fue la aparición de otro Digimon en las cercanías. Luego volví a mirar a ambos -no solo por como me hayan tratado a mí, que ya es bastante.- terminé de decirles, dejando de lado los demás motivos en silencio.

Me pare de donde estaba, me estiro y digo- veo que en esta conversación no pinto nada, voy a mi habitación, si me necesitan solo griten, haa y por cierto si te quieres quedar hay un cuarto de huéspedes que nadie esta ocupando, Petimeramon si decide quedarse se lo puedes mostrar por favor. de este modo retire las bandejas ya que nadie seguía comiendo y me dirigí a mi habitación a prepararme para mañana.

de esta forma se quedaron solo Petimeramon y el digimon, mi compañero seguía dudoso de quien era  así que dijo- ¿como te llamas? y ¿también sentiste eso de hace unos instantes ? fue algo extraño. esperando su respuesta Petimeramon comenzó a jugar con el balón.

-Mi nombre es Shiron, el Windramon.- me presenté al Petitmeramon en cuanto su camarada humano se fue. -Si, lo sentí.- le contesté al Digimon llameante, que pareció haber detectado lo mismo que yo. Volví a mirar hacia donde sentí eso y luego volteé a ver a la criatura de fuego. -Probablemente haya sido otro Digimon.- le comenté algo preocupado al bebé.

mi compañero seguía jugando con la pelota que le di, sin mucha preocupación, mientras terminaba de hacer mi mochila con todo lo que tenia que llevar, vi por la ventana de mi habitación que daba hacia el patio trasero de la casa, hay estaban los dos digimons, ese digimon que aun no se había presentado estaba mirando hacia una dirección un tanto preocupado ya que estaba en un segundo piso vi en la dirección que el estaba mirando, vi una silueta en la lejanía apenas un momento. Después de terminar de hacer la mochila abrí la ventana de mi alcoba para escuchar mejor lo que los digimon estaban haciendo o si me llamaban.

Petimeramon mientras jugaba con la pelota le dijo- ¿por que estas tan preocupado por la presencia de otro digimon? acaso creas que se asuste, que los humanos le hagan algo malo o que porque este asustado comience a atacar a todo. en ese preciso momento mi compañero dejo de jugar para escuchar lo que decía el windramon.

-No es por eso.- le respondí al Digimon llameante en cuanto su camarada se alejó. Tenía ciertas preocupaciones con lo que había pasado en el Digimundo. -¿No lo sabes acaso?- le pregunté mirándole a los ojos, desentendiendo el si lo sabía o no. Me senté de manera erguida en el suelo, con la cola a un costado, y estiré mis patas. -¿No has estado en el Digimundo últimamente?- le seguí interrogando confundido por el desconocimiento que ese Digimon "doméstico" poseía.

Petimeramon miro a Shiron con duda y dijo- nací en este mundo y nunca e ido al digimundo, ¿acaso a ocurrido una gran catástrofe en el o algo peor?. desde mi habitación escuche lo que dijeron y me comencé a preguntar si mi amigo estaba bien, hace un tiempo el había ido al digimundo y me pregunte si lo había echo antes de que en el ocurriera algo malo.

-No, no hay ningún muerto.- le contesté al Petitmeramon, el cual no había nacido en el Digimundo, sino acá, en el Mundo Humano, cosa que me sorprendió. -Por suerte y a la vez por desgracia.- se me escapó decirle, demostrando un sentimiento de pena y tristeza por lo que ocurría en mi hogar. -No es algo que quisieras ver.- le recomendé, ya que lo que yo había visto en la Llanura Guardián no se lo recomiendo a nadie más.

decidí entrar en el computador para pasar el rato, después de unos instantes en el pc escuche un ruido que provenía de la calle siguiente a mi casa bastante fuerte como si alguien hubiese chocado en un automóvil, decidí ver por mi ventana para ver como estaban los digimons.

dice petimeramon- entonces a ocurrido algo aun peor en el digimundo ¿como que?. mi compañero al escuchar el ruido se giro en esa dirección.

-Un virus.- le contesté al Petitmeramon, pero, antes de poder seguir diciendo lo que pasó, se escuchó un fuerte estruendo, como un choque de autos. Al escuchar ese sonido, aleteé rápido y me escondí en los árboles. Desde allí, una vez escondido, me dispuse a observar lo que había ocurrido.

no vi al digimon que parecía un dragón y petimeramon seguía en el patio mirando en dirección del ruido, tome mi celular y me dirigí al lugar de donde venia el ruido que era una calle que se cruzaba de forma perpendicular con la de mi casa. Me demore en llegar al lugar unos 2 minutos contando con el tiempo de salir de mi casa. Y cuando pude observar lo que ocurrió vi a algo que no era un humano.

ME dediqué a observar el accidente, cosa difícil con el humo del vehículo afectado, "genial, más contaminación al ambiente" pensé al verlo. Luego, sentía la presencia de un Digimon, lo cual traté de percatarme y de quién se trataba. Enfoqué mi visión en una criatura que salió de la humareda, era un Gizamon, que parecía estar fuera de control...