Encontrando la respuesta

*Kio y Agumon caminaban por las costas de la playa viendo el mar y la gran selva tropical la cual llamaba su atención por la variedad de sonidos, Kio se sentó en la arena y Agumon igual, el joven se acostó en la arena mirando el cielo mientras que Agumon miraba el mar como si algo llamara su atención y se acostó en la arena para ver el cielo-¿te has dado cuenta de algo? Agumon- dijo Kio, -¿qué cosa?- dijo Agumon, -que el mar es tan oscuro y el cielo muy brillante pero aun asi se juntan- dijo el joven, Agumon lo quedo mirando-yo también estaba pensando en lo mismo- dijo Agumon.*

Wizardmon corría como alma que lleva el diablo por la selva, jadeando y lanzando de cuando en cuando truenos a su espalda, hacia su perseguidor, el cual no podía verse bien, tan solo era una sombra oscura que traspasaba los arbustos y anulaba los ataques con su garra izquierda.

El digimon brujo chasqueó la lengua, desesperado, y siguió corriendo rápidamente, tratando de huir, en vano, de ese digimon. Supo que no lo conseguiría, necesitaría ayuda para ello.

- ¡Socorro!

Mientras, a su espalda, el otro digimon siguió persiguiéndolo. Era de un nivel mayor, por lo que no tardaría en darle caza. Y entonces absorbería sus datos para hacerse más fuerte.

- Deep Sorrow

Al instante un extraño viento salió disparado hacia Wizardmon, golpeándolo y lanzandolo hacia delante. La selva ya estaba por terminar, y el digimon cayó de bruces sobre la arena de la playa.

*Kio y Agumon estaban mirando el cielo sobre aquellas palabras que habían dicho, escucharon unas gritos de auxilio por lo que el joven y su Digimon se levantaron inmediatamente mirando donde provenía aquella voz, vieron que un Wizardmon salió del bosque volando cayendo en la arena de la playa, Kio y Agumon corrieron a verlo-¿estás bien?-dijo el joven preguntado al Digimon con apariencia de mago-¡Agumon prepárate!- dijo Kio a su Digimon,-¡sí!- dijo Agumon asintiendo con la cabeza y colocándose en posición de ataque, ambos no sabían de que se trataba pero habia que estar preparado.*

El lugar se volvió en calma durante unos largos segundos que le parecieron eternos a Wizardmon. Agradeció con toda su alma que hubiera habido un niño elegido con su digimon por ahí. Clavó los ojos en el linde de la selva, buscando nerviosamente con la mirada a su perseguidor. Solo debía de encontrar una sombra con aspecto demoniaco y con alas.... No tuvo que esperar mucho más tiempo para verle de nuevo.

Se escuchó un par de crujidos, y unas cuantas pisadas. El digimon perseguidor avanzaba hacia la playa con lentitud, aunque pronto se vio su silueta entre las sombras. Era alto, bastante alto. Llevaba una máscara dorada, y toda su piel era de un gris azulado; sus garras estaban envueltas en vendas rojas, y acababan en cuchillas doradas. El torso lo llevaba desnudo, a diferencia de cintura para abajo, que llevaba unos pantalones negros con placas metálicas en algunas zonas. Para terminar, pisaba el suelo con unas botas del mismo color, con pinchos afilados y amenazadores en ellas.

NeoDevimon plegó las alas, rojas. No las necesitaría de momento.

- Entregadme a Wizardmon.

*Kio se sorprendió al ver al Digimon Demonio-a este Digimon nunca lo eh visto-dijo el joven, Agumon tenia una mirada de determinación-yo tampoco lo eh visto, pero sea quien sea no te daremos a Wizardmon-dijo Agumon mirando fijamente a los ojos a NeoDevimon-escapa Wizardmon, Agumon detendrá a este Digimon- dijo el joven con determinación.*

Ante la negativa del muchacho y de su digimon, NeoDevimon suspiró. Si le dieran a Wizardmon por las buenas, no tendría por qué estar perdiendo el tiempo. Lo absorbería y punto. Pero dada la situación, parecía que no iba a ser tan fácil... o sí.

- En ese caso tendré que atacaros a vosotros también- comentó como si nada alzando una de sus garras a la altura de su cara y haciéndola chispear-. Stun Clav.

Su garra comenzó a brillar más intensamente, y NeoDevimon lanzó un rayo eléctrico hacia el humano, para que el otro dejara de molestar. Muerto el perro, se acabó la rabia.

Wizardmon chasqueó la lengua, desesperado. Aquel digimon naranja no parecía muy poderoso a simple vista. Tenía sus dudas de si conseguiría resistir el ataque de intentar interponerse entre su compañero humano y el rayo.

*Kio solo cerró los ojos sacando su Digivice que empezaba a brillar-¡Agumon Ultra Digivolves a…MetalGreymon!- dijo MetalGreymon y puso su brazo Metálico para que el rayo impactara con este, Kio abrió los ojos-no nos subestimes…- dijo Kio seriamente, el joven al decir estas palabras MetalGreymon rugió,-todo estará bien Wizardmon, ahora corre-dijo el joven sonriendo.*

El rayo eléctrico de NeoDevimon chocó contra la armadura metálica de MetalGreymon, pero no se disipó. Al ser metal, condujo toda esa energía al cuerpo del digimon naranja, achicharrándolo por dentro. No había sido una descarga muy fuerte, tan solo lo justo para evitar que se moviera y atacara.

- Yo no subestimo a nadie... -dijo NeoDevimon-. Tan solo cumplo órdenes.

Dicho eso, comenzó a caminar hacia Wizardmon, lentamente, mientras que este retrocedía, aterrado. Su unica carta de salvación se había evaporado. Siguió caminando hacia atrás, mirando como Neo se acercaba más y más a él.

- No, por favor...

*Kio había pensado que eso ocurriría mientras que MetalGreymon tenia el pelo erizado y unos ojos enormes-auch…-dijo MetalGreymon mientras miraba como NeoDevimon se acercaba a Wizardmon, Kio se interpuso en frente de el Digimon Demonio y saco su Katana-no harás nada, Wizardmon aprovecha de correr- dijo Kio mirando con determinación Wizardmon, MetalGreymon no podía moverse solo mirar-Kio…- dijo MetalGreymon algo preocupado.*

NeoDevimon observó al humano, sin ninguna emoción en sus fríos ojos. El muchacho desenfundó una katana, pero aquello no alteró al digimon demonio. Alzó la mirada para observar de nuevo a Wizardmon, que se había dado la vuelta y, haciendo caso a Kio, corrió para salvar su vida, de nuevo con la intención de internarse en la selva. NeoDevimon lo siguió con la mirada, sin moverse del sitio...

- Pero no te quedes ahi quieto, hombre... -dijo una voz, de repente.

Otro demonio, con aspecto de mujer, entró en escena, aterrizando frente a Wizardmon y cortándole el paso. El demonio mujer sonrió, mostrando sus afilados colmillos.

- ¿Ibas a alguna parte?

Movió su larga cola, alargándola un poco, y trazó un golpe lateral que golpeó de lleno a Wizardmon. El digimon brujo salió volando hacia atrás, aterrizando a los pies de NeoDevimon. Este último movió los dedos de sus manos y atravesó a Wizardmon de un golpe limpio. El digimon brujo gritó y comenzó a desfragmentarse en datos, absorbidos posteriormente por Neo.

Aeirmon miró con desaprobación a su compañero.

- Y yo que pensaba que jugarías un poco más con él...

*Kio miro impresionado a la Digimon demonio-(no puedo creerlo, son dos y tampoco eh visto a esa Digimon)-dijo el joven mientras que no pudo hacer nada ante la acción de la Digimon contra Wizardmon y solo miro hacia atrás como el Digimon mago se desintegraba en datos en ese momento el joven apretó el mango de la espada con fuerza a la vez que su compañero se estaba librando de la parálisis, Kio miro a NeoDevimon y a la Digimon Demonio-(no creo que tenga oportunidad contra ella, además que no me gusta pelear con mujeres) ¿que les hizo Wizardmon? ¡se toman esto como un juego!- exclamo el joven un poco enojado aunque por otra parte sabía que era la ley de la naturaleza.*

Aeirmon se cruzó de brazos, observando como su compañero absorbía los datos restantes de Wizardmon. Se dio la vuelta cuando escuchó hablar al humano y lo miró tranquilamente.

- No nos hizo nada, pero ¿que más da? Solo era un digimon destinado a ser absorbido... -hizo una pausa y sonrió levemente-. Solo es para que él -señaló a Neo- evolucione de una vez. Aunque si atacaramos a presas más fuertes sería más sencillo-comentó mirando a MetalGreymon.

- Pero no atacamos a niños elegidos, a no ser que estos se interpongan en nuestro camino.-dijo Neo, dedigievolucionando a Impmon.

Aeirmon inclinó la cabeza a modo de asentimiento.

- Exacto.

*Kio solo apretó los dientes al escuchar las palabras de la Digimon demonio y luego le dio la espalda mirando a MetalGreymon aunque por otra parte escucho las palabras de NeoDevimon quien luego volvió a su etapa Rookie-a Impmon si lo conozco- dijo el joven levantando la ceja, no le tomo mucha importancia al asunto por lo que miro a MetalGreymon asintiendo con su cabeza volvió a su etapa Rookie, Agumon corrió hasta su compañero y el joven empezó a caminar por la orilla de la playa.*

Aeirmon vió como sus palabras afectaban al humano, pero este se dió la vuelta antes de que pudiera decir algo de lo que arrepentirse. El digimon demonio sonrió, mirándose las afiladas garras.

- Impmon, lo mejor será ir a buscar a algunos digimons novatos-Dijo con voz suave, aunque bastante audible para el peliblanco y su Agumon-. Seguro que hay algunos por aquí. Sería una pena que alguien los absorbiera.

Miró hacia atrás, hacia Kio, aún con una media sonrisa. Luego movió su cola amenazadoramente, rasgando el aire con su púa.

*Kio al escuchar las palabras de la Digimon paro al instante y miro seriamente hacia atrás, giro para ver completamente a la Digimon-no te aproveches de los mas débiles- dijo el joven seriamente-si te aprovechas de los mas débiles es porque no te la puedes con los mas fuertes- dijo Kio seriamente pero con una sonrisa al finalizar sus palabras, Agumon miro a Kio y sonrio.*

Aeirmon se volvió hacia el joven, tranquilamente, sin caer en la provocación del muchacho. No, a pesar de la provocación, sonrió.

- No-refutó-. Significa que no hago distinciones con mis presas. Todas son iguales, y me da lo mismo de que etapa sean-se quedó en silencio un momento-. Ya has visto como ha podido ocuparse él de tu digimon-dijo señalando a Neo-. Y ya has visto que no tenemos interés por los niños elegidos.

*Kio solo miro a la Digimon demonio y Agumon igualmente- fue un error- dijo Agumon cruzándose de brazos a la vez que cerraba los ojos, el joven no le tomo mucha importancia a la Digimon- solo no le hagas daño a Digimon inocentes, te estare vigilando- dijo Kio seriamente y le dio la espalda empezando a caminar, Agumon siguió a su compañero.*

Aeirmon alzó el vuelo y sonrió. Con un gestó ordenó a NeoDevimon que hiciera lo mismo. Este asintió y la imitó, colocándose tras ella, como si la respetara. Parecía que de la curiosa pareja, ella era la que mandaba.

- No puedes estar en todos los sitios... -murmuró, divertida. Luego se elevó, mirando en dirección contraria-. Byee

NeoDevimon inclinó la cabeza, a modo de despedida, y la siguió.